Anda di halaman 1dari 29

Honduras: Análisis de Contexto 2010 – 25 enero 2010

Sergio Fernando Bahr


El primer golpe de Estado del siglo XXI en América Latina
En condiciones normales de gobernabilidad y estabilidad democrática, las elecciones
recientes serían el acontecimiento fundamental en la agenda política nacional. Sin embargo,
el contexto político del país está marcado por el golpe de Estado empresarial-militar contra el
gobierno de Zelaya Rosales (28 de junio de 2009) y las elecciones son un componente más
de la crisis política que el golpe hizo estallar en Honduras.
El 28 de junio en horas de la madrugada el ejército hondureño procedió a la detención y
expulsión del país del presidente Manuel Zelaya Rosales, con el respaldo de una orden de la
Corte Suprema de Justicia que argumentaba un intento presidencial de violar la constitución
del país para asegurar su reelección.
En realidad, lo ocurrido el 28 de junio fue el desenlace violento de un conflicto entre los
diferentes poderes (y grupos de poder) del Estado, en el que se agotaron -o no fueron
utilizados- los mecanismos institucionales de pesos y contrapesos y en el que la corte
suprema, congreso nacional y fiscalía general de la república asumieron una postura
ideologizada y politizada para responder a un poder ejecutivo que había logrado capitalizar
un nivel importante de apoyo social.

¿Golpe de Estado o “sucesión constitucional”? Aspectos jurídicos


Con fecha 23 de Marzo de 2009, el Presidente Zelaya aprobó el Decreto Ejecutivo PCM-
005-2009, de 23 de marzo, por el que se convocaba “(...) una amplia consulta popular en
todo el territorio nacional para que la ciudadanía hondureña pueda expresar libremente su
acuerdo o no con la convocatoria de una Asamblea Nacional Constituyente, que dicte y
apruebe una nueva Constitución Política (...)”. Este decreto le daba respaldo legal a la
realización de la consulta por “La Cuarta Urna”, consulta que había sido asumida como
consigna por el poder ejecutivo y gran parte del movimiento social organizado del país.

Sin embargo, el decreto ejecutivo no llegó a ser publicado en el Diario Oficial hondureño, “La
Gaceta”. Conforme al artículo 221 de la Constitución hondureña, las leyes no son obligatorias
hasta su publicación en el diario oficial y una vez transcurrida la “vacatio legis” establecida. A
pesar de no haber sido publicado -y por lo tanto, no tener existencia jurídica- dicho decreto
fue utilizado en el “Requerimiento Fiscal para que se libre orden de captura” contra el
Presidente Zelaya, de fecha 25 de junio de 2009, emitido por el Fiscal de la Nación de
Honduras

Entonces, el hecho de convocar una “Encuesta Nacional de opinión a celebrar el día 28 de


junio de 2009” mediante el Decreto Ejecutivo nº PCM-020-2009” se convierte en la base para
acusar al presidente de:

1. Delito contra la Forma de Gobierno


2. Delito de Traición a la patria
3. Delito de abuso de autoridad
4. Delito de usurpación de funciones en perjuicio de la Administración Pública y el Estado
de Honduras.
La acusación formulada por el Fiscal de la Nación de Honduras “indebidamente equipara la
convocatoria de una Encuesta Nacional de Opinión por el Presidente Zelaya, -cuyo objetivo o
resultado no era la realización de reforma constitucional alguna sino mas bien conocer la
opinión de la ciudadanía sobre la necesidad de abordar dicha reforma-, con la realización de
una reforma constitucional”1

La convocatoria misma por parte del Ejecutivo tenía base legal: una de las primeras leyes
aprobadas durante la administración de Zelaya fue la “Ley de participación ciudadana” que
contempla la realización de consultas con carácter nacional que pueden ser solicitadas por
cualquier ciudadano/a del país, y que había sido rubricada para su aprobación en el
Congreso Nacional con la firma de, entre otros, el diputado presidente del Congreso Nacional
Roberto Micheletti Bain.

Por lo tanto, la convocatoria en sí, o la realización (que no la hubo) de una encuesta de


opinión NO pueden ser equiparables al hecho de realizar una reforma constitucional o
convocar a una asamblea constituyente. Se trataba de una encuesta de OPINION, cuyos
resultados, dicho sea de paso no tenían carácter vinculante (lo que había sido reconocido y
planteado en varias ocasiones por el poder ejecutivo). “Se imputa como delito al Presidente
Zelaya la realización de una supuesta reforma constitucional que a fecha de hoy nadie ha
indicado o acreditado en qué consistiría exactamente, es decir, cuales serian los artículos
reformados o a reformar”2
Es un elemento contextual interesante que mediante Decretos 412- 2002 de 13 de
Noviembre de 2002, ratificado por Decreto 154-2003 del 23 de septiembre de 2003, el
Congreso Nacional con la presencia de muchos y muchas de las diputadas que pusieron el
grito al cielo en el 2009, ya había realizado una reforma constitucional, de hecho, de los
artículos conocidos como “pétreos” o irreformables, reforma que fue declarada anulada por
la Corte Suprema de Justicia en el 11 de noviembre de 2008. En esa ocasión se usaron
mecanismos institucionales y jurídicos para detener el intento de reforma, sin que se hayan
realizado acusaciones legales contra los proponentes de las mismas.

De hecho, el mismo presidente de-facto Roberto Micheletti había propuesto en 1984 una
reforma constitucional que habría permitido al entonces presidente Roberto Suazo Cordova
optar a la reelección.

La figura que más se ha utilizado para nombrar lo ocurrido el 28 de junio es la de “sucesión


constitucional”. De acuerdo al sistema legal hondureño, solo compete a los servidores
públicos realizar las funciones que explícitamente les son asignadas en la ley, y utilizando
solamente aquellas figuras legales que forman parte de la constitución, leyes y reglamentos
del país.

El congreso nacional NO está facultado por la ley para remover del poder a un presidente en
funciones, y más claro aun: La “sucesión presidencial” o “sucesión constitucional” NO existe
como figura legal en ninguna de las leyes, reglamentos o constitución de la república.

1"Un golpe de Estado perpetrado con desprecio a la legalidad, a la institucionalidad y al pueblo hondureño"
Enrique Santiago Romero. Misión Internacional de Observación de la Federación Internacional de Derechos
Humanos (FIDH). Julio 2009.
2 Idem.
Por otro lado, la toma de posesión del mismo Micheletti como presidente del ejecutivo tiene
vicios de nulidad: el artículo 242 de la Constitución prevé que para el caso de que el
Presidente del Congreso se viere obligado a ocupar la titularidad del Poder Ejecutivo por
ausencia del Presidente y Vicepresidente, dicho desempeño será simultáneo al de la
Presidencia del Congreso Nacional y siempre en calidad de tal Presidente del Congreso.

En Honduras pues se realizó un golpe de Estado, sin fundamentos jurídicos, como la única
forma encontrada por uno de los sectores en conflicto para resolver la lucha política en que
se encontraban sumergidos. Al hacerlo, desatarían una de las peores crisis políticas,
económicas y sociales en la historia democrática del país, y se evidenciaría el agotamiento
definitivo del modelo político democrático, en todas sus expresiones institucionales en
Honduras.

¿Un Movimiento “Zelayista”? Reacciones al golpe de Estado:


Como ha sido ya bien documentado, el golpe de Estado provoco una situación de
ingobernabilidad en el país que hasta la fecha se ha saldado con unos 30 muertos, arrestos
arbitrarios, despidos injustificados de personal del Estado, desalojos violentos, allanamientos
ilegales y más de 300 heridos (todos ellos contra miembros/as de la resistencia nacional
contra el golpe), con el cierre constante de medios de comunicación que se manifestaron en
contra del golpe de Estado, toques de queda, estados de sitio e, incluso, un “decreto de
emergencia” nacional que determino la suspensión de las garantías constitucionales de la
población por más de 30 días.
A partir del 28 de junio y hasta unos dos días antes de la realización de las elecciones
generales, la agenda política del país estuvo determinada en su totalidad por la expulsión de
Zelaya y por la conformación de un frente amplio de “resistencia contra el Golpe de Estado”
que aglutina a muy diversos sectores de la población del país.
Es fundamental señalar que aunque a dicho movimiento se le ha tildado de “zelayista” (es
decir, seguidores de la figura de Manuel Zelaya Rosales), se trata en realidad de un amplio
movimiento nacional por la institucionalidad democrática, heterogéneo, formado por
múltiples organizaciones y personas y que si bien incluye a seguidores de Zelaya va
más allá. Un movimiento heterogéneo que por motivos jurídicos, ideológicos y de formación
democrática rechazan el rompimiento de la legitimidad y gobernabilidad democrática del
país.
Para que exista gobernabilidad democrática debe existir estabilidad institucional y política, y
esto se relaciona con la continuidad de las reglas y de las instituciones, con la consistencia
en la toma de decisiones, con la demanda (input) de la sociedad y la capacidad de respuesta
a esa demanda (output) de los gobiernos.3
Debe existir un consenso político construido a su vez sobre el acuerdo o afinidad de los
miembros de una sociedad en lo referente a los principios, valores, normas y acciones,
consenso sobre las reglas del juego político, y sobre los fines y medios instrumentales y
específicos del mismo.
Este mismo consenso es el que brinda legitimidad a los procesos democráticos.
Recordemos que la legitimidad y la legalidad no siempre van de la mano, y en el caso de
Honduras la misma legalidad de los sucesos del 28 de junio se encuentra en discusión.

3 Concepto desarrollado por la Organización de Estados Americanos OEA.


La percepción de un cambio violento y unilateral en las reglas del juego ha provocado una
reacción política ciudadana que va mucho más allá de la figura caudillista o
personalizada (presidente Zelaya) y que tiene que ver con la defensa de una costosa y
frágil institucionalidad y legitimidad democrática en Honduras.
El calificativo de “zelayista” no otorga pues para nada una descripción valida del movimiento
político-social que surge como respuesta al golpe de Estado, y cuyas acciones, en particular
aquellas aglutinadas alrededor de la dirección del Frente Nacional de Resistencia contra el
Golpe de Estado; determinarían la agenda política del país desde el 28 de junio hasta unos
días antes de la realización de las elecciones.

El contexto pre-electoral fue en realidad un contexto post-golpe


El contexto pre-electoral pues se caracterizó por la constante protesta social, la respuesta
violenta del Estado ante la misma, el desconocimiento internacional absoluto al gobierno de
facto y los intentos por encontrar una solución negociada a la crisis política. El proceso
mismo pasó a un segundo plano
Los distintos candidatos habían sido electos en los partidos mayoritarios por sendas
elecciones internas, y en los minoritarios por asambleas partidarias. En el contexto del golpe,
la alianza posible entre la Unificación Democrática y el PINU se vuelve imposible ante la
aceptación por parte de las autoridades de este último partido del gobierno de facto.
Los diferentes candidatos procuraron no pronunciarse, en sus respectivas plataformas
políticas, sobre la crisis política de país. De hecho, no hubo existió en la agenda política del
país discusión alguna sobre otros temas (derechos de las mujeres, seguridad, pobreza) que
no fuera la crisis y sus posibles soluciones.

Propuestas y planes de gobierno


Con la excepción de la Unificación Democrática, que no presentó un plan de gobierno en el
contexto de las elecciones, los partidos tradicionales presentaron documentos de carácter
extremadamente general, en los que no se tomaba en cuenta la crisis política del país pero
se hacían ofertas de desarrollo, seguridad y pobreza. Planes de gobierno:

Partido Nacional – Porfirio Lobo Sosa

• Garantizar ingreso digno, educación con salud y seguridad.


• Establecer diálogos con todos los sectores de la sociedad hondureña.
• Apoyo a pequeños y medianos empresarios, la producción en el campo e incentivar el
turismo
• “Bono diez mil”, donar 833 lempiras mensuales a madres solteras para que matriculen
a sus hijos en las escuelas.
• Gobierno de unidad nacional.
• Mitad de las secretarias de Estado dirigidas por mujeres.

Partido Liberal – Elvin Santos



• Trabajo para todos
• “poner dinero en el bolsillo”
• Generación de empleos masivos a través de programas de infraestructura
• Fortalecer la inteligencia policial
• Instalar cámaras en mercados, plazas publicas, semáforos, parques y sitios
concurridos.
• Poner en manos de gobiernos locales la administración de centros educativos y de
salud

Partido Innovación y Unidad PINU – Bernard Martínez

• 3 ejes: unidad, conciliación y diálogo.


• Atacar la corrupción
• Buscar justicia social
• Políticas de empleo
• El problema fundamental del país es el desorden por el incumplimiento de las leyes.

Democracia Cristiana DC – Felicito Avila


• Un plan de país en lugar de un plan de gobierno
• Poner orden en el país lo que significa aplicar la ley.
• Identificar inversiones productivas
• Planificar Honduras
• Re ingeniar el proceso de inserción de la economía

Las encuestas de opinión daban como seguro ganador a Porfirio Lobo Sosa del partido
nacional, y se verían confirmadas con los resultados mismos del proceso electoral.

Un proceso electoral “anormal”4


El proceso electoral realizado el 29 de noviembre en Honduras se realizó en un contexto
marcado por serias interrupciones de la institucionalidad democrática. La Ley electoral, por
ejemplo, determina que debe darse un período de por lo menos 90 días o 3 meses de
ininterrumpida libertad ciudadana. En el caso de Honduras, los 90 días previos a las
elecciones estuvieron marcados por toques de queda, allanamientos de moradas y oficinas,
arrestos y un decreto de emergencia que suspendió las garantías constitucionales de la
población del país durante más de un mes.

Por otro lado, no hubo presencia de observadores internacionales imparciales de Naciones


Unidas, de la Organización de Estados Americanos o de instituciones como el “Centro
Carter” que tienen reconocimiento internacional en procesos de observación electoral
imparcial. Los observadores que si estuvieron presentes en el proceso son miembros de
organizaciones que manifestaron su apoyo a lo ocurrido el 28 de junio, y cuya imparcialidad,
por lo tanto, puede ser puesta en juicio.
Mas grave aun, el Tribunal supremo electoral no emitió dictamen alguno sobre la renuncia
masiva de candidatos a cargos de elección popular: las candidaturas independientes,
participantes por primera vez en procesos electorales en Honduras renunciaron casi en su
totalidad a validar el proceso.
4 En su declaración oficial sobre los comicios en Honduras, la Unión Europea plantea que “no se realizaron en una
situación normal”
En el partido Innovación y Unidad -PINU- se documentaron más de 80 renuncias de
candidatos y candidatas tanto a puestos locales como a diputaciones, y en la Unificación
Democrática -partido que decide romper con la resistencia y participar en las elecciones- más
de la mitad del total de sus candidaturas a cargos de elección popular decidieron no
participar del proceso.
En el mismo partido liberal, uno de los partidos tradicionales del país, se documentaron más
de 40 renuncias a candidaturas electorales, todo esto en medio de una campaña mediática
sin precedentes en el país y ante confirmadas presiones del Estado y la empresa privada
para obligar a sus empleados a participar en el proceso.
Hasta el momento, el Tribunal Supremo Electoral -TSE- no ha dado datos finales sobre los
resultados del proceso electoral, y los datos parciales disponibles son aquellos brindados en
la noche misma del 29 de noviembre a unas 5 horas de cerrados los centros de votación. Por
este motivo no podemos aun ofrecer datos sobre la representación de las mujeres o el total
de puestos obtenidos por cada partido. Hasta ahora los datos oficiales:

Candidato Porcentaje Votos total


Porfirio Lobo 55.90% 693520
Elvin Santos 38.20% 458708
Bernard M. 2.20% 27838
Felicito Avila 1.90% 27689
Cesar Ham 1.80% 21942
Nulos 63227
En Blanco 40651
Total votos 1631847
Total actas 70.53%
Fuente: Tribunal supremo electoral (diciembre 2009)

Estos datos y sus proyecciones le estarían dando la victoria al candidato del Partido Nacional
Porfirio Lobo Sosa por el mayor margen registrado en la historia electoral del país.
La victoria del Partido Nacional no se limita a los resultados presidenciales. De acuerdo al
Tribunal Supremo Electoral en sus proyecciones -no datos oficiales-, el Partido Nacional
obtendría la mayor cantidad de diputados -entre 70 y 73- lo que le brindaría una mayoría
automática en el congreso nacional y virtualmente elimina su necesidad de realizar alianzas
para legislar. El TSE reporta en enero que los diputados por partido quedarían así:
PN 71 / PL 44 / PINU 5 / DC 4 / UD 4
A nivel local el derrumbe del partido liberal se antoja más aplastante. Los nacionalistas
estarían ganando en 252 alcaldías contra 46 del partido liberal, aunque los resultados
pueden cambiar a medida que se vaya finalizando el escrutinio. De continuar la tendencia,
sin embargo, sería la primera vez en la historia que el PL no logra ganar una sola alcaldía en
zonas del país que han votado liberal históricamente. En el departamento de Yoro – lugar de
nacimiento del presidente de facto Micheletti-el Partido Liberal no ganaba un solo municipio.

En Cortés, otro departamento liberal, este partido solo registraba dos triunfos -incluyendo la
importante alcaldía de San Pedro Sula, segunda ciudad más grande del país.
En Santa Bárbara, de 28 alcaldías, el Partido Nacional ganaba 22 y 6 el Partido Liberal. El
Paraíso, otro departamento históricamente liberal, a juzgar por las estadísticas de 20
municipios, el nacionalismo se estaba llevando trece victorias incluyendo alcaldías que no
había ganado en más de 30 años.

En Olancho, de 23 alcaldías el nacionalismo estaba triunfando en veinte y apenas tres el


Partido Liberal. En Colón de diez municipios, el nacionalismo se está alzando con el triunfo
en nueve dejando apenas uno al Partido Liberal. En La Paz 16 de 18 municipios serian
ganados por el partido nacional, que obtendrá también una mayoría absoluta de diputados
representantes en el PARLACEN o parlamento centroamericano.

En cuanto a la participación electoral, es imposible determinar los verdaderos niveles de


abstencionismo debido a la ausencia de observadores internacionales imparciales. El tribunal
supremo electoral aseguraba originalmente que se computaba una participación de unos 2.8
millones de electores, equivalentes al 62% del padrón electoral, pero sus datos más
recientes dan cuenta de una participación que se aproxima al 49.5% del total de votantes
inscritos. Aun no se cuenta con datos oficiales sobre la futura representación de las mujeres
en las alcaldías o congreso, pero las proyecciones parecen indicar un retroceso en el
número de mujeres electas a cargos de elección popular. En el congreso nacional la
representación de las mujeres se redujo casi en un 50%, reduciéndose de 31 diputadas en la
legislación actual a 17 diputadas en el próximo congreso.

Otro elemento interesante de análisis es que la participación electoral no puede leerse


automáticamente como una muestra de apoyo al golpe o al gobierno golpista. Aunque
prácticamente todos los diputados tanto del PL como del PN se propusieron para reelección,
de los 73 diputados obtenidos por el partido nacional solo 21 fueron participantes del proceso
de destitución de Zelaya, y solo 14 en el caso del partido liberal.
Para otros observadores la participación puede haber sido más baja que la reportada por el
TSE. La tardanza del TSE en dar a conocer los resultados a mas de una semana de
realizadas las elecciones genera dudas sobre la transparencia del proceso y la exactitud de
los datos del tribunal.
¿Son las elecciones una solución a la crisis política?
5
“No, no y definitivamente no”

A partir del 28 de junio el discurso del gobierno de facto, la narrativa de los medios masivos
de comunicación y de algunos sectores de la comunidad internacional hizo énfasis en que el
proceso electoral del 29 de noviembre representaría una “solución democrática” a la crisis
política del país.
Sin embargo, existen razones para cuestionar este análisis. En primer lugar, las elecciones
se realizaron en un marco de cuestionable legalidad y legitimidad democrática, sin
participación de observadores internacionales imparciales, sin reconocimiento de Naciones
Unidas y la OEA, en un marco de violencia institucionalizada y con la renuncia masiva de
candidatos y candidatas de diferentes partidos a puestos de elección.
Por otro lado, existe un amplio sector de la población que no se siente representado por el

5 Presidente de Brasil Ignacio Lula da Silva, contestando una pregunta sobre si su gobierno reconocería como
presidente a Porfirio Lobo Sosa.
proceso, y en materia de gobernabilidad futura del país, no se puede obtener legitimidad
SOLAMENTE DE LA LEGALIDAD -menos aun cuando esta última se encuentra cuestionada-
sino de la construcción de consensos políticos en la sociedad.
A nivel internacional las elecciones del 29 de noviembre han sido duramente criticadas por la
mayoría de los países de América, sólo cuatro naciones (Panamá, Colombia, Perú y Estados
Unidos) han declarado abiertamente su respaldo al proceso, mientras que la Cumbre
Iberoamericana y la OEA no han logrado consensos sobre el mismo, y los países
suramericanos se han declarado abiertamente en contra de reconocer el proceso.
Finalmente, no puede existir un proceso de “reconciliación” nacional si no se admite que hay
necesidad de la misma, o no se incluye a todos los actores que se encuentran en
desacuerdo. Aunque en su discurso de campaña -y en sus apariciones públicas tras el
triunfo electoral- el candidato ganador ha insistido en que realizara un proceso de
reconciliación en el marco de un gobierno de unidad nacional, lo cierto es que su primera
“Reunión de reconciliación y unidad” contó con la presencia de las iglesias, algunos medios
de comunicación masivos, empresarios y algunos partidos políticos (PL, DC, PINU).
La reunión no contó con la presencia de organizaciones sindicales, campesinas, de jóvenes,
de mujeres, de las candidaturas independientes, el partido de izquierda (UD) o del frente
nacional de resistencia contra el golpe de Estado. Sin embargo, la UD parece dispuesta a
validar el nuevo gobierno a cambio de puestos en algunas instancias del Estado.
Por el contrario, este último ha anunciado que elaborará un plan de estrategia para luchar
contra la crisis política que vive la nación desde el derrocamiento del presidente
constitucional, Manuel Zelaya, y para restituir la democracia en el país. El coordinador del
frente, Juan Barahona, ha ratificado que continua la lucha por restablecer el orden
constitucional y por la restitución de Zelaya al poder, así como también convocar a una
asamblea nacional constituyente que ayude a abrir el camino a los cambios necesarios para
"la re fundación de Honduras".
Es decir, no solamente es difícil creer que a corto plazo se desarrollara un proceso de
“reconciliación nacional”. En el actual clima político hondureño, muy por el contrario, se
evidencia una división y polarización nunca antes vista en el país.
Relaciones internacionales en el contexto hondureño
A nivel de relaciones internacionales, ningún gobierno del mundo reconoció como legitimo al
gobierno de facto de Micheletti, y aunque es de esperar que se sumen algunas naciones al
reconocimiento de los resultados electorales ya brindado por EUA, Perú, Panamá y
Colombia, se prevé que continué el aislamiento internacional del país. En América Latina, el
PARLATINO y el MERCOSUR han anunciado ya su rechazo a los resultados electorales.
Entre los países de Centroamérica, no existe uno solo que haya reconocido el proceso de
golpe de Estado o que ofrezca su reconocimiento al gobierno resultante del proceso
electoral, con los previsibles impactos que esto implica hacia la integración centroamericana
y a los procesos regionales de negociación (el tratado de libre comercio con la Unión
Europea, por ejemplo, se encuentra detenido y se plantea realizarse sin la participación de
Honduras)
Las relaciones con los países del cono sur se encuentran en el punto mas bajo de su historia,
y el gobierno de facto se prepara para “denunciar” (es decir, dejar de formar parte de) los
tratados de Petrocaribe y Alba, mientras a amenazado con romper relaciones diplomáticas
con España y otros países europeos. Nunca en su historia como nación el país se había
encontrado en una situación tal de aislamiento internacional.
Perspectivas para el 2010
En las condiciones actuales, tras un periodo corto de tiempo en que las elecciones llegaron a
ser el tema dominante de la agenda política del país, consideramos que los sucesos del 28
de junio de 2009 continuarán determinando el accionar de los actores políticos en Honduras.
Aunque muchos actores decidan no reconocer los resultados del proceso, lo cierto es que los
mismos no pueden ser ignorados: marcaran la re composición de fuerzas de los sectores de
poder en Honduras en la administración del Estado.
En ese sentido, es importante destacar que el triunfo abultado del Partido Nacional -o total
descalabro del Partido Liberal, quizá una interpretación más ajustada a la realidad- significa
que por primera vez en la historia electoral de Honduras un gobierno contara con una
mayoría absoluta a nivel de alcaldías, diputaciones en el Congreso Nacional y poder
ejecutivo. Dicha concentración de poder marcara las relaciones entre el gobierno y los
sectores sociales a partir del 2010. Por otro lado, el mismo partido liberal, segunda fuerza
electoral del país, se enfrentara a un proceso de composición, en el que será importante
notar si las estructuras partidarias continúan siendo controladas por aquellos que, como su
candidato Elvin Santos , apoyaban lo ocurrido el 28 de junio, o si habrán espacios para los
“liberales en resistencia”, importante sector del partido que se ha negó a participar del
proceso electoral.
No es mejor la situación del único partido de izquierda legalmente inscrito en el país. La
Unificación Democrática, que después de haber participado como miembro activa de las
actividades y dirección del frente nacional de resistencia decidió, de manera polémica,
participar del proceso electoral. Esto le provoco aun otro sisma interno, la desbandada de
dirigentes, candidatas/os y activistas, y más importante, una dura pérdida de legitimidad y
simpatía de parte del movimiento social que hasta ahora ha sido su sustento electoral.
El futuro inmediato del país, si entendemos las crisis como momentos de inflexión y de
nuevos comienzos, se antoja sin embargo optimista. Se abren las puertas a la formación de
una nueva opción electoral para los sectores progresistas, lo que dependerá en buena
medida de la capacidad de las organizaciones sociales para mantener los actuales procesos
de unidad, y del fortalecimiento de sus niveles de organización.
El discurso de la reconciliación
“Nuestra Honduras necesita de hombres y mujeres que a pesar de pensar distinto se comprometan a reconocerse como
hermanos. En esta barca vamos todos y sí se hunde una parte nos hundimos todos”. Vicario de la catedral.

El año 2010 ha traído consigo los nuevos elementos de la estrategia golpista para el país, en
particular, el discurso de la “reconciliación”. La estrategia de comunicación empleada
recuerda a los meses posteriores al golpe, con los medios masivos y la iglesia insistiendo
constantemente en la necesidad, de hecho, en el “hecho” de una reconciliación nacional que
no esta para nada cerca de ser realidad.

El discurso del candidato ganador, Porfirio Lobo, se concentra en la necesidad de la


reconciliación, aunque esta no ofrece a la resistencia ningún tipo de justicia por lo acontecido
en el país. La conformación tanto del nuevo Congreso Nacional como del futuro gabinete de
gobierno tampoco parece indicar una verdadera voluntad de establecer un gobierno de
unidad, a pesar de la estrategia lamentable de una debilitada y deslegitimada UD que se
entrega a legitimar procesos políticos a cambio de las migajas del poder.
Aunque se trata aun de especulaciones, los medios masivos reportan una posible
configuración del nuevo gabinete:

Oficializado: Oscar Alvarez como ministro de Seguridad, Miguel Pastor como ministro de
Obras Publicas.
Canciller: Mario Canahuati.
Ministra de la Presidencia: María Antonieta Guillen de Bográn
Ministro de Gobernación: Antonio Rivera/Rodolfo Irías Navas /Roberto Pacheco
Ministro de Seguridad: Oscar Álvarez Guerrero
Ministro de Defensa: Pompeyo Bonilla/Romeo Vásquez Velásquez
Ministro de Soptravi: Miguel Rodrigo Pastor
Ministro de Relaciones Exteriores: Mario Canahuati
Ministro del Trabajo: Felicito Ávila
Ministro de Serna: María Cristina Handal /Tulio Mariano González
Ministro de Salud: Arturo Bendaña
Ministro de Planificación: Arturo Corrales
Ministro del INA: Oscar Escalante/César Ham
Ministro de Educación: Alejandro Ventura / Javier Menocal
Ministro de Finanzas: Williams Chong Wong
Ministro del FHIS: Nasry Asfura
Ministro de la SAG: Jacobo Paz/ Johnny Handal /Luis Donaire
Presidencia del Banco Central: María Elena Mondragón
Comisión de Banca y Seguros: Williams Chong Wong / Carlos Cruz
Ministro de Cultura: Bernad Martínez
Ministro de Turismo: Epaminondas Marinakis /Eva Carolina Gómez

Por otro lado, la nueva directiva del congreso nacional 2010 quedaría conformada así:
Presidente Juan Orlando Hernández (PN)
Primer vice presidente Lena Gutiérrez (PN)
Segundo vice presidente Marlon Lara (PL)
Tercer vice presidente Ramón Velásquez Nazar (DC)
Cuarto vice presidente Marvin Ponce (UD)
Quinto vice presidente Martha Concepción Figueroa
Sexto vice presidente Nora Gúnera de Melgar (PN)
Secretaria
Primer secretario Rigoberto Chang Castillo (PN)
Segundo secretario Gladis Aurora López (PN)
Pro- secretaria
Primer pro- secretario Eliseo Mejia (PN)
Segundo pro- secretario Waldina Paz (PL)
Vice –presidencia Alterna
Primera vice presidencia alterna Oscar Rolando Burgos (PL)
Segunda vice presidencia alterna Victoria Carrasco García (PN)
Secretario Alterno
Primer secretario alterno Ángel Darío Banegas Leiva (PL)
Segundo secretario alterno Milton de Jesús Puerto (PN)

El nuevo Congreso cuenta con 74 nuevos diputados. 54 diputados/as fueron renovados en sus
cargos.
Situación de la seguridad/inseguridad en el país6

Entre enero y junio de 2009, se presentaron, 3,768 muertes violentas, de las cuales 2300 se
tipifican como homicidios lo que representa un aumento de 3.7% con respecto al primer
semestre de 2008, con 83 víctimas más.

Esto representa el menor incremento observado en los informes del observatorio de la


violencia en los últimos 3 años, pero sigue mostrando una tendencia de crecimiento a lo que
eran ya altísimos indicadores de violencia. En el caso de las muertes por causa externa, las
cifras se pueden descomponer en:

• 383 homicidios al mes, un promedio diario de 12.8 victimas


• 82.6% homicidios han sucedido por armas de fuego.
• 847 homicidios han sucedido durante los fines de semana, y el 46% del total en los
departamentos de Cortes y Francisco Morazán. Fuentes policiales consideran que 810
homicidios estuvieron relaciones con actividades del crimen organizado.

La población entre 15 y 44 años, incluye el 80.7% de los homicidios. Los hombres son los
más afectados (93.3%), de los cuales 241 adolescentes fueron víctimas de homicidio
correspondiendo a 10.5% de los casos. Sin embargo, este porcentaje implica un aumento del
número de homicidios de mujeres, que en estudios de años anteriores se situaba entre un
3% y 5% de los casos totales.

Las armas de fuego siguen siendo responsables del mayor número de homicidios, aportando
en el primer semestre del año el 83% de los casos, con un incremento de 9.8% en relación al
periodo anterior. Las armas blancas ocasionaron 284 muertes. La legislación hondureña
permite un total de 5 armas por persona por hogar, aunque la proliferación de armas de
6 Todos los datos son obtenidos del informe 2009 (aun no publicado) del Observatorio de la Violencia, Tegucigalpa, 2009.
fuego se debe más a un mercado negro que facilita su obtención y a los pobres mecanismos
institucionales de control.

El análisis de las tasas de homicidio, muestra que los grupos de mayor riesgo son los
hombres con una tasa global de 56.5 por 100,000. La tasa más alta ocurrió en el grupo de
hombres de 25 a 29 años, con un valor de 142.5, seguido del grupo de 30 a 34 años. Para
las mujeres, la mayor tasa fue de 9.2 por 100,000 para el mismo rango de los hombres, 25 a
29 años. La tasa GLOBAL se sitúa en 8.8 por cada 100 mil personas, mientras que países
del continente que enfrentan conflictos armados internos, como Colombia (38 por 100,000),
tienen tasas menores a la de Honduras.

En parte debido a sus características poblacionales (Honduras es un país con alto porcentaje
de población joven) y en parte por las características del crimen organizado en la región, el
mayor porcentaje de victimas de homicidio se concentra entre los 15 y los 30 años de edad.
Observando los datos nacionales distribuidos por departamento, vemos una concentración
de homicidios que no está determinad por la mayor concentración poblacional, sino por los
reportes de incidencia del crimen organizado, los departamentos del norte del país como
Atlántida, Yoro, Cortés y el fronterizo Copán muestran una fuerte concentración de
homicidios y confirman una tendencia observada ya en años anteriores.

Agresiones
Los datos que fueron registrados por Medicina Forense producto de requerimientos fiscales,
alcanzaron en el primer semestre de 2009, la suma de 5,497 eventos. La mayor proporción
de solicitudes correspondieron a lesiones interpersonales con un 66.7% similar a las
anteriores publicaciones del observatorio de la violencia, seguido de 887 casos de delitos
sexuales con el 16.1%. Completan la distribución 616 casos de mujeres agredidas y 39
menores maltratados.

El departamento de Medicina Forense realizó 887 evaluaciones sexológicas en el primer


semestre de 2009, siendo las mujeres la víctima principal de agresiones sexuales con un
86.7% del total. Los grupos de edad en que se concentran las víctimas se han mantenido
exactamente idénticos a los informes de años anteriores, niñas y niños entre los 10 a 14
años seguido por el de 15 a 19 años, correspondiendo a una proporción de 65.2%.

Las mujeres víctimas de homicidios, se debieron principalmente a situaciones


relacionadas con el crimen organizado (44.9%) . El resto de muertes, tiene como causa a los
asaltos y robos, y con idéntica proporción a los homicidios por violencia de pareja o
intrafamiliar.

Es interesante notar que en Honduras la tasa histórica de suicidios ha sido relativamente


baja (fluctuando entre 2 y 4 por cada cien mil). Sin embargo en el año 2009 los suicidios
muestran un crecimiento de 24.4%, con 40 muertes adicionales con relación al primer
semestre de 2008 observándose aumento en la mayoría de los departamentos de
Comayagua, Choluteca y El Paraíso, mientras que las muertes no intencionales reportaron
79 casos más frente al mismo periodo del año anterior. Las muertes clasificadas como
indeterminadas, presentaron una reducción de 25.6% respecto del primer semestre de 2008.

¿Una nueva militarización de la acción policial?

Ante el panorama de aumento de la violencia en sus tasas de homicidios y agresiones, uno


de los principales riesgos institucionales a que se enfrenta el país es un aparente proceso de
re-militarización y politización de la policía nacional.

A partir del golpe de Estado del 28 de junio, la policía se ha convertido en un asistente de las
políticas de seguridad interna de carácter militar impulsadas por el ministerio de seguridad.

Tras décadas de labores realizadas por organizaciones de Derechos Humanos para


fortalecer el proceso de profesionalización policial, años de existencia del CONASIN (órgano
consultivo en materia de seguridad con participación de la sociedad civil) y un fuerte proceso
de relaciones públicas para rescatar la imagen de la policía y las fuerzas armadas, ambas se
han revelado en el actual contexto de crisis política como instituciones ideologizadas y de
cuestionable profesionalismo.

El actual contexto pues pone en nueva luz –poco favorable- el futuro del país en materia de
seguridad ciudadana.

Contexto económico: Honduras, la crisis dentro de la crisis


“La caída de Wall Street es para el fundamentalismo de mercado lo que la caída del Muro de Berlín fue para el
comunismo; le dice al mundo que esta forma de organización económica no es sustentable”. Joseph Stiglizt,
octubre 2008

“El gobierno reducirá el gasto público en un 60% en todas las dependencias del Estado, con excepción de
seguridad y el Tribunal Supremo Electoral. Durante el gobierno de transición no se realizaran inversiones ni
gastos sociales” Gabriela Nuñez, presidenta de-facto del Banco Central de Honduras, octubre 2009.

Como se ha mencionado en informes anteriores, el modelo económico hondureño estuvo


marcado durante 20 años por la aplicación de políticas de ajuste estructural y por re-
estructuraciones dirigidas a hacer “competitivo” al país en el marco de una globalización y un
modelo de desarrollo entendidos únicamente como crecimiento económico, y de manera más
limitada, como control inflacionario y del gasto publico.
Este modelo se encuentra estrechamente vinculado a una visión fundamentalista,
ideologizada de los procesos económicos, en la que la absoluta liberación de mercados y, en
particular, de los procesos financieros conduciría al desarrollo.

El estallido de la crisis financiera internacional vendría a cuestionar este modelo, y si en


países desarrollados se requirió una fuerte intervención del Estado (el “bailout” en USA por
ejemplo) en países como Honduras todavía se sienten los efectos de la crisis en la reducción
de ingresos por remesas en un 8.2% ya que las remesas son uno de los principales ingresos
del país, y suman un 25% del PIB, y la mayor parte de los emigrantes hondureños son
empleados en el sector de construcción, uno de los más afectados por la crisis.

Entre el último segundo semestre del 2008 y el primero de 2009 se habían perdido 180mil
puestos de trabajo en el país. Se ha producido una reducción de las líneas de crédito
bancarias, de la inversión extranjera directa y en la relación con su principal socio comercial,
Estados Unidos.

Los acontecimientos del 28 de junio del presente año vendrían a agregar un componente
interno de inestabilidad económica. En ese sentido, la economía hondureña se enfrenta a
una crisis nacional enmarcada en el contexto de una crisis económica internacional.

Una crisis regional

En el ámbito centroamericano el IMAE, muestra en los primeros 6 meses de 2009, una caída
de -1.9% frente a un crecimiento de 3.8% en igual periodo de 2008. No obstante, aunque
dicho indicador todavía es negativo, dejó de caer desde marzo de 2009 cuando se
registraron tasas negativas de 3.0%, hasta alcanzar una tasa siempre negativa pero menor,
de 2.7% en mayo de 2009, explicado por factores externos como la ralentización del PIB real
trimestral de los Estados Unidos que de -6.6% en el primer trimestre de este año pasó a
-1.0% en el segundo trimestre de 2009.

Por su parte, la inflación regional a junio de 2009 fue de 2.4%, frente al 12.7% de junio de
2008, lo que equivale a una contracción de 10.3 puntos porcentuales. Con los resultados a
junio, en términos de crecimiento económico medido por el PIB, se espera en los países
centroamericanos una tasa de reducción del PIB de 1.9%. La inflación promedio en la región
oscilará entre 4.2% y 5.8%.

Principales indicadores en Honduras

Durante la administración de Manuel Zelaya la economía hondureña se vio favorecida por la


condenación de deuda externa, obtenida vía la iniciativa HIPC, y por un aumento notable en
la recaudación tributaria.

El PIB crecía en 6.6% (2006), 6.3% (2007) y 4% (2008)7 lo que convertía a Honduras en el
país de crecimiento económico más elevado en la región centroamericana después de Costa
Rica.

7 De acuerdo a fuentes de gobierno. La sociedad civil discutía los porcentajes exactos, pero admitía un crecimiento
positivo en la economía del país.
Entre enero y agosto del 2009, el Índice mensual de actividad económica (IMAE) mostró un
declive de 3.4% comparado con el crecimiento de 2.4% que había mostrado en el mismo
período del 2008. Sin embargo, todavía en el mes de junio se anticipaba un crecimiento de
0.7% para el 2009, que si bien se encontraba muy por debajo del promedio de los últimos
años, presentaba por lo menos un comportamiento aun positivo.

Para septiembre del 2009, sin embargo, el Banco Central de Honduras preveía indicadores
negativos de -2.6% en el PIB.

La crisis internacional limitó el crecimiento del crédito (0.55% en términos reales). Como
respuesta, el gobierno redujo el encaje legal de 12% a 10%, liberando unos US$95 millones
para el uso crediticio en el sistema bancario. Una inyección directa de casi mil millones de
lempiras a la banca privada era parte de las políticas de respuesta a la crisis, y los
requerimientos de reserva fueron posteriormente reduciros a cero, para solicitudes de
préstamo en las que el 60% de los recursos prestados fueran usados en actividades
productivas.

A pesar de contar con la inyección de recursos estatales, la banca privada mantuvo o elevó
en varios puntos los intereses de préstamo, por lo que no se logro dinamizar la estructura
financiera.
Otras medidas gubernamentales ante la crisis incluyeron la solicitud de endeudamiento
externo a varias fuentes, incluyendo al gobierno de Venezuela (que accedió a un préstamo
de US$30 millones para el Banco Nacional de Desarrollo Agropecuario) y a la Alternativa
Bolivariana para las Américas (ALBA), que concedió un préstamo de US$100 millones para
el país.

Antes de junio 2009, se había producido una brutal caída en la inversión extranjera (42.3%
en comparación con el 2008). Entre julio y noviembre las reservas internacionales del Banco
Central de Honduras cayeron en un 18% (US$444.6). Al nivel actual, como ha reconocido el
gobierno de facto, las reservas internacionales de US$1.98 billones representan apenas unos
3.2 meses de importaciones, lo que coloca las reservas internacionales del país en el margen
de suficiencia.

Nuevos créditos contratados tanto con el Banco Mundial como con el Fondo Monetario
Internacional (este último por valor de US%163.9 millones) NO están disponibles para el
gobierno de facto, que no es reconocido por las directivas de estas organizaciones.

Las actividades que exhibieron variaciones negativas en este período fueron: transporte y
comunicaciones, electricidad y agua, minas y canteras, comercio, industria manufacturera,
banca y seguros y construcción. Las que reportan crecimientos son: servicios diversos,
administración pública y agricultura, silvicultura y pesca.

Los préstamos nuevos otorgados al sector privado, decrecieron en términos reales 9.1%,
comparativamente con el aumento de 26.8% observado en 2008, debido a la menor
colocación de préstamos otorgados al comercio, a servicios y a propiedad raíz. El 37.7% de
estos préstamos se destinaron al consumo, 19.1% al comercio, 14.7% a la industria, 12.5% a
propiedad raíz, 10.1% a servicios, 5.8% a la actividad agrícola y 0.1% a otros sectores.
La posición fiscal de la Administración Central, ha continuado deteriorándose, al pasar de un
superávit de L677.1 millones a junio del 2007, a un déficit de L.1,340.2 millones a junio del
2008 y de L.2,367.4 millones a junio del 2009. Esto se explica por el deterioro progresivo en
los ingresos tributarios y por el ritmo menor de caída de los gastos respecto a los ingresos.

Efectos del golpe de Estado en la economía de Honduras

A partir del golpe de Estado del 28 de junio se presentan una serie de efectos de carácter
tanto contextual (producto de la situación política) como estructural (producto del
reordenamiento de algunos sectores de la economía ordenados por el gobierno de facto).

Durante la administración Zelaya, por ejemplo, se inició un proceso de modernización de la


Dirección ejecutiva de Ingresos (DEI) que incluyó por primera vez en la historia del país la
contratación por concurso de los empleados de esa dependencia (previo a su contratación
habían sido sometidos a diferentes pruebas y capacitaciones, en lugar de la contratación
directa que es tradicional en el país y que históricamente se ha prestado al clientelismo y la
corrupción.

En una medida reciente el gobierno de facto ordenó el despido de los 200 empleados que
habían ingresado a la DEI por concurso, poniendo fin al proceso de modernización de esa
dependencia fundamental para el Estado.
Como resultado, al menos parcial, de dichas medidas la recaudación tributaria se ha
reducido en más de un 30% con respecto a los niveles del 2008 y las proyecciones para
2009.
Uno de los elementos fundamentales que hay que entender sobre la economía hondureña, y
que explica el fuerte impacto económico que sobre la misma tiene el golpe de Estado, es que
necesita el financiamiento externo para financiar el presupuesto de la administración central
depende en un 16.4% y los fondos para la administración pública del Estado en un 56%.8

Estos son los fondos necesarios para financiar las políticas sociales: educación, salud,
servicios básicos, infraestructura física, prevención y respuesta a desastres naturales,
gobernabilidad, justicia y seguridad.

A finales de octubre, no solo habían existido enormes problemas para ejecutar el


financiamiento externo (solo un 37.7% había sido ejecutado) sino que el gobierno de facto
anunciaba que detendría toda inversión pública, y que reduciría en un 60% los gastos de
todas las dependencias estatales con excepción del ministerio de seguridad y del tribunal
supremo electoral.

Durante por lo menos 4 meses, y probablemente unos 3 mas (más de medio año), el Estado
de Honduras no tendrá ningún tipo de inversión pública en políticas sociales.

Otro de los temas de emergencia para el país es el de las políticas energéticas. Como
resultado del golpe, Venezuela anunció la suspensión en los envíos de 20,000 barriles diarios
de petróleo que -como parte de Petrocaribe- estaban destinados a abaratar el costo de los
carburantes en el país, causando unos meses después que se detuvieran o se usaran poco
las flotas vehiculares del Estado no consideradas estratégicas: con excepción de la flota

8 El “grupo de sociedad civil” ha hecho un interesante análisis sobre los efectos del golpe en la economía hondureña.
vehicular asignada a las fuerzas armadas y la policía nacional.

El mismo presupuesto nacional 2009, aprobado aceleradamente (10 días tras el golpe de
Estado) sufre de problemas estructurales: se planifico sobre la base de fuentes de
financiamiento interno que se están contrayendo porque la actividad económica del país se
estaba paralizando, y la captación de impuestos por parte del Estado así como el
financiamiento externo se reducen. Es decir, el presupuesto se proyecto sobre la base de
montos agregados sin tomar en cuenta el impacto que tendría la suspensión de fondos
externos en los ingresos del Estado.

En cuanto a daños muy puntuales causados a la frágil economía del país, el mismo vice-
presidente del Consejo Hondureño de la Empresa Privada (COHEP, organización que ha
respaldado el golpe de Estado) reconoce que los toques de queda han costado a la
economía hondureña unos US$50 millones, cifras que el Grupo de Sociedad Civil
(organización de análisis) pone en L3mil millones.

Para analistas del Banco Central de Honduras, se han perdido por lo menos 74mil puestos
de trabajo en el país desde el 28 de junio, principalmente en el sector maquilador pero en
general como producto de una acelerada reducción de la inversión extranjera.

Es importante notar que no existe un fácil acceso a los indicadores económicos del país
desde el 28 de junio. Las estadísticas concernientes a turismo, por ejemplo, no se han hecho
públicas, aunque la cámara de turismo del país ha pedido a sus afiliadas que reduzcan las
tarifas en hostelería y consumo para tratar de incentivar el turismo interno.

En los días inmediatos al golpe se cerraron al país las fronteras de los países miembros del
Sistema de Integración centroamericana, y aunque temporales, produjeron pérdidas por unos
2.85 millones de dólares, mientras que se estima una pérdida de L700 millones debido a las
tomas de carreteras realizadas por la población en diferentes partes del país.

El panorama que los indicadores parecen construir del futuro de la economía hondureña no
es alentador. En diciembre de 2009 el ministerio de finanzas de facto ha hecho llegar al
congreso nacional de Honduras una propuesta de “paquete fiscal” que busca aumentar los
impuestos a algunos bienes de consumo.

La tendencia es, pues, continuar aumentando los impuestos indirectos, en lugar de crear
impuestos directos a los ingresos, y contribuyendo al crecimiento de la disparidad fiscal en el
país. Uno de los principales temores de la sociedad civil es que la actual situación
económica, la crisis dentro de la crisis que enfrenta Honduras, se traduzca en nuevos
“paquetazos” económicos de corte neoliberal que recrudecerán la pobreza de la población.
Entorno Social: aumento del desempleo y perspectivas del bono
demográfico en Honduras

En el período 2004-2008 los indicadores de desempleo en Honduras se mantuvieron hasta


cierto punto constantes, con variaciones de –0.36 entre el 2006-2007 y el 2007-2008.

Año Porcentaje Cambio Porcentual


2003 28,00 %
2004 27,50 % -1,79 %
2005 28,50 % 3,64 %
2006 28,00 % -1,75 %
2007 27,90 % -0,36 %
2008 27,80 % -0,36 %
Fuente: Ministerio de Trabajo, Honduras 2009.

Sin embargo, a partir del año 2009 comienzan a sentirse los efectos de la crisis financiera
internacional, en Honduras se traduciría en el cierre de muchas empresas, particularmente
maquilas que a su vez corresponden al segundo principal empleador del país después del
Estado9.

Entre septiembre y octubre de 2009 se perdieron 10.000 empleos. Las estadísticas de la


Secretaría del Trabajo indican que en años anteriores la media de despidos anuales era de
unos 38.000, lo cual indica que en un solo mes representan casi un 25 % del total anual
anterior.

En declaraciones a la prensa, el director del Consejo Hondureño de la Empresa Privada


(Cohep), Benjamín Bográn advirtió en el mes de octubre que “aun sin que se elevara el
salario mínimo las empresas recortaran personal a causa de la crisis financiera global... por
esta razón urge encontrar un acuerdo entre empresarios, obreros y gobierno para preservar
los empleos”

El creciente desempleo de Honduras se da en el marco de una economía en la que 63,1% de


los hogares permanece en la pobreza y de ellos el 45,6 % vive en la indigencia, según datos
de Cepal.

De acuerdo a estimaciones del Instituto Nacional de Estadísticas -INE- y la Secretaría de


Trabajo en el país hay unas 230,000 mipymes (micro, pequeñas y medianas empresas), pero
de éstas el 95% son micro empresas”, que la ley define como aquéllas que tienen entre 1 y
15 empleados, que en la práctica se traduce en negocios familiares.

En octubre de 2009, el sub-secretario de Trabajo Obdulio Chévez afirmaba a medios de


comunicación locales que los índices de desempleo se habían disparado “hasta un 70% en
comparación con años anteriores”

De acuerdo al INE, existen en el país 134,092 personas que están en la categoría de


subempleo visible que trabajan menos de 36 horas a la semana y desean laborar más. Este
9 La ultima que públicamente ha cerrado es la empresa norteamericana Russell Corporation que en noviembre
de 2009 dejó cesantes a unos 1.800 obreros que se dedicaban a elaborar ropa deportiva para algunas
universidades de Estados Unidos.
segmento representa el 4.3% de la población ocupada. En cambio las personas ocupadas
bajo condiciones de subempleo invisible ascienden a 1, 127,936. Este último grupo se define
como las personas que trabajan más de 36 horas y tuvieron ingresos inferiores a un salario
mínimo, lo que equivale el 36% de la población ocupada.

La última encuesta de hogares del INE revela que de los 134,092 hondureños en la categoría
de subempleo visible, 70,254 (52.4%) residen en el área rural y 63,839 personas (47.6%) en
el sector urbano. En cuanto a los subempleados invisibles, 679,847 hondureños (60.3%)
radican en el sector rural y 448,089 personas en el área urbana (39.7%). De acuerdo con el
análisis del Instituto de Estadísticas, el problema del empleo en el sector rural de Honduras
se acentúa en la actividad agropecuaria, ya que gran parte de los cultivos se dan por ciclos
de tres a seis meses.

Esta situación se profundiza más en el área rural, de acuerdo con lo revelado por estudios
del INE. Casi el 100 por ciento de la población subempleada se encuentra en la categoría
denominada economía informal.

De la población total de 7, 869,089 de hondureños, la encuesta de mayo de 2009 revela que


6, 090,408 están en edad de trabajar, o sea que son mayores de 10 años. La población
económicamente activa la componen 3, 236,860 hondureños, de los que 3, 135,564 se
encontraban ocupados y 101,296 desempleados. De la población ocupada, el Instituto
Nacional de Estadísticas señaló que 1, 430,141 son asalariados del sector público y privado,
mientras que 1, 705,423 están en la categoría no asalariados lo que significa que trabajan,
principalmente, por cuenta propia.

Previsiblemente, la crisis producto de la falta de empleos en el país hace aumentar el número


de hondureños que emigran a Estados Unidos; lo que crea un “nuevo circulo de la pobreza”:
los emigrantes arriesgan todo para llegar a Estados Unidos, país en el que se ha vuelto mas
difícil encontrar trabajos como parte de sus propias secuelas ante la crisis financiera
internacional.

Los datos disponibles en el país indican que aproximadamente un 10% de la población total
del país se ha convertido en emigrantes, la mayoría de ellas y ellos en los Estados Unidos.
Del total, los hombres son un 70.4% y las mujeres un 29.6%. El 65% de los migrantes tienen
entre 15 y 29 años.

Esto provoca una importante reflexión. De acuerdo a estudios recientes 10, uno de los
principales mecanismos y recursos que los países pueden utilizar para lograr crecimiento en
sus índices de desarrollo es un buen aprovechamiento del bono demográfico, es decir, de la
situación temporal en la que se cuenta con una mayor proporción de población en edad de
ahorrar, invertir, trabajar y producir simultáneamente a un menor número de personas que
requieren inversiones en educación y salud.

Es decir, la tasa de dependencia económica se reduce a consecuencia del aumento en la


proporción de población económicamente activa y la reducción en el porcentaje de la
10 Behrman, Dureya y Székely 2003 en su estudio demuestran que la estructura demográfica de los países tiene una clara
relación con variables como el ahorro interno, el PIB per cápita, el capital por trabajador y la educación. Sus datos
plantean que la relación entre el nivel del PIB per cápita y la edad promedio de los países se vuelve positiva conforme se
incrementa la edad promedio de la población.
población inactiva.

Si el ahorro interno comienza a aumentar -aunque sea de manera modesta- a partir de un


promedio de edad de 20 a 25 años, y crece considerablemente a partir del promedio de
población 25 años hasta los 34, significa que Honduras está desaprovechando las
posibilidades que le otorgaría el bono demográfico, ya sea vía la expulsión de su población
joven en edad de trabajar (migración) o por su incapacidad para ofrecer un mercado de
trabajo capaz de asumir a la nueva población en edad de trabajar.

De acuerdo al INE, la población total del país asciende a 7, 876,197 de los cuales los
hombres suman 3, 882,731 y las mujeres 3, 993,466. Según datos de la encuesta de
hogares de septiembre 2008, la población comprendida entre 5 a 17 años, se estima en 2,
661,021 lo que representa el 34 por ciento de la población nacional; de la cual 1, 366,827
(51.4 por ciento son niños) y 1, 294,195 (48.6 por ciento son niñas). El estudio destaca que a
nivel nacional el 73 por ciento de la población entre 5 y 17 años se dedica solo a estudiar;
12.3 por ciento trabaja (incluye los que estudian y trabajan y los que solo trabajan) y un 15
por ciento, que ni estudian ni trabajan, componente similar se observa en el área urbana y
rural. De acuerdo a esta investigación del total de la población que trabaja el 79 por ciento
son niños y el 21.3 por ciento son niñas. Entre los que solo estudian no hay mucha diferencia
entre ambos sexos, pero si lo hay entre los que ni estudian ni trabajan, donde las niñas son
mayoría 60 por ciento contra 40 por ciento de los niños.

El informe establece que la mayor prevalencia del trabajo infantil se encuentra en el área
rural. Del total de 326,943 menores que trabajan el 74 por ciento se concentra en el área
rural, mientras que el restante 26.3 por ciento está en el área urbana. Referente al ingreso
promedio nacional que percibe esta población es de 1,690.00 lempiras mensuales, en el área
urbana y rural se estima en 2,299.00 lempiras y 1,376.00 lempiras respectivamente.

En términos de pobreza, un informe presentado por el Programa de las Naciones Unidas


para el Desarrollo, PNUD, plantea que al final del 2009, Honduras tendrá más de cien mil
nuevos pobres, debido a la crisis mundial que está afectado al país centroamericano. La
crisis política propia a país profundizara también la situación de pobreza y extrema pobreza.

En particular, el crecimiento del desempleo y la suspensión de programas de lucha contra la


pobreza, por ejemplo: tres programas conjuntos entre aprobados en coordinación por el
gobierno de Honduras (administración Zelaya) y las agencias del SNU, se encuentra
suspendidos debido al golpe de Estado. El proyecto sumaba un montón de US$25 millones y
estaba dirigido a los programas de cultura y desarrollo, gobernanza, empleo y migración e
infancia, nutrición y seguridad alimentaria, con focalización en los 80 municipios mas pobres
de país para el periodo 2009-2010.

Por otro lado, la empresa privada hondureña a través de su organización representante el


COHEP ha anunciado que pedirá una “revisión” de la ley de salario mínimo que durante la
administración Zelaya produjo un aumento de 60% en los ingresos de los trabajadores
menos pagados del país.
SALARIOMINIMOPORDIAENLPSYDOLARES1988 -2009
200.00
180.00
160.00
140.00
120.00
100.00
Lempiras
IO
A
R
S
L

80.00
60.00 Dolares
40.00
20.00
0.00

Fuente: BCH. Departamento de Estudios Económicos

Esto podría provocar un mayor empobrecimiento, considerando por ejemplo la tendencia


alcista en los precios de la canasta básica. El costo de una canasta básica para una familia
de cinco miembros se cotizó en enero de 2009 en 6,249.90 lempiras, contra los 5,148.30,
que se vendió en el mismo período de 2008.

Derechos humanos y un “nuevo movimiento social”

En términos de gobernabilidad, han resurgido en el actual contexto las masivas violaciones a


los Derechos Humanos que no se registraban en el país desde la década de los 80. De
acuerdo a la plataforma nacional de organizaciones de Derechos Humanos:
“Van 187 casos documentados por la Plataforma; 24 son mujeres. De los 187 casos 20 son
"colectivos" (incluyen comunidades u organizaciones). 67 Casos son de la capital (no
computé los de Escuela Martinez Rodas ni los de la colonia Rosalinda porque no se donde
quedan- casos CPTRT; tampoco la aldea el Carrizal); 27 de SPS; 16 de El Paraíso; 4 de
Choluteca; 3 de Olancho; 4 de Lempira; 6 Intibucá; 6 Santa Bárbara; 5 Comayagua; 4 Colón;
2 Yoro; 2 La Paz; 2 Copán y 1 Valle. En 73 casos se menciona la participación de militares,
solos o de manera combinada con la policía y en 5 casos se menciona a políticos
(candidatos y actuales). Hay nombres pendientes que habría que indagar”

Según el último informe del Comité de Familiares y Desaparecidos de Honduras, COFADEH,


al 15 de octubre, como consecuencia directa de la acción represora del estado se
contabilizaron 21 asesinatos políticos3, 3 atentados contra personas, 108 amenazas de
muerte, 114 personas con juicios políticos, 56 ataques a la liberad de expresión, 3,033
detenciones ilegales y más de 800 personas lesionadas de distinta gravedad por la policía y
fuerzas armadas. Desde el golpe de estado hasta el 15 de octubre, al menos 114 personas,
entre ellas 12 mujeres, han sido acusadas ante los tribunales por terrorismo, sedición, daño a
la propiedad privada, y robo, entre otros delitos.

Sin embargo, el cambio más importante que a nivel social atraviesa el país es el de la re-
configuración de sus movimientos sociales.
Como hemos mencionado en informes anteriores, el movimiento social hondureño se ha
caracterizado en las últimas décadas por su atomización, división y dificultades para
encontrar puntos mínimos de convergencia alrededor de los cuales construir agendas
comunes de acción.

A partir de los sucesos del 28 de junio, sin embargo, se ha producido un proceso de


articulación nunca antes vista en la historia del país. Alrededor del Frente Nacional de
Convergencia, y más generalmente en un movimiento increíblemente heterogéneo conocido
como “resistencia” se han unido intereses y acciones de grupos LGTB, organizaciones de
mujeres, de jóvenes, artistas, organizaciones sindicales, campesinas, grupos de intelectuales
y organizaciones políticas partidarias.

Por primera vez en la historia del país, se realiza un proceso de organización de los barrios y
colonias de las principales ciudades de Honduras. A noviembre de 2009, el Frente Nacional
de Resistencia reportaba la organización de más de 60 barrios y colonias en las ciudades de
San Pedro Sula y Tegucigalpa.

Esto implica, tanto para la cooperación solidaria como para los mismos movimientos sociales
de Honduras un re-planteamiento de sus programas y estrategias en lo que respecta a las
reivindicaciones sociales y democráticas en el país.
Situación de las mujeres: Retrocesos, promesas de unidad y resistencia
del movimiento de mujeres organizado en Honduras

Aunque todos los grupos organizados del país reportan serios retrocesos legales e
institucionales en sus luchas reivindicativas, estos se hacen más evidentes en el caso del
movimiento de mujeres de Honduras.

Es importante tomar en cuenta que, como hemos señalado en informes anteriores, las
mujeres como organizaciones y como movimiento social han conseguido algunos de los
logros más significativos y medibles a través de intensos procesos de incidencia, en las
áreas de violencia contra la mujer y fortalecimiento de las instituciones del Estado que
trabajan el tema.

En las alianzas estratégicas -en su momento consideradas sostenibles- con el Estado


(representado por el Instituto Nacional de la Mujer -INAM-) se habían producido notables
avances en materia de Derechos Humanos de las mujeres, derechos sexuales y
reproductivos, violencia hacia la mujer y femicidio.

Violencia contra las mujeres11

En el actual contexto, sin embargo, se ha producido un aumento en los índices de violencia


(en particular, de carácter político), retrocesos en cuanto a derechos de las mujeres en
materia legal y se ha roto por completo la relación entre las instituciones estatales y el
movimiento de mujeres organizado.

En términos comparativos, de enero del 2002 a octubre de 2008, 114 mujeres fueron
asesinadas según informes de prensa y la Dirección General de Investigaciones Criminales
reportaba 170 mujeres asesinadas entre enero-octubre de 2008, lo que significaba un
promedio de 17 mujeres asesinadas mensualmente, muchas de ellas por su pareja o ex
pareja.
11 Violaciones a los Derechos Humanos de las mujeres después del golpe de Estado en Honduras.
Feministas en Resistencia, Tegucigalpa, honduras, 25 noviembre 2009.
En el mismo período del 2009, el promedio haciende a 246.4 asesinatos de mujeres
mensuales. Casi la mitad de los femicidios o muertes violentas de mujeres ocurridas en el
2009 se han producido tres meses y medio después del golpe de Estado. Al comparar las
estadísticas de femicidios de este año con años anteriores, se observa que entre enero y
octubre de este año se reportan 325 muertes violentas de mujeres; en cambio, entre enero y
diciembre del 2008 en el país murieron en forma violenta 312 mujeres. Con dos meses por
estudiar, el presente año ya computaba un aumento significativo de asesinatos de mujeres
en comparación a años anteriores.

El contexto generalizado de violencia provocado por la ocupación militar también ha cobrado


la vida de 15 mujeres trans de la comunidad LGBT, muertas después del golpe de estado con
armas de fuego, algunas de ellas con señales de tortura. En dos de los casos los médicos
forenses se negaron a realizar la autopsia correspondiente

En 23 casos de los 217 registrados (un 10%), las mujeres manifestaron en sus declaraciones
haber sido víctimas de manoseo y golpes en senos y vagina, insinuaciones sexuales e
insultos con connotaciones sexuales violentas. Las organizaciones de mujeres como Centro
de Derechos de la Mujer -CDM- y Centro de Estudios de la Mujer de Honduras -CEMH- han
documentado por lo menos 10 violaciones sexuales, ocurridas en las ciudades de
Tegucigalpa, San Pedro Sula, Choloma, Danlí y El Progreso. Estas violaciones sexuales
tienen el común denominador de ser violaciones múltiples, ejecutadas por efectivos de las
policías nacionales y realizadas después de las manifestaciones o durante los toques de
queda.

Sólo una de las mujeres que ha sido víctima de este tipo de agresiones sexuales ha
presentado denuncia formal ante las autoridades competentes. Las otras víctimas han
presentado sus denuncias ante organizaciones de mujeres, pero se rehúsan a presentarlas
ante la Fiscalía de la Mujer o la Fiscalía de Derechos Humanos debido a un aumento del
sentimiento de desconfianza de la población hacia las instituciones que, desde el Estado,
tienen como labor defender sus Derechos Humanos.

Persecución política

Además del aumento señalado en los femicidios -en los que a los producidos por la pareja se
suman ahora aquellos de carácter político- la persecución política se ha reflejado también en
atentados contra la libertad de expresión y despidos de organizaciones estatales.

Para el caso, el 27 de julio de 2009 fueron despedidas 19 empleados y empleadas (12


mujeres) del Instituto Nacional de la Mujer -INAM- por declararse en oposición al golpe de
Estado. A estas personas no se les cancelaron salarios atrasados, ni se les dio justificación
formal de motivo de despido. Cuando el INAM les prohibió también ingresar a la institución a
retirar sus artículos personales, las personas despedidas iniciaron un proceso de demanda
legal ante la Secretaria de Trabajo, que a 4 meses del despido no ha realizado ninguna
diligencia sobre el caso.

Por otro lado, el 16 de octubre de 2009 os programas “Tiempo de Hablar”, del Centro de
Derechos de Mujeres (CDM); “La Bullaranga”, del Centro de Estudios de la Mujer-Honduras
(CEMH), y el programa “Entre Chonas”, de la Organización de Mujeres por la Paz, “Visitación
Padilla”, fueron clausurados mediante una nota desde la gerencia del grupo INVOSA-Radio
Cadena Voces, en base al Decreto PCM-M-016-2009, que restringe las garantías
constitucionales. En las notas, se expresa que las causas de cancelación de los programas
de radio son supuestos “irrespetos a la Constitución”, y porque las afirmaciones hechas en
los programas constituyen “un peligro para la paz de la familia hondureña”.

Derrumbe de la relación institucional entre el movimiento de mujeres y el Estado.

Entre las primeras medidas del gobierno de facto estuvo el despido de la Ministra del INAM
Doris García Paredes. Cuando el movimiento de mujeres (en coordinación con personal del
INAM) realizan una toma pacífica del Edificio de esta secretaría, fueron desalojadas
violentamente el día 15 de julio. El desalojo violento marcaría las relaciones entre el
movimiento de mujeres y la nueva dirección del INAM.

A partir de esa fecha no existe trabajo de coordinación entre el Estado y el movimiento de


mujeres en materia de implementación de la Política Nacional de la Mujer. Mientras tanto, las
mujeres miembros de Oficinas Municipales de la Mujer -OMM-, instancias creadas para velar
por los Derechos de las mujeres en el ámbito local, también han sufrido persecución y
despido.

Varios proyectos que se encontraban en ejecución de parte del INAM han sido suspendidos,
y el II plan de Igualdad y Equidad de Género 2008-2015, cuyo contenido fue producto de un
proceso de consenso entre el Estado y el movimiento de mujeres, ha sido modificado en su
contenido unilateralmente, amén de encontrarse detenido debido a que el Estado no ha
destinado presupuesto alguno para su ejecución.

El derrumbe de la relación entre la institucional estatal y el movimiento de mujeres representa


uno de los efectos más negativos del contexto actual, ya que se trata de una relación
construida a lo largo de décadas de esfuerzos de un movimiento de mujeres -incontables
recursos humanos y materiales- para lograr una mejoría en la situación de los Derechos
Humanos de las mujeres en Honduras.

Volviendo al pasado: retrocesos legales para el movimiento de mujeres

Dos son los casos más notables de retroceso de los Derechos de las Mujeres en materia
legal en el país. Por un lado, la prohibición del uso y distribución de las Pastillas
Anticonceptivas de Emergencia o PAE, mediante Acuerdo Ejecutivo 36-2009 de la Secretaría
de Salud de fecha 29 de junio de 2009 (día siguiente al golpe de estado), bajo el argumento
que son abortivas y por lo tanto violan el derecho a la vida establecido en la constitución.
Esta prohibición, impulsada desde el Congreso Nacional, había sido previamente vetada por
el gobierno de Zelaya Rosales.

El 8 de Julio el Congreso Nacional realizo una reforma a la Ley de Municipalidades de


Honduras que, entre otras coas, excluye a las Oficinas Municipales de la Mujer -OMM- como
parte orgánica de las estructuras municipales.

El anteproyecto de “Ley de Servicio Militar Obligatorio”, iniciado por el actual congreso tras el
golpe de Estado y actualmente en “discusión suspendida” establece que las mujeres pueden
ser objeto de reclutamiento militar forzoso en casos de emergencia.
Otro anteproyecto, que en es conocido por el Congreso Nacional en el mes de Diciembre y
que será discutido en la próxima legislatura, busca prohibir por ley la venta de preservativos
a adolescentes a menos que estos se encuentren casados o sean “acompañados por sus
padres”.

Finalmente, diputados del Partido Nacional, impulsan un anteproyecto de Ley para Fusionar
el INAM con otras instituciones como el Instituto Hondureño de la niñez y la familia y la Red
Solidaria (que ejecuta programas sociales) lo que haría desaparecer, por completo, el mayor
símbolo del compromiso del Estado hondureño hacia la defensa especifica de los Derechos
Humanos de las Mujeres.

En general, el actual contexto es de alto riesgo para el movimiento de mujeres en Honduras.


Los sucesos del 28 de junio han dado al traste con décadas de avances en la relación entre
las mujeres y el Estado, ponen en precario las estrategias y planes de trabajo de las
organizaciones de mujeres, y amenazan con hacer retroceder aquellos cambios que en el
sistema legal habían sido logrados por las mujeres de Honduras.
Siglas Utilizadas

ALBA – Alternativa Bolivariana para las Americas


BCH – Banco Central de Honduras
BM – Banco Mundial
CDM – Centro de Derechos de la Mujer
CEMH – Centro de Estudios de la Mujer en Honduras
CHE – Colegio Hondureño de Economistas
COFADEH- Comité de Familiares de los Desaparecidos en Honduras
COHEP – Consejo hondureño de la empresa privada
CPTRT – Centro para la Prevención, rehabilitación y tratamiento de las víctimas de la Tortura.
CONASIN – Consejo Nacional de Seguridad Interna
DC – Democracia Cristiana
DEI – Dirección Ejecutiva de Ingresos
FIDH – Federación Internacional de Derechos Humanos
FMI – Fondo Monetario Internacional.
IMAE – Índice mensual de actividad económica.
INAM – Instituto Nacional de la Mujer
INE – Instituto Nacional de Estadística
LGTB- Lesbianas, gays transexuales y bisexuales (organizaciones)
OEA- Organización de Estados Americanos
OMM – Oficina Municipal de la Mujer
PAE – Pastillas Anticonceptivas de Emergencia
PINU – Partido Innovación y Unidad
PL – Partido Liberal
PN- Partido Nacional
PNUD – Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo.
Parlatino – Parlamento Latinoamericano
PIB – Producto Interno Bruto
TSE – Tribunal Supremo Electoral (Honduras)
UD- Unificación Democrática
Fuentes
1. "Un golpe de Estado perpetrado con desprecio a la legalidad, a la institucionalidad y al
pueblo hondureño" Abogado Enrique Santiago Romero. Misión Internacional de
Observación de la Federación Internacional de Derechos Humanos (FIDH) y la RED
CIFCA, sobre la situación de los Derechos Humanos en Honduras tras el golpe de
estado. Honduras 17 al 25 julio 2009.
2. http://www.elheraldo.hn/Ediciones/2009/12/04/Noticias/Lobo-inicia-el-camino-para-el-
gran-dialogo-nacional
3. http://voselsoberano.com/v1/index.php?
option=com_content&view=article&id=2932:parlatino-expulso-al-congreso-de-facto-
hondureno-del-organismo&catid=1:noticias-generales
4. Observatorio de la Violencia, informe 2009, PNUD, UNAH, Honduras 2009.
5. Tribunal Supremo Electoral de Honduras -TSE- sistema de monitoreo electoral 2009.
6. Honduras: Recent Economic Performance. Jose Antonio Cordero, Center for
Economic and Policy Research. November 2009
7. Honduras: Cómo afrontar la crisis financiera Internacional. FOSDEH, Honduras 2008.
8. El Impacto Económico del golpe de Estado. Grupo de sociedad civil, Honduras 2009.
9. Banco central de Honduras. http://www.bch.hn/
10. Honduras: Informe Económico II TRIMESTRE 2009. Sistema de Información de la
Estrategia para la Reducción de la Pobreza, Honduras.
http://www.sierp.hn/sierp.web/site/index.aspx
11. http://www.proceso.hn/2009/12/09/Nacionales/C.hondure.C/18903.html
12. https://www.cia.gov/library/publications/the-world-factbook/
13. http://www.latribuna.hn/web2.0/?p=38990
14. Banco Central de Honduras – Informe de Tercer periodo economía Honduras,
septiembre 2009. BCH, Tegucigalpa, 2009.
15. http://www.undp.un.hn/reduccion_de_la_pobreza.htm
16. Tendencias en las migraciones y remesas internacionales en países de C.A y
República Dominicana. BID-INE, noviembre 2008
17. INE – Encuesta nacional sobre trabajo infantil 2008
18. Banco Central de Honduras BCH. Departamento de Estudios Económicos 2009
19. http://www.cdc.org.sv/
20. Violencia contra las mujeres en Honduras: Una reflexión en el camino. Centro de
Derechos de Mujeres -CDM- Tegucigalpa, Honduras.
21. Violaciones a los Derechos Humanos de las mujeres después del golpe de Estado en
Honduras. Feministas en Resistencia, Tegucigalpa, honduras, 25 noviembre 2009.
22. Entrevistas a representantes de organizaciones de Mujeres, diciembre 2009.

Anda mungkin juga menyukai