Esta palabra designa «las expresiones que contravienen las reglas de gramática». Son solecismos
las frases incoherentes, los barbarismos léxicos, los calcos sintácticos de otras lenguas, la
ausencia de concordancia y, en conclusión, cualquier falta que contravenga la normativa de la
lengua:
Anacoluto: son aquellas frases rotas, en las que la segunda parte no acompaña a la
primera o no se corresponde con ella. Es decir, la falta de coherencia sintáctica en una
frase. Ejemplo: La televisión, aparte de distraernos, su función también tendría que ser
educativa (La frase correcta sería La televisión, aparte de distraernos, tendría que
educarnos).
Anantapódoton: es una variante de anacoluto, en el que sólo se expone uno de los dos
elementos correlativos que tendrían que aparecer en la frase. A veces puede resultar
difícil diferenciar un anacoluto de un anantapódoton o viceversa, ya que los dos rompen
el curso lógico de la oración. Ejemplo: El sistema permite mejorar, por una parte, el ruido
de los vehículos y el alto riesgo de accidentes (El sistema permite mejorar, por una parte,
el ruido de los vehículos y, por otra, el alto riesgo de accidentes).
Zeugma: según el DRAE «consiste en que cuando una palabra tiene conexión con dos o
más miembros del período, está expresa en uno de ellos y ha de sobreentenderse en los
demás». La zeugma es un tipo de elipsis que evita repeticiones innecesarias, pero que
puede dar lugar a regímenes irregulares y discordancias gramaticales. Ejemplo: Frisaba
la edad de nuestro hidalgo con los cincuenta años; era de complexión recia, seco de
carnes, enjuto de rostro, gran madrugador y amigo de la caza.