El envase tiene dos funciones básicas: protección e identificación de producto, pero también
puede apoyar la venta si se usa como estímulo a la compra, además de ser útil para exhibir el
producto, por lo atractivo de su forma, ergonomía, practicidad o por el diseño gráfico
llamativo. Dependiendo de la cultura ecológica y de la forma y magnitud del consumo, un
envase puede hacer también más o menos atractivo el producto. En países de hábitos de
compra conocidos como de tierras frías, donde la adquisición de los insumos alimenticios se
hace una vez a la semana, quincena o mes, pues las familias disponen de congeladores, no
obstante que el número de miembros promedio de las familias pueda ser menor al de países
en donde los alimentos se acostumbran adquirir a diario. En esos mercados, las presentaciones
de los productos son en envases de mayor tamaño, divididas en porciones menores, suele
tener mayor aceptación, porque son acordes con sus patrones de compra y consumo.
Por nivel del envase se considera la proximidad del contenedor respecto al contenido
(producto). El primero se considera envase primario, el segundo, que tiene contacto con el
primero, pero no con el producto, lo llamamos envase secundario y así sucesivamente. Por
ejemplo, en un perfume el envase primario corresponde al frasco que contiene el líquido de la
fragancia, y la cajita de cartón que contiene al frasco es el envase secundario. Los materiales y
las formas del envase son múltiples y dependen del tipo de producto que contengan, las
características y modos de uso o consumo por parte de los clientes y, por último, el efecto de
atracción sobre el comprador.
ETIQUETA
La etiqueta es el espacio impreso frecuentemente en recuadro, resaltado, adherido o atado,
ubicado en el producto, envase, empaque y embalaje que contiene información (instrucciones
o datos) opcional u obligatoria, que proporciona el productor o el distribuidor relativa al
producto, formulación, instrucción, envase, empaque o embalaje, marca, advertencias,
fabricante, distribuidor, importador y exportador
Aunque pudiese ser conveniente en la etapa de despegue de las empresas, para el productor
puede resultar riesgoso que sus productos se comercialicen por medio de la marca del
distribuidor, porque debido a que los compradores no identifican al productor, no se llega a
generar lealtad de éstos a los productos del fabricante, y cuando convenga al distribuidor, éste
podrá optar por otro proveedor sustituyendo los productos de este segundo bajo su misma
marca de distribuidor. Cuando un productor identifica a sus productos mediante la marca tiene
la opción de nombrar a todos sus productos con una misma marca, o utilizar varias marcas
dependiendo de situaciones como diferentes niveles de calidad y precio y productos
destinados a mercados o segmentos de mercado diferentes.
Las marcas son elemento distintivo del sistema comercial moderno en países con economía de
mercado. El buen posicionamiento de las marcas constituye un activo intangible que respalda
la aceptación y fidelidad por parte de los compradores. Las marcas con prestigio son garantía
de calidad uniforme y servicio. Para posicionar una marca es menester mantener la calidad
constante y comunicar a los clientes las ventajas y bondades que el producto ofrece mediante
la promoción (ventas personales, publicidad, promoción de ventas y relaciones públicas).Es
frecuente que las marcas exitosas sean eficientemente distribuidas, siendo fácil de adquirirlas
en múltiples lugares.