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República Bolivariana De Venezuela

Ministerio del Poder Popular para La Educación Universitaria


Universidad Bolivariana De Venezuela
Programa de Formación de Grado: Estudios Políticos y Gobiernos

La
identida
d
nacional
Mary Bolívar

en C.I 14.745.331

La globalización tiene responsabilidad en este


fenómeno, ya que no sólo abarca aspectos
tiempos económicos, sino, también, políticos, sociales y hasta
culturales; los cuales forman parte de lo que ocurre
en la realidad; pero cada vez con mayor intensidad y

de alcance.

Los cambios observados en el transcurso de los

globaliza últimos años, con los avances tecnológicos, el

ción
incremento de las relaciones comerciales, los movimientos migratorios y las
transformaciones político-económicas, han provocado no sólo una mayor
integración global, sino una relativa interdependencia que alcanza, prácticamente,
todos los aspectos de la vida social: la economía, la política, la ecología, la
comunicación, la educación.

La identidad es producto de un proceso que se ha construido y reconstruido a


lo largo del tiempo y que tiene estrecha relación con las particularidades culturales
propias de cada región geográfica y de las características que identifican a los
pueblos en un momento histórico determinado.

La identidad nacional es un proceso histórico y geográfico, dinámico y en


constante transformación, en otras palabras: está sujeta al cambio. Alude a un
sentido de pertenencia que trasciende, más allá de lo afectivo, hace referencia a la
obligación que tenemos todas las personas de salvar lo nuestro, preservar gustos,
costumbres y valores nacionales y afirmar y elevar el carácter del ser
costarricense, es la forma más sensata y efectiva de contribuir a preservar la
identidad cultural de cada pueblo, de cada país.

La educación juega un rol conservador en la conformación de una identidad


nacional. Según Denis (1995) “(1995), el aspecto formativo no sólo debe
enfocarse en el resguardo de ciertos valores sociales, sino que “...el mismo
proceso educativo debería ser lo suficientemente flexible y dinámico como para
aceptar la realidad cambiante del sistema valorativo de la sociedad o de cada
grupo humano”. Podemos decir que primordialmente tenemos que entender el
entorno sociocultural en que vivimos, crear nuevas alternativas hacia personas
respetuosas del ambiente del ambiente, y tolerantes de las prácticas culturales de
otros grupos.

La exposición de las personas a los medios masivos de comunicación genera


la aparición de nuevas ideas fuerza en la mente de las personas esta ideas
pueden ser totalmente importadas o producto de un sincretismo cultural. Tal como
la adopción de nuevas religiones, giros idiomáticos, mezcla de imágenes
importadas con locales, demanda por nuevos bienes y servicios. El mundo actual
no es fácil de comprender para la juventud, quieren a un joven alejado de la
realidad, que tenga como prioridad el consumo y no la creación. La construcción
de las identidades no es un tema de simple análisis, el llevar una camisa con
identificaciones extranjeras, comer hamburguesas de franquicias reconocidas de
sus países, no quiere decir que no estén identificados con su país. No podemos
medir la identidad nacional solo con estos parámetros, falta comprender la
dinámica del cambio social.
Un salón de clases es uno de los lugares en la cual se puede reconocer a
diversos tipos de estudiantes, como pertenecen a una comunidad, se idéntica con
ella o no, tanto como los estudiantes y profesores, comparten no solo
conocimiento sino además valores y actitudes que forman parte de su identidad,
recibiendo diferentes aportes culturales que los identifiquen, y a los diferentes
grupos sociales.

Desde el punto de vista conservador, la identidad nacional alude a un sentido


de pertenencia que transciende, más allá de lo afectivo, se debe valorar lo nativo,
folclórico, lo nacional, asi se garantiza la continuidad y coherencia del universo
genuino. Para sobrevivir como nación hay que utilizar el lenguaje de patriótico,
respetar nuestra y sentirse orgulloso de nuestras tradiciones, la identidad es un
fenómeno sociocultural e histórico y político

En el proceso de construcción de una identidad, Leandro (2002), distingue dos


aspectos fundamentales: el altercentrismo y el etnocentrismo. El primero se
relaciona con la dependencia, la cual considera que, lo mejor viene de afuera, por
lo que las personas adoptan modelos, valores, actitudes y otras manifestaciones
culturales externas, ya que son consideradas superiores por el grupo social.

El segundo se refiere a “...aquellas formas de entender, sentir y actuar que


asumen como único criterio válido los principios del propio grupo, mientras
rechazan y condenan cualquier otra formad e entender y sentir y actuar ante la
realidad” De esta manera se puede aludir, que tenemos con otras identidades,
nos relacionamos con nosotros mismos, tener presente que los rasgos culturales
que identifiquen lejos de discriminar, se propicie ambientes para el intercambio de
cultural.

Los procesos identitarios llevan a los distintos grupos humanos reconstruir


identidades por las industrias culturales, flujos migratorios, actividades
comerciales, en una relación interactiva que da paso a varios fenómenos sociales,
entre ellos:

1. La aparición de espacios sociales, en los que se promueven prácticas culturales


alternativas y emergentes.

2. La promoción de la diversidad y el reclamo de las minorías por sus derechos.

3. La dinámica de los micros mundos dentro de la concepción política de Estado.

4. La presión política de los organismos internacionales por los derechos


humanos.

5. El surgimiento de la cultura popular.


6. La pluralidad de expresiones culturales enmarcadas en símbolos, modas,
valores, conocimientos, ideas y prácticas sociales de diversa naturaleza.

Dentro de cada cultural se habla de multiculturalidad cuando en el seno de una


unidad socio-política se vive de acuerdo con diferentes opciones culturales.
Distintos modos de vida, adaptaciones geográficas, económicas políticas y
educativas, diferentes grupos regionales, rurales, urbanos, religiosos, etc. Se
puede vivir de acuerdo con diferentes opciones culturales y a la diversidad que
esta ofrece.

Por las distintas posiciones y discursos, es necesario asumir que existen


diversas interpretaciones en torno a si existe o no una única identidad, ante el
impacto del fenómeno de la globalización. Se puede considerar, que el proceso de
la globalización no solo debe verse como el desarrollo de las nuevas tecnologías
de la comunicación de la ampliación de mercados, es un proceso que trasciende
lo económico y tecnológico. La identidad es un proceso histórico que va en
constante transformación, forma parte de los procesos de socialización que
vinculan las prácticas cotidianas de los individuos y los grupos sociales gracias al
intercambio cultural, de los grupos sociales que nacen y viven en un territorio. Esta
la visión de cambio social y transformación de los propio a causa de los medios de
comunicación masiva, principalmente de la televisión e internet.

Este aspecto es fundamental para entender la dinámica de cambio social que


vivimos en estos tiempos, en la que lo foráneo viene a convertirse en un factor
determinante para diferenciar, compartir o afirmar una forma de identidad.
Además, es una construcción social que se reconoce al interior de cada sociedad,
en aspectos tales como el género, los grupos étnicos, el lugar en donde se nace o
se vive, el aspecto generacional, la edad, las diferencias socioeconómicas, las
tendencias políticas e, incluso, las preferencias sexuales; por lo que la diversidad
se convierte en una característica que cohesiona el fenómeno de las identidades
en tiempos de globalización.

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