Anno Domini (en latín ‘en el año del Señor’), abreviado como A. D., es un indicador
calendario que indica que la cifra que le antecede está contada a partir del año cristiano
del nacimiento de Jesucristo (Jesús de Nazaret), considerado el inicio de la era cristiana.
En el español contemporáneo se emplea con más frecuencia el equivalente «después de
Cristo, referido a Jesús abreviado como d.C. para numerar los años de la era cristiana.
Así, 1492 A. D. y 1492 d. C. representan ambos el año en que Colón llegó a América.
Anno Domini
Después de Cristo, abreviado como d. C., y usado también en latín como anno Domini (en
el año del Señor) y abreviado A. D.,1 es un indicador de calendario que señala que la
cifra antecedente está contada a partir del año cristiano del nacimiento de Jesucristo,
considerado el inicio de la era cristiana. Así pues, 1492 A. D. y 1492 d. C. representan
ambos el año en que Colón llegó a América, aunque en la actualidad se usa casi
exclusivamente la denominación después de Cristo.
Esta designación sirve para enumerar los años en el calendario juliano y el calendario
gregoriano. La formulación latina original Anno Domini nostri iesu christi fue
simplificada posteriormente como Anno Domini, siendo tal año determinado en
el 525 por Dionisio el Exiguo en su Tabla de Pascuas, adoptándose por la Europa
occidental durante el siglo viii y en Oriente en el siglo xvi.
Ahora bien, hasta el siglo xvi el inicio del año podía ser en distintos meses y fechas, según
se tuvieran en cuenta unas u otras tradiciones y unos u otros hechos importantes en la
vida de Cristo: el Estilo Bizantino (el año empieza el 1 de septiembre), el Año de la
Encarnación (el 25 de marzo), el Año de la Natividad (el 25 de diciembre), el Año de la
Circuncisión (el 1 de enero), el Estilo Veneciano, etc
Cálculo erróneo
Popularización
A pesar de que el uso de anno Domini estaba generalizado durante el siglo ix, el antes de
Cristo (o su equivalente) no fue común hasta mucho más tarde. Beda utilizó la
expresión anno igitur ante incarnationem Dominicam (antes de la Encarnación del
Señor) dos veces. Un anno an xpi nativitate (en el año antes del nacimiento de Cristo) se
encuentra en 1474 en una obra de un monje alemán.nota 1 En 1627, el
teólogo jesuita francés Denis Pétau (Dionysius Petavius en latín), con su obra De
doctrina temporum, popularizó el uso ante Christum (latín para antes de Cristo) para
marcar los años anteriores a anno Domini.
Fecha aceptada
Uso en abreviatura
El uso tradicional del latín coloca la abreviatura A. D. antes del año; por ejemplo:
A. D. 2007 (léase anno Domini dos mil siete» y se traduce ‘en el año del Señor de 2007’).
En el caso en castellano de d. C. (después de Cristo), la abreviatura se coloca tras el año;
por ejemplo: 64 d. C. (léase «sesenta y cuatro después de Cristo»).
Era común
Anno Salutis, frecuentemente traducido del latín como en el año de gracia o en el año de
la salvación, es una expresión equivalente a anno Domini, porque para el cristianismo el
nacimiento de Jesús significó el inicio de la salvación.
Se trata de una expresión usada hasta el xviii. Aparece a menudo en una forma más
elaborada como Anno Nostrae Salutis (en el año de nuestra salvación, abreviado An.
Nos. Sal.), Anno Salutis Humanae (en el año de la salvación de los hombres, abreviado
An. Sal. Hum.) o Anno Reparatae Salutis (en el año de la salvación realizada, abreviado
An. Rep. Sal.).
¿Antes de Cristo o Antes de la Era Común?: esta es la verdadera diferencia entre las
abreviaturas a.C./d.C. y E.C./A.E.C
Un estudio reciente ha concluido que la tumba que se creía de Jesús de Nazaret era
mucho más antigua de lo que se pensaba hasta ahora. Sin embargo, los investigadores
databan las fechas en términos de “Era Común”, y no de “Cristo”. ¿Por qué y cuál es la
verdadera diferencia?
Primero los significados. Existen cuatro abreviaturas para referirse a las fechas del
pasado: a.C. (antes de Cristo), d.C. (después de Cristo), E.C. (Era Común), y a.E.C. (antes
de la Era Común). Lo curioso es que son casi idénticas en su significado, aunque
dependiendo de a quién le preguntes, tienen un carácter mucho más adecuado para
hablar de la historia.
Por ello, a.E.C. y a.C. significan lo mismo, es decir, anterior al año 1 E.C. (Era Común). En
realidad, también es lo mismo que el año A.D. 1 (Anno Domini), que significa “en el año
de nuestro señor” y cuyo primer año es la fecha que nació Jesús de Nazaret.
Anno Domini fue la primera de las abreviaturas en aparecer. Antes del siglo VI A.D.,
muchos cristianos que no usaban un sistema de tipo Anno Mundi (en el año del mundo)
confiaban en la datación romana, ya sea marcando las fechas del año o confiando en el
sistema de fechas establecido bajo el emperador romano Diocleciano (244-311). Sea
como fuere, en el español contemporáneo se emplea con más frecuencia el equivalente,
“después de Cristo” (d.C.) para numerar los años de la era cristiana.
E.C./A.E.C fueron invenciones mucho más recientes. Comenzaron en el siglo XVII, con el
advenimiento del término “Era Vulgar”. Contrario a lo que pueda parecer, esto no se
debió a que la gente considerara que era una edad de connotaciones negativas, sino
porque “vulgar” significaba más o menos “común”, lo que reflejaba que estaban en una
era “perteneciente a la gente común” “(Del latín vulgaris).
La primera instancia documentada de Vulgaris Aerae (Era Vulgar o Era Común) que se
usó indistintamente con “después de Cristo” fue presentada en algunas obras latinas de
Johannes Kepler en los años 1615, 1616 y 1617.
Se sabe también que a mediados del siglo XVII, el término inglés “vulgar” adoptó una
nueva definición, ahora más cercana a “grosero”, aunque no sería hasta que la
referencia a “tosca/no refinada” se hiciera más común en el siglo XX, que la referencia a
Era Vulgar cesaría entre las personas. En cuanto a Era Común (E.C.), comenzó a
utilizarse indistintamente con Era Vulgar hacia el 1800.
¿Cuáles son las principales diferencias actuales? Las abreviaturas “Era Común” y “antes
de la Era Común” son usadas frecuentemente por investigadores, académicos y
científicos por su carácter neutro, ya que a.C. y d.C. poseen un matiz religioso. A ellos se
han sumado en los últimos años muchos museos del mundo (entre ellos el famoso
Smithsonian Institution). [Telegraph, Wikipedia, Wikipedia]
Anno Mundi
Anno Mundi (‘en el año del mundo’) hace referencia a un calendario basado en el conteo
de los años a partir de la supuesta creación del mundo según la tradición judeocristiana.
Tal es el caso del calendario hebreo que considera que la creación ocurrió en 3760 a. C.1
y este criterio se basa en el Seder Olam Rabbah del rabino Yose Ben Halafta en el siglo II.
El año 2016 del calendario gregoriano es el 2016+3760=5776 del Anno Mundi y
del calendario hebreo.
James Ussher, un arzobispo anglicano del condado de Armagh (hoy en Irlanda del Norte)
en 1650 en su obra "Anales del Antiguo Testamento" fijó el 23 de
octubre del 4004 a. C. Para llegar a ese punto de partida basó su cómputo en el recuento
de las generaciones asentadas en el Antiguo Testamento, desde Jesucristo hasta Adán
(4000 años), estableció una correlación con los registros de la historia romana y de las
civilizaciones del Oriente Medio, e hizo una corrección basada en una sugerencia del
astrónomo Johannes Kepler, quien asoció el oscurecimiento del cielo durante la
crucifixión de Jesús atribuida con un eclipse solar,2 con la que se retrasa en cuatro años
la fecha de la creación.
Por lo tanto, dicha fecha 4000+4=4004 a. C. fue aceptada inicialmente sólo por la
cristiandad y posteriormente en otras tendencias religiosas. Esta cronología apoyada
por el mencionado arzobispo, dio origen al que se llamó a partir de entonces Calendario
de Ussher-Lightfoot.
A éste se relaciona el Anno Lucis de la masonería, que agrega 4000 años a las
fechas d. C.; y el número de la fecha juliana, contando los días que han pasado desde el
mediodía del tiempo del meridiano de Greenwich (UTC, antes GMT) en el lunes 1 de
enero de 4713 a. C.
La fecha inferida del Martirologio romano3 es 25 de marzo de 5199 a. C., el cual es muy
cercano a la fecha de los anales irlandeses antes mencionados.