Anticipación Estratégica para la seguridad

Pública y Privada.
Por: Julián Meneses
Nos encontramos en un contexto de grandes desafíos; nuevas dinámicas sociales,
económicas y políticas van presentándose en la realidad de los directivos de la
seguridad pública y privada, de manera que hay un reto que lo aflige: no solo se
debe comprender los cambios en curso, sino además prever y anticiparse.

Es necesario entender cómo poder mantener a flote y hacia la dirección correcta la

seguridad Pública y Privada, para lo que la Anticipación Estratégica se
convierte en la práctica esencial, como explicaré a continuación.

Seguridad Pública y Privada: Sector que demanda de

Anticipación Estratégica.
Cuando cambia el mundo constantemente, hay nuevas amenazas y desafíos, a su
vez la forma de hacer política, cambian las leyes, se plantean reformas, y sobre
todo surgen condiciones nuevas que no se esperaban, es fácil ver como la
mayoría de nosotros tan solo se está reaccionando y no anticipando.

La explicación anterior aplica a todos los ámbitos, incluyendo el empresarial,

social, cultural, entre otros. Por ejemplo, un cambio en la economía global, afecta
la forma en la que los comercios de una región específica interactúan en el
mercado.

Pero tales situaciones comerciales podrían anticiparse a los cambios globales,

pronosticarlos y así tomar acción para ir un paso adelante y forjar sus propias
condiciones siempre favorables.

Lo que quiero decir, es que el control de las condiciones es posible, siempre y

cuando se tenga acceso a una gestión de estrategia anticipativa, de manera que
las empresas y la misma organización pública tiene la opción de reaccionar o
anticipar. Actuar por reacción origina desventajas; en cambio una actitud
proactiva, anticipativa y estratégica es lo que garantiza el control y la efectividad.

Lo mismo aplica en el ámbito de la seguridad pública y privada. De manera que

la importancia de la Anticipación Estratégica, está en que le permitirá a las
organizaciones mantenerse alerta ante los actores y factores que influyen sobre
una situación, para realizar una correcta y efectiva interpretación de ellos y

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generar ventajas competitivas, dejando a un lado el nada efectivo y muy
descontextualizado método de la reacción.

Anticipación Estratégica: El factor diferencial.

La Anticipación Estratégica es un valor, pues le da a las organizaciones y a los
responsables de definir estrategias un factor diferencial. Es un instrumento, porque
permite lograr objetivos mediante su utilización; es una herramienta ya que puede
ser usada para un fin, o deberíamos decir, múltiples fines orientados al
cumplimiento de un objetivo, y finalmente es un recurso siempre a disposición si
se conocen su principios.

Y, ¿cómo se puede tener a la mano la Anticipación Estratégica?

En primer lugar mediante el reconocimiento de la necesidad de contar con ella.

Una empresa u organización pública que es capaz de hacerse consciente de su

necesidad de dejar de reaccionar para comenzar a protagonizar y generar los
cambios, y construir las realidades nuevas para lograr la efectividad de sus
estrategias, se preocupará por mantener un equipo que esté a la vanguardia de
los principios para la correcta gestión estratégica y por lo tanto la anticipación.

La Anticipación Estratégica es, por lo tanto, un ir al futuro y plantarse, para

aprovechar en primera plana los cambios que se han evaluado y que sin duda
ocurrirán.

Ahora que estamos en el contexto de la Anticipación Estratégica, su necesaria

aplicación en el mundo actual de dinámicas en evolución en todos los ámbitos y
dimensiones, veamos cómo apoyarnos en sus principios para mejorar la seguridad
pública y privada.

Los objetivos que pueden delimitarse desde la

Anticipación Estratégica.
Como he venido comentando, la Anticipación Estratégica es una práctica que
debe estar presente, sí y solo sí, para la evolución de las organizaciones,
empresas, emprendimiento, para los desempeños de organismos públicos o
privados.

Los objetivos que persigue la Anticipación Estratégica son también razones para
apoyarse en esta práctica.

En primer lugar, mediante la Anticipación Estratégica, se puede apoyar el manejo

de crisis en la seguridad pública o privada. La seguridad, continuidad de negocios,

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y la tranquilidad de los decisores en una crisis, se obtienen cuando la empresa o
la organización pública logra anteponerse para poder sobrepasar conflictos y así
mantenerse centrada en los objetivos.

Para poder lograr tal anteposición, es necesario hacer un análisis e interpretación

de situaciones complejas, que es otro de los objetivos de la Anticipación
Estratégica. Este análisis se basa en la opciones de futuro de las empresas y
organizaciones públicas, de manera que así pueden determinarse las
probabilidades a corto, mediano o largo plazo, y crear planes estratégicos que
permitan la estabilidad y seguridad de la empresa.

La seguridad, entonces, se traduce como el potencial de gestionar las

probabilidades para sobrepasar e incluso aprovechar cada uno de los factores del
contexto. (Aunque a primera vista parezcan negativos.)

Por lo tanto, la Anticipación Estratégica también persigue como objetivo el

asesoramiento y desarrollo de planes y estrategias de seguridad pública y
privada centrándose directamente en la prevención.

Para ello, es importante realizar un monitoreo en tiempo real en situaciones de

interés, bajo el principio de la anticipación, pues de esa forma los planes y
estrategias pueden ser adaptados continuamente de forma efectiva. Este
monitoreo, es el perfecto complemento del cálculo de probabilidades, y a esta
técnica se le conoce como: inteligencia de medios abiertos.

Por otro lado, los riesgos públicos y privados, son objetivos de análisis de la
Anticipación Estratégica, a través de técnicas de generación de microescenarios y
nanoescenarios que permiten preconocer cómo podrían afectar a personas y
organizaciones de manera individual.

Pilares esenciales para la perfecta Anticipación

Estratégica a favor de la seguridad pública y privada.

Para poder anticipar, en primer lugar, hay que comprender y asimilar una gran
verdad: la Anticipación Estratégica debe apoyarse en la Probabilidad como un
producto directo del Pronóstico técnico.

¿A qué me refiero?

Se necesita hacer pronóstico de los escenarios futuros para determinar la

Probabilidad y entonces, aplicar la disciplina de la Anticipación Estratégica.

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En tal sentido, fortalecer la seguridad pública y privada, llevar esa seguridad a
un alto nivel técnico, el cual es posible, es una acción que se sostiene en procesos
y procedimientos matemáticos, combinados con técnicas de análisis psicológico y
sociológico.

Esto es posible porque la Anticipación Estratégica es una ciencia probada,

sustentada en principios y postulados demostrados como infalibles, que requiere
de una limpia y certera ejecución para que puedan lograrse los objetivos que
fueron delimitados en el segmento anterior, como los fines que el decisor en
seguridad.

En este sentido, es necesario abordar el concepto de pronóstico para entender el

proceso mediante el cual puede lograrse una excelente gestión de seguridad
pública y privada a través de la Anticipación Estratégica como un proceso
coherente y secuencial que contiene de manera general, varias actividades.

ACTIVIDAD # 1: Pronóstico
El pronóstico es el concepto con el que etiqueto la actividad de cálculo
probabilístico como una ciencia.

Es así como se aleja la acción del cálculo y la probabilidad como resultado de las
visiones místicas en las que, erradamente, se han enfocado diversas corrientes en
la historia de la humanidad.

Pronóstico es el enunciado de lo que es probable que ocurra en el futuro, y

encierra una serie de tareas que permiten su construcción, de manera que va más
allá del análisis subjetivo, y pasa a ser un proceso con mecanismos orientados a
un objetivos, en donde no se deberían tener en cuenta las clásicas “variables”,
sino “actores” que toman decisiones, y cómo estas decisiones son limitadas,
pueden precalcularse.

Mientras más orientado esté el análisis hacia el pronóstico técnico, más garantía
habrá en los resultados.

Es así como pronóstico es mucho más que predicción. Pues no se trata de tan
solo de pre-decir o adivinar, sino de determinar lo que va a pasar, con base en los
indicadores de futuro.

Puede decirse que el pronóstico es una tecnología para la ingeniería de

futuro, en la que a través suyo, se pueden identificar claramente indicadores de
futuro y además monitorearlos para seguir calibrando los modelos de análisis que
nos permiten avanzar más rápidamente en esta búsqueda científica.

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Actividad # 2: Probabilidad como resultado del pronóstico
técnico.
La probabilidad es entonces el resultado del pronóstico técnico, y en este punto es
necesario detenerse para aclarar que una probabilidad se basa a su vez en
presupuestos.

Los presupuestos son supuestos que se establecen en base a los datos obtenidos
o creados por los equipos de analistas, pues solo de esa manera se puede
fundamentar sólidamente, garantizando una Anticipación Estratégica efectiva.

Entonces, lo imposible pasa a ser un concepto nuevo, ya que lo que creemos

imposible es realmente relativo al observador. Cuando lo imposible es el resultado
del presupuesto en el que se basa la probabilidad tras un pronóstico, tal imposible
deja de serlo.

Me gusta decir siempre, que la historia nos ha demostrado que toda la ingeniería
del futuro, que la Anticipación Estratégica como práctica, método y disciplina, es
un concepto sólido al que debemos prestar atención.

Cuando lo imposible sorprende a la seguridad pública y privada, lo que sucede

es que no hubo una buena gestión anticipativa, por lo tanto, no se previó, no se
pronosticó, y no se develó la probabilidad de lo posible, lo imposible y lo
impensable.

Con este pilar la seguridad pública y privada puede contar con una gestión
efectiva para que pueda garantizarse

Actividad # 3: Acceso a la información.

Aunque son muchos los factores que podrían intervenir en la formulación de una
estrategia para anticiparse a ciertos eventos, en este tercer pilar voy a resumir una
serie de acciones.

En otras publicaciones se podrá encontrar literatura detallada sobre los

pasos, principios y claves a tomar en cuenta para poder generar un proceso ideal
a fin de materializar una estrategia que lleve hacia acciones determinadas.

Sin embargo, en este tercer pilar, como he dicho, quiero que el lector entienda la
importancia de fundamentar la Anticipación Estratégica en el acceso o la
creación de la información correcta.

Esto aplica en todos los ámbitos y dimensiones de la realidad.

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Una política de seguridad acertada por ejemplo, se orientará al logro de la
protección de los intereses de sus usuarios, pero se construirá con base en los
datos necesarios para entender el contexto y pronosticar lo que va o ocurrir, y
no solo, lo que puede ocurrir.

Esta es una diferencia clave con los métodos clásicos de análisis para la
seguridad, ya que en ellos, cuando se analizan múltiples opciones, esto lleva
naturalmente a la necesidad de contar con muchas medidas de prevención. Por el
contrario cuando se sabe que va a ocurrir, el modelo usa menos recursos, y
enfoca los esfuerzos en estas altas probabilidades.

Con una buena gestión de Anticipación Estratégica, en la que se cumplan los

procesos de pronóstico, probabilidad, presupuestos, entre otros, lo imposible no
sorprenderá a la seguridad pública y privada, porque se habrán estudiado los
indicadores necesarios para prevenir y determinar cuáles son las mejores
decisiones que deben tomarse, en función a los objetivos.

Hacia una gestión anticipativa y estratégica para la garantía de la

seguridad pública y privada.
La intención de dar a conocer la importancia y funcionamiento de la Anticipación
Estratégica, es que se tenga conciencia sobre cómo puede crear un proceso de
planeación y control sólido y funcional para la seguridad pública y privada.

La garantía está, en que se realicen los procesos de forma óptima, para lo que se
requiere de mucho conocimiento técnico en el área.

Los resultados no solo justifican la inversión del tiempo y de los recursos

necesarios para poder gestionar las crisis y anticiparse a los escenarios, sino que
además se presentan como una ganancia sobre la inversión, que normalmente se
traduce en menos recursos gastados y más resultados.

En conclusión, la anticipación estratégica, es la perfecta herramienta para los

decisores en el campo de la seguridad pública y privada, ya que cada vez deben
operar con menos recursos, ser más efectivos, y garantizar la protección de los
bienes y las personas puestos bajo su responsabilidad.

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