agrícolas internacionales
y su influencia en los precios
de los alimentos
Ignacio Atance Muñiz*
José María García Álvarez-Coque**
TABLA 1
PRECIOS REALES Y PREVISTOS DE TRIGO, MAÍZ Y SOJA ($/T)
los precios medios a lo largo del año 2007 y cebada) destinados para bioetanol as-
se situaron muy por encima de los previs- cendieron en 2006 (últimos datos disponi-
tos tanto en el caso del trigo (51 por 100 bles) a 3 Mt (1,4 por 100 de la producción
con respecto al precio previsto), como de UE), cifra que representa un aumento de
la soja (66 por 100) o el maíz (25 por 100). 2,3 Mt respecto a 2004, es decir, un incre-
En consecuencia, ambas instituciones mento del 300 por 100 en términos relati-
han realineado sus proyecciones a la nue- vos. En el caso de USA, el maíz destina-
va realidad de los mercados, asumiendo, do a bioetanol en 2006 supuso unos 3
como veremos con detalle en el apartado M.bushels, es decir, dos millones más
próximo, que los precios experimentarán (200 por 100) que el empleado en 2004.
un ligero descenso respecto a los precios No obstante, el desequilibrio oferta-de-
récord del 2007 a raíz de una recupera- manda ha sido pequeño en términos ab-
ción de la oferta, pero que, sin embargo, solutos, perfectamente asumible gracias
se mantendrán altos durante la próxima a los niveles previos de almacenamiento.
década, muy alejados en todo caso, no Como consecuencia, eso sí, la ratio de
sólo de los precios de comienzos de los stocks en comparación con el consumo
años 2000 sino también de las previsio- anual, habría descendido en todos los
nes existentes hace sólo un año. De esta productos, estando previsto que se man-
manera, los precios previstos en el hori- tenga en estos niveles, relativamente ba-
zonte 2014 son en torno a un 20-35 por jos, durante la próxima década. En con-
100 superiores a los previstos un año an- creto, en trigo el ratio habría descendido
tes en el caso del trigo y el maíz y hasta al 18 por 100 (respecto a niveles del 35
un 50 por 100 superiores en el caso de las por 100 a comienzos de década) estando
oleaginosas (soja). previsto que se mantenga estable en un
¿Qué ha pasado en los mercados mun- 20-21 por 100 en la próxima década, COLABORACIONES
diales para esta sacudida de precios en mientras que en maíz habría descendido
2007? Sin duda se trata de una pregunta al 13 por 100 (30 por 100 a comienzos de
compleja, por lo que mejor es aportar los década), porcentaje que se mantiene
datos existentes. Los años 2006-2007 se constante como previsión para la próxima
han caracterizado por producciones cor- década.
tas, inferiores a las normales y por tanto a Por tanto, observamos como los mer-
las previstas, mientras que la demanda ha cados habrían reaccionado con virulencia
sido creciente, tal y como estaba espera- a un pequeño desajuste entre producción
do. Así, en 2007, la producción de trigo ha- y consumo. Aisladamente, ni el incremen-
bría caído unos 20 millones de toneladas to de la demanda de materias primas
(Mt) (-3 por 100) y la de soja unos 14 Mt (- agrarias en las economías emergentes, ni
6 por 100) respecto a la de 2006, con lige- el derivado del incremento de su utiliza-
ros repuntes de su consumo, mientras que ción para la producción de biocarburantes
en el caso del maíz no se habría produci- tendrían que conllevar subidas de sus
do desequilibrio entre su producción y con- precios más allá de las previstas en las
sumo. perspectivas de hace un año. Sin embar-
A ello debemos sumar el crecimiento go, ante su presencia conjunta y ante los
de la demanda de materias primas para riesgos de que cosechas por debajo de
biocombustibles, importante en términos los niveles previstos puedan suceder nue-
relativos, pero aún pequeña en valor ab- vamente, parece evidente que los opera-
soluto. En la UE, los cereales (trigo, maíz dores han tomado posiciones en los mer-
Latina (10 por 100 de las importaciones las exportaciones de USA de maíz y sor-
netas mundiales), donde el incremento go, (Cuota de mercado en 2007/08 63,3
del consumo se compensará con el incre- por 100, y en 2008/09 se estima en 55,2
mento de la producción propia. por 100), por el incremento del uso do-
méstico (bioetanol), pero se recuperará la
Cereales secundarios cuota de mercado en los próximos 10
años por el incremento de las produccio-
Las estimaciones apuntan a un creci- nes. Esta perdida la compensarán países
miento medio anual de un 1,4 por 100 en como Argentina que aumentarán su cuota
la producción debido al incremento del de mercado hasta el 17 por 100. En el ca-
área de cultivo y los rendimientos, sobre so de Brasil la tendencia es a la baja
todo del maíz en USA y Latinoamérica. Se puesto que el consumo crece más que la
establece una producción de cerca de producción lo que la sitúa en el 6,8 por
1.050 Mt en 2008/09, alcanzando 1.170 100. Las importaciones se incrementarán
Mt en 2017/18 (de las cuales 900 Mt se- en países de Asia, fundamentalmente
rán de maíz). La producción respondería China y Japón, debido a su incremento en
así a la mayor demanda para uso alimen- la cabaña ganadera.
tario (por incremento tanto de la población
como del consumo per capita), uso indus- Oleaginosas
trial en la producción de etanol y uso por
parte del sector ganadero que debe cubrir Se espera un incremento en las pro-
las necesidades del incremento de la ca- ducciones de oleaginosas, por aumento
baña, sobre todo en Asia y Latinoamérica. del área de cultivo. La producción de so-
En cuanto a precios, FAPRI considera ja alcanzará al final del periodo los 300
que en la campaña 2007/08 la demanda Mt, siendo los principales productores COLABORACIONES
de maíz en el mundo y sobre todo en USA Argentina (60 Mt en 2017/18), Brasil (91
provocó un incremento del precio del ma- Mt) y USA (88 Mt); el principal consumi-
íz de más de un 27 por 100, situándolo en dor mundial es USA, se espera que en
198 $/t, precio que se espera que des- 2016/17 le arrebate el liderazgo China
cienda ligeramente debido al incremento (23 por 100 del consumo mundial en
de las producciones esperado para la co- 2017/18).
secha 2009/10, a partir de ese momento Según FAPRI, el récord alcanzado por
se mantendrá relativamente estable en los precios de las oleaginosas en 2007/08
torno a los 195 $/t. En las proyecciones estaba causado por la existencia de una
de la OCDE se estima un precio global de oferta incapaz de asumir el incremento
los cereales secundarios para la campaña fuerte de la demanda que se dio. El precio
2007/08 de 159 $/t con una tendencia al de la soja se mantendrá elevado en
descenso, situándose el precio al final del 2008/09 por la baja disponibilidad de
periodo 2016/17 en 138 $/t. stocks (395 $/t) y posteriormente descen-
Por último, el comercio mundial de ce- derá oscilando entre 374 $/t (2009/10) y
reales secundarios se incrementaría un 390 $/t (2016/17). A pesar de la expansión
1,5 por 100 anual, situándose a lo largo del área de cultivo y la mejora en los ren-
del periodo en 130 Mt, sobre todo debido dimientos no se espera que los precios de
al maíz y a la cebada por el incremento de las oleaginosas vuelvan a sus niveles his-
su demanda en países de África y Asia. tóricos por el resto del periodo considera-
En 2008/09 se espera un decremento de do en las proyecciones.
El resultado neto de las presiones an- mentos de precios en origen. Por el con-
teriores puede favorecer que los precios trario, en otros países los márgenes de
de los productos alimenticios puedan con- comercialización no han actuado como
tenerse en el interior de la Unión Europea. estabilizador y los consumidores tienden
No obstante, los precios al nivel de los a soportar los incrementos de precios, so-
consumidores dependen en buena medi- bre todo si no existen unas condiciones
da del funcionamiento de los canales de de competencia en el mercado detallista.
comercialización, ya que los mecanismos La capacidad de negociación de la distri-
de transmisión de precios no son siempre bución se ve reforzada por la tendencia
transparentes ni eficientes. En España, generalizada a la centralización de las
como en otros países industrializados, la compras, que constituye un elemento
evolución de los precios de los alimentos esencial de las nuevas relaciones vertica-
al productor no sigue la de los precios al les entre productores y comercio minoris-
consumidor en una cadena en la que in- ta. La negociación proveedor-minorista,
tervienen varios agentes y en la que el po- apoyada en el poder de compra de las
der de negociación de la distribución es centrales, constituye un eje esencial de la
considerablemente superior al de los pro- distribución moderna. Este hecho debería
ductores. Esta evolución asimétrica de los atraer la atención por la investigación re-
precios ha sido reflejada por los datos del lacionada con imperfecciones en los mer-
Observatorio de precios del MAPA y por cados y prácticas anticompetitivas e inclu-
diferentes investigaciones. Los precios fi- so del marco normativo vigente, casi
nales de los productos de alimentación se exclusivamente orientado en la actualidad
ven condicionado, por un lado, por la for- a las prácticas que se producen al final de
mación de los márgenes comerciales (con la cadena comercial por afectar de un mo-
un crecimiento del 18 por 100 entre 2001 do directo al precio pagado por el consu- COLABORACIONES
y 2004). Por el otro lado, por el creciente midor.
peso de los servicios añadidos al produc-
to, que contribuyen a cortar la relación en-
tre los precios en origen y los precios en 7. Comentarios finales
destino.
Las condiciones competitivas en el sec- Existen factores estructurales que invi-
tor minorista varían entre los propios paí- tan a pensar en un ciclo largo de precios
ses de la Unión Europea de modo que to- altos en los mercados mundiales de pro-
davía hay que recorrer un trecho hasta que ductos básicos. Entre dichos factores po-
alcancemos un verdadero mercado único. demos destacar la demanda de los países
En algunos países, los aumentos de pre- emergentes, vinculada a su creciente ur-
cios de los alimentos se han podido mode- banización y dinamismo económico. La
rar debido a la elevada competencia entre utilización de productos agrícolas para la
minoristas y los márgenes de comercializa- producción de biocombustibles contribuye
ción han actuado de mecanismo estabiliza- a la escasez pero no parece ser tan deter-
dor, suavizando los efectos de los shocks minante a medio plazo. Por otro lado, la
sobre los precios de los productos básicos. estrechez de los mercados internaciona-
Si se añade una situación de ralentización les conlleva fuertes oscilaciones de pre-
del ritmo de crecimiento de la renta y el cios.
empleo, los minoristas son más reticentes La producción agraria se tenderá a
a trasladar a los consumidores los au- desplazar a grandes países en desarrollo
COLABORACIONES