John C. Maxwell en sus 21 Leyes irrefutables del liderazgo, nos explica las
verdades más importantes del liderazgo aprendidas a lo largo de su trayectoria
como líder. El liderazgo implica entrega, abnegación y compromiso, un buen líder
que comprende su posición, tiene el deseo de aprender, la disposición de ayudar a
los demás y el propósito de crecer junto a su equipo, sabe que por ser líder no es
mejor que las personas de su equipo, sólo tiene asignaciones, responsabilidades y
una visión diferente, entiende que su liderazgo debe ser inclusivo y fomentar el
crecimiento de todos.
7. La ley del respeto: por naturaleza, la gente sigue a líderes que son más
fuertes que ellos mismos.
La mejor forma en que el líder demuestra su fortaleza es generando cambios
positivos que afecten de forma positiva a su equipo. Un buen líder impone
respeto al dirigir con éxito a su equipo, los motiva, inspira, no permite que
ningún miembro se rinda, pues su objetivo es conducirlos a la victoria. El líder
para tener una excelente reputación y una influencia perdurable debe ser
intrépido, inquebrantable.
8. La ley de la intuición: los líderes evalúan todas las cosas con pasión de
liderazgo.
Esta basada en hechos, más el instinto y otros factores intangibles, es el factor
que distingue a los líderes más grandes de los que simplemente son buenos
líderes. Un gran líder se acerca a una situación o problema con una actitud de
liderazgo, es decir, con visión y anticipación a las consecuencias y magnitudes
del tema. Cuando un líder evalúa todo con predisposición, interpreta la
situación, tendencia, recursos, personas e identifica un problema, lo mide,
examina las variables para solucionarlo, analiza las consecuencias de cada
variable y ejecuta la solución de la forma más eficaz posible.
10. La ley de la conexión: los líderes tocan el corazón antes de pedir la mano.
Un buen líder sabe cómo conectar con la gente, para ello debe ser afectuoso y
accesible, debe mostrar un interés genuino por ayudarlos, debe conectar con
una persona a la vez. El líder eficaz comprende que primero debe ganarse el
corazón de las personas antes de pedirles que sean sus seguidores, un buen
líder debe hablar a nivel emocional antes de hablar a nivel intelectual. El líder
nunca subestima la importancia de construir puentes en las relaciones con su
equipo, se esfuerza para dirigir a otros usando su corazón.
11. La ley del círculo íntimo: el potencial de un líder lo determinan quienes están
más cerca de él.
La capacidad del líder esta determinada por quienes están más cerca de él,
por lo que el líder debe rodearse con gente mejor que él y por ende se verá
obligado a crecer a ese nivel. El líder debe tratar de agregar a personas con
valor potencial que se autodirigen y motivan, a personas que levantan la moral
en el equipo, a personas que levantan al líder, a personas con valor productivo
que forman a otros, a personas con valor comprobado que hacen efecto
multiplicador forman a formadores, y nunca dejar de mejorar su círculo íntimo.
12. La ley del otorgamiento de poderes: sólo los líderes seguros otorgan poder a
otros.
No debe ser un líder cuello de botella, que por inseguridad arrebata a todos en
su equipo cualquier poder de decisión y crea dependencia hacia él. Un líder
firme y seguro crea más poder otorgando poder a su gente de confianza,
obtiene más autoridad al entregarla y hace al equipo más fluido, rentable y
exitoso.
15. La ley de la victoria: los líderes encuentran la forma de que el equipo gane.
Para un líder cualquier otro resultado que no sea salir victorioso es inaceptable,
persiste y logra llevar a su equipo y a él mismo al éxito. El líder determina que
debe hacer y encuentra la forma de ganar para lograrlo se asegura que en su
equipo todos tengan unidad de visión, que cada miembro sume y construyan la
diversidad de habilidades del equipo y eleva a los miembros del equipo a su
máximo potencial.
16. La ley del gran impulso: el impulso es el mejor amigo del líder.
Un líder promedio continúa con lo que ya se ha hecho y lo mantiene estable,
un verdadero líder impulsa el crecimiento de su equipo hacia adelante, a través
de acciones claves que generen crecimiento y crea impulso para el y para
todos. El líder solo podrá transmitir aquello que verdaderamente siente, si está
preparado y motivado, si siente el impulso lo usa como su aliado, para lograr
que el equipo pase de un estado de reposo a movimiento, es más difícil al
comienzo, pero al empezar a moverse es difícil detenerlo. El impulso es el
agente de cambio más poderoso.
20. La ley del crecimiento explosivo: para añadir crecimiento, dirija seguidores;
para multiplicarse, dirija líderes.
Esta ley pude considerarse una extensión de la ley del tope o de la ley del
círculo íntimo, ya que el verdadero líder se rodea de otros líderes para tener un
efecto multiplicador en su crecimiento, y porque cada líder que compra su
visión será capaz de venderla a todos sus seguidores por él. Sin embargo el
desarrollo del liderazgo es una ardua labor encontrar y atraer líderes
potenciales, y aún más retenerlos porque son dinámicos, emprendedores y
tienen tendencia de ir por su propio camino, lo cual exige tiempo, energía y
recursos.
21. La ley del legado: el valor duradero del líder se mide por la sucesión.
En el futuro no sólo se le juzgará al líder por su período en el equipo, sino por
dejar un legado, y entregar al equipo de la mejor manera permitirá que su
trabajo realizado siga creciendo. El buen líder reconoce la importancia de tener
un sucesor y que entrenarlo es la clave del éxito continuo en el equipo. El éxito
no se mide por el sitio hacia donde uno parte, sino por lo que uno deja atrás.
Las 21 leyes irrefutables del liderazgo solo le servirán al líder si las aprende, las
toma en serio y las aplica en su vida. Siempre debe recordar que todo depende
del liderazgo, todo crece o cae por el liderazgo y nunca olvidar: - El personal
determina el potencial del equipo. – Las relaciones determinan la moral del
equipo. – La visión determina la dirección del equipo. – El liderazgo determina el
éxito del equipo.
CONCLUSIÓN
Aprender sobre liderazgo es tarea obligatoria de toda persona que aspire a un
liderazgo, no sólo para instruirse de como autoliderarse sino para saber y
desarrollar sus habilidades para liderar a las personas que lo siguen. Y las 21
leyes irrefutables del liderazgo de John C. Maxwell nos ejemplifican los principios y
procedimientos que pueden ayudar al crecimiento sostenido, pues son adaptables
a todas las áreas, personal, familiar o profesional y son una herramienta que se
puede utilizar y aplicar diariamente al estar orientadas para mejorar la aptitud y
actitud de cualquier persona.
En mi opinión creo que es necesario saber como influir de manera positiva en un
equipo de trabajo, y como potenciar el nivel de influencia como líder ya que todo
se trata de influencia, y ésta a su vez requiere de sacrificio, esfuerzo y trabajo
constante en varios factores como la confianza, comunicación, experiencia,
conocimientos, servicio a otros y sobre todo de tener la capacidad de añadir valor
a las personas. La aplicación de las 21 leyes transforma y mejora la aptitud y
actitud del liderazgo de las personas.