Los niveles altos de triglicéridos son preocupantes debido a que pueden aumentar el riesgo de
sufrir enfermedades cardiacas y derrame cerebral. Si quieres bajar rápidamente tus triglicéridos,
los siguientes cambios en el estilo de vida y medicamentos pueden marcar una gran diferencia.
Método
Elimina los dulces de tu dieta.[1] Los azúcares refinados y añadidos pueden generar el aumento de
los triglicéridos, así que una de las formas más rápidas de bajarlos puede ser reducir la ingesta de
azúcar. Esto se debe a que los azúcares suelen ser calorías innecesarias que el organismo convierte
en triglicéridos (una forma de grasa) para su almacenamiento.
Evita, por ejemplo, los postres dulces y los jugos concentrados de frutas.
En vez de consumir carbohidratos refinados, opta por los panes y las pastas hechos de granos
integrales.
Reduce tu consumo general de carbohidratos y come más proteínas. Las proteínas tienen un
"índice glucémico más bajo" que los carbohidratos, lo cual significa que se absorben con más
lentitud en el torrente sanguíneo. Esto a su vez es útil para bajar los niveles de azúcar en sangre y
los niveles de "lípidos" en sangre (incluyendo los triglicéridos).Las grasas saludables también son
una gran adición en la dieta ya que estas ayudan a estabilizar el azúcar en la sangre y pueden a su
vez ayudar a reducir los triglicéridos.
Una vez que los triglicéridos hayan bajado a un nivel aceptable, podrás reincorporar gradualmente
el alcohol a tu dieta. Sin embargo, evita beber mucho o muy seguido, puesto que consumirlo en
exceso podría volver a subir dichos niveles.
Consume más ácidos grasos omega 3.[2] Los ácidos grasos omega 3 se consideran grasas
"buenas", y consumirlos regularmente le permite al cuerpo reducir los niveles de triglicéridos.
Consume 2 porciones de pescado graso por semana. Si lo haces de forma constante, puedes notar
un cambio en los niveles de triglicéridos.
Algunos pescados grasos con un alto contenido en omega 3 son el salmón, la caballa, las sardinas,
el atún y la trucha.
También puedes encontrar omega 3 en la linaza molida, el aceite de linaza, la soya, las legumbres,
las nueces y las verduras de hoja verde oscuro. Incorpora estos alimentos a tu dieta diaria.
Un suplemento de omega 3 de buena calidad puede ser muy beneficioso ya que puede ayudar a
alcanzar la cantidad recomendada de omega-3 u omega-6.
Consume alimentos de origen vegetal. En especial si las proteínas de tu dieta provienen de fuentes
vegetales (en vez de provenir de las carnes rojas), puedes notar una reducción significativa de tus
niveles de colesterol y triglicéridos.
Los frijoles secos, las arvejas y la soya son productos vegetales ricos en proteínas.
También puedes comer pollo como un sustituto de la carne roja, ya que es una mejor alternativa
para regular los niveles de triglicéridos.
Obtén suficiente fibra. La fibra ayuda a regular la forma en que el organismo absorbe y pasa los
alimentos. Por lo tanto, los alimentos ricos en fibra pueden disminuir considerablemente los
niveles de triglicéridos y de colesterol.
La fibra se mezcla con agua en los intestinos para formar una matriz gelatinosa a la cual se
adhieren las grasas. Esto disminuye el porcentaje de grasas (incluyendo los triglicéridos) que el
cuerpo absorbe. Además, la fibra mantiene la salud del aparato digestivo de otras maneras.
Para obtener más fibra en tu dieta, aumenta tu consumo de granos integrales. También debes
ingerir más frijoles, frutas y verduras.
La fibra también produce la sensación de saciedad, lo cual puede evitar que comas en exceso.
Bebe más agua al momento de aumentar tu ingesta de fibra. De otro modo, podrías experimentar
un malestar intestinal de moderado a severo.
Vigila tu consumo de grasas. Las grasas saturadas y las grasas trans pueden ser muy perjudiciales
para la salud. Pero si consumes la menor cantidad posible, puede afectar de forma positiva los
triglicéridos.
Los alimentos envasados y la comida rápida son los mayores responsables de estas grasas "malas".
Los productos de origen animal y todo lo hecho con aceite vegetal hidrogenado también pueden
representar un problema, además de la materia grasa, la manteca o la margarina.
Algunas frutas con el menor contenido de fructosa son albaricoques, frutas cítricas, melones,
fresas, aguacates y tomates. Si vas a consumir frutas, estas son las mejores opciones.
Algunas frutas más ricas en fructosa son mangos, plátanos, plátano macho, uvas, peras, manzanas,
sandía, piña y zarzamoras. Son frutas que debes evitar o al menos limitar en tu dieta.
Método
Regula tu ingesta de calorías.[5] Pon mucha atención a la cantidad de calorías que ingieres a diario
y determina si puedes reducirla (consulta con tu médico para encontrar una meta segura y
alcanzable).
Esto es muy útil si tienes sobrepeso u eres obeso, ya que el exceso de peso puede ser una causa de
niveles altos de triglicéridos.
La mayoría de las mujeres debe intentar consumir 1200 calorías al día, mientras que la mayoría de
los hombres debe tratar de obtener 1800 calorías al día (esto puede variar dependiendo del nivel
de actividad y otros factores). Si necesitas bajar de peso o disminuir tus calorías, el médico puede
hacerte seguir una dieta especial que tenga menos calorías, pero no debes seguir este tipo de
dieta sin su aprobación.
Come porciones más pequeñas. Consumir comidas más pequeñas con más frecuencia es mejor
que comer dos o tres grandes.
Haz ejercicios.[6] Los ejercicios moderados constituyen una parte fundamental para la reducción
de los niveles de colesterol y triglicéridos.
No cedas a la tentación de fijarte un régimen de ejercicios muy severo. Tal vez pienses que tus
niveles de triglicéridos bajarán más rápido si empiezas con un programa de ejercicios riguroso,
pero es una mala decisión a largo plazo. Empezar con algo muy difícil aumenta las probabilidades
de dejar el programa más pronto. Empieza con 10 minutos de ejercicios diarios y añade 1 o 2
minutos por semana hasta que llegues a 30 a 40 minutos.
Varía tu rutina de ejercicios. Puedes caminar un día, montar en bicicleta el otro día y hacer
ejercicios siguiendo un DVD el siguiente día. Sé creativo. Variar tu programa de ejercicios impedirá
que te aburras. También puede permitirte encontrar una forma de ejercicio que te parezca
divertida.
Deja de fumar.[7] Dejar de fumar es un paso esencial para reducir el riesgo de enfermedades
cardiacas y disminuir los niveles de triglicéridos.
Método
Tomar medicamentos
Los fibratos son ácidos carboxílicos, un tipo de ácido orgánico hecho de carbono y oxígeno.
También son anfipáticos, lo cual significa que se ven atraídos tanto por las grasas como por el
agua.
Dichos fármacos aumentan los niveles de HDL, y a su vez reducen los niveles de triglicéridos. Esto
se produce a través de la reducción de la producción en el hígado de cierta partícula encargada de
transportar los triglicéridos.
Ten en cuenta que los fibratos pueden provocar malestar digestivo, irritación hepática y cálculos
biliares. Además, es peligroso usarlos junto con anticoagulantes y pueden causar daño muscular
cuando se utilizan con las estatinas.
De la misma manera que los fibratos, el ácido nicotínico disminuye la capacidad del hígado de
producir las partículas que transportan los triglicéridos, las cuales se conocen como lipoproteínas
de muy baja densidad (VLDL).
El ácido nicotínico aumenta el colesterol HDL ("colesterol bueno") más que otros fármacos del
mismo tipo.
Consulta con tu doctor antes de usar dicho medicamento, ya que puede interactuar con otros
medicamentos y causar efectos secundarios peligrosos.[9]
Los posibles efectos secundarios graves son dificultad para respirar, dolor de estómago intenso,
ictericia y mareos. Aunque estos ocurren raras veces, es importante tenerlos en cuenta.
Infórmate sobre los omega 3 de venta bajo receta médica. Consumir más ácidos grasos omega 3
de forma natural puede marcar una gran diferencia en los niveles de triglicéridos, pero las dosis
elevadas de suplementos de omega 3 de venta bajo receta pueden disminuir los triglicéridos de
forma mucho más efectiva.
Solo debes tomar dosis altas de omega 3 bajo las indicaciones y la supervisión de un doctor, ya
que podrían interactuar con otros medicamentos.[10] El exceso de omega 3 puede diluir
severamente la sangre y bajar la presión arterial. También puede dar lugar a niveles elevados de
azúcar en sangre y podría impedir el funcionamiento del hígado. Asimismo, puede desencadenar
trastornos mentales.
Aprende sobre las estatinas.[11] La estatina más usada es la atorvastatina. Otras estatinas son
fluvastatina, lovastatina, pitavastatina, pravastatina, rosuvastatina y simvastatina.
Estos fármacos reducen el colesterol bloqueando una enzima llamada HMG-CoA reductasa. Esta
enzima desempeña una función clave en la producción de colesterol.
El objetivo principal de la estatina es disminuir el colesterol LDL. También puede bajar los
triglicéridos, pero este fármaco tiende a ser menos efectivo que otros tipos de medicamentos
recetados para este fin.
Los efectos secundarios de la estatina son poco frecuentes, pero severos. El daño muscular es el
principal de ellos, sobre todo cuando se usa la estatina junto con un fibrato. También puede
provocar problemas hepáticos y aumentar el riesgo de diabetes.
Ten cuidado con los síntomas de exceso de consumo de omega 3. Estos pueden incluir piel grasa o
brotes de acné, antojos, pelo grasiento y sensación general de pesadez.
Consejos
Antes de realizar cambios importantes que afecten tu salud, es indispensable entender por qué lo
haces. Los niveles elevados de triglicéridos son uno de los principales "factores de riesgo" de
enfermedades cardiacas (incluyendo los infartos, los derrames cerebrales y la "aterosclerosis", la
cual es un endurecimiento de las arterias).[12]
Los triglicéridos también contribuyen a una afección llamada "síndrome metabólico". Cualquier
persona que tenga tres o más de los siguientes factores es diagnosticada con dicho síndrome:
presión arterial elevada, niveles de triglicéridos elevados, colesterol HDL alto, aumento de la
circunferencia de la cintura y niveles elevados de azúcar en sangre. En esencia, es un "síndrome"
basado en el estilo de vida, el cual aumenta el riesgo de enfermedades cardiacas, diabetes, hígado
graso y varios tipos de cáncer.[13] Es por eso que debes evitar los niveles elevados de triglicéridos.
Mientras más cambios positivos adoptes en tu estilo de vida, incluyendo la dieta y el ejercicio
(añadiendo medicamentos si es necesario y según lo que recomiende el médico), más feliz serás y
estarás encaminado hacia una vida saludable y satisfactoria. A veces empezar es la parte más
difícil, pero mientras más progresos realices, más animado estarás.
Advertencias
Siempre debes consultar con un médico antes de realizar cambios significativos en tu alimentación
o la cantidad de actividad física que practiques. Los cambios drásticos (aun si son saludables)
pueden repercutir de forma negativa en la salud general.
El aspartame es una sustancia compuesta de Fenilalanina y ácido aspártico. Ambas sustancias
son AMINOACIDOS. Los aminoácidos son 20 y están en las proteínas.
Alguien debería educar a la gente para que no sea crea tanto mito de baratija que hay por ahi.
Acesulfame K, aspartame, sucralosa, son los 3 edulcorantes artificiales más utilizados y todos son
completamente seguros.
Yo te recomiendo beber solo agua, pero como mucha gente está acostumbrada al sabor y al
dulzor, si no puedes, toma con confianza estas bebidas.
lo que yo te recomendaria es que no sea el unico liquido que consumas; trata de tomar agua
principalmente que es lo mejor; y en menor cantidad las bebidas dieteticas
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