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ESTILOS DE APRENDIZAJE

En sus orígenes, el hombre se hallaba solo en el planeta Tierra. Se hallaba solo por
dos motivos: el primero es que no sabía hablar, ni comunicarse, y su sistema de
mímica y señales era muy limitado. Como él, los demás se presentaban como
entidades aisladas unas de otras; su segunda razón para estar solo es que el
concepto "aprender" ni siquiera se hallaba en su mente: solo buscaba sobrevivir, y
para ello bastaba satisfacer sus más básicas necesidades biológicas. Con el tiempo,
supo que al aprender iba mejorando su nivel de vida y de esta manera se fueron
originando nuevos descubrimientos que llevaron a este a evolucionar, sin embargo
para que esto sucediera fue preciso en primer lugar tener un conocimiento,
comprender, aplicar y finalmente llegar a tener un aprendizaje.

La educación, dentro del marco del desarrollo social, se va presentando como una
actividad humana que implica cada día nuevos retos y oportunidades. La época
actual se caracteriza por los nuevos paradigmas que están surgiendo en todas las
formas de comprender la realidad. Debido a esto, la educación se enfrenta a
situaciones inevitables, originadas por los cambios de mentalidad derivados a su
vez de los avances científicos y tecnológicos que se dan a pasos agigantados. Es
por esto que el proceso educativo debe tomar en cuenta nuevos aspectos que
ofrezcan de manera más eficaz y efectiva el aprendizaje de los alumnos.

El aprendizaje, se presenta como un proceso en el que intervienen varias


actividades complementarias: la experiencia de una dificultad y de la tarea que de
ahí se deduce, la búsqueda de un camino para resolver esta dificultad, la
perseverancia, el tanteo de las posibles soluciones y el esfuerzo por comprender
las relaciones y circunstancias que ya se han producido; consiste de manera
generalizada, en la adquisición de conocimientos a partir de determinada
información.

Al hablar de aprendizaje, se tiene forzosamente que referir a un proceso de


enseñanza, ya sea propio o impartido, ya que los dos procesos van de la mano y no
es posible aislar uno del otro. En el ser humano, la capacidad de aprendizaje ha
llegado a sobrepasar la habilidad común, ya que el cambio producido en este se
dará en función del entorno dado o de ciertas asociaciones entre estímulos y
respuestas, o bien, por simple intuición, o sea, a través del descubrimiento de las
cosas.

Según la revista Medigraphic el aprendizaje:

“Va más allá de procesos individuales de la transmisión de la cultura de generación


en generación, el aprendizaje, es uno de los mejores vehículos para la adaptación
conductual de una poderosa fuerza para el progreso social.” (Aguilar, 2006, p. 1)

Cuando un individuo aprende existe un factor determinante y es el hecho de que


algunos aprenden con más facilidad que otros, en este proceso, es importante tomar
en cuenta los elementos que dependen del sujeto que aprende como la inteligencia,
la motivación, la participación y la edad entre otros. Por otro lado están los que se
encuentran fuera del control del individuo, pero que intervienen también ya sea para
favorecer o no dicho aprendizaje, en este grupo se puede encontrar el contexto
social, herencia, nivel económico, etc.

Una manera de comprender lo que ocurre cuando alguien aprende es a través de


los conceptos que se refieren a los fenómenos de la realidad. Para lo cual es
necesario definirlos. Existen distintos tipos de definiciones: etimológicas (que nos
brindan el significado del término o palabra con la cual se expresa verbalmente o
por escrito un concepto; reales (son aquellas definiciones que nos hablan de las
características del objeto que un concepto encierra; y, las definiciones reales
esenciales (que intentan expresar en pocas palabras la esencia del concepto
mediante su ubicación en el género al que pertenecen e indicando la diferencia
específica que lo distingue de otros de su misma clase). De acuerdo con la lógica
tradicional éste tipo de definiciones son las que más nos acercan a lo que un
fenómeno es en realidad. Así, por ejemplo, el concepto hombre puede ser definido
(mediante una definición real esencial) diciendo de él, que es un animal racional,
donde “animal” indica la clase o género al que pertenece, y “racional” señala la
diferencia con otros seres pertenecientes a la misma clase.

El aprendizaje desde el punto de vista etimológico proviene del latín aprendere que
significa asir, agarrar, tomar. Alude al hecho de que el pensamiento humano
utilizando herramientas cognitivas capta, o como a veces se dice, aprehende la
esencia de las cosas. Sin embargo, una sólo definición difícilmente puede expresar
toda la complejidad de este proceso inherentemente humano.

Por ello, a continuación, se citan algunas definiciones del aprendizaje, con el fin de
comprender de mejor manera el significado de dicho concepto:

Garza Rosa María y Susana Leventhal señalan que:

“Se puede definir el aprendizaje como el proceso mediante el cual una persona
adquiere destrezas o habilidades prácticas (motoras e intelectuales), incorpora
contenidos informativos o adopta nuevas estrategias de conocimiento y
acción”.(Garza y Leventhal, 2002, p. 14)

La teoría del análisis experimental del comportamiento, explica el aprendizaje


humano de la siguiente manera:

“El aprendizaje es un proceso y en sus unidades más primitivas o básicas tiene lugar

cuando una persona, en virtud de determinadas experiencias que incluyen


necesariamente interacciones con el entorno, produce respuestas nuevas, o
modifica las ya existentes, o cuando algunas actividades ya existentes se emiten en
relación a aspectos nuevos del contexto, es decir, cuando el individuo establece
nuevas relaciones entre su actividad y el entorno”. (Del Río, 1995, p. 41)

Entonces, el aprendizaje es un cambio perdurable en la conducta o en la capacidad


de comportarse de una determinada manera, la cual resulta de la práctica o de
alguna otra forma de experiencia, pero, ¿Cómo se llega a aprender? ¿Cuál es el
proceso que lleva a una persona al aprendizaje?
Se ha dado respuesta a estas interrogantes a través de diversos estudios; gran
variedad de teorías hablan sobre el proceso el aprendizaje, tales son: Teoría
conductista, cognoscitivista, constructivista, etc. Estás teorías, mencionan que, en
términos generales se puede decir que la manera de aprender depende de cómo
adquirimos, procesamos y empleamos la información. Cada persona aprende de
forma distinta de las demás: utiliza diversas estrategias con ritmos diferentes y con
mayor o menor eficacia, aunque tenga las mismas motivaciones, el mismo nivel de
instrucción, la misma edad o esté estudiando un mismo tema. Al modo de
representar, procesar y recuperar la información se le denomina “estilo de
aprendizaje” y cada persona tiende a desarrollar ciertas preferencias o tendencias
asociadas con un estilo de aprendizaje, los cuales reflejarán con claridad el conjunto
de elementos que conforman la manera especial en que cada uno realiza la tarea
de aprender.

Es importante mencionar que en la forma de asimilar la información y de aprenderla


interfiere de sobremanera el contexto, pues el aprendizaje no es una entidad
individual, si bien el estilo de aprendizaje de una persona puede serlo, el contexto
permeará en ésta y su manera de adquirir conocimientos.

Se describen a continuación algunos de los estilos de aprendizaje:

 Según el sistema de representación: Visual, auditivo y kinestésico.

 Según el hemisferio cerebral: Lógico u holístico.

 Según el modelo de procesar la información: activo, reflexivo, pragmático y


teórico.

 Según el tipo de inteligencia (Gardner): Lógico-matemático, lingüístico-


verbal, corporal-kinestésico, espacial, musical, interpersonal, intrapersonal y
naturista.

Cada uno de estos estilos pueden interactuar para que una persona pueda obtener
un mayor y mejor aprendizaje y así potenciar más sus habilidades. Es importante
señalar que es importante no utilizar los estilos de aprendizaje como un medio para
clasificar a las personas en categorías. Cada sistema de aprendizaje evoluciona y
cambia constantemente, como nosotros mismos, pues el aprendizaje supera al
simple “saber algo más”, pues supone un cambio de conducta como consecuencia
del resultado de una práctica o experiencia y se consigue a partir del acceso a
determinada información. Los aprendizajes, son el resultado de procesos cognitivos
individuales y sociales mediante los cuales se construyen nuevas representaciones
mentales que luego se podrán aplicar a situaciones diferentes y en contextos
diversos.
BIBLIOGRAFÍA

AGUILAR, F. (2006). Características biológicas, psicológicas y pedagógicas del


aprendizaje. Integración educativa a una visión neurológica. Revista de plasticidad
y Restauración neurológica, 5 (1) 41.

Contreras, O y Del Bosque A. (2004). Aprender con estrategias. México: Editorial


Pax México.

DEL RÍO, M. (1995). Desarrollo psicológico y educación. Madrid: Editorial Alianza.

GARZA, R y Leventhal S. (2002). Aprender cómo aprender. México: Editorial Trillas.

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