2018-FEBRERO-27

CAPITULO N.5
ARQUITECTURA Y SIGNIFICADO
El significado no existe: es un proceso creativo,
Una tarea en el aquí y en el ahora.
.
FREDERICK S. PEARLS
El objeto es un signo, como de hecho lo es cualquier objeto que representa algo
para alguien, pero en el caso de un edificio, mientras sea un signo, no representa
lo mismo que las palabras del lenguaje.

La arquitectura comunica para qué sirve a quien observa; por lo tanto, su significado
principal es su uso. Un ejemplo claro lo encontramos en una escalera que antes
que nada nos muestra la posibilidad de subir o bajar y su significado se basa en
el servicio que da (función primera). Pero la arquitectura comunica muchas cosas
más, a través de su función segunda que es la simbólica.

Como en toda obra de arte, retrata a su autor por esto se debe que todo edificio
tenga una personalidad, un humor, un sentido personal. Comunica una selección y
un juicio que son del individuo, pero que también habla de su historia y la historia,
también encontramos la identidad o personalidad en el uso de recursos técnicos y
constructivos de la época en la que fue edificado, más allá de los principios estéticos
que resultaron de la arquitectura.

Cuando vemos el coliseo romano lega a nuestra mente ideas, que nos llevan a
recordar, pero antes que nada nos producen un sentimiento. Gracias a la experiencia
pasada, a puntos de referencia a un sistema de valores encontramos un significado
para la obra

Todo proceso significativo se apoya en relaciones, en la física encontramos un ejemplo

donde los conceptos de espacio, tiempo, masa, movimiento, aceleración pueden
expresarse solo por medio de relaciones funcionales que se establecen entre ellos.
El significado de un fenómeno se manifiesta solo cuando se aclaran sus relaciones
con otros fenómenos, es bastante difícil imaginar que una obra arquitectónica o una
obra de arte nos dice algo por sí misma. Un gran aporte lo hicieron los Gestálticos
para ayudarnos con la comprensión fue fondo figura.
Si pensamos en el significado, encontramos por lo general dos tipos de opiniones
contrarias: la objetiva, que sostiene que una cosa o una palabra tiene uno o varios
significados que se establecen por medio de una definición; y la otra es la subjetiva
que sostiene que una palabra significa únicamente lo que yo quiero que signifique.

Sabemos que los cambios en la formas arquitectónicas se explican en función de

los cambios sociales. La estética de la forma trata de proporción, equilibrio, ritmo,
volumen, espacio, luz y sombra, espacios llenos o vacíos, basándose esencialmente
en la dimensión sintáctica de la arquitectura, en el plano en que las partes de un
edificio se relacionan entre sí y con todas en conjunto.

En el conjunto de significados que puede tener un edificio ,pueden identificarse

instancias fundamentales:

Significados conocidos, que el arquitecto da conscientemente su obras,

incluyendo sus significados propios.
Significados desconocidos en la época del proyecto y que solo el tiempo y
la evolución incorporan al edificio.
Significado del espíritu de la época, que el arquitecto incorpora en su obras
de modo inconsciente.

La tarea del crítico arquitectónico consiste en la lectura del edificio que a veces se
centra en el binomio función-utilitaria simbólica o de forma tradicional sería
función/forma/estructura. Una forma de operar de la crítica arquitectónica se puede
sintetizar en el siguiente esquema.

PROYECTO EDIFICIO

CRITICA

En este proceso lo que se busca hacer es el elaborar un proyecto con tanto cuidado
en relación con su función para que sea completamente funcional y que su función
primera y segunda tenga una buena relación.
CONCLUSIÓN:

El elaborar un proyecto por sí solo no es arquitectura ya que para que sea considerada así
deberá tener una utilidad, un compromiso con el lugar donde se construye, comprende una
técnica y tecnología que origine el proyecto y tiene carácter de objeto público. El arquitecto
crea objetos pero los usuarios son los intérpretes del significado, no hay como controlar
estos significados porque serian siempre múltiples, variados y complejos.

La forma arquitectónica nace en el acto de proyectar, el significado puede ser

diferente para el arquitecto que lo elaboro, para el usuario y para el crítico. Sea
cual sea la modalidad de trabajo, sus opiniones y su jerarquía de prioridades al
proyectar, el arquitecto se enfrenta siempre a las formas, que son el medio de
expresión.

El arquitecto tiene bajo control a la forma del edificio al momento de proyectarlo,

pero tiene una conciencia parcial acerca del significado de las formas que lo definen.

El significado no existe solo es un proceso creativo, un desempeño aquí y ahora.

La historia de la arquitectura establece relaciones definidas entre la forma de los

edificios y la época o las características de las sociedades que los construyeron,
considerándolos como obras de arte más que como objetos utilitarios.

No hay es posible controlar los significados de las formas arquitectónicas que

proyecta el arquitecto, por eso siempre serán múltiples, variados y muy complejos.
Uno de los aspectos que nos quedan muy claros es que las formas siempre va a
transmitir algún tipo de significado, o nos hará tener algún tipo de sentimiento o nos
traerá recuerdos ya sean propios o que hemos adquirido por medio del conocimiento
de la historia.

De lo que nunca nos debemos de olvidar al memento de proyectar es que el

proyecto debe de tener un sentido de adecuación, un compromiso directo con el
lugar y que su prioridad es buscar su funcionalidad desde diferentes puntos de vista.