La calidad de la interacción que determina la atmósfera emocional hogareña puede alterarse por diferentes factores. Existe una correlación positiva entre el grado de estimulación verbal y su desarrollo psicológico y cognitivo. Esta estimulación estaría reflejando el grado de “respuesta” emocional y la calidad del afecto del adulto que mantiene una relación estable y consistente con el niño. Es necesario destacar la importancia del rol paterno dentro de las necesidades del niño. Es interesante subrayar este aspecto dado que la literatura sobre privación maternal, privación afectiva y hospitalismo tiende a sobre valorar sobre la mente del lector la figura materna. En el estudio de T. Wachs se observan tres ítems del HSS correlacionados positivamente con desarrollo cognitivo: El padre ayuda en el cuidado del niño; el padre juega con el niño por lo menos minutos al día; los padres han seguido un curso sobre crianza o desarrollo del niño. Conclusiones: La madurez se refiere a las posibilidades con la que un niño cuenta al ingresas a un ámbito escolar con un cierto nivel de desarrollo físico, psíquico como social para enfrentarse a diversas situaciones. Esta madurez se va construyendo gracias a los factores interno y externos.
Como ya se explicó influyen varios factores como: edad, salud, coeficiente intelectual, el sexo y al estimulación psicosocial. Estos factores fueron analizados y llegaron a ciertas conclusiones:
La edad cronológica es como un requisito de ingreso a la educación y otros adoptan el
criterio de edad mental. Sobre la base de los resultados del California Achievement test, llegaron a la conclusión que su rendimiento era significativamente superior al de los alumnos de menos edad y, en el mismo grado, en lectura, ortografía y otras destrezas de lenguaje.
Leroy Boussion comparó a niños de Coeficiente Inlectual de 120-140 que habían
empezado a leer a los 5 años, con otros de igual inteligencia que habían iniciado su escolaridad a los 6 años. Concluye que los niños adelantados son menos brillantes que sus compañeros de igual C.I., presentan menor resistencia a la fatiga, menor capacidad de atención y una mayor lentitud en la escritura. Resultados del Metropolitan Readiness Test confirman la superioridad de las niñas más que los niños en grupos pareados por edad cronológica.
La medición de ciertas características tales como peso y estatura muestran, alguna
relación con el aprestamiento. Una salud deficiente puede constituir la base de dificultades en el rendimiento escolar. Es lógico concluir que la desnutrición que se desarrolla durante este período de crecimiento rápido, produzca lesiones más intensas y definitivas Estudios realizados en Chile demuestran que el mal rendimiento escolar y la mayor frecuencia y gravedad de trastornos de salud mental en los hijos, existen en familias de estratificación social y económica baja. (Estimulación psicosocial)