Esteban Niedojadlo
¿Cuál es el rol de la literatura en el aula de Algunas orientaciones
Lengua Extranjera?
– Trabajo con las cuatro habilidades (tareas integradas Natal da barca. Lygia Fagundes Telles. (En Venha
de comprensión y producción de textos). ver o pôr –do –sol e outros contos)
El Subterráneo. Alejandro Dolina (En El bar del
infierno).
Laberintos. Manuel Mujica Láinez.
Iluminogravuras. Ariano Suassuna.
Material de trabajo
esgrimista. Bandadas de gaviotas, que fingen el vuelo
CROQUIS EN LA ARENA destrozado
de un pedazo blanco de papel.
Oliverio Girondo
¡Y ante todo está el mar!
La mañana se pasea en la playa empolvada de sol.
¡El mar!… ritmo de divagaciones. ¡El mar! con su baba y con
Brazos. su epilepsia.
Piernas amputadas.
Cuerpos que se reintegran. Cabezas flotantes de caucho. ¡El mar!… hasta gritar
Al tornearles los cuerpos a las bañistas, las olas alargan sus ¡BASTA!
virutas sobre el aserrín de
la playa.
como en el circo.
¡Todo es oro y azul!
Mar del Plata, octubre, 1920.
La sombra de los toldos. Los ojos de las chicas que se
inyectan novelas y horizontes.
Mi alegría, de zapatos de goma, que me hace rebotar sobre Ritual
la arena.
Clarice Lispector
Por ochenta centavos, los fotógrafos venden los cuerpos de
las mujeres que se bañan. Ahí está él, el mar, la más ininteligible de las existencias no
humanas. Y aquí está la mujer, de pie en la playa, el más
Hay quioscos que explotan la dramaticidad de la rompiente.
Sirvientas cluecas. Sifones ininteligible de los seres vivos. Como el ser humano hizo un
irascibles, con extracto de mar. Rocas con pechos algosos de
día una pregunta sobre sí mismo, volviéndose el más
marinero y corazones
pintados de ininteligible de los seres vivos. Ella y el mar.
Sólo podría haber un encuentro de sus misterios si uno se conoce menos todavía de lo que conoce el mar. Su hazaña
entregara al otro: la entrega de dos mundos incognoscibles es, sin conocerse, entretanto, proseguir. Es fatal no
hecha con la confianza con que se entregan dos conocerse, y no conocerse exige valor.
comprensiones. Va entrando. El agua salada está tan fría que le eriza en ritual
Ella mira el mar, es lo que puede hacer. Y su mirada está las piernas. Pero una alegría fatal —y la alegría es una
limitada por la línea del horizonte, es decir, por su fatalidad— ya la posee, aunque todavía no se le ocurra
incapacidad humana de ver la curvatura de la Tierra. sonreír. Por el contrario, está muy seria. El olor es de una
Son las seis de la mañana. Sólo un perro suelto vaga por la marejada atontadora que la despierta de sus más
playa, un perro negro. ¿Por qué un perro resulta tan libre? adormecidos sueños seculares. Y ahora ella está alerta, aun
Porque él es el misterio vivo que no se indaga. La mujer sin pensar. La mujer es ahora compacta y leve y aguda; se
vacila porque va a entrar. abre camino en la gelidez que, líquida, se opone a ella,
Su cuerpo se consuela con su propia exigüidad en relación mientras la deja entrar, como en el amor, en que la oposición
con la vastedad del mar porque es la exigüidad del cuerpo lo puede ser una petición.
que le permite mantenerse caliente y es esa exigüidad que la El camino lento aumenta su valor secreto. Y de repente ella
vuelve pobre y libre, con su parte de libertad de perro en las se deja cubrir por la primera ola. La sal, el yodo, todo líquido,
arenas. Ese cuerpo entrará en el ilimitado frío que sin rabia la dejan por un instante ciega, escurriéndose (espantada, de
ruge en el silencio de las seis. La mujer no lo sabe, pero está pie, fertilizada).
realizando una hazaña. Con la playa vacía a esa hora de la Ahora el frío se convierte en hielo. Avanzando, ella abre el
mañana, ella no tiene el ejemplo de otros seres humanos que mar por el medio. Ya no precisa valor, ahora ya es antigua en
transforman la entrada en el mar en simple juego liviano de el ritual. Baja la cabeza dentro del brillo del mar, y retira una
vivir. Ella está sola. El mar salado no está solo porque es cabellera que sale escurriéndose sobre los ojos salados que
salado y grande, y eso es una realización. A esa hora ella se arden. Brinca con la mano en el agua, pausada, los cabellos
al sol, casi inmediatamente endurecidos por la sal. Con la dentro de las aguas. A veces el mar le opone resistencia,
concha de las manos hace lo que siempre hace en el mar, y empujándola con fuerza hacia atrás, pero entonces la proa de
con la altivez de los que nunca dan explicaciones ni a ellos la mujer avanza un poco más dura y áspera.
mismos: con la concha de las manos llenas de agua, bebe en Y ahora pisa en la arena. Sabe que está brillante de agua, y
grandes sorbos, buenos. de sal, y de sol. Aunque lo olvide dentro de unos minutos,
Era eso lo que le faltaba: el mar por dentro como el líquido nunca podrá perder todo eso. Y sabe de algún modo oscuro
espeso de un hombre. Ahora ella está toda igual a sí misma. que sus cabellos escurridos son de náufrago. Porque sabe
La garganta alimentada se contrae por la sal, los ojos que ha corrido un riesgo. Un riesgo tan antiguo como el ser
enrojecen por el sol, las olas suaves la golpean y retroceden, humano.
pues ella es una muralla compacta.
Se sumerge de nuevo, de nuevo bebe, más agua, ahora sin Baño de mar
ansiedad, pues no precisa más. Ella es la amante que sabe
Clarice Lispector
que lo tendrá todo, otra vez. El sol se abre más y la eriza, al
secarla, ella se sumerge de nuevo; está cada vez menos Hablo sobre el baño de mar de los simples mortales, no sobre
ansiosa y menos aguda. Ahora sabe lo que quiere. Quiere los surfistas (que son heroes)
quedar de pie, parada en el mar. Así queda, pues. Como Ante la tierra domesticada, el mar es salvaje. Aunque
contra los costados de un navio, el agua bate, vuelve, bate. contaminado y algo agotado, el hombre no logra imponer al
La mujer no recibe transmisiones. No precisa comunicación. mar su “ilógica lógica” cultural. Conocer el mar es apelar al
Después camina dentro del agua, de regreso a la playa. No conocimiento de los fenómenos físicos naturales: movimiento
está caminando sobre las aguas —ah, nunca haría eso de la tierra, ondas mecánicas, calor, sonoridad y luz… fuerza,
después de que hace miles de años ya alguien caminara energía cinética.
sobre las aguas—, pero nadie le puede quitar eso: caminar
Al entrar al mar, nos sometemos a su naturaleza y somos un Orientaciones didácticas:
cuerpo más. Los sentidos nos hacen comprensible esa A partir del cruce de estos textos proponemos el abordaje de
realidad física, aunque sea fragmentariamente. Nuestro la relación que se establece entre la idea del mar y las
cerebro reacciona ante los estímulos y se enfoca en las representaciones de la mujer. Las consignas que se plantean
sensaciones de placer, relax, sobresalto, temor. Como todos a continuación son tan solo lineamientos para ordenar una
los ritos, el baño de mar es la vivencia misma del presente secuencia para un curso en particular.
Así, para mí, la escena de alguien entrando al mar es el -La visión del cuerpo – la idea del cuerpo.
ineludible ritual de la playa. Hay quien vive cerca de la playa y -La idea del mar y las representaciones subjetivas que
no ha ingresado nunca al mar, por libertad individual o suscita: ¿A qué campos semánticos la asocia cada autor?
Los que administran las playas, esos "gestores" que marcan -¿Qué contrariedades pueden detectar entre “los dos
atentan persistentemente contra el paisaje que es la El mar como una idea luminosa – El mar como una idea
comunión del hombre con su espacio vital. Un espacio de oscura o misteriosa. –El mar como una situación de peligro.
libertad.
-¿Y Cómo son las playas en los dos casos? (la playa lúdica –
la playa privada).
¿Dónde aparece la claridad/luminosidad en la idea de mar de
Clarice?.
-La idea de movimiento del mar se transforma también en una
idea de convulsión. ¿Por qué será esto?
Oliverio Girondo