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NEUROBIOMECÁNICA CLÍNICA 55

La anatomía de los puntos de tensión La proporción de tejido conectivo en relación con el teji-
do neural es diferente dependiendo del nervio y del seg-
Los puntos de tensión propuestos forman uno de los
mento del nervio examinado. Donde un nervio tiene el
muchos mecanismos (detallados en el Capítulo 3) por los
movimiento como su mecanismo de adaptación princi-
que insuficiencias funcionales y estructurales pueden pre-
pal (como el nervio mediano en la parte superior del bra-
disponer a síntomas del sistema nervioso.
zo), los tejidos conectivos ocupan una proporción más
Si la adaptación al movimiento del sistema nervioso
pequeña del área de sección transversal. A la inversa,
varía entre áreas diferentes, deben ser evidentes las varia-
donde un nervio (como el nervio mediano de la muñeca)
ciones anatómicas de tales áreas. Los anatomistas no han
es más vulnerable a las fuerzas compresoras, existe una
buscado específicamente estas variaciones. Sin embargo,
mayor proporción de tejido conectivo. Se puede ver esta
es evidentemente importante extrapolarlas para apoyar el
relación en la Figura 2.17, donde se muestran los porcen-
concepto de punto de tensión, especialmente en la vascu-
tajes del área de sección transversal de un segmento del
larización y el tejido conectivo que contiene. nervio mediano dedicados a los fascículos y los dedicados
Ya que el sistema nervioso depende tanto de un sumi- al tejido epineural. Cuando aumenta el número de fascí-
nistro sanguíneo adecuado, hipótesis como la de la exis- culos, el área de sección transversal dedicado a ellos dis-
tencia de puntos de tensión se pueden desarrollar desde minuye. Una relación similar, aunque no tan clara, existe
patrones de vascularización. Para adaptarse a los requisi- en otros nervios. Sunderland (1978) ha documentado la
tos de los diferentes movimientos y tensiones, la disposi- disposición fascicular de todos los nervios principales.
ción vascular del sistema nervioso es diferente en las áreas Las sujeciones del sistema nervioso a las estructuras
inmóviles que en las áreas móviles. En general, los vasos
extraneurales (vasos nutricionales) entran en el sistema A B
nervioso por áreas de poco movimiento relativo a la in-
terfaz. Estas áreas se consideran a menudo puntos de ten-
sión. En la columna cervical, las regiones donde más va-
sos extraneurales entran son las áreas de C5 a C7 (Man-
nen, 1966; Parke, 1988). El plexo lumbosacro también
tiene un abundante suministro sanguíneo como la mé-
dula cervical (Dommisse, 1986). Los vasos extraneurales
que nutren el neuroeje y las meninges torácicos son me-
nos consistentes, aunque normalmente una arteria prin-
cipal entra alrededor de T9. La columna torácica es me-
nos móvil que las columnas lumbar y cervical, y esto pro- Axila Epicóndilo Muñeca
bablemente disminuye la necesidad de que vasos nutri-
cionales entren por un punto en particular. En la perife- Fig. 2.17. Relación entre el tejido conectivo y el tejido neural en el nervio
mediano. La columna A es el número de fascículos (línea de puntos) y la
ria, los vasos nutricionales que entran por detrás de la ca- columna B es el porcentaje del área de sección transversal de los fascículos
dera y la articulación de la rodilla y por la cara flexora del (línea continua). De Sunderland S 1978 Nerves and nerve injuries, 2ª
codo son algunos ejemplos. Los vasos intraneurales pro- edición. Churchill Livingstone, Edinburgh con autorización de los
porcionan nutrición a los segmentos del sistema nervioso editores y del autor.
entre las articulaciones. El nervio mediano es un claro
ejemplo. En la parte superior del brazo, los vasos nutri-
cionales que están cerca del codo y del hombro nutren el
que lo rodean también proporcionan algunas pistas. En
nervio, y la parte entre el codo y el hombro depende por
el punto de tensión L4, la duramadre está firmemente
completo de los vasos intraneurales. Este es un diseño
unida al ligamento longitudinal posterior, tan firmemen-
esencialmente bueno, porque el nervio mediano se puede
te que es imposible separar las dos estructuras (Blikna
mover dos o más centímetros en la parte superior del bra-
1969; Parke y Watanabe, 1990). De acuerdo con Haupt
zo durante el movimiento, haciéndole un sitio potencial-
y Stofft, la duramadre es más gruesa en el área medioto-
mente inseguro para la entrada de un vaso nutricional.
rácica que en ningún otro lugar del conducto vertebral.
En general, los vasos extraneurales penetran en los ner-
Sin embargo, Tencer et al., difieren. En sus estudios ne-
vios periféricos alrededor de las articulaciones y las áreas
crópsicos encontraron que las propiedades de elasticidad
protegidas (Sunderland, 1978; Ogata y Naito, 1986).
neurales eran uniformes en toda la longitud de la dura-
La disposición de las láminas de tejido conectivo del
madre. Las regiones L4 y C6 son aproximadamente los
sistema nervioso periférico proporciona un apoyo mayor.
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60 MOVILIZACIÓN DEL SISTEMA NERVIOSO

síntomas. Un porcentaje más alto de sujetos describían esta forma, para acceder mejor al sistema nervioso por la
síntomas allí donde se aplicaba el primer movimiento. cadera y por la columna lumbar, se debería empezar por
Shacklock (1989) concluyó que el orden y la magni- los componentes proximales (por ejemplo, movimientos
tud de la aplicación afectaban a las respuestas sintomáti- de la cadera). De forma similar, para probar las estructu-
cas especialmente a cada extremo de la extremidad. De ras del sistema nervioso en el pie, se debería empezar por
el componente del pie.

Fig. 2.21. La respuesta a una EPE será diferente dependiendo de si la flexión cervical se añade anterior o posteriormente de la propia EPE.

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