Ricardo Núñez, nacido el 28 de septiembre de 1.954 en Timbiqui Cauca, hijo de
Fernando Alegría y Ángela Núñez Quintero, el segundo de diez (10) hermanos.
Fue bautizado en agua en El nombre del Señor Jesús, en la Iglesia Pentecostal
Unida de Colombia en el año 1.973 en el municipio de Mesetas, Meta, donde fue lleno del Espíritu Santo hablando en nuevas lenguas e iniciando de manera inmediata su servicio al Señor Jesús como presidente de los Jóvenes por un periodo de dos años; es allí donde amplía su visión de servicio al Señor Jesús y toma la decisión de trasladarse a la capital de la Republica de Colombia, la ciudad de Bogotá D.C; Contrajo matrimonio con la hermana Mariela Yarce en el año 1979 y de esta unión quedó la bendición de cinco (5) hijos: Josué Ricardo, Sergio Fernando, Oscar Hernán, Jhenyfer y Niyireth Núñez Yarce, quienes han sido su apoyo aun después de la partida de la hermana Mariela, acompañándolo y compartiendo su tiempo personal y familiar con la Iglesia. Después de algunos años de servicio en diferentes áreas o comités de la Iglesia es enviado en el año 1.980 al Santo Ministerio por medio del Ministro Luis Ángel Sinesterra Vidal, quien en aquel entonces era supervisor del Distrito y le envía a Soacha Cundinamarca abrir su primera obra dando excelentes resultados que con el transcurrir de los años aún se pueden visualizar, al igual que sucedió en las siguientes obras que El Señor Jesús Le permitiera abrir en Pandi Cundinamarca, La Mesa Cundinamarca y Zipaquirá Cundinamarca, obras que a la fecha se mantienen, han crecido y cuentan con muchas sedes hijas que han salido de ellas para expandir el reino de los cielos en el Departamento de Cundinamarca y sus alrededores. Para el año 1.985 habían transcurrido ya algunos años en el Santo Ministerio y en Zipaquirá su lugar de predicación actual se preparaba para realizar unos bautismos en El Nombre de Señor Jesús a un grupo aproximado de 20 o 21 personas pero algo inquietaba su vida, una Visión?, Un llamamiento?, Ir a otro país?, Será posible Republica Dominicana?, Aun no tengo la Licencia Local?, eran preguntas que surgían en el Ministro Núñez; desde meses atrás del año 1984 debido a una misión que había recibido de parte de Dios a través de un sueño de ir a Republica Dominicana a llevar el poderoso evangelio de Cristo, Visión y llamamiento que fue confirmado por Dios a través de uno de los nuevos hermanos bautizados quien con firmeza y decisión le dice “tú te tienes que ir a mi país” ¡Oh! grata sorpresa un Dominicano estaba frente a sus ojos confirmando lo que hacía varios días inquietaba su vida, fue este hermano quien le dio la dirección de la embajada de Republica Dominicana en la ciudad de Bogotá D.C, al llegar allí fue atendido de manera inmediata por la Vicecónsul de nombre Josefina quien se identificó y atendió con esmero su solicitud indicándole que no se le cobraría nada por su visa y aun así en medio de preguntas y algunas dificultades al no considerarse un pastor calificado, con trayectoria o indispensable para esta labor por sus pocos años de Ministerio parte a este país a iniciar la obra allí. En el año 1986 a solo dos semanas de su llegada a la República Dominicana El Señor Jesús le permite bautizar la primera familia eran trinitarios pero a partir de este momento se convertirían en nuestros hermanos, el hermano Carlos Morillo y la hermana Carmen de Morillo junto a sus hijos de los cuales el Ministro Núñez recuerda el nombre de uno de ellos llamado Aneuris, seguidamente empieza a dar frutos esta bella obra y el Señor añade nuevas almas para su honra y su gloria, algunos de los primeros hermanos el hermano Joaquín Martínez y su esposa Ibelise, Santos Jiménez y su esposa la hermana Elvira, los hermanos Marcelino, Justina, Juan Victorino Liriano y familia, un ciudadano haitiano y hasta un Francés que no hablaba español pero su Biblia estaba en Francés y el Ministro Núñez buscaba las citas de la unicidad y el con solo leer le fue revelado el Nombre de Jesús para ser bautizado. Luego de dos años la Iglesia que administraba el Ministro Núñez, aumentó en grupo y ya había hermanos bautizados, llego el momento donde se congregaban aproximadamente 40 personas, en un lugar del barrio Cansino Primero en la rotonda de Melido Marte límites del barrio las minas, sector donde se hacían reuniones para llevar la palabra de Dios de hogar en hogar, avanzando hasta Samaná, La romana, Santiago, lugares que a partir de ese momento se hicieron responsables de haber oído hablar del Nombre de Jesús. Al paso de algún tiempo de estar predicando la palabra de Dios en el país el Ministro Núñez, le extendió una invitación a un hermano de nombre Rogelio Velázquez, la cual sirvió para realizar los trámites de la visa, con el fin de que le colaborara con el trabajo evangelistico que había iniciado en el País, quien gustosamente aceptó dicha invitación y fue a colaborarles en esta bonita obra que había ya empezado hacer el señor en la isla. Al ver como la obra del señor en este país estaba en un bonito crecimiento el Ministro Núñez pide ayuda a la Iglesia Pentecostal Unida de Colombia solicitando un Misionero para trabajar bajo su dirección y dar continuidad al trabajo realizado en aquel país, El consistorio de Ancianos luego de evaluar la situación y de seguir el procedimiento pertinente decidió enviar en el año de 1.988 de manera oficial a la Primera Familia Misionera, provenientes de Colombia al hermano Gerardo Vásquez y familia y se ordenó el regreso a Colombia del Ministro Núñez quien anhelaba en su corazón seguir siendo parte de la obra en aquel lugar. A partir de allí el Ministro Núñez sigue con la llama de las Misiones encendida en su Corazón avanzando por su iniciativa a países como Costa rica, México, Canadá y Estados Unidos, en la Iglesia Pentecostal Tabernáculo de Restauración en Irving, TX, donde actualmente trabaja arduamente después de haberse desgastado su salud, y padecer una enfermedad llamada Parkinson desde hace aproximadamente 17 años, la cual aunque se conocen sus efectos degenerativos no ha logrado apagar su visión y misión Misionera llevándole hoy a sus 64 años a pensar aun en los campos blancos que están para la ciega entre ellos los que aún no han recibido El Nombre de Jesús en Centro América.