Parcial 1° Nota.
Ronald García
Carlos A. Nath
Una de las personas que más se destaca en esta época es Giambullari (fundador de la
academia florentina) quien empezó una discusión sobre las familias de las lenguas quien
argumenta que el toscano, su lengua, provenía del hebreo a través del etrusco y por último
del arameo lo que hacía a su lengua cercana a una lengua sagrada y por lo tanto deba
símbolo de status. Desde el humanismo no se habla de la enseñanza de las lenguas ni de
ningún enfoque lingüístico, pero si hubo un gran auge del estudio de las lenguas extranjeras
como parte de una necesidad para el contacto cultural y comercial desde Europa hacia los
demás países y sus rutas comerciales. Sin embargo, desde los griegos (Platón) quienes
empezaron a mantener contactos con otras civilizaciones como la egipcia, descubrieron así
nuevas leyes, nuevas costumbres, etc, entre ellas las lenguas; de allí surge la gramática
tradicional la cual busca descubrir la lengua ideal tomando el latín como base de todo.
En el siglo XVII la discusión sobre la lengua se basa en el argumento “mi lengua es cercana
a lo más puro” aparecen algunos razonamientos como el chovinismo, el cual pretendía no
aceptar términos extranjeros en la lengua para no afectar su pureza; adicionalmente, el
centralismo, que no acepta términos de provincia o de cualquier lugar que no se considerara
la lengua de la nobleza. En el caso del francés se destaca que la forma como se hablaba
la lengua en París era la adecuada o la más noble. Como consecuencia de estas ideas
surgen las academias de la lengua en 1635 que buscan determinar qué es lo puro de una
lengua.
A pesar de que en este periodo no surge ningún enfoque lingüístico que se ocupe de la
gramática, hay indicios o elementos determinantes que plantean la existencia de una lengua
de la élite o una lengua pura, que dan las bases para la gramática normativa, la cual surge
en el siglo XX. Esta gramática busca normalizar la lengua para purificarla (normalizar), dicha
normalización se da a través de los manuales los cuales dan pautas sobre lo puro y lo culto,
en otras palabras, lo correcto y lo incorrecto, estos manuales desarrollan la idea de hablar
correcto es hablar como habla la élite. En 1786
Ya en el siglo XIX aparece el Darwinismo que afecta la mirada hacia el mundo y lleva a
considerar a la lengua como un ser vivo que evoluciona, se adapta y se complejiza con el
paso del tiempo. Durante esta época se habla sobre la gramática comparativa, la cual se
destaca por empezar el estudio de las familias de las lenguas, durante esta época aparece
Gobineau quién a través del método científico argumenta que hay razas superiores,
elemento que se puede conectar a la idea de superioridad de algunas lenguas.