Matrícula: ES1821010944
Grupo: DE-DEECG-1802-M2-024
Las autoridades federales, estatales y municipales cuentan con sus propias normas y reglamentos, de las
cuales los gobernados deben de cumplir con ciertas obligaciones y responsabilidades, tal es el caso que
nos ocupa donde la Directora de Calificación “A” del Instituto de Verificación Administrativa del Distrito
Federal (actualmente Ciudad de México), impuso una multa a la persona moral “asociación religiosa e
impartición de enseñanza religiosa”, por no haber manifestado el uso de suelo del inmueble ubicado en
calle central número 38 de la colonia Atlántida, código postal 04370 de la delegación Coyoacán del
Distrito Federal actualmente ciudad de México.
Ahora bien, dicho inmueble se ubica en una zona donde solo se le permite el uso habitacional con una
superficie de construcción de 577 metros de construcción y con 2 niveles de vivienda permitido, sin
embargo, dentro de los antecedentes del predio se encuentra la leyenda siguiente No existen
antecedentes de trámites relacionados con este predio. De ahí que la autoridad de la delegación
Coyoacán al realizar la verificación del predio esto es lo que se manifiesta por la autoridad que dicho
predio era ocupado por una “Asociación Religiosa e Impartición de Enseñanza Religiosa”, catalogada
como “Templo y Lugar de Culto”, lo cual se encuentra prohibido para los inmuebles a los que les
corresponde las zonificaciones habitacionales (H), como se podrá observar en las imágenes siguientes.
Ahora entremos de lleno a nuestra actividad integradora
CASO PRÁCTICO
contra de la sentencia del dieciséis de noviembre de dos mil dieciséis, dictada por la Sala Superior del
Tribunal de lo Contencioso Administrativo de la Ciudad de México
Directora de Calificación “A” del Instituto de Verificación Administrativa del Distrito Federal (actualmente
Ciudad de México) y al Tesorero de la Ciudad de México
De conformidad con los artículos 107, fracción V, inciso b), de la Constitución Federal
Artículo 107. Las controversias de que habla el artículo 103 de esta Constitución,
con excepción de aquellas en materia electoral, se sujetarán a los
procedimientos que determine la ley reglamentaria, de acuerdo con las bases
siguientes
Que la demanda de amparo fue presentada dentro del plazo de quince días que para tal efecto señala el
artículo 17 de la Ley de Amparo
El Artículo 17de la de la Ley de Amparo dice; el plazo para presentar la demanda de amparo es de quince
días, salvo
La resolución emitida por la Sala Superior del Tribunal de lo Contencioso Administrativo de la Ciudad de
México, de fecha 16 de noviembre de 2016, con respecto al Recurso de Apelación **, presentado por la
hoy quejosa; en virtud de la cual es declarado fundado, pero se reconoce la validez de la resolución de
29 de enero de 2016 en el expediente administrativo
Porque el uso del suelo llevado a cabo en el inmueble materia de la visita de verificación, consistente en
“asociación religiosa e impartición de enseñanza religiosa”, homologable a “templos y lugares de culto”,
no se encuentra permitida en el Programa Delegacional de Desarrollo Urbano para la Delegación
Coyoacán de la Ciudad de México
i. Cuál es la ley en que la Autoridad de origen basa su fundamento para imponer una multa.
j. Por qué motivo la Autoridad de Origen sostiene que la parte Quejosa (quién pide Amparo)
no acredita un Interés Jurídico.
La responsable precisó que la Sala de origen a través de la sentencia apelada, reconoció la validez de la
resolución impugnada
k. Cómo se llama el trámite que inició la Quejosa contra la imposición de la Multa por parte de la
Autoridad Delegacional.
Impugnar la nulidad de la resolución de veintinueve de enero de dos mil dieciséis, emitida por el Director
de Calificación “A” del Instituto de Verificación Administrativa del Distrito Federal (actualmente Ciudad de
México)
El Recurso de Apelación
En el oficio de contestación de demanda, pues la multa impugnada fue pagada por la parte actora, como
se advierte del recibo de pago con línea de captura *; por tanto, al haberse acreditado que la parte actora
llevó a cabo el pago de la multa que le fue impuesta en la resolución impugnada, resulta inconcuso que
el Tesorero de la Ciudad de México, reviste el carácter de autoridad demandada, al ser la ejecutora de la
sanción económica referida, puesto que a dicha autoridad le corresponde llevar a cabo la recaudación del
importe por medio del cual se pagó la multa de mérito
n. En que disposición se basó la Autoridad de origen para emitir la Resolución del Procedimiento
de Calificación de las Actas de Visita de Verificación.
Para fundar su competencia citó, entre otros, el artículo 25, Apartado A Bis, sección primera, fracción V,
del Estatuto Orgánico del Instituto de Verificación Administrativa del Distrito Federal (actualmente Ciudad
de México), que establece que, la Dirección de Calificación “A” del Instituto de Verificación Administrativa
tiene competencia para emitir la resolución en los procedimientos de calificación de las actas de visita de
verificación
o. Existió una invasión de competencia para imponer la Multa, por parte de quién fue.
En efecto existe una invasión de esferas de competencias para imponer las multas ya que de acurdo a
los artículos 27 y 130 constitucionales, dicha invasión violatoria fue ejecutada por la Dirección de
Calificación “A” del Instituto de Verificación Administrativa del Distrito Federal (actualmente ciudad de
México).
Al declarar infundado el diverso argumento consistente en que la autoridad demandada no cuente con
atribuciones para emitir la resolución impugnada, porque no se ha celebrado un acuerdo de coordinación
entre la Federación y la Ciudad de México en términos de los artículos 41 y 42 de la Ley General de
Asentamientos Humanos
a) Que el órgano jurisdiccional tenga competencia legal para resolver el procedimiento o proceso en el
que vaya a contrastar una norma;
b) Cuando dicho control sea solicitado por cualquiera de las partes contendientes en un proceso, es decir,
a petición de parte, deben proporcionarse los elementos mínimos necesarios para llevar a cabo el control,
debiéndose señalar con toda claridad cuál es el derecho humano o garantía que se estima infringido, la
norma general a contrastar y el agravio que le produce, de lo contrario el órgano jurisdiccional no está
obligado a emprender un estudio expreso oficioso de los derechos humanos o preceptos constitucionales
o convencionales que se le transcriban, o que de manera genérica se invoquen como pertenecientes al
sistema;
c) Debe existir aplicación expresa o implícita de la norma, aunque en ciertos casos también puede
ejercerse respecto de normas que, bien sea expresa o implícitamente, deban emplearse para resolver
alguna cuestión del procedimiento en el que se actúa;
d) La existencia de un perjuicio en quien solicita el control difuso, o bien irrogarlo a cualquiera de las
partes cuando se realiza oficiosamente;
e) La inexistencia de cosa juzgada respecto del tema en el juicio, pues si el órgano jurisdiccional ya realizó
el control difuso, estimando que la norma es constitucional, no puede realizarlo nuevamente, máxime si
un juzgador superior ya se pronunció sobre el tema.
Los artículos 1, 14, 16, y 133 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, en relación
con el contenido de los numerales 2 y 14 del Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos, así como
de los preceptos 8 y 25 de la Convención Americana sobre Derechos Humanos.
Primero. La quejosa argumenta que la sentencia reclamada es contraria a los derechos fundamentales
reconocidos en los artículos 1, 14, 16, y 133 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos,
en relación con el contenido de los numerales 2 y 14 del Pacto Internacional de Derechos Civiles y
Políticos, así como de los preceptos 8 y 25 de la Convención Americana sobre Derechos Humanos, atento
a que la Sala Superior declaró infundado el primer concepto de nulidad en el que reclamó la omisión por
parte de la autoridad del Instituto de Verificación Administrativa del Distrito Federal (actualmente Ciudad
de México), al no acumular los procedimientos administrativos *e**, a pesar de que provinieron de la
misma visita de verificación, además de ser ambos de su propiedad, en contravención al principio de
legalidad y seguridad jurídica.
Lo anterior, pues, a juicio de la Sala responsable, la parte actora no exhibió las constancias del diverso
expediente número **, al considerar erróneamente que no era obligación de la autoridad, y que la carga
de la prueba recaía en su persona.
En ese sentido, la quejosa asevera que, resulta evidente la violación al derecho constitucional de acceso
a la justicia, ya que la omisión del Director de Calificación “A” del Instituto de Verificación Administrativa
de la Ciudad de México, de omitir la acumulación de los procedimientos ******, generó perjuicio en su
esfera jurídica, ya que en el expediente administrativo ** se impuso una multa económica contraria a
derecho.
Insiste en que, aun cuando las partes no lo soliciten, contrario a lo esgrimido por la autoridad demandada
y confirmado por la Sala Superior, es obligación de la autoridad realizar la acumulación de procedimientos,
pues esto se desprende expresamente del artículo 53 de la Ley de Procedimiento Administrativo para el
Distrito Federal (actualmente Ciudad de México).
La peticionaria de amparo señala que, es evidente que en el caso concreto puede concluirse que derivado
del hecho que los inmuebles en cuestión tienen como origen el ejercicio de las mimas acciones y fines,
las visitas tenían por objeto el mismo fin, además son ambas del mismo propietario, las resoluciones que
pondrán fin a ambos procedimientos deben ser congruentes, tal como lo mencionó anteriormente se
emitieron las resoluciones en fechas y con consecuencias distintas.
En este sentido, la inconforme considera que, al ser clara la posibilidad de acumular los procedimientos
*e *, a efecto de una mejor impartición de la justicia administrativa, al tener el mismo objeto las visitas de
verificación, insiste debieron acumularse ambos procedimientos.
Segundo. La quejosa aduce que, la sentencia reclamada es contraria a los derechos fundamentales
reconocidos en los artículos 1, 14, 16, 17, 27 y 133 de la Constitución Política de los Estados Unidos
Mexicanos, en relación con el contenido de los numerales 2 y 14 del Pacto Internacional de Derechos
Civiles y Políticos, así como de los preceptos 8 y 25 de la Convención Americana sobre Derechos
Humanos, en virtud que la Sala Superior pierde de vista que si bien las delegaciones tienen facultades
para establecer programas de regularización de usos de suelos, como facultad concurrente; sin
embargo, tratándose de un uso de suelo destinado al tema de asociación religiosa, es competencia
exclusiva de las autoridades federales, en el caso concreto, de la Secretaria de Gobernación
Artículo 27. La propiedad de las tierras y aguas comprendidas dentro de los límites
del territorio nacional, corresponde originariamente a la Nación, la cual ha tenido y
tiene el derecho de transmitir el dominio de ellas a los particulares, constituyendo la
propiedad privada
Artículo 130. El principio histórico de la separación del Estado y las iglesias orienta
las normas contenidas en el presente artículo. Las iglesias y demás agrupaciones
religiosas se sujetarán a la ley.
Conclusión.
De las Revisiones efectuada por alguna autoridad con carácter de fiscalizadora debe de estar
debidamente fundados y motivados de acuerdo al ordenamiento que se trate en primera instancia se debe
invocar la Constitución Política de los Estado Unido Mexicano, su leyes y reglamentos, así como los
códigos, de acuerdo al tipo de resolución que se emita, con la finalidad de que el gobernado cuente con
los elementos sustantivos para presenta su medio de defensa ante la autoridad competente.
Biografía
http://www2.scjn.gob.mx/juridica/engroses/2/2017/10/2_221730_3319.docx
http://ciudadmx.cdmx.gob.mx:8080/seduvi/fichasReporte/fichaInformacion.jsp?nombreConexion
=cCoyoacan&cuentaCatastral=052_258_20&idDenuncia=&ocultar=1&x=-
99.14710149999997&y=19.3418675&z=0.5
http://ciudadmx.cdmx.gob.mx:8080/seduvi/