Cada vez que realizamos una actividad que demanda energía, aumenta de manera directa el
consumo de oxígeno y la producción de dióxido de carbono.
Es por ello que nuestro organismo se prepara, incluso antes de realizar el ejercicio, para
responder de manera efectiva a esta exigencia física.
Control de la Ventilación
El control de la ventilación esta dado en general por el bulbo raquídeo. Durante el ejercicio el
control es más activo y voluntario, determinado en gran parte por la actividad cortical, se tiene
la noción de la realización de una actividad física y la corteza motora envía inputs a nivel de los
centros superiores pero inferiores a la misma corteza. Los centros reguladores de la ventilación
reciben inputs de la periferia que regulan el mayor o menor aumento de la ventilación, este
aumento depende de:
Una serie de estímulos periféricos se suman y llegan a un resultado final de cuanto aumenta
realmente la ventilación, empezando por la corteza motora que muchas veces gatilla una
hiperventilación antes de comenzar la actividad física.
Estas son funciones fisiológicas importantes y claves del sistema ventilatorio, específicamente
para la condición de actividad física.
2. Fase II: Existe un aumento gradual de la ventilación entre los 3 a 4 min de haber comenzado
el ejercicio.
Esto es DEBIDO A: