El día 28 de octubre es el día dedicado a los muertos con violencia. Para recibir
sus almas en un ambiente limpio y fresco, se hace el aseo de la casa y si se
conoce el lugar del deceso se lleva flores y velas, se prende el primer velador y se
coloca una flor blanca para recibir a las ánimas solas.
El día 30 de octubre se prende una nueva veladora, se coloca otro vaso con agua
y se pone un pan blanco para los difuntos que se fueron sin comer o los que
tuvieron algún accidente.
El día 1 de Noviembre es el día de todos los santos, fecha en la que al medio día
llegan los “angelitos” que son las almas de quienes fallecieron siendo niños. En
este día se coloca toda la comida en el altar de muertos.
En el primer nivel escalón se coloca la imagen de un santo del cual se sea devoto,
el segundo se destina a las ánimas del purgatorio; es útil porque por medio de él el
alma del difunto obtiene el permiso para salir de ese lugar en caso de encontrarse
ahí. En el tercer escalón se coloca la sal que simboliza la purificación del espíritu
para los niños del purgatorio