ESPECIAL

La notificación judicial
de personas inciertas
o domicilio desconocido

Percy Howell SEVILLA AGURTO*

El autor considera que no debería existir mayor debate sobre la notificación por edictos y
el curador procesal para personas inciertas o cuyo domicilio se desconoce en la medida

RESUMEN
que existe norma expresa que regula tal supuesto de hecho. No obstante, considera que
el tema se agrava en cuanto a la diversidad de interpretaciones que se le da a la norma.
Concluye que es la ley procesal la que ha establecido que cuando se deban notificar a
personas inciertas o personas cuyo domicilio se ignore se deberá proceder a la notifica-
ción vía edictos.

I. Planteamiento del problema

El tema bajo comentario radica en dar una

respuesta motivada y razonable a la siguien-
te interrogante: ante la indicación de los de-
mandantes de que desconocen a los integran-
tes de una sucesión demandada y/o ignoran
MARCO NORMATIVO el domicilio de aquellos o cualquier otro de-
mandado, ¿debe admitirse la petición de no-
• Código Procesal Civil: arts. 61;155; 158, 165. tificación por edictos, por tanto, la designa-
ción de curador procesal?
PALABRAS CLAVE: Notificación judicial / Derecho de
defensa / Persona incierta / Ley procesal Para la mayoría de nuestros magistrados1
la respuesta a dicha interrogante es afirma-
Recibido: 27/03/2017
tiva, es decir, sí debe optarse por la notifi-
cación vía edictos, y de no apersonarse los
Aprobado: 30/03/2017
demandados, procederse al nombramiento

* Socio Principal del Estudio Sevilla & Parrilla Abogados. Abogado, egresado del Postítulo de Derecho Procesal Civil y de
la Maestría de Derecho Procesal en la Pontificia Universidad Católica del Perú. Egresado del Programa de Especialización
de Arbitraje Comercial en la Cámara de Comercio de Lima.
1 Pleno Jurisdiccional Distrital 2016 en materia Civil de Lima Norte.

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Comentario relevante
te
del autor
Atañe que el derecho de defensa en
cualquier proceso o procedimiento
importará que el emplazado pueda
tener pleno conocimiento de la pre-
tensión (o acusación) que se tiene
contra él, a fin de que este puede
ejercer los mecanismos legales
otorgados por el legislador, entién-
dase que el ordenamiento jurídico
garantiza el conocimiento pleno,
efectivo y oportuno de las actuacio-
nes en su contra.
de curador procesal para que se garantice
el derecho de defensa de dichos sujetos
procesales.
Cabe precisar que, en nuestra opinión, este
tema no debería ameritar mayor debate por-
que existe norma expresa que regula tal
supuesto de hecho, empero, como sabemos,
en la práctica muchos jueces complican lo
que ya está resuelto por la ley pretendiendo
dar interpretaciones “extravagantes” a las
normas.
II. El derecho de defensa
Nos explica Chamorro Bernal2 que el dere-
cho de defensa es un derecho fundamental
extensible a cualquier procedimiento, con
mayor o menor alcance, según su natura-
leza y finalidad, y que debe observarse no
2 CHAMORRO BERNAL, Francisco. La tutela judicial efectiva. Bosch, Barcelona, 1994, p. 133.
3 MONTERO AROCA, Juan y FLORS MATÍES, José. Amparo constitucional y proceso civil. Tirant lo Blanch, Valencia,
2005, p. 111.
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solo en su conjunto, sino también, en cada
una de sus fases. Así, Montero Aroca3 señala
el derecho fundamental a la defensa com-
porta, como antes dijimos, del de poder
conocer, alegar, probar y rebatir de todo
cuanto sea materia del proceso y en con-
diciones que garanticen la contradicción
y la igualdad de las partes. En ese orden
de ideas, el derecho de defensa consiste en
la facultad de toda persona de contar con
el tiempo y los medios necesarios para ejer-
cerlo en todo tipo de procesos, incluidos los
administrativos, lo cual implica, entre otras
cosas, que sea informada con anticipación
de las actuaciones iniciadas en su contra.
El derecho de defensa es un derecho funda-
mental que tiene como contenido otros dere-
chos fundamentales como son: i) derecho a
un debido emplazamiento o comunicación
de la acusación; ii) derecho a la posibilidad
de un tiempo razonable para poder contra-
decir la demanda o absolver una acusación
en materia penal; iii) derecho a poder alegar;
iv) derecho a probar; v) derecho una resolu-
ción que se pronuncie sobre el fondo y que la
misma sea arreglada a derecho; y vi) derecho
a impugnar que se pronuncie sobre el fondo y
que la misma sea arreglada a derecho.
Hasta aquí atañe que el derecho de defensa
en cualquier proceso o procedimiento impor-
tará que el emplazado pueda tener pleno
conocimiento de la pretensión (o acusación)
que se tiene contra él, a fin de que este pueda
ejercer los mecanismos legales otorgados
por el legislador, entiéndase que el ordena-
miento jurídico garantiza el conocimiento
pleno, efectivo y oportuno de las actuaciones
en su contra.
 ESPECIAL | LA NOTIFICACIÓN POR EDICTOS Y DESIGNACIÓN DEL CURADOR PROCESAL
III. La notificación judicial
Se dice que “la notificación es un acto de
comunicación procesal, por el cual se pone
en conocimiento de las partes y demás inte-
resados las providencias judiciales para
materializar el derecho de defensa, es por
ello que se afirma que la notificación cons-
tituye una exigencia del contradictorio sin
la cual se afectaría el debido proceso y la
igualdad de las partes. (…) No solo la noti-
ficación en el proceso tiene como finalidad
asegurar el principio de bilateralidad o de
contradicción, sino que fija el término ini-
cial en el cómputo de los plazos procesales
dentro de los cuáles deberá cumplirse el acto
procesal ordenado o impugnar la resolución
transmitida”4.
La notificación judicial es aquel acto proce-
sal cuyo principal objetivo es que las par-
tes intervinientes en un proceso judicial
tomen conocimiento de las resoluciones
judiciales emitidas en el marco del mismo, a
fin de que estas puedan ejercer su derecho a
la defensa en el ámbito del debido proceso.
En ese sentido, desde una perspectiva de
contenido y aplicación del debido pro-
ceso se puede decir que los actos judicia-
les deben tener como requisito de vali-
dez la notificación, con la finalidad de que
el procesado tenga la posibilidad de cono-
cer el contenido de los pronunciamientos y
diligencias judiciales, pero solo en el caso
de que se apliquen sanciones o se restrin-
jan derechos de la persona, incumplir este
requisito vulnerará, además, el derecho de
defensa, lo cual implica que dicho proceso
resultará susceptible de revisión en la vía
constitucional.
4 LEDESMA NARVÁEZ, Marianella. Comentarios al Código Procesal Civil. Tomo I. Gaceta Jurídica, Lima, 2008, p. 538.
5 STC Exp. N° 4303-2004-AA/TC.
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Comentario relevante
te
del autor
La notificación judicial es aquel acto
procesal cuyo principal objetivo es
que las partes intervinientes en un
proceso judicial tomen conocimiento
de las resoluciones judiciales emiti-
das en el marco del mismo, a fin de
que estas puedan ejercer su derecho
a la defensa en el ámbito del debido
proceso.
Al respecto, nuestro Supremo Intérprete de
la Constitución ha señalado que: “La noti-
ficación es un acto procesal cuyo cuestio-
namiento o anomalía no genera per se vio-
lación del derecho al debido proceso o a la
tutela procesal efectiva; así, para que ello
ocurra, resultará indispensable la consta-
tación o acreditación indubitable de parte
de quien alega la violación del debido pro-
ceso, de que con la falta de una debida noti-
ficación se ha visto afectado de modo real y
concreto el derecho de defensa u otro dere-
cho constitucional directamente implicado
en un caso concreto. Esto se entiende desde
la perspectiva de que los procesos constitu-
cionales ni son una instancia a la que pue-
den extenderse las nulidades o impugnacio-
nes del proceso judicial ordinario, ni pueden
convertirse en un medio para la articulación
de estrategias de defensa luego de que una
de las partes haya sido vencida en un pro-
ceso judicial”5. Bajo esta postura, es claro
que las notificaciones judiciales tienen como
objetivo primordial poner en conocimiento
83

Comentario relevante
te
del autor
La notificación judicial importa
sobremanera en el proceso judicial,
ya que permite la efectivización del
derecho de defensa de las partes.
de las partes y terceros interesados el conte-
nido de las resoluciones judiciales6, además
que fijan el comienzo y fin de los plazos de
ciertos actos procesales como, por ejemplo,
el plazo para contestar una demanda, propo-
ner excepciones y/o defensas previas, propo-
ner cuestiones probatorias, etc.
Persona incierta es aquella de la que se des-
conoce o se tiene duda sobre su existencia
como, por ejemplo, si una persona fallece y
se desconocen los miembros de su sucesión
intestada (en caso de no haber testamento).
Personas cuyo domicilio se ignore se refiere
a que el demandante o demandado que pre-
tende se les notifique a determinadas perso-
nas (sí se conoce su existencia), pero desco-
nocen su domicilio. Este último supuesto es
difícil que ocurra en la realidad, ya que por
lo general el juez y las partes podrán cono-
cer los domicilios consignados por las per-
sonas que se pretende sean notificadas en sus
DNI, lo cual inclusive puede ser ordenado
de oficio por el juzgador como director del
proceso8.

Por ende, la notificación judicial importa
sobremanera en el proceso judicial, ya que
permite la efectivización del derecho de
defensa de las partes.
IV. Notificación judicial a personas
inciertas o cuyo domicilio se ignore
La ley procesal ha establecido que cuando se
deban notificar a personas inciertas o perso-
nas cuyo domicilio se ignore se deberá pro-
ceder a la notificación vía edictos7.
Bajo estas premisas, es claro que cuando
se tenga que notificar a personas inciertas o
personas con domicilio desconocido se ten-
drá que proceder a la notificación vía edictos
por imperio de la ley. Es obvio, que el legis-
lador busca garantizar el derecho de defensa
de las personas realizando todos los trámi-
tes posibles para lograr que sean notifica-
dos válidamente con las resoluciones judi-
ciales, siendo que en este caso se pretende
garantizar el derecho de defensa de las per-
sonas inciertas y las que tienen domicilio
desconocido.

6 Artículo 155 del CPC.- Objeto de la notificación

“El acto de notificación tiene por objeto poner en conocimiento de los interesados el contenido de las resoluciones judicia-
les. El juez, en decisión motivada, puede ordenar que se notifique a persona ajena al proceso.
Las resoluciones judiciales producen efectos en virtud d notificación hecha con arreglo a lo dispuesto en este Código, salvo
los casos expresamente exceptuados”.
7 Artículo 165 del CPC.- Notificación por edictos
“La notificación por edictos procederá cuando se trate de personas inciertas o cuyo domicilio se ignore. En este último
caso, la parte debe manifestar bajo juramento o promesa que ha agotado las gestiones destinadas a conocer el domicilio de
la persona a quien deba notificar.
Si la afirmación se prueba falsa o se acredita que pudo conocerla empleando la diligencia normal, se anulará todo lo
actuado, y el juez condenará a la parte al pago de una multa no menor de cinco ni mayor de cincuenta Unidades de Refe-
rencia Procesal, que impondrá atendiendo a la naturaleza de la pretensión y a la cuantía del proceso”.
8 Artículo II del Título Preliminar del CPC.- Principios de dirección e impulso del proceso
“La dirección del proceso está a cargo del juez, quien la ejerce de acuerdo a lo dispuesto en este Código.
El juez debe impulsar el proceso por sí mismo, siendo responsable de cualquier demora ocasionada por su negligencia.
Están exceptuados del impulso de oficio los casos expresamente señalados en este Código”.

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 ESPECIAL | LA NOTIFICACIÓN POR EDICTOS Y DESIGNACIÓN DEL CURADOR PROCESAL

Cabe precisar que el legislador, en el su-

puesto de cuando se ignore el domicilio de
las personas, ha previsto una sanción para la
parte que afirmó y declaró bajo juramento o
promesa haber agotado las gestiones destina-
das a conocer el domicilio de la persona que
se debe notificar, pero dicha afirmación fue
falsa o no actuó diligentemente en la bús-
queda del domicilio de la persona.
Esto obedece claramente a la intención del
legislador de evitar el fraude procesal y la
indefensión de las partes procesales.
Ahora bien, realizada la notificación por
edictos sin la intervención de las personas
inciertas o las cuales se desconoce su domi-
cilio, la parte interesada en la continuación
del proceso deberá solicitar al juez el nom-
bramiento de un curador procesal9 quien asu-
mirá la defensa de su representado (persona
incierta o con domicilio desconocido), hasta
las resultas del proceso, salvo que su repre-
sentado intervenga en el proceso o designe a
un apoderado.
En ese sentido, “vemos que la intervención
del curador procesal permite que una de las
partes del proceso pueda actuar en él a tra-
vés de otra persona debidamente autorizada
para ello. Su rol es importante frente a la
naturaleza de confrontación del proceso.
La dualidad de las partes es un elemento
Comentario relevante
te
del autor
Persona incierta es aquella de la que
se desconoce o se tiene duda sobre su
existencia como, por ejemplo, si una
persona fallece y se desconocen los
miembros de su sucesión intestada
(en caso de no haber testamento).
imprescindible para equilibrar la tutela judi-
cial y la aplicación de las leyes; esa duali-
dad se va a establecer a partir del emplaza-
miento. El curador procesal tiene el deber
de intervenir en todos los actos que ocurran
durante el desarrollo del proceso cesando
su representación solo frente a la compare-
cencia del demandado, por tanto, en aten-
ción a la actividad que desarrolla en el
proceso, al curador procesal no podemos
atribuirle la imparcialidad que se exige a
los demás órganos de auxilio judicial, llá-
mese perito, traductor, testigos, secretarios,
etc.; todo lo contrario, su intervención en el
proceso es parcial porque va estar orientada
a la defensa de la parte a quien representa,
esa es su misión, por tanto, el atributo de la
imparcialidad que se exigiría a todo colabo-
rador de la justicia no podría darse en este
supuesto (…)”10.

9 Artículo 61 del CPC.- Curaduría procesal

“El curador procesal es un abogado nombrado por el juez a pedido de interesado, que interviene en el proceso en los
siguientes casos:
1. Cuando no sea posible emplazar válidamente al demandado por ser indeterminado, incierto o con domicilio o residen-
cia ignorados, según lo dispuesto por el artículo 435;
2. Cuando no se pueda establecer o se suspenda la relación procesal por incapacidad de la parte o su representante legal;
3. Cuando exista falta, ausencia o impedimento del representante del incapaz, según lo dispuesto por el artículo 66; o,
4. Cuando no comparece el sucesor procesal, en los casos que así corresponda, según lo dispuesto por el artículo 108.
Concluye la actuación del curador procesal si la parte o su representante legal comparecen al haber adquirido o recuperado
su capacidad procesal”.
10 LEDESMA NARVÁEZ, Marianella. Ob. cit., p. 243.

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Comentario relevante
te
del autor
Personas cuyo domicilio se ignore
se refiere a que el demandante o
demandado pretende se les notifi-
que a determinadas personas (sí se
conoce su existencia), pero descono-
cen su domicilio.
Conclusiones
A manera de conclusiones podemos señalar
los siguientes:
• El derecho de defensa es un derecho
fundamental que tiene como princi-
pal contenido que se realice un debido
emplazamiento o comunicación de
la acusación para que el demandado o
denunciado pueda válidamente ejercer
los mecanismos legales que ofrece el
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ordenamiento jurídico para que se efecti-
vice su defensa.
• La notificación judicial es aquel acto
procesal de comunicación cuyo obje-
tivo primordial es que las partes inter-
vinientes en un proceso judicial tomen
conocimiento de las resoluciones judicia-
les emitidas en el marco del mismo.
• La ley procesal ha establecido que cuando
se deban notificar a personas inciertas o
personas cuyo domicilio se ignore, se
deberá proceder a la notificación vía
edictos.
 Referencias bibliográficas
• CHAMORRO BERNAL, Francisco. La tutela
judicial efectiva. Bosch, Barcelona, 1994.
• LEDESMA NARVÁEZ, Marianella. Comen-
tarios al Código Procesal Civil. Tomo I.
Lima, 2008.
• MONTERO AROCA, Juan y FLORS
MATÍES, José. Amparo constitucional y pro-
ceso civil. Tirant lo Blanch, Valencia, 2005.