Si a mi pueblo vienes puedes vivir la mayor de las aventuras, parte rápidamente el bus por esos

kilómetros pavimentados que nos llenan de ilusión de un viaje cómodo y veloz pero solo después
de 12 kilómetros sentimos el cambio repentino que nos aterriza en una triste historia la de un
relato de como la vía por la que transitas es la más estudiada del país y cuya ruta se encuentra
totalmente pavimentada en los archivos del ministerio de trasporte en nuestra capital,
recordándome del cuento del nuevo traje del rey, aquel que narraba la historia de un traje
especial que solo los limpios, honestos , puros de corazón podían ver y quien en su vida hubieran
obrado con deshonestidad no podrían verlo, así el rey convencido siempre creyó que llevaba el
traje puesto por miedo a ser acusado de ladrón, aunque esta historia supuestamente el honesto
era solo quien podía ver el traje en nuestra versión solo los que se han robado los recursos
durante años ven el pavimento y la gente honesta y trabajadora de nuestra comarca no solo no lo
ve sino lo siente, sobre todo cuando el vehículo sin tener más opción pasa por encima de uno de
los muchos cráteres o montículos de tan deteriorada vía.

Allí comienza la aventura que nos remota a la historia y a la literatura, ahora ya despierto podrás
observa con detenimiento tan maravilloso paisaje, un paisaje realmente echo para los que aman la
aventura y se alimentan de la adrenalina que emana observar desde la ventanilla del bus hacia las
profundidades especialmente en esos lugares donde el borde de la cartera se pierda bajo la
cobertura de las llantas y experimentas la sensación de no ir por tierra sino por aire

A momento observaras la maravilla de la naturaleza que te transporta a zonas selváticas, a zonas

de resera natural, admiras la belleza de las especies vegetales y si la fortuna de acompaña podrás
ver cruzar por las carretera parte de la fauna que allí habita, parece un sueño un viaje que te
transporta a las grandes junglas. De repente ese maravilloso paisaje son hace retroceder y ver qué
metros antes admiramos lo aguerridos de los campesinos que con empeño han conquistado esas
montañas y han abierto en ellas las huertas y las fincas , admiramos las guayas por donde bajan
sus productos y aplaudimos su valentía para vivir en semejante geografía tan hostil, y al mirar
nuevamente el paisaje de selva de la felicidad pasamos a la nostalgia y a la tristeza y de la
admiración a la frustración y desearemos tener una buena cámara para guardar tan maravillosas
imágenes que tal vez generaciones futuras solo puedan admirarlas en imágenes, las maravillosas
fuentes de agua pura que brotan de la roca se trasforman en llanto de las montañas que sienten
que están solas y que su destino será desaparecer frente a la invasión sin freno de los aguerridos
colonos que convierten su naturaleza en paisajes artificiales de zonas productivas que realmente
son áreas de destrucción del paisaje natural.