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MEMORIA

Estudiantil de

LUCIANO SANDOVAL
Todo comenzó en séptimo grado, tenia que pensar a que escuela iba a ir, una fácil decisión, ya que
unos amigos iban a ir a la aeronáutica por que no se rendía examen de ingreso, sin dudas un
pensamiento bastante mediocre, era eso o ir al colegio del barrio. Entonces nos inscribimos, mis
amigos y yo, y casi tan rápido como un parpadeo, un día estaba en séptimo grado, y hoy ya estaba en
mi primer día de clases "la escuela técnica aeronáutica", escuela de alta disciplina y buen nivel de
educación por "definición", o eso es lo que amenos la gente piensa antes de conocer la escuela, y lo
que yo pensaba...

El primer día, me vi en una fila de personas desconocidas, miedo no tenia, pero estaba nervioso por
la incertidumbre de lo que pasaría en el futuro, ver a mis compañeros de primaria conmigo me brindo
un poco de tranquilidad, todos estábamos eufóricos, ya que comenzábamos una nueva etapa,
empezaba la carrera de aprendizaje, que algunos añoraban y otros repudiaban (por eso de 400 alumnos
que ingresaron solamente el 65% llego a segundo año), el primer año fue bastante fácil, básicamente
un repaso de lo que habíamos dado en la primaria, para mi resulto en una dificultad, ya que por aquel
tiempo no entendía el significado de responsabilidad, una de las muchas cosas que aprendí a lo largo
de estos seis años.
Me pusieron en "primero segunda división técnico aeronáutico" en mi curso éramos todos hombres,
menos dos mujeres, que se terminaron yendo del colegio a los meses de haber empezado, quedaron
conmigo dos compañeros de la primaria en el mismo curso, Abel y Pablo, Pablo llego hasta mitad de
año y después abandono, Abel esta hasta hoy conmigo y vamos a recibirnos en el mismo curso.
En primer año éramos unos de los cursos mas desastrosos, después de primero tercera, nosotros
seguíamos en términos de desastre...
Me acuerdo que un día, un tal Rostan de primero tercera, jugando con sus compañeros, rompió el
vidrio de la puerta de su curso y se corto la mano, arreglaron el vidrio y a la semana sucedió lo mismo
y con la misma persona.
Nuestro día de clases en primer año básicamente era estar desocupados molestando a los profesores,
añorando ser drogadictos, borrachos , etc... eso al menos en mi curso, sinceramente no tenia muchas
expectativas del colegio ya que una persona de esa edad, básicamente es un manojo de pensamientos
confusos, mas en esta sociedad tercermundista, que te dicta vivir lo que vivieron tus viejos, tener un
sistema educativo repetitivo y obsoleto, que enseña cosas que no necesitas saber para triunfar como
persona, adoptando políticas de consumismo y estereotipos baratos. Pero todos tarde o temprano se
dan cuenta de eso, y en ese momento se dividen en dos grupos de personas, los que toman en cuenta
eso y siguen haciendo las mismas cosas, y los que toman en cuenta eso y cambian para bien.
La irresponsabilidad y la suma de todas las malas decisiones de un chico que venia de una primaria
de barrio, con una desinformación y falta de motivación/divulgación por parte de sus ejemplos
(padres, hermanos, maestros), dieron resultado en las calificaciones desde el primer al ultimo
trimestre, menos de 6 materias no me llevaba.
Lo único que puedo rescatar de primer año, fueron los asados con mis compañeros, los fines de
semanas de salidas y la falsa idea de ser una persona inteligente por tomar decisiones estúpidas, pero
si hay algo de lo que me di cuenta es que uno tiene que pasar por una serie de sucesos para darse
cuenta de ciertas cosas.
A marzo de segundo año llegue con 4 materias de 6 que tenia en diciembre de primer año, pasé de
año por suerte levantando 2 materias en marzo, la felicidad no tenia comparación, no tanto por mi,
"si no por parte de mis viejos que apostaron todo por mi..." en realidad, no, nunca fueron muy
presentes en el tema del colegio, pero yo me las amañaba para pasar desapercibido con las cosas
malas. En ese momento me di cuenta que la idea que la gente tenia de la disciplinada y rigurosa
escuela técnica aeronáutica estaba errada, y como cualquier adolescente sabiendo que no era tan
difícil como parecía Todo, empecé a desinteresarme por mantener las buenas notas, ya que el que no
estudiaba recibía los mismos beneficios que el que estudiaba, aparte nunca fui una persona que tenga
como meta las mejores calificaciones.
En resumen mi segundo año fue lo mismo que primer año, molestar profesores, etc... Pero teniendo
en cuenta el detalle de la corrupción a nivel institucional y las múltiples posibilidades para las
personas que no estudiaban, estaba menos desesterado para llevar mis malas decisiones, una cadena
de malas decisiones, pero acompañado de compañeros nuevos, que eran peores que los anteriores,
solo había 1 que se destacaba, Benjamín Ponce el mejor promedio del colegio.
Lo mas sorprendente de mi segundo año (2014) en el colegio fue que estaba menos estresado y me
lleve menos materias, llegue a diciembre con 2 materias, pasando de año en diciembre.
En marzo (2015) levante 1 y el resto del año arrastre la otra, hasta que en una mesa de examen me
hicieron copiar un ejercicio y aprobé, todo esto era producto de una excelente gestión de mano del
director Mendoza quien manipulaba los números del colegio a su antojo.
Esto lamentablemente para mi representaba una satisfacción, no sabia la grave repercusión que iba a
tener el no haber adquirido conocimientos en años posteriores.
Creo que 2014 fue uno de los peores años, brote de acné, hice un tratamiento en 2015 que me causo
dolores en los huesos, teniendo que dejar mi entrenamiento en el gimnasio, hasta el 2016.
Pero tenia un buen grupo de amigos Leandro, Martin y Alexis, con los que compartía formas de
pensar bastantes singulares, íbamos a mi casa a merendar y jugábamos en el curso, hablábamos todo
el día, por esa razón algunos casi no pasan de año.
Casi tan rápido como comenzó el año, se termino y ya estábamos en marzo de tercer año, con una
materia para levantar, pero ya estaba en tercero, y se venia lo mejor, ya que convergerían todos los
alumnos técnicos aeronáuticos en un solo curso, en primer año había 3 cursos, en segundo hubo 2
cursos y en tercer año hubo solo un curso, lo que primero me pareció malo, termino siendo bueno,
había un contraste de personalidades entre los 2 tipos de alumnos, pero terminamos siendo buenos
compañeros, conocí gente que hoy en día no esta en la escuela, pero siguen siendo mis amigos.
Tuvimos un viaje a Buenos Aires para conocer tecno polis, con hotel, comidas y todo incluido. En la
habitación de hotel me toco con Facundo Vallejos que a los minutos de ingresar al hotel, fue a bañarse
y rompió una canilla, inundando la habitación. También me toco con Leandro Rivero que no se quería
bañar, con Juan Rodríguez y Franco Silvi.
A la noche salíamos de la habitación y volvíamos antes de que fueran a ver si seguíamos durmiendo
ya que no teníamos autorización para salir de la habitación. En el viaje fueron con nosotros unas
chicas de quinto.
Ese año nos "rateábamos" del colegio para no entrar o simplemente tomar teres, pero algo había
cambiado en mi, al parecer la competencia que había en la unión de los 2 cursos me había creado un
habito de estudio, algo peculiar e interesante, ya que no me lleve casi materias, aunque la mayoría de
las materias se trataban de transcribir archivos PDF, hacer esquemas, lo mas difícil tedioso fue dibujo
técnico, fueron 15 laminas en total ese año, a una la tuve que hacer mas de 4 veces por que siempre
tenia un error: se me corría la tinta del estilógrafo, las medidas no encajaban, etc... y pasé de año sin
materias y con mas amigos que nunca.
Martin, mi amigo de segundo año se había cambiado de colegio, pero con su ida vinieron otros buenos
amigos, aun se mantenían Leandro, Alexis y ahora también estaban Benja, Roberto, Cuffia, Lucas
(un amigo de la primaria), juan, Etc...
Tercero fue un año cargado de alegrías, amigos, conocimiento y buenas notas.
Ya estaba en cuarto año sin materias, y contento, mis nuevos amigos eran la motivación para seguir
yendo a la escuela. A cuarto no habían llegado Benja, Leandro ni Alexis y se terminaron cambiando
de escuela, a algunos todavía los veo fuera del colegio.
En cuarto año seguía manteniendo las buenas notas, recuerdo que en cuarto año la relación de amistad
entre los nuevos compañeros de curso ya era más fuerte, las materias eran fáciles, la única materia
que me representaba una dificultad era matematica, la cual no me lleve a diciembre gracias a mis
compañeros, que hablaron con la profesora para que me ponga el 8 que me faltaba para promediar
con los primeros trimestres específicamente fue Mauro.
Ese año empecé a salir los fines de semanas, algo que antes no hacía, solamente por desinterés,
también conocí a mi primer amor, a la cual deje porque su abuela no aceptaba nuestra relación.
(2017) En quinto año llegue sin materias devuelta y me descuide, comencé a llevarme materias por
desinterés, vino un profesor en suplencia de Báez que era bastante riguroso, hizo que la mayoría del
curso se lleve la materia estabilidad, yo ya la veía perdida, por que mi interés estaba en salir los
sábados, así me lleve a diciembre estabilidad y termodinámica.
Ese año básicamente fue salir de joda, y descuidar todos los ámbitos de mi vida, ya que olvide decir
que mis padres son pastores evangelios, y en 2017 empezaron a irse de miércoles a domingos a una
Iglesia En la localidad de la escondida, por lo tanto nadie estaba para despertarme, cocinarme, limpiar
y decirme que hacer. Eso desemboco en una pendiente resbaladiza de malas decisiones, juntadas entre
semana en mi casa, salir todos los fines de semana, dejar de lado todas mis responsabilidades, faltar
al colegio, y todo eso dio sus frutos a fin de año, me lleve 3 materias, de las cuales una pude levantar
en diciembre, y las otras levante en sexto. Pero no todo fue malo, ganamos las olimpiadas futuro, una
competencia que llevaba a a cargo la secretaria de deporte, que tenia como primer premio un viaje a
Bariloche, para todos los participantes del curso ganador. También visitamos la Famosa fábrica de
Agro metalúrgica Jensen, Situada en Margarita Belén, 100% INDUSTRIA ARGENTINA, después
de ir a la fábrica nos regalaron 500$ pesos para volver, pero lo gastamos en comida.
(2018)Ya en sexto año, y después de unas vacaciones bastantes locas, comenzó el último año de
clases, con nuevos profesores, y los mismos compañeros desde cuarto año, nos vamos a Bariloche y
yo con la sensación de que no aprendí lo suficiente en estos 6 años.
FIN.

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