SEDE CENTRAL - BOLIVAR, Relator:MUNAYCO CASTILLO NELLY KEY /Servicio Digital - Poder Judicial del Perú Fecha: 31/07/2018 09:41:06,Razón: RESOLUCIÓN JUDICIAL,D.Judicial: LA LIBERTAD / TRUJILLO,FIRMA DIGITAL
Trujillo, dos de Abril del año dos mil dieciocho. -
AUTOS Y VISTOS; dado cuenta con el presente Cuaderno; estando expeditos
los autos para resolver; se absuelve la elevación en Grado de la Resolución impugnada, bajo las motivaciones siguientes; y,
CONSIDERANDO:
PRIMERO.- Es materia de impugnación, el Auto contenido en la Resolución número
SEIS, de fecha ocho de Setiembre del año dos mil diecisiete, [en copia certificada de folios doscientos sesenta y tres a doscientos sesenta y cuatro], que DECLARA INFUNDADA la nulidad formulada por doña Zoraida Gitsy Javes Rodríguez. SEGUNDO.- Doña ZORAIDA GITSY JAVES RODRIGUEZ, con escrito que en copia certificada obra de folios doscientos ochenta y tres a doscientos noventa y uno, ha interpuesto recurso de apelación contra el pre-citado Auto, alegando que se ha vulnerado los derechos fundamentales de la recurrente como son a un debido proceso y derecho a la defensa, porque en forma tardía ha resuelto la nulidad interpuesta declarándola infundada. Refiere que el A quo por resolución número UNO, de fecha veintidós de Mayo de dos mil diecisiete, fijó fecha para la realización de la Audiencia Oral el día veintiséis de Mayo de dos mil diecisiete a horas 10:30 a.m,“en dicha resolución se ordena que la recurrente conduzca al menor Bryan Elias Portocarrero Javes para que se lleve a cabo la audiencia”; que así se dispuso notificar a la recurrente con la Resolución número UNO y se giró la cédula de notificación N° 2017-0072247-JR-FC, la misma que se dejó bajo puerta sin preaviso y que el mismo día veintiséis de Mayo de dos mil diecisiete aproximadamente a 11:45 am. Manifiesta que con fecha treinta y uno de Mayo de dos mil diecisiete, la recurrente interpuso la nulidad de todo lo actuado con posterioridad, como lo fue la celebración de la audiencia oral de medidas de protección, ya que no se cumplió con lo dispuesto en la última parte del art. 147° del Código Procesal Civil, que prescribe que entre la notificación para una actuación procesal y su realización, deben transcurrir por lo menos tres días hábiles. Refiere que pese a que por Resolución número TRES, de fecha seis de Julio de dos mil diecisiete, se tiene por interpuesta la nulidad planteada por la recurrente y se corre traslado a la parte denunciada para que absuelva la puesta en conocimiento [sic], que en la misma resolución señala fecha para la continuación de Audiencia de Medidas de Protección para el día veinticuatro de Julio de dos mil diecisiete a horas 10:15 a.m; que sin embargo, el Juzgado por segunda vez vuelve a notificar a la recurrente defectuosamente, a pesar que había señalado casilla electrónica y domicilio procesal, que no se le notificó con arreglo a ley lo cual se verificara con los cargos de notificación. Manifiesta que el Juzgado sin emitir pronunciamiento respecto a la nulidad planteada, continuó con el trámite del proceso, llevando a cabo la continuación de la Audiencia de Medidas de Protección en la que su hijo Bryan Elías Portocarrero Javes no estuvo presente (siendo errado lo señalado en la última parte del considerando quinto de la Res. N° 06 que se apela), contraviniendo el Juzgado gravemente su derecho al debido proceso que se encuentra regulado en el artículo 139 inc. 3 de la Constitución Política del Perú y el artículo 7 de la Ley Orgánica del Poder Judicial, así como también su derecho de defensa regulado en el artículo 139 inciso 14 de la Constitución Política del Perú, porque hasta la fecha ha emitido pronunciamiento respecto a la nulidad interpuesta, prácticamente cuando el proceso en su instancia ya culminó. Refiere que se ha contravenido también los principios y garantías procesales en el trámite del proceso, vulnerando el principio de igualdad de las partes que se encuentra regulado en el artículo 6 de la Ley Orgánica del Poder Judicial. Finalmente refiere que la Ley 30364 y su Reglamento, no prohíbe la intervención del denunciado en el proceso, no limita tampoco la igualdad entre las partes, pues así está establecido en el artículo 35 del Reglamento, refiere que ante acusaciones falsas, cualquier sujeto de derecho debe hacer efectivo su derecho de defensa y debe ser escuchado. TERCERO.- Son garantías de la administración de justicia los principios de la Observancia del Debido Proceso y la Tutela Jurisdiccional Efectiva, prescritos en el inciso 3) del artículo 139º de la Constitución Política del Estado, y cuyas reglas y pautas conformantes se encuentran recogidas en las normas procesales vigentes; por lo que en este sentido, en todo judicial su observancia es obligatoria; máxime, si estas garantías consagran el derecho de los justiciables a iniciar o participar en un determinado proceso judicial con plena protección del derecho de defensa que les asiste, a efectos de que puedan plantear sus distintas pretensiones y/o hacer uso de los medios de defensa y elementos de prueba que resulten idóneos a fin de coadyuvar al esclarecimiento de la verdad; pero siempre y cuando se hubiera procedido en el modo y forma que establece expresamente la Ley Procesal. CUARTO.- Asimismo, es de precisarse que para la validez de toda Resolución Judicial de trascendencia, debe requerirse que ésta sea el reflejo del mérito de lo actuado y del Derecho, tal como lo exige la norma constitucional antes acotada, concordante con lo previsto en el artículo 122°, incisos 3) y 4) del Código Procesal Civil. QUINTO.- En el presente caso, de autos se puede verificar lo siguiente: 1. Don LUIS ALBERTO PORTOCARRERO GARCIA, con escrito de folios noventa y uno a noventa y seis, solicitó medidas de protección sobre tenencia y custodia provisional, para que se disponga que el recurrente cuide a su menor hijo. Alegando que su menor hijo está sufriendo maltratos físicos y psicológicos por parte de su madre, lo cual está causando un gran daño a su hijo. Asimismo indica que está probada la relación paterno-filial con su menor hijo; y que con la madre de su menor hijo están separados desde el año 2010 desde que hizo abandono de hogar conyugal, como consta en la denuncia. Refiere que posteriormente en el año 2012 la madre de su hijo, dejó a su hijo que en ese entonces el menor contaba con dos años y medio de edad en la casa de los padres del recurrente aduciendo que no podía hacerse cargo de su hijo y lo dejó con la ropa que tenia puesto, totalmente desaseado, que en ese momento el recurrente y con la ayuda de sus padres se hicieron cargo de su menor hijo hasta que su hijo cumplió los cinco años de edad y que en todo ese tiempo su madre nunca se preocupó por su hijo y sus necesidades. Manifiesta que en el año 2015 su madre volvió aduciendo que necesitaba a su hijo, y que su hijo necesita a su madre y que se lo entregue, señala que su hijo no quería pero que por el bienestar de su hijo, su familia y tratando de a poco, un acercamiento entre ellos, y llegando a un acuerdo verbal que su persona no tendría ninguna restricción para las visitas. Refiere que todo fue una vil patraña de ella, pues no le dejó verlo, insistiendo en cada momento hasta que le dejó verlo los fines de semana de viernes a domingo, exigiéndole el pago de la educación de su hijo, pagos que lo hizo sin ningún problema. Refiere que estando al cuidado de ella ha estado en total descuido en su alimentación, salud y en su apariencia, como en su educación, sin contar los maltratos físicos y psicológicos que su hijo recibe de su madre. Sostiene que recibió una llamada de la profesora de su menor hijo manifestándole que su hijo tenía moretones en la espalda, que otro día tenía el lóbulo de la oreja roto, el labio partido, hasta que un día corroboró que su hijo tenía flagelada la espalda, acudiendo a la comisaria de la mujer y le derivaron a la DEMUNA pero que hicieron caso omiso a su denuncia manifestándole que los padres que no quieren pasar alimentos siempre hacen denuncias. Finalmente, refiere que el veintiocho de Abril asistió a la Fiscalía de Familia para realizar la denuncia de maltrato a su menor hijo, en el cual tomaron la declaración de su persona así como la de su hijo, y que le derivaron a un reconocimiento médico legal, y a la evolución psicológica. 2. De folios noventa y siete a noventa y nueve obra la Audiencia de Decisión de Medidas de Protección, de fecha 26 de Mayo de 2017 en donde se conferencia con el niño Bryan Elías Portocarrero Javes, indicando: “(..) que se lleva un poquito mal con su mamá, que no le gusta la casa porque todos gritan, que le gritan sus tíos por culpa del niño Jorge, refiere que ve a su papá los viernes y sábado porque así lo quiere su mamá. Que fue castigado por su mamá con un cincho y a puñetes también”. 3. Doña ZORAISA GITSY JAVES RODRIGUEZ, con escrito obrante en copia certificada a folios ciento seis a ciento trece, solicitó la nulidad del acto de notificación, consistente en la Resolución número UNO, de fecha 22 de Mayo de 2017, así como la Nulidad de todo lo actuado con posterioridad, como es la celebración de Audiencia de Medias de Protección, ya que dejaron dicha cédula de notificación el mismo 26 de Mayo a horas 11.45 a.m aproximadamente, esto es, el mismo día en que se había señalado la realización de audiencia oral a horas 10:30 a.m (dos horas después), por lo cual dicho acto de notificación está inmerso en nulidad, debido a que entre la notificación para la actuación procesal de audiencia (contenido en la resolución número UNO, realizada el 26 de Mayo de 2017) y su realización (el 26 de Mayo de 2017), no ha transcurrido por lo menos tres días hábiles que señala la ley. 4. Con Resolución número TRES, de fecha seis de Julio de dos mil diecisiete [de folios en copia certificada ciento cuarenta y siete] se CORRIO TRASLADO de la misma al demandante LUIS ALBERTO PORTOCARRERO GARCIA. En cuanto al Informe Psicológico del menor, TENGASE por recibido en la fecha presente en su oportunidad y en lo que fuere de ley. Asimismo, se SENALÓ fecha para audiencia para el día VEINTICUATRO DE JULIO DEL PRESENTE AÑO, A LAS DIEZ CON QUINCE MINUTOS DE LA MAÑANA en el local del Juzgado con la concurrencia de las partes justiciables y del menor agraviado. 5. Mediante Resolución número SEIS, de fecha ocho de Setiembre del año dos mil diecisiete, [en copia certificada de folios doscientos sesenta y tres a doscientos sesenta y cuatro], que DECLARA INFUNDADA la nulidad formulada por doña Zoraida Gitsy Javes Rodríguez. SEXTO.- A fin de resolver la presente controversia, se debe precisar que de conformidad con lo prescrito por los artículos 171° y 172° del Código Procesal Civil, la nulidad se sanciona sólo por causa establecida en la Ley. Sin embargo, puede declararse cuando el acto procesal careciera de los requisitos indispensables para la obtención de su finalidad. Es decir, que sólo se sanciona con nulidad procesal, aquel estado de anormalidad del acto procedimental, originado en la carencia de alguno de los elementos constitutivos, o en vicios existentes sobre ellos, que potencialmente coloquen a dicho acto procesal en situación de ser declarado judicialmente inválido; en todo caso, el estado de nulidad potencial referido no afectará el debido proceso, ya sea por ser subsanable el vicio, por convalidación, o porque el acto ha cumplido su finalidad. SÉTIMO.- Como se aprecia de autos, la petición de Nulidad de todo lo actuado con posterioridad, como es la celebración de Audiencia de Medias de Protección, ya que dejaron dicha cédula de notificación el mismo 26 de Mayo a horas 11.45 a.m aproximadamente, esto es, el mismo día en que se había señalado la realización de audiencia oral a horas 10:30 a.m (dos horas después), y que dicho acto de notificación está inmerso en nulidad, debido a que entre la notificación para la actuación procesal de audiencia (contenido en la resolución número UNO, realizada el 26 de Mayo de 2017) y su realización (el 26 de Mayo de 2017), no ha transcurrido por lo menos tres días hábiles que señala la ley. OCTAVO.- Sobre el particular, se debe tener en cuenta que el trámite de los hechos materia de denuncia, se encuentra regulado por la Ley N° 30364 – Ley para prevenir, sancionar y erradicar la violencia contra las mujeres y los integrantes del grupo familiar, publicada el 23 de Noviembre del 2015, la misma que tiene por objeto, prevenir, erradicar y sancionar toda forma de violencia producida en el ámbito público o privado contra las mujeres por su condición de tales, y contra los integrantes del grupo familiar, estableciéndose mecanismos, medidas y políticas integrales de prevención, atención y protección de las víctimas así como reparación del daño causado. En este sentido, en el artículo 2 de la citada ley establece que para la interpretación y aplicación de la Ley, y en general de toda medida que adopte el Estado a través de sus poderes públicos e instituciones, se consideran preferentemente, los principios de igualdad y no discriminación, de interés superior del niño, de la debida diligencia, de intervención inmediata y oportuna, de sencillez y oralidad, de razonabilidad y proporcionalidad. Destacándose en cuanto al principio de intervención inmediata y oportuna (numeral 4) que establece que: “Los operadores de justicia y la Policía Nacional del Perú, ante un hecho o amenaza de violencia, deben actuar en forma oportuna, sin dilación por razones procedimentales, formales o de otra naturaleza, disponiendo el ejercicio de las medidas de protección previstas en la ley y otras normas, con la finalidad de atender efectivamente a la víctima.” NOVENO.- Asimismo, para efectos de tutela, la citada Ley ha regulado un Proceso Especial, estableciendo que son competentes los juzgados de familia o los que cumplan sus funciones para conocer las denuncias por actos de violencia contra las mujeres o contra los integrantes del grupo familiar. En cuanto al trámite de la denuncia el artículo 15 señala: “La denuncia puede presentarse por escrito o verbalmente. Cuando se trata de una denuncia verbal, se levanta acta sin otra exigencia que la de suministrar una sucinta relación de los hechos. La denuncia puede ser interpuesta por la persona perjudicada o por cualquier otra en su favor, sin necesidad de tener su representación. También puede interponerla la Defensoría del Pueblo. No se requiere firma del letrado, tasa o alguna otra formalidad. Sin perjuicio de lo expuesto, los profesionales de la salud y educación deben denunciar los casos de violencia contra la mujer o los integrantes del grupo familiar que conozcan en el desempeño de su actividad. Cuando la Policía Nacional del Perú conozca de casos de violencia contra la mujer o los integrantes del grupo familiar, en cualquiera de sus comisarías del ámbito nacional, debe poner los hechos en conocimiento de los juzgados de familia o los que cumplan sus funciones dentro de las veinticuatro horas de conocido el hecho, remitiendo el atestado que resuma lo actuado.” Sobre el proceso el artículo 16 taxativamente establece “En el plazo máximo de setenta y dos horas, siguientes a la interposición de la denuncia, el juzgado de familia o su equivalente procede a evaluar el caso y resuelve en audiencia oral la emisión de las medidas de protección requeridas que sean necesarias. Asimismo, de oficio o a solicitud de la víctima, en la audiencia oral se pronuncia sobre medidas cautelares que resguardan pretensiones de alimentos, regímenes de visitas, tenencia, suspensión o extinción de la patria potestad, liquidación de régimen patrimonial y otros aspectos conexos que sean necesarios para garantizar el bienestar de las víctimas. Analizados los actuados, el juzgado de familia o su equivalente procede a remitir el caso a la fiscalía penal para el inicio del proceso penal conforme a las reglas del Código Procesal Penal, promulgado por el Decreto Legislativo 957.” Sobre la responsabilidad funcional el artículo 21 de la Ley establece: “Quien omite, rehúsa o retarda algún acto a su cargo, en los procesos originados por hechos que constituyen actos de violencia contra las mujeres o contra los integrantes del grupo familiar comete delito sancionado en los artículos 377 o 378 del Código Penal, según corresponda.” El artículo 22 señala que entre las medidas de protección que pueden dictarse en los procesos por actos de violencia contra las mujeres y los integrantes del grupo familiar se encuentran, entre otras, las siguientes: “1. Retiro del agresor del domicilio. 2. Impedimento de acercamiento o proximidad a la víctima en cualquier forma, a la distancia que la autoridad judicial determine. 3. Prohibición de comunicación con la víctima vía epistolar, telefónica, electrónica; asimismo, vía chat, redes sociales, red institucional, intranet u otras redes o formas de comunicación. 4. Prohibición del derecho de tenencia y porte de armas para el agresor, (…) 5. Inventario sobre sus bienes. 6. Cualquier otra requerida para la protección de la integridad personal y la vida de sus víctimas o familiares.” De otro lado, sobre la vigencia e implementación de las medidas de protección, el artículo 23 de la Ley en comento establece: “La vigencia de las medidas dictadas por el juzgado de familia o su equivalente se extiende hasta la sentencia emitida en el juzgado penal o hasta el pronunciamiento fiscal por el que se decida no presentar denuncia penal por resolución denegatoria, salvo que estos pronunciamientos sean impugnados. La Policía Nacional del Perú es responsable de ejecutar las medidas de protección dictadas, (…)”. DÉCIMO.- De la evaluación de la resolución materia de apelación, en contraste con las procesales que conforman el presente Cuaderno, se advierte que el A-quo ha expedido una Resolución debidamente motivada y razonada, derivada de una adecuada apreciación de los hechos, al haber aplicado correctamente la normatividad vigente aplicable al caso en concreto y que ha determinado que la solicitud de doña Zoraida Gitsy Javes Rodríguez, sobre nulidad de actuados, sea declarada infundada. DÉCIMO PRIMERO.- En efecto, como lo advierte el A-quo, se verifica que las notificaciones han sido realizadas oportunamente a las personas con quienes se llevarían a cabo la audiencia oral, tanto es así que en la primera fecha de la audiencia, de fecha 26 de Mayo de 2017, solo se conferencia con el niño Byan Elías Portocarrero Javes, y se suspende la audiencia y se llevará a cabo cuando se tenga informe del menor, disponiéndose que sea evaluado por el Equipo Multidisciplinario a fin de que se realice la evaluación psicológica al niño a la brevedad posible, pues en el presente caso el menor agraviado ha concurrido acompañado de su padre el denunciante, mientras que en la segunda fecha la denunciada si tuvo conocimiento oportuno, toda vez que de la revisión del expediente obra en copia certificada el Cargo de Cédula de Notificación [en copia certificada de folios ciento cuarenta y ocho] , en donde se aprecia que la demandada ha sido notificada con la Resolución número TRES, que señala: “fecha para Audiencia para el día VEINTICUATRO DE JULIO del PRESENTE AÑO A LAS DIEZ CON QUINCE MINUTOS DE LA MAÑANA, en el local del Juzgado, con la concurrencia de las partes justiciables y del menor agraviado”, así como obra en copia certificada escrito de fecha 21 de Julio de 2017 [de folios en copia certificada ciento sesenta y seis a ciento sesenta y ocho], presentado por su abogada doña Katia Elena Valle Carranza, en donde se solicita se reprograme audiencia; a dicha audiencia concurrió el menor con su padre y se llevó a cabo dictándose medidas de protección, además de que el acto procesal se realizó con las personas que la ley faculta para llevarse a cabo la Audiencia Oral. Siendo esto así, la resolución materia de apelación, debe ser CONFIRMADA. DÉCIMO SEGUNDO.- En cuanto a los argumentos de la parte demandante, se debe señalar lo siguiente: 1. En cuanto a las alegaciones impugnatorias de doña Zoraida Gitsy Javes Rodríguez, en el sentido que no se cumplió con lo dispuesto en la última parte del artículo 147 del Código Procesal Civil que prescribe que entre la notificación para una actuación procesal y su realización, deben transcurrir por lo menos tres días hábiles, al respecto, como ya se ha mencionado el artículo 16 de la Ley N° 30364, señala que: “En el plazo máximo de setenta y dos horas, siguientes a la interposición de la denuncia, el juzgado de familia o su equivalente procede a evaluar el caso y resuelve en audiencia oral la emisión de las medidas de protección requeridas que sean necesarias., en este caso estas medidas fueron dictadas en la segunda Audiencia de Medidas de Protección, en donde como ya se ha señalado líneas atrás la denunciada si tenía pleno conocimiento, en ese sentido se ha cumplido la finalidad del procedimiento de tutela que regula la Ley N° 30364. 2. En cuanto a lo manifestado por la recurrente que el Juzgado sin emitir pronunciamiento respecto a la nulidad planteada, continuó con el trámite del proceso, llevando a cabo la continuación de la Audiencia de Medidas de Protección en la que su hijo Bryan Elías Portocarrero Javes no estuvo presente (siendo errado lo señalado en la última parte del considerando quinto de la Res. N° 06 que se apela), contraviniendo el Juzgado gravemente su derecho al debido proceso que se encuentra regulado en el artículo 139 inc. 3 de la Constitución Política del Perú y el artículo 7 de la Ley Orgánica del Poder Judicial, así como también su derecho de defensa regulado en el artículo 139 inciso 14 de la Constitución Política del Perú, porque hasta la fecha ha emitido pronunciamiento respecto a la nulidad interpuesta, prácticamente cuando el proceso en su instancia ya culminó; al respecto, se debe tener en cuenta que mediante resolución número DOS, de fecha dos de junio del año dos mil diecisiete, [de folios en copia certificada ciento treinta y tres], se resolvió declarar inadmisible el escrito de nulidad formulado por doña Zoraisa Gitsy Javes Rodríguez, y se le concede el plazo de tres días a fin que cumpla con presentar el recibo de tasa judicial por nulidad, bajo apercibimiento de tenerse por no interpuesta la nulidad. Por lo que, este colegiado desestima este argumento al haberse resuelto la nulidad mediante la resolución citada precedentemente. Asimismo, de acuerdo al Reglamento de la Ley N° 30364 –Aprobado por Decreto Supremo N° 009-2016-MIMP, el artículo 35.1 dispone que “El Juzgado de Familia puede realizar audiencia con la sola presencia de la víctima o sin ellas”. 3. De otro lado, en cuanto a lo indicado que la Ley 30364 y su reglamento, no prohíbe la intervención del denunciado en el proceso, no limita tampoco la igualdad entre las partes, pues así está establecido en el artículo 35 del reglamento, refiere que ante acusaciones falsas, cualquier sujeto de derecho debe hacer efectivo su derecho de defensa y debe ser escuchado; al respecto, el artículo en mención refiere “El Juzgado de Familia puede realizar audiencia con la sola presencia de las víctimas o sin ellas. En caso que las circunstancias lo ameriten, dicta las medidas de protección o cautelares correspondientes, en el plazo de 72 horas que establece la ley. Cuando el Juzgado lo considere necesario entrevista a la persona denunciada”, en este caso como se ha señalado anteriormente la demandante tenía conocimiento, máxime como si se preciso anteriormente mediante escrito de fecha 21 de Julio de dos mil diecisiete, su abogada doña Katia Elena Valle Carranza, solicita se reprograme audiencia, por lo tanto en ningún momento se ha afectado su derecho de defensa, en ese sentido debe precisarse que dichas argumentaciones no tiene mayor sustento. DÉCIMO TERCERO.- Por lo demás, se determina que la pretensión de doña Zoraida Gitsy Javes Rodríguez que se declare la nulidad de lo actuado por el Juzgado, no tiene mayor sustento jurídico, pues ello implica que lo que se pide es que se deje sin efecto las medidas de protección dictadas por el A quo, vulnerándose el derecho de asistencia y protección de la denunciante y por ende el sentido y objeto de la Ley N° 30364. DÉCIMO CUARTO.- En ese sentido, se colige que la decisión impugnada se encuentra arreglada a Derecho, al haberse respetado en lo sustancial la Tutela Jurisdiccional Efectiva y la Motivación Adecuada y Razonada, que se constituyen –a su vez- en principios jurisdiccionales y derechos procesales a favor de los justiciables, conforme así lo disponen los incisos 3) y 5) del artículo 139° de la Constitución Política del Perú; siendo esto así, la Resolución venida en Grado debe ser Confirmada. Por todas estas consideraciones: SE RESUELVE: 1) CONFIRMAR el Auto contenido en la Resolución número SEIS, de fecha ocho de Setiembre del año dos mil diecisiete, [en copia certificada de folios doscientos sesenta y tres a doscientos sesenta y cuatro], que DECLARA INFUNDADA la nulidad formulada por doña Zoraida Gitsy Javes Rodríguez; y, 2) DISPONER que producida la anotación de la presente Resolución en los Registros respectivos, y su notificación oportuna a los sujetos procesales, se devuelvan los autos al Juzgado de origen en el modo y forma de Ley.- Con la intervención del Sr. Juez Superior Supernumerario Dr. Cosme Luna Bardales, por licencia de la Sra. Jueza Superior Titular Dra. Wilda Mercedes Cárdenas Falcón y del Sr. Juez Superior Supernumerario Dr. Carlos Villanueva Villanueva, por licencia del Dr. Juez Superior Provisional Dr. Francisco Escalante Ponencia de la Señora Juez Titular, Ms. Hilda Rosa Chávez García.-
S.S. CHÁVEZ GARCÍA LUNA BARDALES VILLANUEVA VILLANUEVA
Dr. Erick Hamilton Castillo Saavedra
Juez (T) del Quinto Juzgado Especializado de Familia de Trujillo Sec.: Ysabel Rodríguez Lescano