Introducción
Se presenta el tema tratamiento kinésico de la pará lisis facial periférica de Bell, poniendo
en manifiesto que es una disfunción del nervio facial sin causa detectable alguna, y
unilateral.
Justificación
La selección de el tema Parálisis Facial Periférica de Bell fue elegido debido a la cantidad
de casos que denota la enfermedad en nuestra sociedad, ya que aqueja a 25 de cada
100.000 personas por año, de ambos sexos y diversas edades; además es de importancia
investigar las afecciones que causa en la fisiología facial, como así también en la estética,
lo cual nos guiara a un pronóstico certero para realizar la planificación de un correcto
tratamiento kinésico en el paciente afectado.
Problema de investigación
Tratamientos kinésicos que se utilizan en la Parálisis Facial de Bell, realizados en
pacientes de 45 a 65 años de edad.
Objetivos
Objetivo General:
Objetivo Específicos:
Anatomía
Cara
La cara es inferior a la parte anterior del cráneo. Dividiremos la cara en dos grandes
partes, una superior y otra inferior.
La parte superior comprende cuatro regiones principales: dos medias, la región de la nariz
y la región de las cavidades nasales, y dos laterales, las regiones orbitarias.
La parte inferior o bucofaríngea de la cara comprende un gran número de
Los músculos que actúan sobre los párpados y las cejas son el occipitofrontal, el prócero,
el orbicular del ojo y el corrugador de la ceja.
o Músculo Occipitofrontal
Forma, situación y trayecto: es un músculo digástr ico, plano, delgado y cuadrilátero. Cada
uno de los vientres mu sculares del digástrico occipitofrontal está formado por dos mús
culos: los músculos occipitales posteriormente y los músculos frontales anteriormente.
Acción: el occipital es el tensor de la aponeurosis epicraneal, a la cual, al tensarse, sirve
de punto fijo al frontal, que eleva la piel de las cejas y determina secundariamente la
elevación del parpado superior. La acción del frontal puede preceder a la del occipital. En
ese caso, el occipital se contrae después del frontal para atraer posteriormente el cuero
cabelludo.
o Prócero (Piramidal)
Forma, situación y trayecto: son dos pequeños haces carnosos y delgados, alargados
sobre la parte superior del dorso de la nariz y situado a cada lado de la línea media.
Inserciones y descripción: cada músculo prócero se inserta inferiormente en el cartílago
lateral y en la parte inferomedial del hueso nasal. Las fibras ascienden hacia la raíz de la
nariz entrecruzándose con las fibras del frontal, y termi nan en la cara profunda de la piel
de la región del entrecejo.
Acción: es antagonista de la porción medial del frontal. Atrás en sentido inferior la piel del
espacio interciliar.
Músculos de la oreja
Los músculos de la oreja se dividen en músculos in trínsecos, que pertenecen
enteramente a la oreja y músculos extrínsecos, que se tienen desde la oreja a las regiones
vecinas.
o Buccinador:
Forma, situación y trayecto: aplanado, ancho e irregularmente cuadrilátero, está
situado en la parte profunda de la mejilla, entre el maxilar y la mandíbula y la comisura de
los labios.
El buccinador está cubierto por la fascia bucofarín gea, que es densa y fibrosa
posteriormente pero delgada y celular en la parte anterior.
Acción: tiran posteriormente de las comisuras labiales y alargan la hendidura bucal.
Pueden determinar la expulsión del aire contenido en el vestíbulo, que es lo que produce
en la acción de soplar o silbar. Pueden también empujar el contenido hacia los arcos
dentarios, ayudando a la masticación, o hacia el centro de la cavidad bucal; de esta
manera intervienen en la formación del bolo alimenticio.
Forma, situación y trayecto: son dos pequeños haces situados en el espacio triangular
entre los dos depresores del labio inferior.
Acción: Se confunde con la del elevador del labio superior y del ala de la nariz.
o Cigomático Menor
o Cigomático Mayor
Inserciones y descripción: nace mediante fibras aponeuróticas cortas de la cara lateral del
hueso cigomático, cer ca de su ángulo posterior, inferiomedialmente a la inserción del
cigomático menor. Desde ahí, el músculo desciende oblicuamente inferi or y medialmente,
cruza a distancia el músculo buccinador, del que está separado por el cuerpo adiposo de
la mejilla y se inserta en la piel y en la mucosa de la comisura de los labios.
o Risorio
Forma, situación y trayecto: es inconstante, extremadamente delgado y triangular, que se
extiende, en la parte media de la mejilla, desde la región meseterina a la comisura de los
labios.
Patología
Introducción
La Parálisis Facial Periférica a Frigori o Parális is de Bell fue descrita por primera vez por
el médico inglés Charles Bell (1829) de cuyo apellido toma su nombre, es la causa más
común de parálisis facial aguda. Su incidencia es de 20 a 30 casos por 100 mil personas
al año. Está considerada dentro de las primeras causas de atención médica en Caja
Nacional de Salud tanto en la consulta en el primer nivel como en los servicios de
fisioterapia.
(frontal, orbicular y peribucal) con evidente deterioro de la mímica tanto superior como
inferior de la cara.
En la parálisis supranuclear central, los músculos frontal y orbicular del ojo se encuentran
mucho menos afectados que los de la parte baja de la cara, ya que los músculos faciales
superiores están inervados po r vías corticobulbares provenientes de ambas cortezas
motoras, mientras que los músculos faciales inferiores están inervados sólo por el
hemisferio opuesto. En las lesiones
Fisiopatología
La parálisis de Bell acompaña a la presencia del DNA del virus herpes simple tipo 1 en el
líquido endoneural y músculo auricular posterior, lo cual sugiere que la reactivación del
virus en el ganglio geniculado pudiera ser la causa del trastorno. Sin embargo, no se ha
corroborado la participación casual del virus recién mencionado, en la parálisis de Bell.
También se reportó una mayor incidencia de parálisis de Bell entre los receptore s de la
vacuna intranasal desactivada para influenza, se formuló la hipótesisque esto podría
deberse a la enteroxina de escherichia colis, usada como coadyuvante o a la reactivación
del virus latente.
Diagnóstico diferencial:
Hay muchas causas de parálisis facial aguda que deben considerarse en el diagnóstico
diferencial de la parálisis de Bell.
La enfermedad de Lyme puede causar parálisis facial uní o bilateral; en áreas endémicas,
es probable que el 10% o más de los caso s de parálisis facial se deban a la infección con
Borrelia Burgdorferi. El síndrome de Ramsay-Hunt, causado por la reactivación de Herpes
Zoster en el ganglio geniculado, consiste en parálisis facial grave acompañada de una
erupción vesicular en el conducto auditivo externo, a veces también en la faringe y otras
regiones tegumentarias craneales; a menudo se afecta también el octavo par craneal.
Epidemiología
La forma más común de la parálisis facial es la llamada parálisis de Bell. La incidencia
anual de este trastorno idiopático se sitúa en aproximadamente 25 casos por 100.000
personas al año o en promedio una de 60 personas durante toda la vida.
La incidencia entre hombres y mujeres es similar, con presentación bimodal en las edades
de 20 a 29 años y de 50 a 59 años. La mujer en edad reproductiva es afectada dos a
cuatro veces más que el hombre de la misma edad, y la mujer embarazada 3.3 veces más
que la que no lo está.
Manifestaciones clínicas
Embriología
Los estudios embriológicos han demostrado que el desarrollo de la cara y el del cerebro
tienen un origen común, por lo que la cara es un marcador cualitativo, cuantitativo y
topográfico del desarrollo del siste ma nervioso central. Este elemento es importante para
entender algunas patologías, especialmente las malformaciones del recién nacido.
Los músculos cutáneos faciales dependen de los sist emas nerviosos voluntario,
involuntario, reflejo y automáticoreflejo. Todos es tán inervados por el facial, excepto uno,
el elevador de los párpados, que está inervado por el par III. Las relaciones funcionales
entre el sistema nervioso voluntario y el sistema involuntario son estrechas y se ejercen en
ambos sentidos.
Las variaciones del medio exterior actúan excitando al organismo y hacen que intervengan
los sistemas nerviosos voluntario y automático-reflejo. Finalmente,
Tratamientos
Tratamiento Quirúrgico
La lesión del NF sea por cirugía (yatrógena) o por fracturas del hueso temporal ameritan
una solución quirúrgica, pudiendo realizar una sutura término-terminal. Si esta lesión
ocasionó la pérdida de un fragmento se puede realizar un rerouting con la disminución del
trayecto del nervio para que pudieran entrar en contacto los cabos proximal y distal; en
este caso se puede realizar también un injerto con un fragmento de otro nervio como
pueden ser el auricular mayor o el nervio sural. Si no existe posibilidad de realizar la
reconstrucción nerviosa en la zona lesionada se puede recurrir a una anastomosis, la más
utilizada es la hipogloso-facia l (XII-VII); en esta técnica se diseca el hipogloso y se sutura
su cabo proximal al cabo distal del nervio facial.
Tratamiento Médico
El tratamiento sintomático incluye: 1) la oclusión del ojo durante el sueño para impedir que
se seque la córnea, y 2) el masaje de los músculos debilitados. Un ciclo de
glucocorticoides, como prednisona en dosis de 60 a 80 mg/ día durante los cinco primeros
días, disminuyendo luego la dosis durante los cinco días siguientes, parece que acorta el
periodo de recuperación y mejora de manera modesta el pronóstico funcional. Un estudio
aleatorio publicado en fecha reciente no encontró un beneficio adicional con aciclovir (400
mg cinco veces al día por
10 días) en comparación con prednisona sola para el tratamiento de la parálisis aguda de
Bell; se desconoce el valor de valaciclovir (dosis usual 1000 mg/día por cinco a siete días),
solo o combinado con glucocorticoides.
o Blink réflex: también llamado reflejo del guiño, proporciona información sobre el
estado de la conducción canalicular.
Prueba de Hilger: es una prueba que mide la conducción nerviosa por electrodo de
superficie, comparando la del lado sano con la del lado enfermo, y la del facial superior
con la del facial inferior.
hidratarse el ojo.
o Prueba de Blatt: esta prueba, que estudia la secreción salival, cada vez se utiliza menos, e
incluso equipos la han abandonado.
El número de sesiones no puede determinarse por ant icipado, sino que depende de la
recuperación. La frecuencia de las sesiones suele ser mensual durante 3 meses, y más
tarde, cada 3 meses, hasta conseguir u n equilibrio facial que sea reconocido tanto por el
paciente como por el terapeuta.
Tratamiento Kinésico
0: ninguna movilidad de la porción de piel observada a simple vista o con luz rasante
sobre la terminación cutánea profunda del músculo;
1: movilidad de la porción de piel una vez que se da la orden de
movimiento;
voluntaria
Metodología
a) Tipo de investigación
Enrique Vera Barros de la Ciudad Capital de La Rioja, en el periodo de marzo a julio del
2011.
Conclusión
En el presente trabajo que lleva como nombre “Tratamiento Kinésico de la Parálisis Facial
Periférica de Bell”, se pudieron c oncretar los objetivos planteados.
De las fichas kinésicas, los síntomas mayoritarios de las personas afectadas son: dolor de
cabeza, pérdida de la sensibilidad de la hemicara, sialorrea, dificultad para comer, beber y
hablar.
Al responder sobre la edad los entrevistados coincidieron que son pacientes mayores de
35 años de edad, y con respecto al sexo, para cuatro de ellos el más afectado es el
masculino, y sólo uno de ellos acotó que trató a ambos sexos por igual número.
Con este trabajo se demuestran los beneficios del tratamiento kinésico y sus etapas, para
tratar la parálisis facial, en pacien tes de 45 a 65 años de edad, de ambos sexos; que
concurrieron al nosocomio, antes mencionado, de la cuidad capital de La Rioja.
Por último cabe destacar la importancia del rol del Kinesiólogo en el tratamiento de la
enfermedad, como así también en la reintegración del paciente en la sociedad.
Bibliografía