Tratamiento
Lógicamente, dependiendo del tipo de
enfermedad que se tenga, se administrará un
tratamiento u otro. Hay veces en las que es
suficiente usar un anestésico que calme los
dolores y esperar a que el sistema inmune
restablezca el problema. Asimismo, en
ocasiones en las que la enfermedad sea más
grave será necesario la utilización
de antivirales o antibióticos Por ello, es
primordial acudir a un especialista; por su
parte, el dentista es un profesional que
también es capaz de detectar la posible
existencia de una enfermedad de transmisión
sexual en el paciente.