- NTRODUCCIÓN
Las propiedades térmicas de los alimentos resultan de interés durante las operaciones de
transformación y procesado de alimentos en la industria alimentaria. Una de estas propiedades
es la difusividad térmica, definida como una medida de la rapidez del cambio de temperatura
cuando hay calentamiento o enfriamiento.
La difusividad térmica es una propiedad importante que nos sirve de mucho en la realidad para
poder crear, optimizar, adecuar o mejorar un proceso de producción dependiendo de las
características específicas del alimento; también se pueden diseñar máquinas especializadas
basándose en esta propiedad.
II.- OBJETIVOS.
El tratamiento térmico de alimentos a temperaturas altas es uno de los procesos más efectivos
para la conservación de alimentos y es el más ampliamente utilizado para atender la creciente
demanda de alimentos a nivel mundial.
El tratamiento térmico debe ser realizado de manera que permita la comercialización del producto,
sin peligro de que ocurra un deterioro por microorganismos. Por otro lado, un tratamiento térmico
no debe ser excesivo, pues puede causar alteraciones físicas y pérdida importante del valor
nutritivo en el alimento.
Los principales objetivos de la aplicación de un tratamiento térmico a un alimento son:
existen varios grados de conservación por calentamiento, y no todos los alimentos comerciales
conservados mediante calor están estériles, entre los cuales destacan:
- cocinados.
su objetivo es hacer más potable el alimento. puede hacerse con calor seco (temperaturas mayores
a 100°C) como en el horneado y el tostado; con calor húmedo o al vapor y mediante aceites
calientes o freidura.se considera un método de preservación pues los alimentos cocidos y no
recontaminados duran más que los crudos pues al cocinar se reducen los microorganismos y se
inactivan las enzimas, se reducen además las toxinas, se aumenta la digestibilidad del alimento, y
se alcanzan texturas, colores y sabores deseables.
- escaldado
es un tratamiento térmico entre 95 y195 °C que dura varios minutos, y se aplica a sistemas
tisulares como etapa previa a otras operaciones como la congelación, enlatado, liofilización o
secado. Previa a la congelación se busca la destrucción de enzimas que afectan el color, sabor y
contenido vitamínico. hay dos enzimas ampliamente distribuidas en diversas plantas que son
resistentes al calor: la peroxidasa y la catalasa. La medida de su ausencia de actividad se usa
normalmente como indicador de la efectividad del escaldado.
- pasteurización
Para el caso de la leche se usan métodos de alta temperatura – coto tiempo (siglas HTST en inglés)
a 72° C por 15 de aja temperatura – largo tiempo (LTLT) a 63°C por 30 minutos.
- La esterilización
es un proceso en donde se aplican temperaturas superiores a 100 °C, en el orden de los 115 a 121
º C por tiempos variados y su objetivo es la destrucción de todos los organismos viables que
puedan ser contados por una técnica de recuento o cultivo adecuados y sus esporas, así como los
que pueden deteriorar al alimento, proporcionando una vida útil superior a los 6 meses. Existen
técnicas de esterilización denominada HTST (High Temperature Short Time), entre las cuales
podemos indicar a la UHT (Temperatura Ultra Alta).
3.1.2.- Influencia del tratamiento térmico sobre las características nutritivas y sensoriales.
Bajo el punto de vista de la alteración microbiana se considera como indefinida la vida útil del
producto siempre que se mantenga la integridad del envase. Los cambios físico-químicos que
tienen lugar durante el procesado y el almacenamiento son, por consiguiente, los factores que
determinan la calidad del producto en términos tanto de propiedades sensoriales como de aporte
de nutrientes al consumidor. Las reacciones se producen durante el propio proceso y en el
almacenamiento posterior (Rees y Bettison, 1994).
Las reacciones físicas y químicas que se producen durante el procesado pueden ser deseables o
no deseables, y resultan con frecuencia más importantes y ciertamente mucho más rápidas que las
que tienen lugar durante el almacenamiento (Rees y Bettison, 1994).
3.1.3.- VALOR F
Ball introdujo el símbolo F para designar el equivalente en minutos a 121.1ºC (250ºF) de las
letalidades combinadas de todas las integraciones tiempo-temperatura en el punto de
calentamiento más tardío para un producto durante su tratamiento térmico. Así, el valor F es una
medida del efecto letal total sobre los microorganismos que tiene un tratamiento térmico. El
término Fc indica el valor F en el centro de un envase, F0 indica el valor F equivalente en minutos
a 121,1ºC y z = 10ºC; y Fs la letalidad integrada del calor recibido por todos los puntos en un
recipiente (Rees y Bettison, 1994). Fi es el tiempo a cualquier otra temperatura equivalente a 1
minuto a 250ºF. (Stumbo, 1973).
De los estudios de Esty y Meyer (1922) y Townsend (1938); citados por ICMSF (1980), se deduce
que el tiempo requerido a 121ºC (250ºF) para que, en un tampón fosfato, la población preexistente
sufra 12 reducciones decimales es de 2.45 min. El valor F0 para el Clostridum botulinum en
cualquier otro medio de calentamiento, exige su determinación experimental mediante el uso de
envases inoculados (ICMSF, 1980).
3.2.- ENVACES
Corrosión externa: el revestimiento de estaño no ofrece una garantía absoluta de protección contra
condiciones desfavorables de corrosión. Con el paso del tiempo, los procesos de obtención de la
hojalata han variado, antes consistía en sumergir la lámina de acero en un baño de estaño fundido
y así se obtenía una hojalata con gran recubrimiento de estaño. (YRINAHURTADO, MARTINEZ
,1999.)
3.2.2.- VIDRIO
La utilización del vidrio como material de envase para los alimentos se remonta como mínimo a
dos milenios. El vidrio para envase comprende las botellas, frascos, jarros, tarros y vasos. Los
sectores de aplicación son diversos y abarcan una amplia gama de productos comestibles:
líquidos, conservas, etc. En muchos sectores la competencia de otros materiales, en especial los
papeles y los plásticos, resulta evidente.
Resistencia mecánica. Es uno de los materiales más resistentes que existen. Esta elevada
resistencia corresponde a una gran rigidez de la red vítrea. Sin embargo, la alta rigidez
impide una elasticidad local que permitiría al vidrio reaccionar de manera flexible a las
exigencias mecánicas y explica, en parte, su fragilidad básica.
Propiedades térmicas: El vidrio es un aislante térmico mejor que los metales y posee
cierta inercia térmica teniendo en cuenta su capacidad calorífica, que puede aprovecharse
para mantener un líquido frío o un producto alimenticio caliente.
Propiedades ópticas: La transmisión de la luz del espectro visible representa una
característica fundamental del vidrio, y su transparencia constituye por cierto la
propiedad más atractiva de este material ampliamente utilizado en la industria del
empacado para mejorar la presentación de los productos alimenticios.
Transmisión de rayos ultravioleta (UV): Los rayos UV dañan las moléculas orgánicas.
Una alta dosis de ellos, podría afectar el sabor de los comestibles. Los vidrieros han
logrado exitosamente elaborar vidrios industriales con gran poder filtrante sin opacar el
material ni modificar siquiera su color en el espectro de luz visible.
3.2.2.3.- Ventajas
Es inerte al contacto.
No presenta el fenómeno conocido como "migraciones" de monómeros y aditivos hacia
el producto.
Es ideal para ser reutilizado.
Es 100 % reciclable. (1 TM/ 1.2 TM).
3.2.2.3.- Desventajas
Es uno de los materiales más costosos dentro de los usados para envases, tanto en su
producción, distribución y recuperación.
En el proceso de producción los envases de vidrio utilizan mucha energía.
Riesgos de rotura que pueden generar cortes y lastimaduras a distintas personas a lo largo
del ciclo de la vida del envase.
Se estima que una botella de vidrio demora cientos de años en ser depurada por la
naturaleza.
Las propiedades térmicas de los alimentos son de considerable importancia in la ingeniería para
los procesadores de alimentos, dado que ellas gobiernan los cambios de temperatura en procesos
que involucran la transferencia de calor, procesos tales como, calentamiento, enfriamiento, secado
y congelamiento (JIMENEZ y KASAHARA, 1991; PELEG, 1983; SINGH y HELDMAN 1998).
Junto con otras características físicas como la densidad, viscosidad, forma y tamaño, ellos son de
gran importancia en el diseño de equipos y perfiles de proceso. Se incluyen aquí el calor
específico, conductividad térmica, difusividad térmica, emisividad y conductancia de superficie
(PELEG, 1983). Estas propiedades son dependientes de la temperatura, composición química del
producto y estructura física (URBICAIN y LOZANO, 1997).
Los datos de conductividad térmica de alimentos como una función del contenido de humedad es
una de las primeras propiedades requeridas para modelar procesos involucrando transferencia de
masa y energía. Ejemplos típicos son, los procesos de secado, re-hidratación, almacenamiento,
etc. (LOZANO et. al., 1979).
La conductividad térmica de la grasa es más baja que la del agua, al igual que la conductividad
térmica del aire; altos niveles de grasa oaire atrapado disminuiría consecuentemente la
conductividad térmica de un alimento. Esto tiene un gran impacto en las tasas de calentamiento y
enfriamiento, como también en la eficiencia de los procesos (PELEG, 1983).
La conductividad térmica de líquidos puede incrementarse con la presión, pero decrece con un
incremento de la concentración de solutos (PELEG, 1983). Para medir esta propiedad en sólidos
se han desarrollado numerosas técnicas experimentales muchas de las cuales son válidas para
rangos de temperatura y productos alimenticios específicos, las que se pueden agrupar en las de
flujo de calor en régimen estacionario y no estacionario. A su vez, la variación de la conductividad
térmica experimentada en diferentes alimentos se refiere a las diferencias en su composición;
además estas diferencias parecen ser también originadas por la procedencia de los diferentes
productos (JIMENEZ y KASAHARA, 1991).
α = K δ/Cp
Entre los métodos más importantes se tiene los métodos indirectos de predicción, y los métodos
directos de predicción como el método de la historia de temperaturas, la sonda de conductividad
térmica, el método de Dickerson (Serpil y Servet, 2009).
DENSIDAD
La densidad (δ) es la masa (m) de una sustancia o de un alimento contenido en una unidad de
volumen (V). En el sistema internacional de unidades la densidad se expresa en Kg/m3.
δ = 𝑚 /𝑉
Los jugos de cítricos contienen una enorme diversidad de compuestos químicos, pero los más
abundantes son los azúcares o hidratos de carbono. Los hidratos de carbono constituyen más del
80% de la materia soluble de los jugos de cítricos, un 10% de ácido (cítrico) y sus sales, el resto
corresponde a compuestos nitrogenados, vitaminas, elementos minerales y otras sustancias
solubles en agua. Con propósitos de control de calidad se determina la cantidad de sólidos solubles
(Bartholomew y Sinclair, 1951).
Los componentes internos (sólidos solubles, ácidos orgánicos y jugo) y el aspecto de la cáscara
(color e integridad) son muy importantes para la calidad de la fruta cítrica. La maduración interna
avanza desde la periferia hasta el corazón, con disminución de la clorofila y ácidos y aumento de
carotenoides, jugo y sólidos solubles (Salaya y Gonzalo, 2004).
Desde el punto de vista químico, la parte comestible de las frutas está compuesta aparte de agua,
por azúcares, ácidos orgánicos, polisacáridos de diferente naturaleza, y por otros compuestos
como proteínas, lípidos y vitaminas. Entre los constituyentes mayoritarios en los jugos, se
encuentran los carbohidratos, ácidos orgánicos y compuestos fenólicos. (Bengoechea et al., 1997).
y = ax + b
donde las constantes b (ordenada en el origen) y a (pendiente) dependen del tipo de sistema que
se estudia y, a menudo, son los parámetros que se pretende encontrar.
El método más efectivo para determinar los parámetros a y b se conoce como técnica de mínimos
cuadrados. Consiste en someter el sistema a diferentes condiciones, fijando para ello distintos
valores de la variable independiente x, y anotando en cada caso el correspondiente valor medido
para la variable dependiente y. De este modo se dispone de una serie de puntos (x1,y1), .... (xn,yn)
que, representados gráficamente, deberían caer sobre una línea recta. Sin embargo, los errores
experimentales siempre presentes hacen que no se hallen perfectamente alineados
(ver Fig. 1). El método de mínimos cuadrados determina los valores de los parámetros a y b de
la recta que mejor se ajusta a los datos experimentales. Sin detallar el procedimiento, se dará aquí
simplemente el resultado:
Fig. 1
donde n es el número de medidas y Σ representa la suma de todos los datos que se indican. Los
errores en las medidas, se traducirán en errores en los resultados de a y b. Se describe a
continuación un método para calcular estos errores. En principio, el método de mínimos
cuadrados asume que, al fijar las condiciones experimentales, los valores yi de la variable
independiente se conocen con precisión absoluta (esto generalmente no es así, pero lo aceptamos
como esencial en el método). Sin embargo, las mediciones de la variable x, irán afectadas de sus
errores correspondientes, si ε es el valor máximo de todos estos errores, entonces se tiene:
Será aquella en la que la función de ajuste será una función exponencial del tipo
y = a.bx
Será aquella en la que la función de ajuste sea una función potencial del tipo:
y = a. xb
Considerando las nuevas variables v = log y u= log x resolveríamos la regresión lineal entre
ellas de forma que si el resultado fuera: v*= A +B u
El ajuste logarítmico calcula el ajuste de los mínimos cuadrados mediante puntos usando la
siguiente ecuación:
donde a y b son constantes y ln es la función de logaritmo natural. Este modelo requiere que x >
0 para todos los puntos de datos. Para este cálculo, Spotfire usa un método de regresión no lineal.
Como resultado, el cálculo será más preciso que si se usa una regresión lineal solo de valores
transformados.
X.- BIBLIOGRAFÍA
LOZANO, J.; URBICAIN, M.; ROTSTEIN, E., 1979. Thermal conductivity of apples As a
function of moisture content. J. Food Sci.
PELEG, M., 1983. Physical Properties of Food. AVI Pubhising Company, INC. Westport,
Connecticut.
SINGH, P.; HELDMAN, D., 1998. Introducción a la Ingeniería de los Alimentos. Editorial
Acribia, S.A. Zaragoza. España.
URBICAIN, M.; LOZANO, J., 1997. Thermal and Reological Properties of Foodstuffs. In:
VALENTAS, R.; ROTSTEIN, E.; SINGH, P., 1997. Handbook of Food Engineering Practice.