SUMILLA .-
-La regla gral es que la sociedad de gananciales luego del divorcio se divide 50 50.
Esta regla la aplicó el Juez de 1ra Instancia.
En 2da instancia se resolvió a favor del apelante (el padre) con la PERDIDA de
los GANANCIALES en el caso del cónyuge culpable (la madre) para lo cual (el
padre) ARGUMENTANDO que la cónyuge incurrió en adulterio y por ello ha
sido infectada con VIH (Virus de la Inmunodeficiencia Humana) y se ha valido
de diferentes medios y artimañas como abandonar el domicilio conyugal,
privándole de sus hijos, violando el régimen de visitas en colusión con la abuela
quien tenía la tenencia; con autorización y conocimiento de la madre
Según la interpretación del Art. 345-A Código Civil (TERCER PLENO CASATORIO
CIVIL) la ADJUDICACIÓN DE BIENES tiene la naturaleza de una obligación legal,
cuya finalidad es corregir un evidente desequilibrio económico e indemnizar el daño a
la persona, resultante de la separación de hecho o del divorcio.
En este contexto cabe señalar que todo pronunciamiento de la Corte Suprema debería
ser vinculante. Una de las funciones del recurso de casación es la “uniformadora”,
mediante la cual se busca unificar decisiones, brindando respuestas únicas a casos
idénticos.
Ya en la CASACIÓN los tribunales sostienen que la SENTENCIA DE VISTA emitida
por sala de apelaciones NO SE ENCUENTRA DEBIDAMENTE MOTIVADA conforme
a las normas vigentes por cuanto si bien el juez de primera instancia determinó que la
demandante tiene la condición de cónyuge perjudicado y en consecuencia, ha
dispuesto adjudicarle el cien por ciento (100%) del inmueble de la sociedad de
gananciales a favor de la demandante.
En segunda instancia la Sala Civil dispone que el demandado abone por concepto de
indemnización de daños y perjuicios la suma de diez mil nuevos soles (S/.10,000.00).
Se considera que al no haberse realizado la liquidación de las gananciales no es
posible adjudicar el bien a favor de la demandante, con lo que la SENTENCIA DE
VISTA vulnera lo prescrito en el artículo 345-A del Código Civil, puesto que, no se
establece la premisa citada por la Sala Civil, que previamente se realice una
liquidación de gananciales.