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Se considera genocidio, según la Real Academia Española, al exterminio o eliminación sistemática de un

grupo social por motivo de raza, de etnia, de religión, de política o de nacionalidad.

A lo largo de la historia, distintos genocidios han marcado la vida tanto de un país como de todo el mundo,
al dejar pérdidas sociales irremediables y crisis económicas y políticas totalmente devastadoras por las
que se necesitarán décadas y décadas para poder arreglar la situación.

Características de los genocidios

El genocidio es aquel delito internacional que incluye cualquier destrucción total o parcial de un grupo
nacional, religioso, racial o étnico por medio de actos perpetrados como la matanza o la lesión grave de
la integridad, tanto física como mental, de las personas que forman parte de ese grupo.

Otro nombre que suele recibir esta palabra es “crímenes contra la humanidad”, debido a que suelen ser
asesinatos de masas con el fin de eliminar algún determinado grupo diferente a lo que aquella sociedad
impone y que, en algunos casos, se ha llegado a planear distintos medios para evitar el nacimiento de más
personas que pertenecerían a ese grupo marginado.

Por esta y muchas otras razones es que se considera al genocidio como el acto más grave y más extenso
dentro de lo que se denomina como limpieza étnica. Su objetivo es que un país o territorio pueda ser
capaz de eliminar la presencia de ciertas personas que son consideradas inferiores o distintas por las
personas dominantes o con poder de dicha sociedad; la mayoría de los casos ocurre por una diferencia en
lo religioso o lo racial.

Se dice que a lo largo de la historia, si se suman todas las muertes como resultado de los distintos
genocidios que acontecieron, se podría llegar a un número mayor a 60 millones de personas.

Los sujetos que llevan a cabo estas acciones suelen ser los gobiernos que se encuentran a cargo del poder
del Estado y debido a que es considerado un delito internacional, cualquier otro país tiene la capacidad
de juzgar a dicho organismo sobre sus acciones e intentar frenar lo que acontece.

Origen de la palabra genocidio

Esta palabra proviene del griego genos que tiene como significado la raza, tribu o nación. En cuanto a la
raíz de esta palabra, –cida, significa matar. Raphael Lemkin, un abogado de Polonia, consejero del
Departamento de Guerra de los Estados Unidos durante la Segunda Guerra Mundial y a su vez judío, fue
quien creó este término. Luego del exterminio de los judíos de la mano de los nazis, Lemkin se dedicó a la
lucha por la creación de leyes que puedan ser capaces de castigar las prácticas realizadas con estas
características.

No obstante, la definición de genocidio no es del todo precisa. Juristas afirman que el genocidio se difiere
de lo relacionado a la guerra debido a que su objetivo es exterminar al otro y no simplemente desarmarlo.
A su vez, se diferencia del asesinato en serie debido a que este último es un asesinato de un grupo de
personas, pero que se realiza de manera aislada; en cambio, el genocidio niega por completo el derecho
de existencia de ese determinado grupo.

(El Holocausto)

Sin duda alguna, el genocidio armenio y el Holocausto (aquel realizado por los nazis) fueron los más
relevantes a lo largo de la historia, debido a la cantidad de muertos y las formas trágicas en que las llevaron
a cabo.

A continuación se mencionan estos y otros genocidios que marcaron la historia mundial:

El genocidio armenio tuvo lugar durante los años 1915 y 1917 y fueron asesinadas un millón y medio de
personas.

El Holocausto, en cambio, tuvo una mayor cantidad de muertos, un número que supera los seis millones.
El Holocausto se lo conocía por los nazis como la Solución Final o el Shoah y su objetivo era la eliminación
de todas aquellas personas que fueran judías y que se encontraran en territorio europeo. El líder de este
plan fue Adolf Hitler y y uno de los métodos que autorizó utilizar fue la asfixia por medio de gases
venenosos, ahorcamientos, disparos, la hambruna y el trabajo forzado.

El genocidio en Ucrania, donde bajo el régimen estalinista hubo entre 3 y 10 millones de personas muertas
debido a la hambruna provocada con esta intención.

El genocidio de Camboya ocurrió entre los años 1975 y 1979 bajo el régimen comunista de los Kherms
Khorn (Jemeres rojos), dirigido por Pol Pot. En esta ocasión, alrededor de dos millones de personas
murieron como consecuencia de sus actos.

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