Generalidades
Este contenido mínimo en cromo es fundamental para que un acero pueda ser
considerado como inoxidable. De hecho, los fenómenos de corrosión de aquellos
aceros situados en ambientes rurales e industriales desaparecen prácticamente
cuando la proporción de cromo como elemento de aleación supera el 12%, mientras
que para contenidos de cromo superiores al 15% el acero ya es resistente a la
corrosión en contacto incluso con atmósferas marinas.
Esta capacidad protectora que el cromo confiere a los aceros se basa en la gran
afinidad que muestra el cromo por el oxígeno. De esta manera, un acero que posea
un alto contenido en cromo al entrar en contacto con un medio oxidante (por ejemplo,
la atmósfera) produce la formación de una finísima capa superficial de óxido de
cromo (Cr2O3), que es impermeable e invisible y que cubre homogéneamente a toda
la pieza de acero, impidiendo que el proceso corrosivo sobre el acero siga
progresando. Este fenómeno se conoce como pasivación del acero.
Los aceros inoxidables son aleaciones de hierro (Fe), cromo (Cr) en un porcentaje en
peso >10,5%, y de carbono (C) cuyo porcentaje debe ser <1,2%. A parte de estos
componentes, a los aceros inoxidables se les complementan con otros elementos
aleantes que les confiere distintas propiedades que serán útiles según el uso a que se
destine el acero.
Entre estos nuevos elementos que se añaden a la composición de los aceros
inoxidables se encuentra fundamentalmente el níquel (Ni), aunque también se suelen
emplear el molibdeno (Mo), nitrógeno (N) o el titanio (Ti), entre otros. Con ellos se podrá
conseguir mejorar las prestaciones de los aceros inoxidables en aspectos tales como
su conformabilidad, mejorar su resistencia mecánica o su resistencia térmica (mejorar
su comportamiento frente a temperaturas elevadas).
Los aceros inoxidables ferríticos muestran una buena ductilidad inicial debido a su
estructura ferrítica, y no son endurecibles baja tratamiento térmico. Sólo pueden ser
endurecidos por deformación plástica en frío, pero con tasas de endurecimiento menor
que los austeníticos y con una pérdida de la ductilidad inicial mucho más significativa.
3. Aceros Inoxidables Martensíticos
La familia de los aceros inoxidables martensíticos está constituída por unos aceros
susceptibles de ser endurecidos por tratamiento térmico de temple y revenido,
alcanzando unas buenas propiedades mecánicas y una aceptable aunque moderada
resistencia a la corrosión (inferior a la de los aceros austeníticos y ferríticos).
Bibliografía:
1) https://ingemecanica.com/tutorialsemanal/tutorialn102.html
2) http://www.uginox.com/es/node/931