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Liderazgo educativo del profesor en el aula

y la personalización educativa
por Emanuele BALDUZZI
Università Cattolica del Sacro Cuore

1.  El concepto de liderazgo za, no exento de dificultades (Hargrea-


Entre las diferentes definiciones del ves, Earl y Ryan 1998, pp. 257 y ss.), que
liderazgo podemos señalar la que Ma- permita crear una escuela de calidad.
nuel Lorenzo Delgado (2005, p. 371) nos Calidad que está íntimamente vinculada
ofrece: «la función de dinamización de un con la de la misma enseñanza (Day y Gu,
grupo o de una organización para generar 2012, pp. 208 y ss.), que debe ofrecer a to-
su propio crecimiento en función de una dos los alumnos la posibilidad de alcanzar

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misión o proyecto compartido». De tal ma- un nivel de conocimiento y de aprendizaje
nera, el liderazgo en cuanto «capacidad de significativos (Domenici, 2011, p. 21) [1],
una persona (o grupo de personas) para de tal manera que la escuela podrá defi-
influir en otras» (Gardner y Laskin 1998, nirse de hecho como «una comunidad edu-
p. 20), necesariamente depende no sólo cativa de alta calidad formativa» (Scurati,

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de la capacidad de elección y de influen- 2002).
cia ejercitada por una o varias personas,
sino también de los horizontes de referen- La pregunta que surge entonces es la
cia escogidos y de la capacidad de orien- siguente: ¿calidad formativa y liderazgo,
tar hacia esos horizontes y conseguir que cómo y en qué medida interactúan?, y
sean compartidos. Es evidente que, tam- por otra parte, ¿es posible hablar de un
bién desde la pespectiva educativa, no to- liderazgo para la educación o liderazgo
dos los horizontes de sentido son igual de pedagógico en la escuela, o simplemente
válidos, ni idóneos para ejercer influencia es suficiente concentrarse en un liderazgo
verdaderamente formativa. administrativo o de organización (es de-
cir, meramente técnico)?
Desde hace cuatro décadas la palabra
liderazgo ha sido invocada cada vez con Antes de analizar el tema, parece im-
más fuerza con la intención de promover prescindible precisar una cuestión esen-
un cambio de orientación en la enseñan- cial para comprender el sentido de nues-
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tra argumentación: a la hora de enfocar el el líder, entendido como una persona úni-
liderazgo desde la perspectiva educativa ca y aislada (Lambert, 1998, p. 9), por lo
no trataremos de definirlo en sus diferen- que «no tiene sentido sin la implicación
tes facetas para después añadirle simple- del profesorado» (Coronel Llamas, 2005,
mente el adjetivo educativo, aplicando ese p. 473).
concepto acrítica y automáticamente a
realidades para las que no fue creado, en Durante los últimos años, una de las
este caso a la escuela. Todo lo contrario: al teorías más en boga sobre el liderazgo en
examinar el contenido de tal concepto, he- el contexto escolar, que cobró fuerza a par-
mos de seleccionar con esmero y precisión tir de 1970, ha sido el liderazgo instructi-
aquello que tiene un sentido formativo, vo (Instructional Leadership). Se centra
sobre todo porque manifiesta en qué con- en definir los principales cometidos de los
siste la educación. Por eso, en este artícu- Directores, destacando tres en particular:
lo nos centraremos en las cuestiones clave la definición de la misión de la escuela, la
que favorecen u obstaculizan el liderazgo gestión del curriculum y de la instrucción
en su vertiente formativa. y la promoción de un clima escolar positi-
vo de aprendizaje (Hallinger, 2003). Por
Presentaremos en primer lugar algu- lo que se refiere a las diferentes tipologías
nas de las principales aportaciones sobre del liderazgo en las organizaciones escola-
el liderazgo educativo en la literatura res [2], hemos de mencionar el liderazgo
científica, a fin de identificar posterior- transformacional —surgido por evolución
mente lo que, en nuestra opinión, connota del liderazgo transaccional—, que busca
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el liderazgo en un sentido verdaderamen- acrecentar el desarrollo y el éxito del sis-


te educativo. Así, desde el análisis teórico, tema escolar —tanto el de la organización
intentaremos iluminar las prácticas típi- como el de las personas— promoviendo
cas que el profesor realiza en su docencia el cambio y el aprendizaje a través de las
cotidiana. diversas metas y capacidades que el líder
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ha de encarnar en su relaciones inter-


personales (Avolio y Bass 2002, pp. 1-6).
2. Liderazgo instruccional y lide- También se debe citar el liderazgo distri-
razgo centrado en el aprendizaje buido, que sería una forma de liderazgo
Para empezar, podemos definir el li- transformacional (Krüger y Scheerens,
derazgo educativo en el contexto escolar 2012, p. 26). Se trata de un enfoque muy
como aquél que tiene la capacidad de im- complejo y articulado, imposible de resu-
pulsar y orientar los múltiples esfuerzos mir en pocas palabras, que se centra más
de los diferentes agentes para favorecer y en las redes de las interacciones, los roles
mejorar los aprendizajes de los estudian- y la distribución de las responsabilidades
tes (Robinson, Hohepa y Lloyd, 2009, p. en las organizaciones escolares, aunque
70). Por eso, el liderazgo educativo es so- no pueda ser «sinónimo de liderazgo com-
bre todo un rasgo de la organización es- partido, participativo, colaborativo, de-
colar (Bolívar, López y Murillo, 2013, p. mocrático o situacional» (Bolívar, López y
21), y está muy lejos de identificarse con Murillo, 2013, p. 33). Igualmente, existe
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el liderazgo integrado, que es la combina- Por todas esas razones, hoy en día
ción del liderazgo transformacional y el algunos autores, al estudiar el liderazgo
liderazgo educativo compartido (Marks y educativo, prefieren hablar de lideraz-
Printy, 2003, p. 394). go para el aprendizaje, centrado en los
alumnos o centrado en el aprendizaje
Volviendo al concepto de liderazgo (leadership for learning, student-centered
instruccional —el que aquí nos interesa— leadership, learning centered leadership)
podemos concretar así sus características en lugar de utilizar la expresión liderazgo
esenciales ya señaladas: 1) ha de gestio- instruccional. Las diferencias más nota-
nar la escuela como una organización bles entre ambos enfoques se hallan reco-
profesional de aprendizaje que defina ob- gidas en una reciente publicación sobre el
jetivos apropiados para todos los alumnos citado tema (MacBeath, Townsend, 2011,
(Earley, 2011, p. 102); 2) ha de potenciar pp. 1246-1247). En ella se considera el
la profesionalidad de los docentes, tanto aprendizaje en un sentido que va mucho
dentro como fuera del aula (Blase y Blase más allá de la pura mejora de los resulta-
2004, p. 164); 3) su éxito depende de la dos de los estudiantes, e implica a todos
capacidad de «interiorización» profunda los «actores» formativos, tanto de dentro
de los objetivos por parte de los profesores como de fuera de la escuela, considerados
(Day et al., 2011, p. 23); 4) podría entrar en su conjunto como creadores y agentes
en crisis si no hay convergencia de las me- de una comunidad de aprendizaje. En
tas y los objetivos individuales con los del este sentido, el liderazgo para el apren-
«sistema» (Hallinger, 2010, p. 66). dizaje podría ser visto como la «evolu-

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ción histórica del liderazgo instruccional»
A la vista de lo expuesto, no es sufi- (Hallinger, 2010, p. 72).
ciente la simple acción de los Directores,
sino que es necesario el compromiso de La comunidad de aprendizaje de la
todos los «actores» escolares, y sobre todo que venimos hablando hay que situar-

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de los profesores, para alcanzar un nivel la en el marco «organización que apren-
óptimo de aprendizaje en la escuela: sin de», idea desarrollada por Peter Senge
una participación profunda de estos últi- en un célebre libro (1992, pp. 14-21). De
mos, el liderazgo directivo (en todas sus las cinco disciplinas de la organización
facetas) es ineficaz. Por eso, el liderazgo inteligente que propone —pensamien-
vertical, que vaya de arriba abajo, debe to sistémico, dominio personal, modelos
complementarse con el horizontal. Ade- mentales, aprendizaje en equipo y cons-
más, y ésta es una de las cuestiones más trucción de una visión compartida—, nos
destacadas, el liderazgo ha de estar vin- interesa en particular esta última, porque
culado y comprometido con el aprendiza- atañe a las «visiones del futuro» que todo
je, y hay que medir el liderazgo educativo grupo humano va definiendo. El acto de
analizando su impacto en los aprendizajes liderazgo surge ante todo como «un prin-
de los estudiantes, aunque sea una reali- cipio para inspirar (literalmente “insuflar
dad difícil de valorar y evaluar (Robinson, vida”) a la visión de las organizaciones
2011, p. 8). inteligentes» (p. 419), y se presenta ope-
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rativamente «como la capacidad de una 3. El significado de la educación


comunidad humana para dar forma a su personalizada y la tarea del profesor
futuro» (Senge et al., 2000, p. 21). Por tan- Anticipo que voy a considerar como
to, se rechaza con fuerza la figura de líder sinónimos, aunque implique simplificar
carismático y no se piensa sólo en los altos el problema, personalización educativa y
directivos. Esas ideas han sido adaptadas educación personalizada, pues se enraí-
al contexto educativo en otro libro (Senge zan en la misma realidad: la persona hu-
et al., 2000). Es imposible abordar aquí mana y su singular capacidad de mejora a
las diferentes cuestiones tratadas en él través de la educación, es decir de forma
por los diferentes autores, pero me parece única e irrepetible [3]. Desde la perspec-
que las resume muy bien esta frase: sub- tiva didáctica, Massimo Baldacci (2005,
rayar la importancia de unos horizontes 15), al profundizar en el concepto de per-
de valores, metas e ideales compartidos, sonalización, nos recuerda que «cada su-
tanto en el conjunto de una escuela como jeto tiene determinadas inclinaciones in-
en sus diferentes aulas en concreto (pp. telectuales y, por lo tanto, (...) desarrolla
71-73; 175-176), los cuales surgen gracias (...) actitudes peculiares (...). En este mar-
a las contribuciones de todas las personas co de conjunto se busca promover lo que
que participan en el proceso de aprendi- diferencia cualitativamente a un alumno
zaje (incluidos por supuesto también los de los demás, y (...) caracteriza su singu-
alumnos). laridad. La personalización constituye la
traducción operativa de esta intención».
Necesariamente, toda comunidad de
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aprendizaje se funda sobre todo en las De hecho, el profesor tiene la misión


personas que actúan, no sólo en su mera de perseguir, no sólo objetivos cognitivos y
estructura global u organización formal. formativos comunes para todos, sino tam-
Por ello, es conveniente plantearse las si- bién la de acoger y estimular un proceso
guientes preguntas: ¿Cuáles deberían ser formativo abierto a las cualidades y habi-
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las finalidades y los horizontes de sentido lidades propias de cada alumno. El proce-
más destacados en una comunidad esco- so de personalización consiste en apoyar
lar? ¿Qué metas nos permitirían identi- un itinerario de maduración de la origina-
ficar cuál es el liderazgo auténticamente lidad antropológica —escogido y concebi-
educativo? De hecho, no es suficiente uti- do en función de la unicidad e irrepetibili-
lizar como criterio el aprendizaje, sino que dad de cada sujeto—, cuyo fundamento es
se impone también determinar el sentido la capacidad del ser humano para actuar
educativo del mismo (y en virtud de él jus- libremente, por lo que implica la genera-
tificar el liderazgo en el contexto escolar). ción de algo nuevo e imprevisible (en el
Personalmente, creo que el carácter edu- sentido definido por Hannah Arendt).
cativo del aprendizaje depende en buena
medida de la personalización educativa, Una de las aportaciones más destaca-
ya que ésta es la meta más significativa bles sobre este tema nos la ofrece Víctor
que la escuela debería plantearse. García Hoz. Según este autor, y de for-
ma sintética, la educación «es una forma
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de vivir humana que prepara al hombre manera colaborativa, compartida, co-cons-


para vivir cada vez más humanamente. truida— puede ser relevante, por encima
Es la capacitación para responder a todas de todo, con vistas a la realización perso-
las exigencias de la vida humana» (Gar- nal de todo ser humano en formación. Po-
cía Hoz, 1990, p. 30). Por eso, la educa- ner en marcha un proceso educativo de tal
ción personalizada «responde al intento calado constituye el principal reto del li-
de estimular a un sujeto para que vaya derazgo para el aprendizaje, pues implica
perfeccionando su capacidad de dirigir su un esfuerzo colectivo y común que cada co-
propia vida» (García Hoz, 1981, p. 16), o munidad escolar ha de llevar a cabo tam-
dicho de otra manera es el «perfecciona- bién para definir su peculiar identidad en
miento intencional de la persona humana tanto que escuela, definiendo de tal forma
mediante la propia actividad consciente y también su misión educativa.
libre» (García Hoz, 1993, p. 35). De donde
se deriva que, entre las diferentes finali- Surgen entonces otras posibles pregun-
dades y objetivos de los centros escolares, tas, como las siguientes: ¿una educación
destaca la de «ofrecer igualmente la posi- personalizada necesita algo más que bue-
bilidad de desarrollar progresivamente el nos profesores y/o educadores? ¿En qué
propio criterio para tomar decisiones efi- sentido, en las escuelas, las buenas prác-
caces y dignas, referentes tanto a la vida ticas educativas deben estar vinculadas al
escolar cuanto a la vida profesional y per- liderazgo? Y, sobre todo, ¿qué aportación
sonal» (García Hoz, 1975, p. 19). La tarea educativamente relevante realiza la pre-
del profesor es esencial en este despliegue sencia del liderazgo en el trabajo concreto

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personal, porque «la educación personali- de los profesores en el aula?
zada se realiza en la vida del estudiante a
través de la relación personal con el pro-
fesor» (García Hoz, 1988, p. 28), y conlle- 4. ¿La personalización educativa
va un estilo docente bien definido. Entre reclama el liderazgo o es suficiente
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los que dicho autor nos presenta, uno me solo una buena práctica educativa?
parece muy interesante para la circuns- En este apartado no me referiré a la
tancia actual: el estilo reflexivo y creador. escuela en su conjunto como comunidad
Para orientarse hacia una educación per- de aprendizaje, sino que me centraré so-
sonalizada de los alumnos y contribuir a bre todo en el peculiar rol del docente en
ella, el profesor, en cuanto educador, ha de ella. En el verdadero liderazgo educativo
reflexionar «sobre sí mismo» (García-Hoz, los profesores participan activamente y de
1988, p. 38), en busca de una mayor au- modo relevante en el proceso de definición
toconciencia de la potencialidad formativa de las metas de la escuela y contribuyen
de los actos que integran su labor diaria. mediante sus clases a realizar y desarro-
llar los valores con los que la escuela se
¿Qué implica tal cosa? Implica una ple- identifica, al igual que manejando y ar-
na conciencia de lo que ha de ser educa- monizando las relaciones interpersonales
tivamente relevante en el crecimiento de complejas y múltiples dentro y fuera del
los alumnos, de lo que —por supuesto, de aula.
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Emanuele BALDUZZI

No obstante, por diversos motivos, es Se discute muy a menudo sobre la im-


sobre todo a la labor docente cotidiana y portancia de los fines y las metas en las
al trato personal con los alumnos a los que escuelas, lo que indudablemente resulta
el profesor ha de prestar atención. En pri- una cuestión esencial. El mismo interés
mer lugar, porque «en el aula necesitamos debería aplicarse también a aclarar si
buenos educadores más que líderes (...). esas metas son también educativas, pre-
Pues bien, aún quedándonos solo con el li- guntándose por qué lo son (si concebimos
derazgo moralmente bueno no terminaría la escuela como un espacio de formación
de identificarse, ni de asimilarse, con la en un sentido profundo y no sólo al servi-
educación» (Gil, Buxarrais, Muñoz y Re- cio de la mera transmisión de información
yero, 2013, pp. 119-120). El profesor, por y contenidos). Ahora bien, no basta con
supuesto ni ha de ser considerado como proponer a los estudiantes unos horizon-
tal, ni tampoco ha de querer ser un líder tes de sentido para que de inmediato se dé
según el sentido clásico de la palabra, es el liderazgo educativo, pues éste consiste
decir, alguien a quien los demás recono- en «el arte de influir sobre las personas
cen dotes carismáticas o capacidades de para que trabajen con ilusión en la con-
comunicación, persuasión e influencia ex- secución de fines que merezcan la pena»
traordinarias y excepcionales. (Sonnenfeld, 2011, p. 169).

Sin embargo, ¿es posible ejercer lide- La personalización educativa constituye


razgo sin ser líder? En un cierto sentido una meta educativa «que merece la pena»,
general no: el liderazgo se identifica con porque no se agota en el simple dominio de
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el líder, y sin un líder no existiría. El li- las habilidades concretas que posee cada
derazgo educativo, en cambio, se apoya sujeto. Para mejorar sus aptitudes y las
en los educadores, no sólo en el líder en predisposiciones personales, además hay
su sentido clásico, e incluso puede darse que lograr que el alumno adquiera y desa-
sin él. Es decir, lo que justifica a un lide- rrolle las habilidades que le permitan cono-
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razgo educativo es propiamente el sentido cerse mejor y comprender su plena realiza-


educativo de la acción, que necesariamen- ción como ser humano, profundizando en la
te ha de ser expresada por una persona, búsqueda de su auténtica maduración. Lo
pero ella tiene que ser antes que nada un natural para la persona es identificar antes
educador, no un líder. Tal liderazgo existe de todo la finalidad que la sostiene en la
cuando hay una persona que busca sobre existencia, y después buscar el camino más
todo el bien del otro, y por esa razón se ha- adecuado para su realización.
bla también del servant leadership, cuyo
fundamento es el deseo de servir (Green- De tal manera, existe una vinculación
leaf, 2002, p. 27). De ello se deriva que el profunda entre personalización educati-
liderazgo educativo implica escoger las fi- va y liderazgo por diferentes razones. La
nalidades en función de su relevancia for- primera es una finalidad esencial para
mativa, y la personalización es sin duda la escuela, y su logro es posible en parte
una de las más importantes. gracias al aporte del liderazgo, pues éste
influye en la definición de la misión de la
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Liderazgo educativo del profesor en el aula y la personalización educativa

escuela y de sus finalidades más relevan- allí donde él no quiere ir, forzando así su
tes. Por otra parte, el liderazgo conlleva libertad y violando su intimidad?
un proceso de «dinamización» e «interio-
rización» que los profesores asumen para
orientarse personalmente hacia esas me- 5. El aporte peculiar del liderazgo
tas, fomentándose así el aporte peculiar en el liderazgo educativo del profe-
de cada profesor. Además, el verdadero sor dentro del aula
liderazgo considera no sólo la escuela en El contenido de este apartado está prin-
su conjunto, sino también la singularidad cipalmente pensado para mostrar la contri-
de sus integrantes (tanto de los profeso- bución del liderazgo del profesor en el aula
res como de los alumnos, activando y va- en un contexto muy definido: los últimos
lorando sus aportaciones específicas). En años de la escuela secundaria superior ita-
este sentido la personalización educativa liana (equivalentes al bachillerato español),
—que implica el esfuerzo de proteger y es decir, el ciclo de estudios que abre la posi-
cuidar las cualidades peculiares de cada bilidad de matricularse en la Universidad.
sujeto— necesita el liderazgo para vol-
verse algo real. Finalmente, destacaré un ¿Cómo puede el profesor ejercer el li-
último punto, que a mi juicio es el más sig- derazgo educativo en su aula? Éste tiene
nificativo. En la práctica, como he subra- muchas vertientes, pero voy a referirme a
yado, el liderazgo debe centrarse especial- las siguientes:
mente en el aprendizaje de los alumnos.
Por su parte, la personalización educativa 1)  Con su liderazgo, el profesor

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estimúla el «perfeccionamiento intencio- contribuye de diversos modos a la de-
nal de la persona humana mediante la finición y al desarrollo del proyecto
propia actividad consciente y libre» (Gar- educativo compartido en el seno de la
cía Hoz, 1993, p. 35). Ello implica una vin- institución escolar dentro de la que tra-
culación profunda entre liderazgo y perso- baja. En primer lugar, en el nivel orga-

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nalización educativa, ligada a un proceso nizativo, participando en el conjunto de
de aprendizaje verdaderamente formativo sus actividades en función de su expe-
en el que se tengan en cuenta no sólo los riencia, sus competencias y su rol. Las
conocimientos, las actitudes y las compe- metas perseguidas serán también el re-
tencias especificas —hoy en día muy con- sultado de un trabajo en equipo —con
sideradas—, sino también el crecimiento los demás actores, dentro y fuera de la
armónico y unitario de la persona humana escuela—, algo a lo que todo profesor
durante el mismo proceso de aprendizaje. debe contribuir activa y responsable-
mente. Sus relaciones interpersonales
Sin embargo, cabe preguntar: ¿qué serán determinantes para definir y
puede añadir de peculiar el liderazgo a la lograr en la mayor medida posible los
acción educativa? Y sobre todo, ¿el lide- objetivos que se quieran alcanzar.
razgo no conllevaría una cierta forma de
«violencia»?, es decir ¿al influir en él, no 2)  En el contexto del aula, el lide-
se manipularía al educando para dirigirlo razgo del profesor se aprecia cuando
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Emanuele BALDUZZI

intenta buscar la eficacia y el éxito la escuela quiere fomentar, por ejem-


de su trabajo, es decir, estimular el plo cuando no tienen respeto hacia los
aprendizaje personal de los estudian- demás compañeros. En este sentido, el
tes, objetivo siempre muy problemáti- liderazgo del profesor en el aula ha de
co y complejo, quizás imposible de de- ser un liderazgo moral. Elio Damiano
finir en sí mismo y de medir en sentido (2010, p. 154) lo expresa así: «En el
estricto. Sin embargo, tener conciencia caso del profesor (...) la ética debe ser
de lo que se ha hecho y su incidencia percibida como el rasgo distintivo de
positiva o negativa en la formación de su profesión». El liderazgo ético impli-
los alumnos es esencial para contri- ca ejercer una influencia que se oriente
buir al éxito en el proceso de enseñan- hacia unos valores y busque la asun-
za-aprendizaje. ción de la responsabilidad por parte de
todos, lo que el profesor en primer lu-
Tal cosa sólo puede darse si en clase gar ha de reflejar en sus acciones (do-
es posible descubrir y compartir, entre tándolas así de sentido educativo) y ha
profesores y alumnos, metodologías de promover en los estudiantes (esa es
sobre la enseñanza, ritmos de trabajo su contribución peculiar del liderazgo).
y, al mismo tiempo, los horizontes de
sentido que se intentan aclarar y pro- 4)  El liderazgo del profesor, y esto
mover. Permitir a los estudiantes par- constituye su rasgo más relevante,
ticipar en la organización del trabajo ha de basarse en una visión positiva
en el aula, en la medida en que ello del porvenir de los estudiantes, ha de
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sea posible, para construir desde abajo trasmitir energía y confianza ante los
y todos juntos un proceso de aprendi- retos futuros. El liderazgo del profesor
zaje compartido es algo esencial con en el aula no implica sólo constatar lo
vistas al liderazgo del profesor. Para que ocurre, sino también empujar a
el docente, influir no puede equivaler los estudiantes a buscar siempre una
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siempre a «ejercitar influencia» mecá- mejora, hacerles creer en la posibili-


nica y directa, sino que debe intentar dad de éxito, darles una nueva meta
descubrir cómo «ejercitar en el aula de desarrollo personal, aunque no la
una influencia compartida» con los estén buscando. Al «influir» no puede
alumnos. Es inevitable actuar así si se inmiscuirse de manera arbitraria en la
busca algo más que la asimilación de vida del alumno, sino todo lo contra-
aprendizajes predefinidos, si se aspira rio: lo hará buscando la promoción y
a promover un proceso de elaboración el desarrollo de unas potencialidades
personal de los conocimientos que sea personales que han de ser protegidas y
fruto de una acción conjunta. activadas. Favorecer al estudiante es
promover lo que me permite ser mejor
3)  El liderazgo tiene que ver tam- que antes, aquello que, si no se esti-
bién con la capacidad de «influir» sobre mula, frenará su maduración huma-
los alumnos cuando éstos descuidan na. Por eso, como nos enseña Romano
las verdaderas metas educativas que Guardini (1987, p. 236) debemos tener
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Liderazgo educativo del profesor en el aula y la personalización educativa

siempre en cuenta que «la primera 6. Un ejemplo concreto de lide-


cuestión, gracias a la cual el educador razgo del profesor: el POF italiano
ayuda al educando, consiste en poseer (Piano dell’offerta formativa)
la firme convicción de tener un desti- En Italia, todo lo que he dicho, se mate-
no, y una posibilidad de éxito». rializa sobre todo en la escuela en el POF,
es decir, el Piano dell’offerta formativa.
Esas metas son esenciales también Como se lee en la página web del Minis-
para un educador y para la formación tero della Pubblica Istruzione, «Il Piano
en general, por lo que el liderazgo se dell’offerta formativa è la Carta d’identità
caracteriza y se identifica sobre todo della scuola: in esso vengono illustrate le
por la exigencia efectiva de la mejora linee distintive dell’istituto, l’ispirazio-
personal del alumno, que, de modo ne- ne culturale-pedagogica che lo muove, la
cesario, va buscando. Sin duda, en una progettazione curricolare, extracurrico-
relación educativa los efectos visibles lare, didattica ed organizzativa delle sue
son importantes, pero no agotan todas attività». (El POF viene a ser la creden-
sus dimensiones, de modo que una ac- cial de una escuela: determina los rasgos
ción formativa bien orientada, aunque distintivos de esa institución, el proyecto
no tenga éxito, no pierde por comple- pedagógico-cultural que la guía, su diseño
to su valor. El liderazgo, sin embargo, curricular y extracurricular, la didáctica
se manifiesta casi por completo en los y la organización de sus actividades) [4].
efectos, y si éstos no se dan, no se po- Por eso, la autonomía de las escuelas se
dría hablar de verdadero liderazgo. Ha refleja precisamente en su contenido.

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de comprometerse, en particular, con
los efectos alcanzados, aunque siem- En este artículo, es conveniente poner
pre desde una perspectiva educativa. de relieve una cosa: aunque suele haber un
grupo concreto de profesores que se ocupa
5)  El liderazgo del profesor em- de redactar ese POF, los valores y los idea-

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puja a los alumnos a ejercer un lide- les expresados en él son debatidos y son
razgo en primera persona, haciendo fruto de las demandas y contribuciones de
que participen en las actividades de todos los profesores y directivos de la Escue-
clase, tomen conciencia de las poten- la, realizándose así un trabajo de liderazgo
cialidades e inclinaciones personales compartido, orientado a definir las metas y
(algo inherente al proceso de persona- el plan de trabajo de la misma escuela. Por
lización educativa), sepan ejercer una otro lado, su realización efectiva depende
influencia positiva sobre sí mismos y en singular medida de la acción del profesor
los demás, preocupándose por la clase en el aula y de su capacidad de liderazgo.
como comunidad de aprendizaje, y se Es en este instante cuando se aprecia que
beneficien de las oportunidades que el el liderazgo educativo es importante. Para
liderazgo pueda ofrecerles para buscar aclarar ese punto recurriré a un ejemplo.
y dar sentido a su propia existencia.
Toda escuela expresa con claridad en
el POF sus metas y objetivos educati-
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vos. En muchas instituciones se valoran dado que el Director y los profesores se


metas ligadas a virtudes cívicas (como reúnen con las familias para declarar
el respeto, la tolerancia, la participación los principios en función de los cuales
responsable), e incluso se definen los ras- orientarán sus acciones formativas en
gos operativos de la educación para la ciu- la práctica diaria de la enseñanza, y
dadanía que la escuela intenta promover. las familias pueden pronunciarse so-
Es indiferente, no obstante, si lo hace de bre ellos.
forma explícita exponiendo un diseño di-
dáctico, o sólo se alude a ciertos valores En efecto, al principio las metas
como la tolerancia, el pluralismo, la acogi- educativa son definidas por el Director
da, u otros ya reseñados. con su equipo de trabajo, quienes esta-
blecen unas finalidades que definen la
El liderazgo educativo en el aula del identidad de la escuela; en un segundo
profesor es muy necesario y tiene diferen- momento, esas mismas finalidades han
tes vertientes, sobre todo si se ejerce ante de ser discutidas con todos los profeso-
una clase con jóvenes que tienen entre 16 res —en Italia el conjunto de los pro-
y 19 años. He elegido este preciso momen- fesores que se reunen para participar
to del proceso escolar porque la madurez en las decisiones sobre la escuela se
y el desarrollo de los alumnos permiten llama Collegio docenti— para que sean
debatir con sentido crítico y de modo par- compartidas, precisadas y en su caso
ticipativo sobre los asuntos y cuestiones también redefinidas. Por último, son
vitales que guardan relación con las ma- presentadas a las familias y las apor-
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terias humanísticas. taciones, consejos y dudas que los pa-


dres expresan se intentan incorporar a
1)  En primer lugar, con su lideraz- la redacción final del documento, que
go, el profesor orienta e impulsa a los luego se publicará en la página web de
alumnos hacia esas metas. Al princi- la escuela.
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pio, no son los alumnos los que las eli-


gen y definen. El liderazgo del profesor Cabe, pues, hablar de liderazgo
implica también aclarar a los estu- educativo, en cuanto con esta práctica
diantes el sentido formativo de las mis- se busca estimular una participación
mas, y justificar el porqué han sido es- activa de todas las personas de la co-
cogidas. En este momento, el liderazgo munidad educativa, y en particular
implica: a) aclarar y explicar el sentido porque la meta que en todo momento
de lo que se propone, y b) fomentar la se busca es profundizar en el sentido
participación activa de los estudiantes, educativo de las mismas metas.
despertando su sentido crítico.
2)  El liderazgo del profesor, en un
En su conjunto, la escuela como or- segundo momento, ha de permitir a los
ganización e institución participa de estudiantes participar en el proceso de
esa función mediante el llamado Pat- definición concreta de las metas forma-
to di coresponsabilità scuola-famiglia, tivas, dentro del contexto específico del
150
Liderazgo educativo del profesor en el aula y la personalización educativa

aula. Su traducción operativa en la cla- educativo no consiste en encaminar a


se, inicialmente, es siempre planteada los alumnos hacia un horizonte cual-
por un profesor, que sin embargo debe- quiera, sino hacia un horizonte forma-
ría contar con los estudiantes a la hora tivo que permita una mejor autocom-
de incorporarlas a la realidad docente prensión personal, algo que sólo una
del día a día. Por ejemplo, si se toma el verdadera personalización educativa
respeto a los demás como ideal educa- permite alcanzar.
tivo, habría que discutir sobre: qué sig-
nifica, cómo vamos a mostrarlo y qué 3)  El liderazgo del profesor es en-
actividades deberíamos promover para tonces, en efecto, un liderazgo com-
ello en el aula. El liderazgo se extiende partido, pues sirve para construir un
en un sentido horizontal e implica a la horizonte común y compartido, y ha
totalidad de los alumnos, que con sus de aceptar y respetar lo que de for-
diferentes aportaciones contribuyen a ma conjunta ha sido descubierto. Por
su efectiva realización. Como se puede eso, el verdadero liderazgo educativo
ver, la participación de los estudiantes implica un gran esfuerzo por parte de
es clave también en el proceso de per- todos, sean profesores o alumnos, pues
sonalización educativa cuando sus ini- depende por completo de que quien en-
ciativas se orientan a buscar el sentido seña y quienes aprenden valoren algo
de las relaciones interpersonales y de compartido. El liderazgo educativo
la existencia con los demás, cuestiones significa también asumir la respon-
esenciales en todo proceso de mejora sabilidad de lo que estamos haciendo,

año LXXIII, nº 260, enero-abril 2015, 141-155


personal de cada sujeto. algo en lo que el profesorado debe dar
particular ejemplo. El ejemplo que da
En concreto, el profesor y los alum- el profesor es una forma de testimonio
nos llegan a un acuerdo escrito sobre imprescindible, pues permite concre-
la definición de respeto y los compro- tar del mejor modo ese liderazgo que

revista española de pedagogía


misos esenciales que cada persona ha ejerce para el bien de los alumnos: a
de respetar en su vida escolar. Ade- través de él, lo hace entregando su
más, se ofrece la posibilidad a los es- propia persona, pues son los valores
tudiantes de redefinir, cada mes, por encarnados en un actuar virtuoso los
ejemplo, lo que se ha elegido y com- decisivos para ejercer una verdadera
partido, a fin de fomentar una toma influencia educativa.
de conciencia cada vez más profunda
y auténtica. El liderazgo educativo del Además, para asumir la propia
profesor se aprecia en particular cuan- responsabilidad todo profesor debe ne-
do intenta vincular la comprensión de cesariamente tomar conciencia de su
las aportaciones conceptuales con las misión, dar explicaciones y aclarar las
conductas manifestadas, subrayando razones propiamente educativas de lo
su relevancia en el proceso de persona- que está haciendo. De ello se deriva un
lización y maduración humana. Como estilo de liderazgo que, en cuanto bus-
se puede ver una vez más, el liderazgo ca una identidad educativa, orienta a
151
Emanuele BALDUZZI

los estudiantes hacia al pensamiento [4] http://archivio.pubblica.istruzione.it/argomenti/


ético y la reflexión crítica, suscitados autonomia/pof/default.shtml, última fecha de
por cada profesor de diferente forma, consulta 16. V. 2014.
gracias a la escucha activa de las nece-
sidades de los alumnos.
Bibliografía
Por todo lo expuesto se puede decir ARENDT, H. (2008) Vita activa (Milano, Bom­
que, si la educación personalizada, como piani).
he dicho antes, «responde al intento de
estimular a un sujeto para que vaya per- AVOLIO, B. J. y BASS, B. M. (2002) Developing
feccionando su capacidad de dirigir su Potential Across a Full Range of Leadership.
propia vida», ésta requiere no tanto un Cases on Transactional and Transformational
liderazgo genérico sino precisamente uno Leadership (Mahwah, Lawrence Erlbaum As-
que sea en verdad formativo. sociates).

Dirección para la correspondencia: BALDACCI, M. (2005) Personalizzazione o indivi-


Emanuele Balduzzi. Doctor europaeus dualizzazione? (Trento, Erickson).
en Pedagogía de la Universidad Católica
de Milán. Departamento de Pedagogía. BLASE, J. R. y BLASE, J. (20042) Handbook of
Largo Gemelli 1, 20123 Milano (Italia). Instructional Leadership. How Successful
E-mail: emanuele.balduzzi@unicatt.it. Principals Promote Teaching and Learning
(Thousand Oaks, Corving Press).
año LXXIII, nº 260, enero-abril 2015, 141-155

Fecha de recepción de la versión definiti-


va de este artículo: 10. IX. 2014. BOLÍVAR, A., LÓPEZ, J. y MURILLO, F. J.
(2013) Liderazgo en las instituciones educati-
vas. Una revisión de líneas de investigación,
Notas Revista Fuentes, 14, pp. 15-60.
revista española de pedagogía

[1] Además, tenemos en mente el No Child Left Be-


hind Act, aprobado en 2001 por los EE.UU. CORONEL LLAMAS, J. M. (2005) El liderazgo del
profesorado en las organizaciones educativas: te-
[2] Una interesante exposición de las diferentes máticas para su análisis e investigación, revista
perspectivas y autores es la de MARZANO, WA- española de pedagogía, 232, pp. 471-490.
TERS y MCNULTY, 2005, pp. 13-27.
DAMIANO, E. (2010) La competenza etica degli
[3] Resulta imposible definir en unas pocas páginas, insegnanti, en XODO, C. y BENETTON, M.
teniendo también en cuenta su recorrido histori- (eds.) Che cos’è la competenza? Costrutti epis-
co, el concepto de persona. Una exposición sin- temologici, pedagogici e deontologici (Lecce,
tética del argumento, pero precisa y detallada, Pensa MultiMedia) pp. 151-161.
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Research to Results (Alexandria, Association
cativa
revista española de pedagogía

for Supervision and Curriculum Development El sentido del liderazgo educativo en la


and Aurora, Mid-continent Research for Edu- escuela es algo muy analizado y debatido,
cation and Learning). en particular en los países anglojasones.
El objetivo de este artículo es ofrecer al-
ROBINSON, V., HOHEPA, M. y LLOYD, C. (2009) gunas aportaciones sobre el carácter for-
School leadership and student outcomes: Iden- mativo inherente a él, pues no parece ra-
tifying what works and why: Best evidence syn- zonable hablar sobre el simple liderazgo,
thesis iteration (BES) (Wellington, Ministry of y después simplemente añadir el ajetivo
Education). educativo. Por eso, tras definir el llamado
liderazgo instruccional y el centrado en el
ROBINSON, V. (2011) Student-Centered Leaders- aprendizaje, que son las propuestas más
hip (San Francisco, Jossey-Bass). en boga hoy en día, se estudia la verdade-
ra naturaleza del liderazgo educativo que,
SCURATI, C (2002) Introduzione. Sentieri di di- en opinión del autor, ha de valorar y bus-
rezione, en FALANGA, M. (ed.) La leadership car la personalización educativa durante
154
Liderazgo educativo del profesor en el aula y la personalización educativa

el proceso de aprendizaje. El liderazgo es tional remarks about this concept as it is


educativo, por tanto, si se enraíza en me- reductive to limit the matter to provide an
tas formativas bien definidas y se concre- idea of leadership and then match it with
ta en las acciones que en su labor diaria the adjective educational. Accordingly af-
lleva a cabo el profesor. Son éstas, ante ter defining the characteristics of Instruc-
todo, las que permiten alcanzar un éxito tional Leadership and then of Leadership
educativo durante el proceso de aprendi- for Learning, the most widespread pro-
zaje. Tal hecho se ilustra por referencia al posals at the moment, we will look into
contexto escolar italiano y a cómo el lide- the real nature of Educational Leadership
razgo educativo del profesor tiene cabida which, according to the author’s thought,
en el POF (Piano dell’offerta formativa) y must study and promote the educational
puede encauzarse a través de él. personalization of any learning process.
The Leadership gets Educational if it
Descriptores: Liderazgo instruccional, aims at precise educational targets and if
liderazgo para el aprendizaje, liderazgo it is carried out through specific choices
educativo del profesor, personalización edu- of the teacher in the class activity. The-
cativa, enseñanza secundaria superior en se particular choices can be reasonably
Italia. credited with the good results in any lear-
ning process. This could be made clear
with an example drawn from the Italian
Summary: school system: the Educational Leader-
Educational leadership of the class- ship of the teacher might become mani-

año LXXIII, nº 260, enero-abril 2015, 141-155


room teacher and educational per- fest within POF that’s piano dell’offerta
formativa, in other words the plan of the
sonalization educational/learning activity.
The idea of Educational Leadership
in the school is a very important and of- Key Words: Instructional leadership,

revista española de pedagogía


ten investigated concept, in particular in leadership for learning, educational
the Anglo-Saxon countries. The purpose leadership, educational personalization,
of this passage is to suggest some educa- learning in the Italian Secondary school.

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