El relato y la fábula.

CD0103
Los siete contra Tebas y Prometeo encadenado
Laura Estefanía Castro Cruz
17 noviembre 2018 (regularización)

Los siete contra Tebas.

Fábula:

Eteocles, rey de Tebas se enfrenta a la invasión de la ciudad

a cargo de su hermano Polínices, cumpliéndose así la profecía

realizada por Erinis dada a su abuelo Layo, la cual le advirtió

que no tuviese hijos porque de hacerlo, su descendencia

llegaría hasta la tercera generación), lo cual implicaría el

encuentro a muerte entre los dos hermanos, anteriormente Edipo,

su padre, después de haberse dado cuenta de que había matado a

su padre (Layo) y de haberse sacado los ojos, profetizó que

éstos (Eteocles y Polínices) recibirían su herencia mediante

el acero (p. 89).

Relato:

La obra inicia cuando Eteocles está entrando al Ágora y se

encuentra con el coro de jóvenes tebanas que están lamentándose ante

la inminente invasión de las tropas de Cadmo lidereadas por

Polínices, hermano de su rey; veremos pues el único enfrentamiento

activo de Eteocles en el momento en que las hace callar con el

objetivo de que el lamento de éstas no contagie de miedo a los

ciudadanos.

El desarrollo de la obra se sitúa cuando entra el Mensajero y da

cuenta a Eteocles de la invasión que está ocurriendo en Tebas

mediante el ataque de las 7 puertas de la ciudad mismo que está a

cargo de los mejores soldados cadmeos entre ellos Polínices, hermano

del rey. El Mensajero narra la situación a Eteocles nombrando a cada

uno de los invasores en las respectivas 7 entradas de Tebas (al ser

narración todo lo que informa el Mensajero está en obscenia).

Durante el informe hay intervenciones del coro de tebanas que le

advierten a Eteocles no enfrentarse a su hermano asegurándole que si

se enfrenta al invasor del a séptima puerta (el cual es Polínices)

no sobrevivirá ninguno de los dos:

… no existe vejez de esta mancha…

Eteocles no hace caso del coro y sale al encuentro de su hermano en

la séptima puerta.

Aunado a la advertencia del coro dada a Eteocles, éstas comienzan a

enumerar las profecías emitidas por Erinis y cuentan cómo ésta le

advirtió a Layo (abuelo de Eteocles y Polínices) que no tuviese hijos

porque, de hacerlo, su descendencia moriría en la tercera generación,

además, profiere el coro que su padre Edipo, al tomar conciencia de

que fue asesino de su padre (Layo) y que contrajo nupcias con su

madre (Yocasta) y después de haberse sacado los ojos, profetizó que

sus hijos recibirían su herencia mediante el acero (p. 89).

Después, entra el Mensajero a calmar al coro y anuncia que la calma

está de vuelta en Tebas al haber vencido a los invasores sin embargo,

durante el enfrentamiento, Eteocles, su rey y Polínices su hermano,

se dieron muerte a la entrada de la séptima puerta, a lo que el coro

dice:

… la descendencia de Edipo… caídos ya en el polvo…

¡Oh negra y ya cumplida maldición de Edipo y de su estirpe!

… perduraron las desobedientes decisiones de Layo…

Hay un cambio de tiempo y la obra se sitúa en el cortejo fúnebre

donde aparecen Antígona e Ismene, la primera va detrás del cuerpo de

Polínices y la segunda de Eteocles (nos enteramos aquí de que los

hermanos eran gemelos). Entre los lamentos de las hermanas por la

muerte de sus hermanos, entra el Heraldo y dictamina que Eteocles

recibirá entierro digno siendo que Polínices debe ser arrojado fuera.

Antígona establece su postura y se enfrenta al Heraldo anticipando

que ella misma lo enterrará, el Heraldo se lo prohíbe.

Y éste relato da inicio a la fábula que se desarrollará en Antígona.

Prometeo encadenado.

Fábula:

Prometeo desafió a Zeus al dar a los hombres el fuego y la

capacidad de raciocinio para salvarlos ya que, Zeus quería

erradicar a la raza humana. Anteriormente, Zeus, hijo de

Cronos, inicia una campaña para derrocar a su padre del control

total del Olimpo y con la ayuda de Prometeo, gana en su empresa.

Prometeo es castigado por Zeus y condenado a un sufrimiento

constante por haber sido desleal a su mandato, sin embargo,

Prometeo conoce la forma en que Zeus caerá del poder y se valdrá

de su conocimiento para ser librado de su martirio.

Relato:

La obra inicia con Fuerza y Hefesto encadenando a Prometeo,

los cuales, por órdenes de Zeus, son los encargados de ejecutar el

castigo al que fue sometido éste por haber otorgado el fuego a los

humanos. Vemos que Fuerza obliga a Hefesto a ejecutar la sentencia

y mientras que Fuerza enuncia las faltas que cometió Prometeo,

Hefesto duda de su capacidad para encadenar al que dice, es su

pariente.

Después de encadenarlo a una piedra alejada de mortales y sin la

posibilidad de que Prometeo pueda liberarse, se queda sólo éste y

llegan las Oceánides y compadecen a Prometeo, es cuando él anuncia

que aunque Zeus lo castigó, necesitará de él para que le anuncie

como es que perderá el poder en el Olimpo.

Prometeo y el coro (con la estrofa y antiestrofa) comienzan un

diálogo mientras que las Océanides llegan al lugar donde éste está

encadenado. Prometeo empieza a contar el origen de su desgracia

narrando cómo es que llega Zeus al control del Olimpo habiendo

destituido a su padre Cronos del poder con su ayuda pues éste, al

haberse aliado con su madre y mediante engaños, logra que la mitad

de los dioses que apoyaban a Zeus lo llevaran al poder. Cuenta

también cómo es que Zeus, al ya tener el poder total, hizo fueros

en el Olimpo dividiendo a los dioses a los cuales, les dio tareas

específicas por cumplir, exponiendo que, había que eliminar a los

humanos. Es aquí donde Prometeo (todo ocurre en obscenia mediante

narración) defiende a la raza humana siendo el único que sale en su

defensa, Zeus se niega a dejar a los humanos vivos y es cuando éste

toma el fuego y se los regala a los humanos, regalándoles también la

conciencia sobre su muerte y conocimientos para su supervivencia.

Hice que los mortales dejaran de andar pensado en la muerte antes

de tiempo con ciegas esperanzas… pero antes les di el fuego.

Acabando Prometeo su narración, las Oceánides bajan de su carro de

fuego y entra Océano en escena. Se repite la misma acción, es decir,

Océano se lamenta por el infortunio de Prometeo, éste se queja y

después, Océano y las Oceánides se van.

Interfiere el corifeo hablándole a Prometeo asegurando que:

Los mortales han recibido todas las artes de Prometeo.

Como penúltimo personaje, entra Io lamentándose por el destino que

debe sobrellevar. Cuenta a Prometeo cómo es que fue corrida de casa

de su padre y su falta de comprensión al no entender por qué fue

enviada a errar por la tierra. Pide a Prometeo que le cuente el por

qué de su castigo y éste comienza de nuevo a narrar la sentencia de

Zeus anticipando que éste caerá de su poder por su propio hijo el

cual será engendrado de mujer. Io le pide a Prometeo que la ayude y

le cuente cómo dar fin a su martirio y Prometeo le dice a Io que

solo le puede explicar una cosa, ya sea cómo continuará con su exilio

por la tierra o cómo es que caerá Zeus y así será librado. Comienza

Prometeo a darle indicaciones a Io sobre los lugares a los que debe

ir anticipando que su errar será constante, sin embargo acaba también

contando cómo es que nacerá aquel que venza a Zeus y por consecuencia

dará fin a su castigo.

Después de que Io sale de escena, comienza la última intervención

del corifeo con Prometeo en donde éste vaticina cómo caerá Zeus.

Por último llega Hermes a escena y exige a Prometeo que le cuente

con lujo de detalles cómo es que Zeus perderá el poder, Prometeo se

niega y Hermes anticipa al Corifeo que desaparezcan de la escena

para que no vayan a ser víctimas de la furia de Zeus a causa del

silencio de Prometeo. Hermes sale de escena y tiembla.

Prometeo queda solo y narra el estruendo generado en la tierra (su

madre) y termina con lamentándose de nueva cuenta de su situación.