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RESTAURACION DE RIOS Y RIBERAS Marta Gonzalez del Tanago del Rio Diego Garcia de Jalén Lastra ee Og ESCUELA TECNICA SUPERIOR DE INGENIEROS DE MONTES. RESTAURACION DE RIOS Y RIBERAS Marta Gonzalez del Tanago Diego Garcia de Jalén COEDICION eg FUNDACION CONDE DEL VALLE DE SALAZAR EDICIONES MUNDI-PRENSA MADRID, 2001 FUNDACION CONDE DEL VALLE DE SALAZAR ETS. de Ingenieros de Montes Ciudad Universitaria 28040 - Madrid Teléf. 91-3367078 - Fax 91-5439557 GRUPO MUNDI-PRENSA Mundi-Prensa Libros, s.2. Castellé, 37 - 28001 Madrid Tel. 914 3637 00-Fax 915 753998 E-mail: libreria@mundiprensa.es Internet: www.mundiprensa.com Mundi-Prensa Barcelona Editorial Aedos, s.2. Consell de Cent, 391 - 08009 Barcelona Tel.934 88 34 92 - Fax 93487 76 59 E-mail: barvelona@mundiprensa.es Mundi-Prensa México, s.a, de C.V. Rio Pénuco, 141 - Col. Cuauhtémoc 06500 México, D-F. Tel. (+52) -5-533 56 58 - Fax (+52)-5-514 67 99 E-mail: resavbp@data.net mx. Primera edicién: 1998 Fundacién Conde de! Valle de Salazar LS.B.N, 84-86793-74-2 Ediciones Mundi-Prensa LS.B.N. 84-7114-969-9 ‘Depésito Legal. M-8836-2001 Imprime. Joyra ‘No se permite la reproduceién total o parcial de este libro ni almacenamiento en un sistema informatico, ni la transmisién de cualquier forma 0 cualquier medio, electrénico, mecénico, fotocopia, registro u otros medios sin el permiso previo y por escrito de los titulares del Copyright. A Diego, Silvestre y Laura. PRESENTACION Este libro trata de cubrir un vacio bibliografico existente en nuestro pais, dentro del Ambito de la restauracién de los rios y las riberas. Aunque el desarrollo del conocimiento ciemtifico sobre el comportamiento ecol6gico de los rfos asociado al de sus riberas y lanura de imundacién es relativameme reciente, existen ya hoy dia mumerosas investigaciones, publicaciones 0 foros internacionales donde se recogen los conceptos bisicos, y se discuten los problemas y las actuaciones mas adecuadas en cada caso, de los cuales podemos extraer conclusiones que 1nos ayuden a elaborar los proyectss de restauracién. Siendo conscientes del interés creciente sobre la recuperaci6n de los ecosistemas fluviales, fomentado en un marco més amplio de desarrollo sostenible y conservacién de la Naturaleza, hemos querido contribuir a la difusién de estos conocimientos te6ricos y précticos més recientes, presentando en fengua castellana el "estado del arte” y el "saber cémo" de la restauracién fluvial. Colaborar en el desarrollo del conocimiento de nuestros rios y aportar conceptos y técnicas utiles para su restauracion, han sido nuestros Objetivos en la elaboracion de este libro. Con Ia esperanza de haber logrado al menos parte de nuestras intenciones, damos por muy bien empleado todo nuestro esfuerzo. Los Autores. INDICE INTRODUCCION 1.1, Uso y abuso de los ecosistemas fluviales “ 1.2. Necesidad de restaurar y conservar los sistemas fluviales 1.3. Concepto de ecosistema fluvial . . . 1.4, La restauracién de los rios y riberas ANTECEDENTES A LA RESTAURACION Y CONSERVACION DE LOS RIOS Parte I: Principales Componentes del Sistema Fluvial EL RIO Y SU CUENCA VERTIENTE 3.1, El Ciclo hidrot6gico 3.2. Morfologia y Dinémica fluvial EL REGIMEN DE CAUDALES 4.1, Introduecién 4.2. Caracterizacién del régimen de caudales .. . . 4.3. Implicaciones ecolégicas |. MORFOLOGIA Y DINAMICA FLUVIAL Slyilomodueciony a ctescte sata dare 5.2. Morfologia fluvial 5.3. Sedimentos y formas del lecho 5.4. Procesos fluviales . ECOLOGIA FLUVIAL 6.1. Introduccién Jeri " 6.2. Funcionamiento biolbgico de los rios . 6.3. Los macroinvertebrados acuaticos 6.4. Los peces de agua dulce anee i 19 - 24 27 28 . 40 43 45 60 68 83 86 96 14 7. RIBERAS Y LLANURA DE INUNDACION 7.1, Introduccién : 127 7.2. Funciones de la vegetaci6n riparia ¢ interés de su conservacion .... 129 7.3. Descripeién de las riberas . . ieee 7A, El contexto espacial de las riberas y principales earacteristicas .... 137 Parte Ii: Principios bésicos en Ia restauracién de los rfos 8. PRINCIPIOS BASICOS PARA LA RESTAURACION DE RIOS Y RIBERAS 8.1, Introduccién F , 147 8.2. Principios bésicos para la restauracién de los rfos y riberas. 151 9, ETAPAS BASICAS EN LA RESTAURACION DE LOS RIOS 9.1. Introduccién 2 Bee é 169 9.2. Btapas basicas en la restauracién dc los rfos 2 iro 9.3, Discusién 182 Parte Ill: Alternativas y Técnicas para la restauracién de riberas y cauces 10. CAUDALES ECOLOGICOS 10.1. Introduccién ....- ee 187 10.2. Métodos para fijar caudales ecol6gicos = 189 10.3. Método del Habitat Potencial Util... au R103) 10.4. Criterios para seleccionar caudales ecol6gicos 200 10.5. Régimen de caudales ecol6gicos . . . ee 204 11. MEJORA DEL HABITAT FLUVIAL PARA POBLACIONES PISCICOLAS 11.1. Introduccién . . oe. 205 11.2. Planificacidn de las actuaciones de mejora . .. ~ 206 11.3, Evaluacién del hdbitat piscicola ........... - = 207 11.4, Medidas para la mejora del habitat... 2.2.2... 2 11.5. Actuaciones de mejora del habitat... . . AMOI 216 11.6. Seguimiento de las mejoras ae 221 11.7. Consideraciones finales 2 221 12. REVEGETACION DE LAS RIBERAS 12.1. Introduccién: oe 12.2. Papel de la vegetacién en la restauracién y estabilizacién de los cauces . .. . 12.3, Estudio y proyecto de las plantaciones Parte IV: Planificacién y Contenido de los proyectos de restauracién de los rios. 13. PLANIFICACION Y CONTENIDO DE LOS PROYECTOS 13.1. Introduccién 13.2. Medidas legislativas y administrativas . 13.3. Seleccién de los trams a testaurar 14, CONTENIDO DE LOS PROYECTOS DE RESTAURACION DE LOS RIOS 14.1, Organizacién del Proyecto 14.2. Diagnéstico del problema 14.3. Contenido del proyecto de restauracién 14.4. Documentos del proyecto: - Memoria . . - Planos robes = Pliego de condiciones técnicas ~ Presupuesto 15. BIBLIOGRAFIA APENDICE I 223 226 29 257 259 262 . 269 270 273 peat) - 299 - 300 - 300 303 317 AGRADECIMIENTOS Durante la elaboracién del presente libro hemos recibido Ia valiosa colaboracién de numerosas personas, a las que expresamos nuestro mayor agradecimiento. Maria da Graga A.N. Saraiva (Instituto Superior de Agronomia, Tapada da Ajuda, Universidad de Lisboa), ha aportado numerosas ideas, junto a A. Ramos, especialmente en Jos temas relativos a la revegetacién de las riberas fluviales. Richard D. Hey (School of Environmental Sciences, University of East Anglia, Inglaterra) nos ha suministrado una valiosa bibliografia y documentacién propia sobre la morfologfa y dinémica fluvial, y la restauracién de cauces estables con métodos sensibles a la conservacién de la Naturaleza, agradeciéndole vivamente sus comentarios al manuscrito presentado. Geoffrey E. Petts y Andrew R.G. Large (Department of Geography, Loughborough University of Technology, Inglaterra) han ‘prestado una apreciada colaboracién en cl ambito de la descripcién y valoratién de las riberas y lanura de inundacién. A Antoni Palau (Escuela de Ingenieria Agraria, Universidad de Lleida) agradecemos sus aportaciones y comentarios sobre el funcionamiento de los ecosistemas fluviales, ya Mercedes Sainiz de los Terreros su valiosa ayuda y recopilaci6n bibliogréfica ‘A Manuel Molles (Department of Ecology, University of New Mexico en Albuquerque, U.S.A.) queremos agradecer sus sugerencias ¢ ideas discutiendo enfoques y principios de la restauracién fluvial. Igualmente deseamos hacer una especial mencion a Bob Petersen (Stream and Benthic Ecology Group, Limnology Institute, University of Lund, Suecia), por sus notables aportaciones en el Ambito de la restauracién de los rios, agradeciendo muy célidamente su generosidad y ejemplo cientifico Finalmente, queremos expresar nuestro mayor agradecimiento a Juan Manuel Varela y Javier Cachén (Centro de Estudios de Técnicas Aplicadas, CEDEX, MOPTMA), por su colaboracién y ayuda en la claboracién de este documento; al Centro de Estudios y Experimentacién de Obras Publicas (CEDEX, MOPTMA), que ha financiado la Preparaci6n de parte del manuscrito, y a Jose Baragafio (Fundacién Conde del Valle de Salazar, E.T.S.I. de Montes), que ha facilitado su publicacién, 1. INTRODUCCION 1.1, USO Y ABUSO DE LOS ECOSISTEMAS FLUVIALES Los rios han sido los ecosistemas més aprovechados por el hombre a lo largo de su Historia, suministrando agua, pesca, etc. siendo su caracteristica més atractiva la del movimiento unidireccional de la corriente, constituyendo un recurso renovable, un sistema répido de transporte y de remocién de desechos, y una fuente potencial de energia. Son muchas las actividades humanas que alteran los componentes de los coosistemas fluviales (Boon, 1992) (ver Tabla 1.1), y cada vez en mayor medida estas actividades afectan a superficies mayores, a grandes distancias desde donde se producen, y con mayor intensidad en funci6n del creciente poder tecnoldgico y de desarrollo de los paises, Un ejemplo de ello es el efecto de los trasvases, que modifican por completo el régimen de caudales de los tramos afectados (por abstracciGn o incorporacién del agua trasvasada), concebidos para el desarrollo de zonas menos provistas de recursos hidricos pero con cualidades para la agricultura, urbanizaciones, recreo, etc, en un concepto de Sociedad "avanzada" cada dia més en revisién. O el efecto de la contaminacién por deposicidn dcida en muchas masas de agua, procedente de las zonas mas industrializadas Y que tienen su efecto a grandes distancias de donde se originan, creando conffictos entre cuencas y entre paises. Los cambios de usos del suelo por repob!aciones; deforestaciones, urbanizaciones, puestas en regadio, drenajes, etc. alteran el régimen hidrolégico y las relaciones suelo-agua en las laderas, teniendo una repercusién inmediata en los cauces en términos de aportaciones totales, distribucién de las mismas a lo largo del afio, y carga de sedimentos © erosién neta transportada hacia los cauces. 2 Restauracién de Rios y Riberas Pero son las actividades desarrolladas en las proximidades de los cauces, 0 en su interior, las que tienen un impacto mayor y més visible en los ecosistemas fluviales, alterando profundamente la vida acudtica que albergan La regulacién de los caudales mediante embalses es quizés una de las actividades que tiene un efecto més negativo en las comunidades biol6gicas de los rios (Garcfa de Jalén ef al, 1992), siendo muy raro encontrar en nuestro pais, en la actualidad, un rio permanente no regulado. Las canalizaciones, dragados 0 cualquier obra de defensa contra avenidas altera el régimen hidrailico interior del cauce, y destruye la compleja estructura de las orillas naturales, trayendo consigo en la mayorfa de los casos la eliminacién de la vegetacién de ribera y el empobrecimiento de la fauna acustica La agricultura de regadio y. las plantaciones de choperas ocupan con mucha frecuencia en nuestros rios las riberas y Ianura de inundacién de los mismos, llegando hasta la misma orilla del cauce y provocando erosiones de mérgenes y disminucién de la fauna asociada a las aguas, especialmente de las aves. Oo tipo de actividades como la extraccién de éridos, el pastoreo incontrolado en las riberas, la presencia de vertederos, escombreras, incorporacién de vertidos contaminantes, etc. afecta también profundamente al funcionamiento de los ecosistemas fluviales, incorporando elementos t6xicos (¢j. vertidos, escombreras) 0 perturbando las interrelaciones entre el cauce y su llanura de inundaci6n a través del movimiento del agua y Tormacién del sustrato (alterado por ejemplo con la extraccién de dridos), 0 a través de ia vegetacién riparia mediante el intercambio de materia orgénica, regulacién de la energia térmica, etc. (eliminada total o parcialmente por la actividad del pastoreo, entre otras). Introduccién ‘Tabla 1.1.- Principales actividades humanas que afectan a los sistemas fluviales (segiin Boon, 1992) Inter-cuence: Contaminacién atmosférica y Deposicién acida Transvases entre cuencas. Intra-cuenca: Cambios de uso del suelo a) Repoblacién y Desforestacién b) Urbanizacién ©) Desarrollo agricola 4) Drenajes ¢) Vias de infraestructura Actividades en las riberas y llanura de inundacién a) Remocién de la vegetaci6n de riberas b) Obras de defensa contra avenidas c) Dragados y canalizaciones d) Extraccién de dridos ©) Agricultura y Plantaciones de choperas €) Pastoreo e) Actividades recreativas Impactos dentro del rio: 1) Regulacién de caudales (presas) +) Contaminaci6n organica ¢ inorganica ¢) Contaminacién térmica 4) Abstraccién/Incorporacién de caudales ¢) Explotacién de especies nativas £) Introduccion de especies exéticas g) Navegacion 4 Restauracién de Rios y Riberas 1.2, NECESIDAD DE RESTAURAR Y CONSERVAR LOS SISTEMAS FLUVIALES, Hoy dfa, aparece cada vez con més frecuencia entre los cientificos, gestores y politicos, a nivel internacional, el concepto de "desarrollo sostenible”, aceptando la necesidad de adecuar el aprovechamiento de los recursos navurales @ su mantenimiento y conservacién, reconociendo la utilidad, incluso en términos econémicos, de seguir las leyes de la Naturaleza (mantenimiento de los proyectos sin costo adicional) en lugar de contradecirlas (gastos de mantenimiento de los proyectos periédicos, a veces muy superiores a Jos de realizacién de los mismos). La Conservacién de los ecosistemas es hoy dia un Objetivo ampliamente aceptado enel mundo, al menos tedricamente, y asi ha sido recogido por la Unién Internacional para la Conservacién de la Naturaleza y los Recursos Naturales (1980), a través de las principales estrategias propuestas: - Mantener los procesos ecoldgicos esenciales y los sistemas biol6gicos. - Preservar la diversidad genética. - Asegurar un aprovechamiento sostenido de las especies y de los ecosistemas. Son varios los motivos que podemos aludir para justificar la restauracin y conservacién de los sistemas naturales, entre ellos los que aparecen en la Tabla 1.2. En el caso de los sistemas fluviales, su gestién y conservacién para el aprovechamiento sostenido de los recursos que ofrecen exige adoptar una estrategia a nivel de cuenca hidrogréfica, realizando una planificacién de los usos del suelo acorde con la conservacién de los mismos, y teniendo en cuenta las interrelaciones que existen entre los componentes fluviales y los sistemas terrestres que les rodean. Un sistema fluvial ofrece al Hombre no solo "agua", susceptible de ser embalsada y aprovechada para consumo doméstico y en la mayoria de las actividades humanas. El rfo ofrece también toda una serie de recursos y valores cada vez més apreciados (ver Tabla 1.3), cuyo disfrate y conservacion plantean un conflicto de usos del agua, que es necesario considerar en la planificaciGn hidrolégica de cada cuenca, y resolver segiin Objetivos, Criterios de valoracién y Condiciones de partida distintos en cada rfo y, con mayor motivo, muy diferentes de unas cuencas a otras. Introduccion = ‘Tabla 1.2.- Motivos para la restauracién de los ecosistemas naturales (Boon, 1992). 1. Mantenimiento de los sistemas que soportan vida. 2. Valor préctica (ej. control de la erosién, potencial terapetitico, potencial genético para especies cultivadas, etc.) 3, Importancia econémica (ej. minerales, turismo, etc.). 4, Investigacién cientifica. 5. Educaci6n, 6. Valor estético y recreativo. 7. Consideraciones éticas. Tabla 1.3.- Recursos y valores que ofrecen los ecosistemas fluviales naturales. 1. Agua 2. Movimiento y energia . Pesca como alimento y actividad deportiva 4, Vegetacién acudtica y de riberas 5. Fauna silvestre asociada a la presencia del rio 6. Sedimentos aluviales 7. Valor recreativo (bafios, embarcaciones, pic-nic, etc.) 8. Valor paisajfstico 9. Valor cientifico y cultural 6 Restauracion de Rios y Riberas 1.3, CONCEPTO DE ECOSISTEMA FLUVIAL, La necesidad de adoptar en Ia gestién y conservacién de los ecosistemas fluviales una estrategia a nivel de cuenca vertiente se pone en evidencia considerando el origen de Jos caudales que circulan por los rios, consecuencia de los procesos hidrologicos que tienen Jugar en las laderas vertientes El régimen de caudales resultante configura una morfologia de los cauces variable y dindmica, e impone unas caracterfsticas hidratilicas dentro del rio, a las que se adaptan las comunidades biolégicas teniendo en cuenta su variaci6n en el sentido transversal, desde el centro del rio hasta las orillas, y su variacién en el sentido longitudinal, desde la cabecera hasta la desembocadura Superpuesta a la necesidad de considerar la cuenca vertiente como unidad de planificacion y gestién de los sistemas fluviales y recursos hidricos, se plantea el concepto multidimensional del rio, incorporando a las relaciones transversales y longitudinales dentro del cauce, las relaciones en sentido horizontal con el medio terrestre o lanura de inundacién, 2 través de su conexién periédica por avenidas y desbordamientos, paso permanente de agua subterranea, importaci6n y exportaci6n de materia vegetal, movimiento de la fauna asociada, etc; y las relaciones en sentido vertical que presenta con el medio hiporreico, beneficiado por la humedad fredtica y utilizado por numerosas especies que habitan los rios (Figura 1.1) A estas tres dimensiones espaciales del rfo es necesario incorporar una cuarta dimensién, el tiempo (Amorés et al., 1987; Ward, 1989), que tiene especial importancia en las aguas quietas, meandros abandonados, etc., pero que el rio en movimiento rejuvenece de forma constante, retrasando procesos de colmatacién tipicos de sistemas acuaticos sin corriente, aunque ejerza un efecto notable en la geomorfologia, hacia perfiles més estables a escala geolégica. 1.4. LA RESTAURACION DE LOS RIOS Y RIBERAS. Este concepto del rio, como sistema dependiente de su cuenca vertiente, y con las tres dimensiones espaciales unidas al efecto del tiempo antes apuntadas, es el que debe de regir en la gestion y planificacién hidrolégica, y en el diseno de la restauracién y conservacién de los ecosistemas fluviales. Para la restauracién y conservacién de los cauces fluviales habré que tener presente la necesidad de restaurar y conservar no solo la "estructura" de cada componente del rio sino también su “funcién”, permitiendo las interrelaciones mutuas entre ellos. Introduccién 7 Figura 1.1.- Concepto multidimensional del rio, indicando sui conexidn con el medio hiporreico y la ribera, en un contexto espacio-temporal. La estructura atiende a la composicién de elementos fisicos y especies presentes en el rfo, y a su diversidad y disposicién en el espacio, equivalente a lo que podrfamos reconocer en una fotografia "estatica” del sistema fluvial La funci6n se refiere al conjunto de interrelaciones existentes entre Jos elementos y especies que definen larestructura, como mecanismos de funcionamiento que han permitido su aparicién o formacién, o su desarrollo y persistencia, haciendo que dicha estructura se mantenga en equilibrio dindmico y evolucione, siendo equivalente en este caso al movimiento y papel desempeftado por cada uno de los componentes del sistema fluvial, en una representacién filmada del mismo. La restauracién de los rfos y riberas es 0 debe ser una aplicacién multidisciplinar de la Hidrologia y de la Ecologia Fluvial, que podriamos incluir bajo la denominacién de Hidrobiologfa Definiendo estas materias, tradicionalmente la Hidrologia se refiere al estudio del ciclo hidrolégico, tratando de las interrelaciones ¢ interacciones del agua y su entorno 0 cuenca vertiente, teniendo un enfoque més predictivo y analitico. 8 Restauracién de Rios y Riberas La Ecologia Fluvial estudia las interrelaciones de los organismos y su entorno, en este caso del agua o sistema acustico, y es una ciencia més descriptiva y experimental. Estas diferencias de puntos de partida entre hidrélogos (ingenieros) y ecélogos (bidlogos) determinan visiones muy parciales en cada caso de los sistemas fluviales y de Jas posibilidades o significado de su restauracién, como bien se refleja en la Figura 1.2 rs TIPICO INGENIERO TIPICO BIOLOGO (LIMNOLOGO) EN SU HABITAT JSP T pRAbtco EN'SU 08RA ¢ Figura 1.2.- Distinta percepcién del rio del ingeniero hidratilico y del ecdlogo (mbdificado de Gordon er al., 1992 y Osborn y Anderson, 1986). Indudablemente la perspectiva del hidrélogo es muy titil para el disefio de los cauces, proponiendo estructuras estables frente a la fuerza de la gravedad, tensién de arrastre y energia'de la corriente, etc. Atendiendo a las leyes fisicas se pueden deducir formulas 0 modelos teéricos para el célculo de tales estructuras, y en la préctica darles sotucién quitando grados de libertad al rio, para reducir el mimero de variables a calcular o predecir. Introduccion 9 Pero traténdose de un sistema natural como es el rio, en el disefio o restauracién de los cauces no puede obviarse su capacidad para albergar "vida", debiendo tener en cuenta la necesidad de crear habitats fisicos para la fauna, ofreciendo una diversidad de espacios y condiciones hidratilicas titiles para el mayor mimero de especies posibles. Es pues necesario unir a la visién del hidrélogo la perspectiva biolégica de los rios, teniendo asi un enfoque mucho més completo del medio fluvial y mayor informacion para claborar los proyectos de restauracién, tomando siempre ejemplo de la propia Naturaleza. El presente Trabajo se presenta como un documento bisico para proceder a la restauracién y conservacién de los rios, con la perspectiva holistica de Ios ecosistemas fluviales antes apuntada. En la primera parte del mismo se analizan los componentes del sistema fluvial, atendiendo no solo a su estructura sino también a su funcionamiento e interrelacin. As{ se comenta, en primer término, la relacién que.mantiene el rio con su cuenca y, refiriéndonos al propio sistema fluvial, se describen diferentes aspectos de la morfologia y dinémica fluvial, flora y fauna acusticas, y estructura y funcionamiento de las riberas, En la segunda parte, disponiendo del conocimiento de cémo son y cémo funcionan los ros en condiciones naturales, se plantean una serie de principios que deben regir en los proyectos de restauracién, y se desarrollan algunas técnicas o metodologias para llevarlos a cabo, en relacién al establecimiento de un régimen de caudales ecolégico; al establecimiiento de bandas protectoras donde se recupere la vegetacién riparia; y a las posibilidades de mejora del habitat para las poblaciones piscfcolas. En los proyectos de restauracién de los rios, siempre hemos de tener en cuenta el papel de nuestra actuacién, como un paso inicial que acelera el proceso de recuperacisn que harfa el propio rio si cesa la causa de degradacién. En la evaluacién de los mismos, siempre deberemos cuestionarnos la rentabilidad de los trabajos proyectados, frente a la posibilidad de que sea el propio rio el que efecttia el trabajo, buscando un equilibrio natural con su dinémica y condiciones de la cuenca vertiente Amecedentes i 2. ANTECEDENTES A LA RESTAURACION DE LOS RIOS Y RIBERAS La Historia del hombre puede decirse que va unida a la utilizacién més 0 menos intensa de los rfos, aprovechando directamente los recursos que éstos ofrecen (agua, pesca, medio de transporte, energia, recteo, etc.) para multitud de usos, por las diferentes sociedades y culturas. Con el desarrollo de las primeras industrias y el comercio, los rios son intensamente utilizados como medio de transporte, y a tal fin se realizan en los paises mas avanzados de Europa y Norte América, durante los siglos XVIM y XIX, diversos trabajos de canalizaci6n y control del calado mediante Ja estabilizacin de madrgenes.. Progresivamente, y con el aumento de a poblacién y demanda de productos agricolas, se acometen nuevos trabajos de canalizacién afectando ya a rfos pequeiios, con el fin de reducir el espacio ocupado por el cauce fluvial dejando superficies mayores de tierra cultivable, para las cuales en ocasiones es necesario el drenaje del suelo En paises de orografia favorable para ello, el aumento de la demanda de agua se atiende mediante la construccién de numerosas presas y embalses, considerando que la disponibilidad de este recurso es una condicién indispensable para el desarrollo de los pueblos. El aumento y mejora de las vias de comunicacién, el crecimiento de los nicleos urbanos o la creacién de otras estructuras de riesgo de inundacién, obliga al disefio de nuevas canalizaciones, desviaciones del curso natural, rectificaciones, etc. en un afan de controlar a [os rios con herramientas técnicas e ingenieriles Asi se lega hasta mediados de este siglo, con grandes acometidas de transformacién de los grandes rios a escala mundial, siendo un ejemplo de ello el nimero de presas construidas y Ia intensificacion de la regulacién del régimen de los caudales. 2 Restauracién de Rios y Riberas Croome et al. (1976) han estimado que para e] afio 2.000 aproximadamente el 66 % del total del agua que circula por los rios estard controlada por presas y embalses, habiendo sido caleulada por el Comité Internacional de Grandes Presas (1973) una tasa media de construccién de presas a nivel mundial de 2 por dia. Espafia no ha sido ajena a esta regulacién del agua en los rios, teniendo en la actualidad un niimero de presas construido superior a 900 (DGOH, 1986), con una tasa de construccién més acelerada durante los afios 40-60. Asimismo, los trabajos de canalizacién y dragado de los rfos se han acentuado en las titimas décadas, tratando de fomentar el uso de las tierras adyacentes a los rios (llanuras de inundacién) fundamentalmente para la agricultura, fin para el cual también se han acometido trabajos y programas de drenaje de los suelos © puesta en regadio, causando graves problemas de descenso del nivel freético y salinizacién, El resultado de esta sucesiva intervencién humana en Ics rios se ha traducido, a escala global, en una pérdida de las funciones y valores que ofrecen estos sistemas fluviales, afectando dicha pérdida negativamente al hombre y a su cultura dominante actual. De forma progresiva, una tecnologia enfocada al desarrollo y explotacién de los recursos naturalés, imperante en el siglo pasado y primera mitad de éste, va siendo sustituida por unas técnicas y métodos més respetmosos con la Naturaleza, desarrollandose en las ultimas décadas simulténeamente a ellas una tecnologia enfocada especificamente a la restauraci6n, rehabilitacién, mejora o conservacién de los recursos y espacios naturales. En los ecosistemas fluviales, el desarrollo de la ingenierfa hidratilica clésica tiene lugar fundamentalmente en el siglo XIX y principios del XX, en que se acometen las grandes obras de transformacién de los rios. Pero no es hasta los afios 60-70 cuando empiezan a estudiarse los rfos desde un punto de vista biolégico, apareciendo los primeros tratados basicos de Ecologia Fluvial (Hynes, 1960; 1970; Whitton, 1975; Oglesby er al., 1972, etc.). Posteriormente el niimero de investigadores dedicados al estudio de los rios aumenta espectacularmente, asi como ¢l de publicaciones y tratados sobre ecologia fluvial, formulindose teorias ya cldsicas del funcionamiento de los rios (Leopold et al., 1964; Vannotte ef al., 1980) que contribuyen notablemente a la interpretaci6n integrada de los mismos, y a la estimacién de los impactos producidos por las actuaciones humanas, tanto en el plano geomorfolégico como en el de régimen de caudales o sobre las comunidades bioldgicas (¢j. Ward y Stanford, 1979; Petts, 1984; Craig y Kemper, 1987; Brookes, 1988, etc.) Va surgiendo asf una gran bibliografia que documenta las caracteristicas, estructura y funcionamiento de los ecosistemas acuaticos,” sintetizada en obras recientes como la de Naiman y Décamps (1990) y Calow y Petts (1992) entre otras, paralela a la que estima su capacidad de recuperacién frente a’las intervenciones humanas (Yount y Niemi, 1990). Antecedentes 1B Ante el estado de deterioro alarmante en que se encuentran muchos de nuestros rios, surge finalmente una bibliografia especifica de restauracin y conservacién (Boon et al., 1992; Gardiner, 1991; NRC, 1992; Calow y Petts, 1994, eic.), con la cual hoy dia se pueden abordar los trabajos necesarios para la recuperacién de los rios y riberas con una base cientifica, avalada por estudios y experiencias anteriores. Dentro de esta evolucién de los antecedentes bibliograficos relativos a los rfos, es necesario diferenciar la de los estudios de las riberas y lanuras de inundaciOn, mucho mas tardia y reciente, no apareciendo fos primeros tratados de ecologia de riberas hasta finales de los afios setenta (Johnson y Lowe, 1985). El "efecto borde" planteado pot Leopold (1933) en la zona de ecotono formada en la transicién del ecosistema terrestre al ecosistema acudtico, fue inicialmente discutido y elacionado con los ecosistemas ripicolas por Johnson (1978) y Odum (1978), quienes analizaron las interacciones entre especies y los procesos ecol6gicos que tienen lugar en el continuo formado entre los habitats més hiimedos, de mayor profundidad de agua, y los habitats mAs secos, correspondientes a la zona de ladera A partir de entonces, y dado el creciente interés surgido por las zonas de ribera ante su progresivo deterioro, surgen cada vez con més frecuencia reuniones 0 conferencias interdisciplinares para tratar la gestién de los hébitats riparios compatible con su funcionamiento ecolégico y conservacién, plasmados en las publicaciones de Johnson y McCormick (1978), Warner y Hendrix (1984), Johnson er al. (1985) 0 Gresswell et al (1989), Hoy dia es internacionalmepte reconocida ta importancia de las zonas riparias, y si practicamente en todos los tratados més recientes sobre el manejo y la conservaci6n de Jo: ‘os se incluyen capftulos 0 apartados relativos a las riberas (Gore, 1985; Gore y Petts, 1989; Boon ef al., 1992; Carling y Petts, 1992, Amordés y Petts, 1993, etc.), existiendo muchos otros especificamente dedicados al estudio de los ecotonos fluviales (Naiman y Décamps, 1990; Holland et al., 1991). En relacién’a las riberas de los rios espafioles, en general han sido muy poco estudiadas, siendo muy escasa la bibliografia disponible acerca de su tipologia, funcionamiento y principales causas de alteracién por actividades humanas. No obstante, en los tiltimos afios se aprecia una mayor preocupacién por su.estado de deterioro, habiéndose procedido en algunos casos a su restauraci6n, a veces sin demasiado éxito. Quizés los trabajos de Fernéndé Alaana (1983) sobre los Sotos y Riberas de La Rioja y de Montserrat (1982) sear. las referencias que pueden considerarse més pioneias en el estudio de las riberas en nuestro pais, existiendo hoy dia estudios completos como el de Heras y Morante (1989) sobre los rios alaveses, Onaindia et al., (1987) sobre los rfos vizcainos, Gonzdlez del Tanago et al., (en prensa) sobre la Cuenca del Segura, y otros muchos dentro, del campo de Ia fitosociologia, recogidos en la publicacién de Arco y Wildpret (1987) 4 Restauracién de Rios y Riberas Como obra de cardcter general es de resaltar la publicacién de Sanchez Mata y de Ja Fuente (1986) sobre la vegetacion de las riberas de agua dulce, de la que son complementarios otros estudios posteriores como el de Morla (1988), Pizarro (1990), etc. ‘También con un sentido amplio, recogiendo los diferentes aspectos que configuran las riberas (hidrologfa, vegetacién, dinémica fluvial, ecologia acustica, ete), pero con un cardcter aplicado a la restauracién de las riberas, es interesante citar la publicacién del CEDEX (1988), donde también se contemplan los aspectos legislativos sobre riberas en el Ambito nacional y del Consejo de Europa. Como antecedentes cientficos al estudio e interpretacién de las riberas cabe citar también los trabajos de Gonzélez Bernaldez et al. (1987; 1989) sobre las aguas subterréneas enel paisaje, donde se detalla el funcionamiento de fos flujos subterraneos que determinan Ja aparicién de determinadas especies ligadas a la descarga permanente de agua, y la clasificacién de los humedales de a provincia de Madrid, basada en estos principios hidrogeolégicos Gonzdlez Berndldez ha sido quizés uno de los cientificos més sensible a la conservacién de las riberas, apreciando los multiples valores que el medio ripario oftece a Ja cultura humaha (Gonzélez Bernaldez, 1988). Mencién especial requiere el trabajo de Sterling (1990) sobre los valores ecol6gicos de los sotos y bosques de ribera, estudiando el caso del rio Guadarrama. En dicho trabajo se establece una metodologia para abordar el estudio de la vegetacién ripicola, su composicién y estructura, su relacién con la morfologia del cauce impuesta por determinadas variables hidrolégicas de la cuenca vertiente, y su capacidad de acogida para Ja avifauna y los ropaléceros, habiendo realizado algunos trabajos anteriores sobre este mismo temd (Sterling, 1984; Viejo er al., 1985). También es interesante resaltar el trabajo de Montes et al. (1987), sobre el rio Manzanares, donde se analizan tanto el medio fisico o natural como el humano o social, para proponer la restauraciGn ecolégica de su tramo medio, haciendo un detallado estudio de ta composicién y estructura de las comunidades de ribera. Y el trabajo de Gonzélez del Tanago et al. (1990) sobre las riberas de la cuenca del rio Segtra, analizando el estado de su vegetacién y la influencia de las actividades humanas, en este caso principalmente la agricultura y la ganaderia extensiva, en su nivel de degradacién En el campo de la restauracién de rfos y riberas también debemos citar la publicacion de Garcfa de Jal6n y Gonzalez del Ténago (1986) sobre los rfos y riberas de nuestra Peninsula, y especialmente la obra de Sainz de los Terreros er al. (1991), dedicada a las téonicas de restauracién de los sistemas fluviales, haciendo especial mencién al problema de los dragados y canalizaciones. Finalmente, otro trabajo relacionado con el estudio de Jas riberas en Espafa, en este caso en la Cuenca de] Duero, es el realizado por Gonzélez del Tanago et al. (1992), Antecedentes 15 donde se analiza el estado actual de las zonas riparias de los principales rios de esta cuenca, en cuanto a su vegetacion y grado de ocupacién, y se proponen las bases para su restauracién y conservacién. La bibliografia hoy dia disponible en el campo del manejo y restauracién de los ecosistemas naturales es cada vez mas amplia, existiendo numerosas revistas cientificas que centran los distintos enfoques de los estudios y trabajos sobre los rios (Regulated Rivers, Ecological Engineering, Environmental Management, Ecological Modelling, Biological Conservation, Biodiversity, etc.) Asi riismo se organizan cada vez. con mayor frecuencia Congresos, Seminarios 0 Grupos de Trabajo internacionales (York, Inglaterra (1990) sobre Manejo y Conservacién de los Rios; Lund, Suecia (1991) sobre Restauracién de Rios de llanura; Rosenheim, Alemania (1992) sobre Gestién y Restauracién de Rios; Leicester, Inglaterra (1993) sobre Bases Ecolégicas para la Gestién de los Rios; Berkeley, USA, sobre Procesos Fisicos en el manejo de los Rios, etc.), donde se trata de poner en comin diferemes enfoques 0 perspectivas, y de los que se puede concluir la necesidad de poner a disposicién de los técnicos y politicos, de forma sencilla e inteligible, toda la documentacién cientifica hoy dia disponible, para llevarla a la préctica en Ia planificacién, disefio y ejecucién de los Proyectos sobre rios. El presente Trabajo trata de alcanzar precisamente este Objetivo, de ofrecer una informacién concisa y lo més completa posible sobre la estructura y funcionamiento de los ecosistemas fluviales, aplicada a la restauraci6n de cauces y riberas, y facilmente utilizable para la confeccién de programas de actuacién y desarrollo de proyectos concretos, enfocados a la mejora y conservacién de nuestros rios Parte I: PRINCIPALES COMPONENTES DEL ECOSISTEMA FLUVIAL Conocer cudles son los principales componentes del sistema fluvial, cémo funcionan y cudles son las interrelaciones que mantienen entre ellos en condiciones naturales, es un requisito previo para iniciar la restauracién de los rios y sus riberas. ‘Traténdose de una restauracion "fisica", y suponiendo que la calidad de las aguas reGne unas condiciones aceptables para no ser un factor limitante en dicha restauracién, hemos considerado como elementos principales del sistema fluvial: (1) su cuenca vertiente; (2) el régimen de caudales; (3) la morfologia y dinémica del cauce; (4) la fauna acuatica, indicadora del funcionamiento ecolégico del rio; y (5) la vegetacién de las riberas, en cl contexto mas amplio de la Hanura de inundacién. El rio y su cuenca vertiente 19 3. EL RIO Y SU CUENCA VERTIENTE ‘Al estudiar los rfos es necesario mantener presente el origen de las aguas y de los sedimentos que por ellos discurren, y por ello necesitamos considerar siempre las caracteristicas de su cuenca vertiente. 3.1. EL CICLO HIDROLOGICO El esquema simplificado del ciclo hidrolégico (Fig. 3.1) nos permite analizar el movimiento general del agua, considerando los procesos de precipitaci6n, intercepcién, infiltracién, evapotranspiracién y formaci6n de escorrentias, que dan origen al régimen de caudales de cada rio Las precipitaciones, en forma de Iluvia, nieve, granizo, etc., son la principal entrada de agua en una cuenca, aportando caudal a los cauces y recarga a los acufferos. Su importancia radica en ser la forma de suministro natural de agua a los ecosistemas, condicionanéo la vida de los organismos y el desarrollo de las actividades humans. Tanto su forma de producirse (Lluvia, nieve, etc.) como su cuantia dependen de! clima y regién considerada, y para su formacién es necesario que se condense el vapor atmosférico, por enfriamiento de las masas de aire, y se produzca la caida de las gotas de agua debido al incremento de su tamafio. Las variables de Ja precipitaci6n que més interesan fara su andlisis hidrol6gico son: La altura, expresada en mm o I/m?, indicando el volumen de agua aportada 20 Restauracién de Rios y Riberas en eS Te off tatalatay | reciptacian jj} | / | raat cim(etel Pia tet yd j ae hacia lagos, ioe y ocaano= Figura 3.1.~ Ciclo hidrolégico de! agua (segin Dunne y Leopold, 1978). La intensidad, expresada en mm/h, cm/h, indicando la velocidad de llegada del agua al suelo y el riesgo de superar la capacidad de infiltracién de los suelos, en este caso provocando el origen de escorrentias superficiales que agravan la formacién de las avenidas y los procesos de erosi6n. La frecuencia, expresada en afios de retorno o periodo de recurrencia en que se repiten 0 superan al menos una vez las caracteristicas de altura o intensidad de las precipitaciones. Una parte del agua caida en las precipitaciones es detenida por la vegetacién 0 cualquier “srma de cobertura del suelo, mediante el proceso de la intercepcidn La intercepciénes la primera abstracci6n hidrol6gica de las precipitaciones durante las tormentas, y su cuantia depende tanto de las caracteristicas de las lluvias 0 nevadas (intensidad, altura y duracién), como de las de la cobertura vegetal (tipo, densidad, especie, etc.) y tiempo 0 época del aio en que se produce. Se considera pérdida por intercepcién la cantidad de agua que es retenida por la cubierta del suelo y devuelta directamente a la atmésfera por evaporacién, sin haberse infiltrado en el suelo o escurrido superficialmente hacia los cauces El rio y su cuenca vertiente 21 Las mayores pérdidas por intercepcién se producen en las tormentas de poca intensidad, pero al ser éstas las més frecuentes, dichas pérdidas se van acumulando y adquieren un valor importante en el cémputo de las precipitaciones anuales, habiéndose cifrado por término medio en un 25 %, y siendo mucho mayores en los ambientes mediterréneos més célidos El agua no interceptada lega a la superficie del suelo y en su totalidad o en gran parte entra al perfil del suelo mediante el proceso de infiltracién. Este proceso, que incluye Ja entrada del agua al suelo, Ia retenci6n del agua en el suelo y el movimiento del agua a través del suelo, depende de las condiciones de la corteza superficial del suelo; del tipo, extensiOn y densidad de la cubierta vegetal; de las propiedades del suelo en términos de textura, estructura, contenido de materia orginica, humedad precedente, etc.; de las caracteristicas de la tormenta, referidas a su intensidad, altura, duraciéa, ete.; y de la temperatura y calidad de las aguas. La infiltracién es un proceso clave en el comportamiento hidrol6gico de los suelos, ya que determina la formaci6n de escorrentias superficiales o subsuperficiales, sila tasa de entrada y paso del agua a través del suelo va siendo inferior a la intensidad de la lluvia 0 superior a la permeabilidad, respectivamente. El agua infiltrada y retenida por las particulas del suelo constituye la humedad del suelo, que es absorbida por las rafces de las plantas y devuelta en gran parte'a la atmésfera mediante el proceso de la evapotranspiracién. La evaporacién es un proceso fisico, que se produce a partir del agua libre, y la transpiracién es un proceso biolégico que realizan las, plantas para su funcionamiento interno. Ambos se producen de forma contfnua, con o sin precipitacién. Siempre que el suelo esté en capacidad de campo, o con mayor cantidad de agua hhacia la saturaci6n, la evapotranspiracién tiene lugar al nivel maximo porencial (evapotranspiracién potencial), y en este caso su cuantia depende de las condiciones meteorél6gicas (temperatura, humedad atmosférica, energia radiante, viento, etc.).de la atmésfera circundante. Cuando la humedad del suelo desciende por debajo de la capacidad de campo, la evapotranspiracién real es menor que la potencial, dependiendo en este caso de las caracteristicas del suelo (textura, contenido de materia orgénica, etc.) y de la vegetacién (especie, edad, densidad, etc.). La evapotranspiracién disminuye el contenido de humedad del suelo, dejando espacio libre para la entrada y retencién de més agua en el mismo, mejorando con ello las, condiciones para la infiltracién. Por regla general, la evapotranspiraci6n representa la principal via de salida del agua de una cuenca, y en términos anuales supone un porcentaje muy elevado (60 -80 %) 2 Restauracion de Rios y Riberas PRECIPITACION [INTERCEPCON V ALNAGENAMENTO JESCORAENTIA SUPERRCIAL INFLTRAGION. [[RVAPOTRANSPIAAGON Fluo SURSUFERGAL] [PERcoLAGON PROFUNDA ] | [Hitepenetomo) FUWORETAROADO] _[ESCORRENTA SUBTERAANEA \ \ [esconnenTaDRECTA ([eaupat ase [CAUDAL CIRCULANTE Figura 3.2.- Diagrama de flujo de los distintos procesos hidrolégicos. de las precipitaciones anuales. No obstante, durante los aguaceros mas intensos, al referirse aun periodo breve de tiempo este proceso tiene poca importancia, y en este caso Ia via principal de salida del agua son las escorrentias. Finalmente, las aguas no infiltradas, junto con las que se muevena través del suelo © en los acufferos y no son aprovechadas por Ia vegetacién, alcanzan los rios o cauces superficiales, por donde Wiscurren en forma de caudales hacia los mares u océanos, quedando en ocasiones retenidas temporalmente en los embalses. La evaporaci6n del agua desde los mares u océanos (lagos o embalses) cierra el ciclo hidrol6gico, mediante el paso del agua liquida nuevamente a fase de vapor, esperando su posterior condensacién por enfriamiento de las masas de aire cargadas de humedad y desplazadas sobre la superficie terrestre. El régimen de caudales observado en un rio est formado por los excedentes de agua que la cuenca recibe y no es capaz de retener y aprovechar (escorrentias) (Figura 3.2), y depende por tanto de todas las caracteristicas y procesos antes comentados. El concepto de! ciclo hidrolégico puede referirse también al movimiento de los sedimentos y compuestos quimicos que contienen y transportan las aguas. El rio y su cuenca vertiente 2B CUMA Geovocia | ___ pprecipitacion|* ~———n} “tppogratia [ temperatura ort} Mologia VEGETACION USOS DE LA TERRA| CARACTERISTICAS DEL SUELO |CARGA DE SEDIMENT( MORFOLOGIA DINAMICA FLUVI Figura 3.3.- Factores de la cuenca que determinan la morfologia y dinamica del sistema fluvial (Morisawa, 1985). Como consecuencia de la meteorizacién las rocas se descomponen, trocean, disuelven, etc. y producto de ello son los suelos y soluciones quimicas, éstas tltimas transportadas en disolucién por el agua subterrdnea Las particulas de suelo pueden quedar expuestas al efecto erosivo de las aguas, tanto por la Iluvia directamente como por las escorrentias generadas, y asi ser transportadas hacia los cauces 0 quedar retenidas en las laderas. ‘Tanto las sales disueltas como las particulas sélidas erosionadas siguen trayectorias similares a las del agua que las transporta, y asi constituyen respectivamente las propiedades fisico-quimicas de los caudales, y la granulometria y estructura fisica de los cauces. 24 Restauracién de Rios y Riberas 3.2. MORFOLOGIA Y DINAMICA FLUVIAL, En Giltimo término, son las condiciones del clima (precipitaciones, temperaturas) y las caracteristicas geolégicas (topografia, litologfa, suelos), sobre ias que se asientan una determinada yegetaci6n y usos del suelo, las que determinan el comportamiento hidral6gico de cada cuenca, y la salida de caudales y sedimentos a los cauces configurando su morfologia y régimen, como se indica en la Figura 3.3. En cada caso, y ante diferentes regimenes de caudales Ifquidos y sélidos, se desarrollan rios de diferente anchura, profundidad, velocidad de las aguas, tipo de trazado, rugosidad del sustrato, etc. (ver Figura 3.4). LTOLOGIA, SUELO CAUDALES VEGETACION Rugoeidaa Tipo de Gace uToLoaia susio |—-[cavowes | <1 Veaeracion | | ‘Anchura |.—___.{ Profundidad ]~—____-[Pendiente }+—_-| Vetocidad Rugosidad Trazaco .- Variables de ajuste del sistema fluvial (Morisawa, 1985), El rio y su cuenca vertiente 25 Analizando de esta forma jas interrelaciones entre el rio y su cuenca, podemos diferenciar dos tipos de variables. Las variables de primer orden, como son el régimen de caudales y su carga sélida, proceden de la cuenca y son resultado de sus caracteristicas hidroldgicas, teniendo un cardcter independiente del comportamiento del cauce. Las variables de segundo orden, como la anchura, profundidad, velocidad de las aguas, rugosidad, tipo de trazado, etc., son las que utiliza el rio para adaptarse a las primeras, teniendo por ello un cardcter dependiemte de éstas. Finalmente, también como variable independiente a corto plazo es necesario considerar 1a pendiente del valle por donde discurre el rio, que a su vex se hace dependiente de los procesos de erosi6n y sedimentacién fluviales cuando consideramos el tiempo a escala geol6gica. Aplicando estos principios a la restauracién de los rios, es evidente la necesidad de identificar el otigen de los problemas en los rios, y reconocer si estén originados por actividades desarrolladas en las laderas o cuenca vertiente, o si proceden de actuaciones dentro del propio cauce o lanura ce imundacién. En el primer caso, todo intento de restauracién del cauce sera infructuoso si no se corrige la actividad 0 proceso que esté afectando al régimen de caudales (¢j. incremento de avenidas por cambios de uso del suelo, deforestaciones, drenajes, etc.) 0 al de sedimentos (ej. erosiones por incendios forestales, construcci6n de vias de infraestructura, practicas agricolas, etc.) que llegan al tramo objeto de estudio. Dicho régimen de caudales o de sedimentos puede verse también alterado por la regulacién de caudales en tramos de aguas arriba, y en este caso seré necesario revisar su efecto, antes de proceder a cualquier restauraci6n o mejora del habitat fluvial en el tramo afectado, Régimen de Caudales 27 4. EL REGIMEN DE CAUDALES. 4.1, INTRODUCCION El régimen de caudales de los rios es una de las caracteristicas més alteradas por las actividades humanas, no solo mediante su regulacién en Jos cauces con embalses 0 transvases, sino también con usos consuntivos (ej. regadio) y cambios de usos del suelo (ej deforestaciones, usos agricolas, incremento de zonas urbanizadas, etc.), que alteran los componentes del ciclo hidrolégico acelerando las escorrentias. El resultado de todas estas actividades ha traido consigo en general un aumento de los caudales punta, variando su frecuencia primitiva, y una disminucién de los caudales de estiaje, prolongéndose los periodos de aguas bajas debido a una menor capacidad de retencién de agua en la propia cuenca. El efecto de las presas es distinto segtin el uso a que se destinen, pero en general puede decirse que ocasionan aguas abajo una disminucién de los caudales punta. En el caso de embalses destinados a la produccién de energia hidroeléctrica, el régimen de caudales generado aguas abajo se caracteriza por su gran fluetuaci6n, respondiendo a los picos de la demanda de energia. En el caso de los embalses para regadfo el régimen de caudales se caracteriza por la disminucién de las avenidas ordinarias, y el aumento de los caudales de estiaje coincidiendo éste con el periodo de riego. La morfologia de los cauces, asf como las distintas especies que habitan los rios, estan adaptadas a un determinado régimen de caudales, que fluctia de forma natural a lo largo del afio; y de unos afios a otros. Existen muchos organismos acuiticos que necesitan distintas condiciones hidratilicas para completar su ciclc biolégico, siendo necesario que exista una periodicidad en los caudales bajos, caudales medios, y caudales altos, coincidiendo con una cierta 28 Restauracion de Rios y Riberas temperatura ambiente y de las agiias, para que dichas especies completen su desarrollo Por otra parte, el problema de la calidad de las aguas esti muchas veces relacionado con una falta o escasez de caudal en el cauce, debido a un estiaje natural 0, con més frecuencia, a derivaciones del agua a canales para regadfo o produccién de energia cléctrica, sin tener en cuenta el uso prioritario en ese caso de dilucién de los vertidos o contaminacién orgénica, para mantener en el cauce un nivel aceptable para la vida acudtica, La restauracién del régimen de caudales, 0 el mantenimiento de unos niveles minimos y el control de la fluctuaciones de forma que sean aceptables para los organismos acudticos, es quizés una de las fases prioritarias en la restauracién de cauces y riberas, teniendo en cuenta que es el agua, en cantidad y calidad, y su movimiento, los pilares bésicos sobre los que se asienta toda la estructura del ecosistema fluvial. 4.2. CARACTERIZACION DEL REGIMEN DE CAUDALES El estudio del régimen de caudales de un rio reviste gran interés, no solo desde el punto de vista de aprovechamiento de las aportaciones, o el control de las avenidas, sino también para estimar los efectos de muchas actuaciones que 1o alteran, como los embalses 6 transvases, permitiendo la comparacién del régimen existente antes y después de la regulaci6n. El régimen de caudales define en términos estadfsticos 1a distribucién de los caudales a Jo largo del afio, referidos a una seccién o superficie vertiente. Puede expresarse mediante indices valores medios (ej. médulos), caracteristicas de las series (¢j. coeficiente de variacion, predictibilidad), duracién de los caudales, distribucion de frecuencias, etc., con los que se puede cuantificar las aportaciones de cada cuenca, su distribucién en el tiempo, y comparar unos rfos o tramos de rios con otros analizando la variacién de todas estas caracteristicas en el espacio. © Para la caracterizacién del régimen de caudales se pueden emplear los siguientes estadisticos (ver Gordon et al., 1992; Gustard, 1992). Caudal medio anual (médulo anual) Expresa la cantidad media anual desaguada por la cuenca definida para una determinada seccién, y da una indicacién del tamafio de la cuenca y de su régimen hidrol6gico. Puede calcularse a partir de los caudales medios diarios, como media aritmética Régimen de Caudales 29 de los mismos, espreséndose en m’/seg. También puede calcularse dividiendo el volumen anual desaguado, o aportacién anual, en millones de m° (Him°), por el nimero de segundos de un aio, igual a 31.536 x 10°. El caudal medio diario es el caudal que si se mantuviera durante las 24 horas, daria el mismo volumen de agua que el observado ese dia. Con este razonamiento, el caudal medio anual es un valor que mantenido de forma constante a lo largo de todo el afio, darfa la aportacién anual. Para cada aio se obtiene asi un valor del caudal medio anual. Cuando se dispone de datos de varios afios se puede estimar la media aritmética del los caudales medios anuales, y obtener as{ un valor promedio para dicho periodo, o médulo anual. El caudal medio anual tiene una relacién directa con la superficie drenada, segin se indica em la Figura 4.1, ya que el volumen de agua que recibe una cuenca por precipitacién aumenta progresivamente con su superficie (a veces de forma lineal), y también lo hace el volumen de agua retenido en la cuenca y devuelto a la atmésfera por evapotranspiracién. RIO EBRO APORTACIONES (Hms/ano) Y= 9203-X707485 (2=0,988) ° "20.000 20,000) 60.000 180.000 700.000 SUPERFICIE DE CUENCA VERTIENTE (Km2) Figura 4.1.-Relacién entre el caudal medio anval (expresado como aportaciones) y la superficie vertiente en el rio Ebro. 30 Restauracién de Rios y Riberas En éreas montafiosas, o donde el comportamiento hidrolégico no es uniforme en toda la cuenca, el caudal medio anual no es una funcién lineal de la superficie yertiente, sino que dicha relacién se va truncando, identificdindose zonas homogéneras, con relaciones lineales paralelas entre si Cuando se alteran las condiciones de respnesta de la cuenca, mediante regulacién de caudales, cambios de uso del suelo que implican aumento o disminucién de las escorrentias, etc. se pueden observar estas mismas relaciones entre caudal y superficie vertiente truncadas, en este caso no en el espacio, al pasar de una zona homogénea a otra, sino en el tiempo, antes del tratamiento y después, pudiendo ser un buen procedimiento para su evaluaci6n, como se ha propuesto para el caso del estudio de la emision de sedimentos por los caudales (Dunne, 1978). La escorrentia media anual es el caudal medio anual expresado en unidades de altura, es decir el volumen de agua o aportacién anual dividido por la superficie vertiente. Representa la diferencia entre la precipitacién anual y la evapotranspiraci6n, y su evaluacién permite estimar de forma aproximada ‘as disponibilidades de agua d2 una cuenca De forma general, la escorrentfa media anual por unidad de superficie disminuye segiin aumenta la superficie vertiente, teniendo en cuenta que los coeficientes de escorrentia son mayores, en términos generales, en las cuencas més pequefias, donde es mayor la pendiente media y menor la capacidad de almacenamiento de agua en los cauces. Variabilidad temporal En las zonas atidas 0 semiéridas existe una variabilidad muy alta tanto en las precipitaciones como en las escorrentfas o caudal medio anual, en este ultimo caso debidg a las variaciones en la cuantia y en la distribucién de las Iluvias de unos afios a otras. Dicha variabilidad puede estudiarse a través del coeficiente de variacién C,, 0 cociente entre la desviacién tpica y la media aritmética de los datos de la serie. En general la variabilidad de los caudales disminuye segin aumenta el volumen de escorrentia o caudal medio anual, como se indica en la Figura 4.2. En Espafa, situada en la banda mediterrénea de Europa, la variabilidad esperada en el comportamiento de los rios es relativamente elevada, en relacién a lo que sucede en otros paises de la Europa htimeda-templada, donde se ha estudiado el coeficiente de Régimen de Caudales 31 . s 3 z 09 4 Rios de zonas aridas > S oe | 2 = S o4 S 3 8 os os 4 Rios del mundo on 4 oa 02 + 10 20 50 150 400 Escorrentia media anual (mm) Figura 4.2.- Coeficiente de variacién de los caudales y aportaciones medias anuales, en rios de todo el mundo y de zonas semifridas (Gordon er al., 1992). variaci6n anual de los caudales y comprobado su constancia en términos absolutos, y en relacién al conjunto de ros de todo el mundo (ver Figura 4.3, Gustard et al., 1989). En rios 0 arroyos interimitentes o efimeros, tiene también mucho interés calcular el tiempo en que cada afio el Iecho del cauce queda seco o sin corriente, indicando en cada caso el nimero de dias en que el caudal circulante es cero, ¥ su variabilidad de unos afios a otros. Si estos periodos sin agua son predecibles en el tiempo por Jos organismos acuéticos, produciéndose cada afio de form similar, permitirén Ia existencia de determinadas especies capaces de sobrevivir a dicho estiaje, coincidente con alguna fase de su desarrollo més resistente a la sequia. Pero si la duracién y frecuencia de estos periodos sin corriente son muy variables de unos afios a otros, debidos a una sequia extraordinaria o, més frecuentemente, 2 una regulacién por embalses, pueden ser la causa de 1a desaparicién de muchas especies, no existiendo ciclos biolégicos adaptados a tales fluctuaciones impredicibles: 32 Restauracion. de Rios y Riberas Mundo 04 Porcentaje de Estaciones v4 on oz 03 oa 05. os 07 og og Coeficiente de Variacion de la Escorrentia Anual Figura 4.3.- Variabilidad de Ja escorrentia anual en 126 paises de todo el mundo y en rfos de Europa (Gustard, 1992). Estadisticos mensuales CAlculos similares a los comentados para los caudales anuales pueden hacerse con caudales mensuales, estimando el caudal medio mensual (media aritmética de los caudales medios diarios de cada mes) y los médulos mensuales para un determinado periodo de afios, con sus respectivos coeficientes de variacién. El estudio de los caudales medios mensuales a lo largo del afio permite conocer la evolucién de los mismos en cada periodo hidrolégico. Con su representacin grafica se pueden analizar fécilmente las variaciones estacionales, diferenciando tipos de regimenes segiin los maximos se produzcan en el periodo de lluvias (régimen pluvial), en el periodo de deshielo (régimen nival), 0 en ambos (régimen pluvio-nival) (Figura 4.4 y 4.5). También se puede reconocer en estas grificas el efecto de lamimacién de los embalses, produciendo un régimen muy homogéneo a lo largo del aito si el embalse es para Régimen de Caudales 33 Caudal (m.c./seg) Rio Cega 1962-1982 Oct. Nov. Dic. Enr. Feb. Mar. Abr. May Jun. Jul. Agos. Sept. Figura 4.4.- Régimen de caudales del rfo Cega en su cabecera, de tipo pluvio-nival. a ‘Caudal(m.c./seg) Rio Agueda: Castillejo Oct, Nov, Dic, Enr. Feb, Mar. Abr. May. Jun, Jul, Agos. Sept. Figura 4.5.- Régimen de caudales del rfo Agueda en su tramo medio, de tipo pluvial. egadio, o con fuertes fluctuaciones en poco tiempo, si el embalse es para produccién de energfa eléctrica. 34 Restauracién de Rios y Riberas En los cursos permanentes, del régimen de caudales mensuales se puede derivar el siguiente indice: Indice del caudal base = (Caudal medio mensual minimo / Caudal medio anual) * 100 cuyo valor préximo a la unidad indica un régimen uniforme < lo largo del afio, mientras ‘que un valor pequefio o préximo a cero indica un cardcter intermitente o efimero del cauce. Dicho indice puede verse muy alterado por la regulacién del régimen por embalses, que alteran drdsticamente los niveles minimos. Predictibilidad La predictibilidad del régimen de caudales de un affo a otro, 0 de un mes o dia a otro, tiene mucha importancia .esde un punto de vista biolégico para la adaptaciGn de los ciclos de desarrollo en las aguas. La fenologia de muchos organismos esté ligada a termoperiodos 0 fotoperiodos que corresponden a determinadas épocas del afio en que el régimen de caudales presenta una determinada pauta. Por ejemplo, la puesta de los salmones tiene lugar en invierno, cuando de forma natural se producen elevados caudales en Jos rios que mantienen los frezaderos limpios de particulas finas y bien oxigenados, coincidiendo con temperaturas frias que elevan el nivel de saturacién de oxigeno disuelto en las aguas. El hecho de que estos caudales altos se mantengan de un afio a otro en dicha época, asegura el mantenimiento estable de las poblaciones de salmones, mientras que en las zonas donde ello se produzca unos aftos si y otros no, puede resultar un factor limitante para las mismas. Otros ejemplos claros de la necesidad de una cierta predictibilidad del régimen de caudales para los organismos vivos se observan en las especies de la vegetaci6n riparia ‘Muchas semillas necesitan para su germinacién estar inundadas durante un cierto tiempo. En su desarrollo influye no tanto la magnitud de la avenida, como el hecho de que se produzea periédicamente, en una determinada época del afto, permitiendo asi el mantenimiento de la especie por regeneracién natural En los estudios de predictibilidad del régimen de caudales interesa conocer tanto Ja frecuencia e intensidad de los caudales, como la contribucién del fenémeno estacional al régimen anual, Colwell (1974) establece tres tipos de medidas para describir las fluctuaciones temporales de los fendmenos fisicos y biolégicos, definiendo los siguientes conceptos: Predictibilidad, como medida del grado de certidumbre en conocer el estado del fenémeno, en un determinado momento. Puede considerarse que integra dos componentes aspectos, la constancia y la contingencia.

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