Bancos
Cooperativas de Ahorro y Crédito
Mutualistas
Sociedades Financieras
Compañías emisoras de Tarjeta de Crédito
Estas instituciones están reguladas por:
Superintendencia de Bancos y Seguros
Superintendencia de Economía Popular y Solidaria
Historia
Entre los años 1831 y 1839, en el país se dio inicio a la creación de un sistema financiero,
bastante conveniente para la época aunque no muy desarrollado. En la actualidad, tras
analizar una gama de posibilidades y sobrepasando vicisitudes, se ha logrado constituir
un sistema financiero nacional sólido y solvente.
En 1839, mediante decreto legislativo, se autoriza al Ejecutivo que negocie los fondos
para la creación de una institución bancaria. En 1860, se crean el Banco Luzurraga y
Banco Particular. En 1899, la Ley General de Bancos fue promulgada. En 1927, se funda
el Banco Central y en 1928, la Superintendencia de Bancos y el Banco Hipotecario del
Ecuador.
En 1948, debido a que el sistema financiero se va adecuando a las políticas del Fondo
Monetario Internacional, se genera una crisis financiera en el país en 1987. En 1994, se
derogó la Ley General de Bancos de 1987 por la Ley General de Instituciones del Sistema
Financiero. Actualmente, se encuentra vigente la Codificación de la Ley General de
Instituciones del Sistema Financiero, publicada en el Registro Oficial 250 del 23 de enero
de 2001.
En los años 90, el exceso de instituciones financieras, las permanentes modificaciones a
las leyes de acuerdo a las necesidades de los grupos que habían manejado dichas
instituciones, fugas de capital, altas tasas de interés y el conflicto bélico con Perú hacen
que Ecuador viva una de las más graves crisis bancarias.
Percepción del sistema financiero ecuatoriano
El período de recesión por el que atraviesa la economía ecuatoriana, con una variación
del PIB de -1,7% de acuerdo a proyecciones del Banco Central del Ecuador, condicionó
gran parte del desempeño del sector privado durante 2016. Las instituciones del sistema
financiero privado se han visto afectadas no solo por la disminución en el ingreso de los
hogares y empresas, también por el cambio de expectativas en los agentes económicos
respecto al futuro. Esto incide directamente sobre la demanda de crédito y la estructura
de los plazos de captación de los depósitos, generando un exceso de liquidez en las
cuentas reportadas.
Los depósitos a diciembre de 2016 alcanzan su valor histórico más alto con USD 35.485
millones, lo que corresponde a una tasa de crecimiento del 18%. Por su parte, la cartera
total de créditos fue de USD 26.624 millones, con un incremento del 7%. Este
comportamiento abre una brecha de liquidez de USD 8.860 millones que es la más grande
entre depósitos y créditos de los últimos 10 años y representa el 25% del total de los
depósitos totales del sistema.
El principal desafío por el que atravesará el sistema financiero durante el 2017 será el de
colocar el exceso de liquidez ante un escenario de reducción de los ingresos de los hogares
y empresas, lo que aumenta la probabilidad de sobrendeudamiento y deteriora la calidad
crediticia de los agentes económicos. De hecho, de los USD 26.624 millones que
corresponden al total de la cartera, USD 1.067 millones son cartera vencida o
contaminada, lo que representa un indicador de morosidad del 4%.