Nomenclatura:
DENOMINACIÓN TOPONIMIA
Colima. Capital del estado en la que residen los poderes públicos de la
entidad.
Localización
El municipio se localiza, en su mayor
parte, en el Valle de Colima; se
encuentra entre los 18° 53’ y 19° 21'
de latitud norte y entre los 103° 32’ y
103° 43' de longitud oeste del
meridiano de Greenwich. Tiene una
altura promedio de 550 metros sobre
el nivel del mar y una mínima de 305
metros.
Historia
La Villa de Colima se fundó el 25 de julio de 1523, en un lugar cercano a Caxitlán (en términos de
Tecomán)Su fundador fue el capitán Gonzalo de Sandoval, quien recibió órdenes de Hernán Cortés de
“buscar un buen sitio y fundar una villa de españoles que debería llamarse Collimán". El Capitán
Sandoval localizó este sitio en donde actualmente se encuentra la ciudad de Colima.
Como el lugar donde se fundó la primera villa era malsano, sus pobladores y el ayuntamiento tomaron el
acuerdo, en 1525, de trasladarse al sitio actual, consumándose este traslado el 20 de enero de 1527 que
corresponde a la fundación de la Villa de San Sebastián de la provincia de Colima. Esta fundación fue la octava
realizada por los conquistadores en el territorio de la Nueva España.
El Lic. Lorenzo Lebrón de Quiñones recorrió 200 pueblos de la provincia de Colima de 1551 a 1554, con el
carácter de visitador, designado por el Rey de España, para suprimir las múltiples injusticias de que eran
víctimas los indígenas por los encomenderos españoles. Al Lic. Lorenzo se le llamó el "juez más severo que
llegó a éstos territorios", quien además tuvo gran compasión y amor por los indios de estas tierras.
El Padre de la Patria don Miguel Hidalgo y Costilla, se hizo cargo de la parroquia de Colima del 10 de marzo al
26 de noviembre de 1792. Su presencia en Colima fue muy benéfica porque se mejoraron notablemente los
servicios religiosos, mereciendo el respeto del clero regular colimense y de la feligresía. El padre Hidalgo
frecuentaba a las comunidades indígenas ante lo cual hay fundadas presunciones de que en compañía del
padre José Antonio Díaz concibieron grandes proyectos para lograr importantes cambios sociales en la Nueva
España.
Durante el movimiento de Independencia, acaudillados por el padre Hidalgo, los primeros insurgentes
llegaron a Colima el 8 de noviembre de 1810 al mando de José Antonio Torres (hijo) y Rafael Arteaga,
llevándose a Guadalajara 20 españoles importantes como rehenes, de los cuales 9 fueron salvados de ser
degollados por la intervención de don Francisco Ramírez de Oliva ante el padre Hidalgo, cuando 11 de ellos
ya habían sido sacrificados.
Los primeros mártires colimenses entre niños, mujeres, jóvenes y ancianos en número de 300, sucumbieron
en Colima sacrificados por el sanguinario coronel Manuel del Río en los llanos de Santa Juana en el mes de
marzo de 1811.
Son dignos de especial mención los notables y valerosos insurgentes colimenses Pedro y Manuel Regalado
(tío y sobrino), Ignacio Sandoval, José Calixto Martínez y Moreno (a quien apodaban "Cadenas”), el Lego
Gallaga, el Cura Venegas, Fermín Ortíz y el más ameritado de todos ellos, el padre José Antonio Díaz, porque
luchó hasta el sacrificio en defensa de los ideales de la Independencia.
Los insurgentes Ignacio Sandoval, los Regalado, el lego Gallaga y otros patriotas defendieron la entonces Villa
de Colima del asedio de los realistas con un poderoso contingente de luchadores por la libertad.
El 20 de junio de 1823 el Coronel colimense Anastacio Brizuela Comandante de la 21 División de Milicias del
Sur, que con anterioridad se había puesto de acuerdo con el Ayuntamiento de la Villa de Colima y con los
principales vecinos de la población, acordaron la segregación del partido de Colima de la Intendencia de
Guadalajara. Finalmente, en 1824 el acta constitutiva de la República Federal otorgó a Colima la categoría de
territorio federal el 4 de octubre de 1824, separándolo definitivamente de Jalisco.
El 10 de septiembre de 1824, el Congreso Federal le otorgó a Colima el título de ciudad, lo que causó un gran
regocijo entre los colimenses.
La Campana.- Zona urbana de Villa de Alvarez. Conjunto ceremonial formado por varios templos y
plataformas piramidales construidas con cantos rodados. Cuando menos una de las plataformas principales
fue utilizada como mausoleo, siendo posible en la actualidad ver la tumba que guardaba en su interior.
San Francisco de Almoloyán.- Se encuentra en la ciudad de Colima. Ruinas del antiguo convento franciscano
del siglo XVI.
Hacienda de Nogueras.- Pertenece al Municipio de Comala, es una hacienda de trapiche restaurada. Se
pueden visitar la capilla (S. XVII), la casa principal (S. XIX) y el museo.
Comala (a 6 km al norte de la Cd. de Colima).- Llamado también El Puerto Blanco de América, Comala
conserva la arquitectura típica de la región del volcán.
Mesón de Caxitlán.- Está en la carretera Colima-Tecomán.- Ruinas de un antiguo mesón del camino real (S.
XVIII), construido en los terrenos del antiguo pueblo indígena de Caxitlán, donde en 1523 se fundó la primera
villa de Colima.
Palacio de Gobierno - Se ubica en el Jardín Libertad de la Cd. de Colima; es un edificio del siglo XIX. En su
escalera principal existe un mural del pintor colimense Jorge Chávez Carrillo.
Palacio Federal.- Se encuentra en el Jardín Núñez de la Cd. de Colima. Arquitectura civil de principios del siglo
XX. En la planta alta se conservan murales con representación de paisajes de la Cd. de México y retratos de
personajes históricos.
Palacio Federal.
Teatro Hidalgo, situado en el centro de la Cd. de Colima.- Edificio porfiriano, ejemplo de teatro de herradura.
Obra del alarife Lucio Uribe.
Archivo Histórico Municipal de Colima.- Está en el centro de la Cd. de Colima. Es ejemplo de la casa colimota
típica del siglo XIX.
Archivo Histórico del Estado.- (Jardín Juárez o de La Concordia, Cd. de Colima).- Ejemplo de arquitectura civil
porfiriana de principios del siglo XX. Antigua Escuela de Artes aplicadas.
Antigua Estación del Ferrocarril.- Se encuentra en el Parque Hidalgo de la ciudad de Colima. Es ejemplo de la
arquitectura ferroviaria de finales del siglo XIX.
Hacienda del Carmen.- Pertenece al municipio de Villa de Álvarez, es una hacienda ganadera del siglo XIX;
restaurada.
Hacienda de San Antonio.- Se localiza en el municipio de Comala. Hacienda cafetalera del siglo XIX restaurada.
Con capilla y acueducto de piedra.
Grupos étnicos
Existen en el estado de Colima grupos étnicos de ascendencia Náhuatl en Zacualpan y Suchitlán,
dentro del municipio de Comala; en Juluapan y Pueblo Nuevo, en el municipio de Villa de Alvarez y
en la localidad de Las Pesadas del municipio de Minatitlán existe presencia Náhuatl y Otomí
Trajes típicos
Una de estas expresiones, que tienen gran importancia para los pobladores, son los trajes típicos de hombres y
mujeres de Colima.
Artesanías
Reproducción de cerámica precolombina tallado en estopa de coco, tallado de madera, deshidratación de
flores, trabajos en metal repujado, trabajos decorativos con hoja de maíz.
Gastronomía
Los platillos más representativos del municipio son: Tamales con atole de leche; pozole blanco con caldo y
seco; menudo blanco; tatemado; pipián; cuachala; chilayo; sopa de boda; birria de chivo; frijoles puercos;
sopitos; sopes gordos; enchiladas dulces con tuba; tostadas de lomo, pata y cueritos de puerco.
Las bebidas y dulces regionales típicos son: Alfajor, pellizcos, dulce de coco, cajetas, tamarindo, tuba,
tejuino, bate, bolas de maíz y caramelo.
Durango
Toponimia
Durango.
El estado y su capital tomaron el nombre de la ciudad homónima que se encuentra en la
provincia española de Vizcaya.
Gutierre Tibón, estudioso de éste y otros temas, considera la posibilidad de que el
significado sea "vega entre alturas" o "vega extensa"; o sea, tierra plana y fértil limitada
por elevaciones, o muy grande.
Durango puede traducirse también como "helechal", "lugar de helechos", según aparece
en el libro Etimología de Apellidos Vascos, de Isaac López Mendizábal.
Finalmente, otra versión que aparece en la Enciclopedia de México dice que Durango
quiere decir "más allá del agua".
Localización
El municipio de Durango se
localiza en la parte norte del
país, y en el centro oeste de
la altiplanicie mexicana;
está comprendido entre los
paralelos correspondientes
a los 22º40´ y 26º50´ de
latitud norte y entre los
meridianos 102º25'55" y
107º08'50" latitud
occidental con relación al
Meridiano de Greenwich.
Esta nueva conquista corrió a cargo de Francisco de Ibarra entre los años de 1554 y 1567, quien fundó también la
capital bajo el nombre de Villa de Durango, nombre de una de las villas de la española provincia del mismo nombre, en
el año de 1563. En las siguientes décadas, de forma paulatina, se fundaron las misiones franciscanas primero, y
después jesuitas como Nombre de Dios, Peñón Blanco, San Juan Bautista del Rió, Analco, Indé, Topia, La Sauceda,
Cuencamé, el Mezquital, Mapimí, Santiago Papasquiaro, Tepehuanes, Guanaceví, Santa Maria del Oro, Tamazula y
Villa Ocampo, entre otras.
Al igual que en el resto de la provincia, los ataques indígenas forzaron a las autoridades españolas a enviar presidios, o
grupos militares, a resguardar las nuevas villas y a los colonos que iban en busca de formar nuevos asentamientos.
Con la llegada de la Independencia Mexicana, la provincia comenzó a fraccionarse para dar vida a los actuales estados
del norte de México, y en 1827 toma posesión como primer gobernador constitucional del estado de Durango, el
liberalista Santiago de Vaca Ortiz.
Los 30 años de dictadura de Porfirio Díaz, trajeron la integración de Durango a la red de ferrocarril y telégrafos que
transformaron al país. Después, durante la guerra de revolución, el insurgente duranguense Francisco Villa destacó en
su participación por la defensa de los más desamparados y con firmes ideas sobre el reparto agrario; también se le
conoce bajo el nombre del Centauro del Norte.
El traje típico de Durango es también conocido como adelita. De acuerdo con algunos expertos, es el que mejor
refleja las tradiciones de todo el país. De hecho, la adelita ha ganado varios concursos en los que se elegía la mejor
vestimenta tradicional mexicana. El estado de Durango está ubicado en el noreste del país y es uno de los que
Como es habitual, este Estado cuenta más trajes tradicionales aparte del
nombrado. Entre estos destaca el que visten los tepehuán, una de las
comunidades indígenas más numerosas.
1- Adelita
Las mujeres llevan un traje floreado. A diferencia de lo que ocurre con otras
vestimentas tradicionales, los colores que adornan el traje son oscuros.
La falda, del mismo tejido, incorpora un holán blanco, exactamente igual que el colocado en la pechera de la blusa.En
otras celebraciones el estilo del traje cambia totalmente. Se puede usar una falda amplia con colores vivos en sus
holones. Si se elige este, el cuello tiene que ser alto y portar un refajo con encajes para completarlo. El traje masculino
es más simple. Tanto el pantalón, como la camisa son de manta. Esta última puede ser cerrada o de botones y se
completa con una faja ceñida en color rojo. Por último, se viste con un sombrero de palma y con unos zapatos de tipo
está considerado como uno de los más típicos de la región. Su origen se remonta a la época prehispánica y se sigue
utilizando en celebraciones y días festivos. Las mujeres de esta etnia utilizan un traje de dos piezas: una falda y una
blusa. La falda es ancha y larga, con dos o tres colores. Por su parte, la blusa es de colores muy vivos, casi
fosforescentes, y está adornada con encajes. Cuenta con un holán a la cintura, es de cuello alto y tiene una botonadura
en la espalda. Los complementos también forman parte importante de esta vestimenta tradicional. Las mujeres se
ponen llamativos collares y suelen usar peinetas en las cabezas. Por último, los zapatos son algo más modernos, ya
que están elaborados con plástico. Los hombres visten una camisa de manga larga, que está adornada ligeramente
en la zona del cuello y en los puños. Se trata de una camisa larga y suelta, llegando prácticamente hasta las rodillas.
Los pantalones llegan hasta casi cubrir los pies y tienen los mismo adornos que la camisa. También es habitual que
esta vestimenta se complete con un pañuelo anudado al cuello y con un sombrero, ya sea redondo o de soyate.
MÚSICA
Los duranguenses tienen también una amplia herencia mestiza en la que destacan una gran tradición musical, en diversos géneros;
expresiones artesanales, manifestaciones literarias y plásticas y varias fiestas y ferias. La música es una de las tradiciones que más se siente,
tanto si se trata de expresiones indígenas como si son mestizas y derivadas de música clásica europea. Los diferentes géneros musicales
reciben impulso a través de instituciones educativas y culturales, periódicamente se efectúan concursos y recitales de rondallas, tríos,
cuartetos y grupos corales, que tratan de fomentar el interés de niños y jóvenes hacia la música. Si se hiciera un repaso de los grandes músicos
duranguenses, la lista comenzaría con Silvestre Revueltas compositor de prestigio mundial; Ricardo Castro primer concertista mexicano que
triunfó fuera de México y Fanny Anitúa, eminente contralto también reconocida mundialmente. En la música sinfónica destacan también:
Alberto M. Alvarado quien participó en la Opera Italiana y compuso Recuerdo, Río Rosa y Corazón Latino; Luis Baca, autor de las óperas Leonor,
La Giovana de Castiglia y su Ave María; Francisco Fournier que sobresalió como violinista y escribió piezas de baile y gaviotas; Manuel Herrera
y Alvarez que fundó una de las mejores orquestas de la república, Hilario Zurita, compositor de Hermosas Durangueñas y Arturo Lugo
Navarrete autor del Vals Cuca y las obras Lola y Brumas de Oriente.
Velino M. Preza compuso varias marchas que se popularizaron, entre las que se encuentran: Cuarto Poder, Lindas Mexicanas, adelante y Viva
México. Además dirigió durante más de 40 años, la Banda de Policía de la Ciudad de México. Por su sobresaliente labor, Francia le otorgó las
Palmas Académicas. También como director de banda se distinguió Melquiades Campos, quien estuvo al frente de las bandas de Zapadores
de Artillería e Infantería del Estado Mayor y de la entonces Secretaría de Guerra y Marina.
En la música popular, el corrido tiene fuertes raíces en el estado. En este género es ampliamente conocido Miguel Angel Gallardo quien, a
pesar de no ser duranguense amó profundamente esta tierra y le compuso varias canciones y corridos, siendo su composición más popular el
Corrido de Durango.
ARTESANÍAS
La actividad artesanal es parte de las múltiples manifestaciones que constituyen la cultura popular. A través de ella se expresan las tradiciones
y costumbres, la concepción de la belleza y la relación con la naturaleza que rodea al pueblo duranguense. Las artesanías, generalmente
elaboradas con instrumentos sencillos, nacieron como un intento de los hombres del campo para satisfacer sus necesidades domésticas y de
expresión artística. Con el paso del tiempo, esta se transformó en una forma de vida, hasta llegar a ser una importante actividad económica
para campesinos y habitantes del medio rural, quienes gracias a ella obtienen sus ingresos, únicos o complementarios. En la entidad se tienen
diversas artesanías tanto de las derivadas de la tradición mestiza, como de la indígena. En cestería (con ixtle, vara de mimbre, raíz de mezquite,
bejuco y lechuguilla), se elaboran bolsas, petates, canastas, sombreros y algunos objetos decorativos en los municipios de Durango, Lerdo,
Poanas y Mezquital. Los alfareros elaboran macetas, jarros, ollas y cazuelas de barro en los municipios de Durango, Poanas y Villa Unión. Para
las fiestas, en algunas poblaciones se elaboran toritos, castillos y judas constituyendo una de las artesanías de más tradición popular. Manos
artesanas elaboran con cuero una gran cantidad de artículos como bolsas, carteras, cinturones, cigarreras, maletas, botas y sillas de montar.
Los grupos étnicos también continúan elaborando artesanías, principalmente destinadas al consumo interno, éstas consisten sobre todo en
prendas de vestir bordadas, utensilios domésticos, instrumentos para desempeñar sus labores en el campo y también objetos ceremoniales.
Los huicholes se destacan por la elaboración de sombreros, bolsas y morrales, además de pulseras, adornos de chaquira y algunos trabajos
en madera y arcilla. Los tepehuanes elaboran arcos, flechas, sombreros, fajas, frazadas de lana y canastas tejidas. En tanto, los tarahumaras
realizan cerámica de barro, arcos y flechas con punta de piedra, flautas y tambores.
Es un orgullo para los duranguenses contar con la Escuela de Pintura, Escultura y Artesanías de la Universidad Juárez. Allí, además de impartirse
las especialidades de escultura, dibujo y pintura, de una forma diferente de las artesanías tradicionales, se da impulso a ramas artesanales
como la textil, la cerámica y el trabajo de vidrio artístico. Los trabajos de los jóvenes artesanos se dan a conocer a través de exposiciones
realizadas en el kiosco de la plaza principal y en algunos comercios. Los artículos que más han resaltado de la producción artesanal de esta
escuela son los elaborados con vidrio. Entre ellos se encuentran finos floreros, vasos de formas caprichosas y figuras decorativas como
pecesillos que parecen volar o mariposas de vuelo detenido.
GASTRONOMÍA
Dentro de la cultura popular duranguense también están las comidas. La alimentación se organiza con base en los recursos que se encuentran
en la comunidad o que les son accesibles. En cuanto a la preparación de éstos depende de las tradiciones de los ancestros, que las jóvenes
generaciones retoman y difunden. En Durango un platillo tradicional es el caldillo durangueño (filete de res frito con ajos, cebollas, jitomates
y chiles) y que además de sabroso, es muy nutritivo. La quesería duranguense tiene gran prestigio ya que se elaboran quesos para los más
diversos gustos. Además del asadero que es queso cocido, destaca el llamado queso menonita utilizado en la preparación de entomatadas,
enchiladas y otros antojitos.
El chorizo es otra especialidad, acompañando una gran variedad de guisos, o con huevos y frijoles.
El pinole también forma parte de los alimentos que se consumen, siendo Santiago Papasquiaro el lugar que se ha especializado en la
elaboración de este rico derivado del maíz. Existen en el estado los más variados dulces típicos como es la cajeta (que en otros lugares se
conoce como ate), elaborada casi siempre con membrillo y que se acostumbra acompañar con queso fresco. También se elaboran dulces con
nuez, almendra, manzana y tejocote; así como ricas frutas cristalizadas.