Matrícula 16-10797
ASPECTOS BÁSICOS
La Edad Antigua
La Edad Moderna.
La Edad Contemporánea.
1.3. La Bioética
La bioética es la rama de la ética dedicada a proveer los principios para la
conducta más apropiada del ser humano con respecto a la vida, tanto de la
vida humana como del resto de seres vivos, así como al ambiente en el que
pueden darse condiciones aceptables para la misma.
1.4. La deontología
Según una corriente «clásica», la ética tiene como objeto los actos que el ser
humano realiza de modo consciente y libre (es decir, aquellos actos sobre los
que ejerce de algún modo un control racional).
Las reglas a seguir.- Se tratan de reglas que pueden ser escritas o no escritas
y que su seguimiento se encuentra limitado por la voluntad del individuo.
UNIDAD II
MORAL Y ÉTICA
2.1. Moralética
La moral primitiva
Durante la Edad Media surge una nueva moral. El régimen feudal se basa en la
gran propiedad de tierra. En lugar del esclavo se encuentra el siervo, que es
propiedad del terrateniente; pero se le considera un ser humano y se le da
cierta protección. La moral que domina es la propagada por la aristocracia,
cuyas virtudes se cifran en el culto al honor, el valor y el arte de la guerra, la
nobleza de sangre, el desprecio al trabajo manual.
El código moral de los caballeros tiene exigencias como las siguientes: Todo
caballero debe tener actitud y lealtad conjuntamente; debe proteger a los
pobres para que los ricos no los opriman, y sostener a los débiles para que los
fuertes no los humillen, debe alejarse de cualquier lugar donde habite la traición
o la injusticia. Cuando las damas o doncellas necesiten de él, debe ayudarlas
con su poder, si quiere ganar alabanzas y premios, pues hay que honrar a las
mujeres y soportar la pesada carga de defender su derecho.
Entre las virtudes más estimadas por la sociedad burguesa están la honradez,
la laboriosidad, la fidelidad conyugal, el patriotismo, etc. La valentía y el arrojo,
virtudes de antaño, fueron sustituidas por las virtudes de la escrupulosidad, el
ahorro y la astucia en los negocios. La curiosidad intelectual y la confianza en
uno mismo, de pecados mortales pasaron a ser virtudes sobresalientes.
Función ética: Asegurar de que el profesional, sea eficaz, que mantenga una
buena conducta moral, la conquista de un título, que reconozca que este
individuo se ha preparado correctamente, que cumpla con sus obligaciones
morales, para hacer de su carrera una misión respetable en la vida, la cual
inicia con la capacitación y termina con el secreto profesional.
UNIDAD III
Esto se agrava teniendo en cuenta que suele ser una tarea que no es prevista
por los psicólogos, que llevan varios años formándose con la idea de tener que
invertir todas sus capacidades en la intervención terapéutica y en los
programas de educación y concienciación. Desarrollar un plan de marketing
puede llegar a ser algo complicado, y hay que buscar tiempo para ello.
3. El intrusismo laboral
Esto tiene resultados desastrosos para todos: a los clientes les perjudica por
gastar tiempo y dinero en algo que no funciona e incluso les puede hacer omitir
los tratamientos realmente eficaces; a los psicólogos les quita una parte de su
mercado, y a los falsos terapeutas les terminan lloviendo las denuncias.
Mucha gente cree que los psicólogos siempre están ejerciendo como tales, lo
cual significa, por un lado, que cualquier amigo, familiar o amigo de amigo les
puede solicitar terapia gratis, y por el otro, que siempre están intentando “leer la
mente” de las personas. Obviamente nada de esto es verdad, pero en
ocasiones puede ser bastante molesto que la gente del entorno cercano asuma
estas creencias erróneas.
3.7 Rol del Psicólogo como agente de cambio social
UNIDAD IV
Todo inicia con preguntas como: ¿Qué hay en la mente de la gente? o ¿por
qué sufren las personas? La inquietud sobre lo humano corre por las venas de
aquellos que buscan en la psicología una profesión; esto implica querer saber,
desear entender. El futuro psicólogo se acerca a las instituciones con la
intención de nutrirse de conocimiento. A veces se queda en la periferia,
revisando sólo ciertos enfoques o propuestas. Pero, al tener la oportunidad de
acceder a un programa integral, podrá empezar a responderse sus primeras
interrogantes de una mejor manera.
El primer logro social del niño es permitir que su madre se aleje de su lado,
porque ella se ha convertido en una certeza interior y en algo exterior
previsible. Dice Wolman: "El camino que lleva de la infancia a la edad adulta es
el progreso de la confianza en los otros a la confianza en sí mismo".
Si esta crisis se supera con éxito los niños en un futuro serán personas
autónomas, capaces de saber qué es lo conveniente en todo momento y
capaces de tomar decisiones.
Son esta fase y la primera las que mayor interés despertaron en Erikson, quien
señaló explícitamente que son las dos fases fundamentales del desarrollo. Este
interés es explicable. Al nacer el bebé se enfrenta al mundo: "Después de una
vida de regularidad rítmica, calor y protección en el útero, el infante
experimenta la realidad de la vida en sus primeros contactos con el mundo
exterior". De la calidad de esta primera experiencia dependerá que el niño
tenga una visión optimista del mundo. Así, vemos fácilmente la importancia
estratégica de esta fase compartida por la fase que ahora nos ocupa, pues
ahora, como cuando era un recién nacido, el individuo se enfrenta a un mundo
nuevo.
Gracias a los psicólogos suizos Piaget e Inhelder, sabemos que, alrededor
e los doce años de edad, nuestros jóvenes se convierten en filósofos "no sólo
preocupados por cómo son las cosas, sino también, por cómo podrían ser". Su
pensamiento sufre un cambio radical y una de las consecuencias más notables
de este cambio es que aparecen las preguntas acerca de la propia existencia:
"¿Quién soy yo?", "¿Qué es la vida", "¿Qué sentido tiene la vida?" Los jóvenes
plantean mil preguntas y buscan las respuestas a través del diálogo con otros
jóvenes que son sus iguales y que enfrentan las mismas tareas de desarrollo.
Los adolescentes sostienen conversaciones interminables, donde, sin
proponérselo, interrogan a la vida. Su poderoso pensamiento exige
explicaciones. Al final de este proceso, se debe ser capaz de decir: "Yo sé
quién soy", "Yo soy capaz", "Yo sirvo para…", "Yo deseo…", "Yo seré…". Pero
sobre todo se debe ser capaz de decir: "Yo valgo mucho", "Yo soy digno de ser
amado y respetado y soy capaz de amar y respetar".
Sólo un confiado será capaz de fundir su identidad con la de otro sin perderse;
de entregar su amor, de trabar amistad íntima y solidaria, de darse a través de
la unión sexual y del orgasmo. Una personalidad sana deberá ser capaz de
amar incondicionalmente; pero también deberá ser capaz de renunciar a su
objeto amoroso si las circunstancias lo obligan. La evitación de la intimidad por
el temor a la pérdida del yo puede llevar a un profundo sentimiento de
aislamiento.
Recobrar los momentos sublimes en los que logramos ser comprendidos sin
palabras sólo será posible gracias a la profunda comunicación que logra la
intimidad. Los enamorados caminan juntos, se tocan, se miran y por un instante
son capaces de mantener relaciones personales genuinas en el amor o en la
amistad. Nuestros hijos sucumbirán ante el irresistible anhelo de la vida y los
padres debemos aceptarlo, aceptar sus noviazgos y confiar en ellos. Abrir la
puerta de nuestra casa a los amigos de nuestros hijos, conocerlos bien y
brindarles nuestros afecto y nuestra confianza será la mejor garantía de
respeto.
UNIDAD V
Al mismo tiempo que persiguen esos objetivos, hacen toda clase de esfuerzos
por proteger el bienestar de aquellos que solicitan sus servicios y de los
participantes en investigaciones que pueden ser objeto de su estudio. Usan sus
destrezas sólo para los propósitos que concuerdan con estos valores, y no
permiten, a sabiendas, que otras personas les den un mal uso.
A la vez que demandan para sí mismos libertad de indagación y comunicación,
los psicólogos aceptan la responsabilidad que esta libertad requiere:
competencia, objetividad en la aplicación de sus habilidades, e interés por lo
que le conviene a los clientes, colegas, estudiantes, participantes en
investigaciones y la sociedad. En la búsqueda de estos ideales, los psicólogos
suscriben principios en los siguientes terrenos:
1) Responsabilidad.-
2) Competencia.-
4) Declaraciones públicas.-
5) Confidencialidad.-
7) Relaciones profesionales.-
8) Técnicas de evaluación.-
Privacidad y confidencialidad
A- Educación y formación
B- Evaluación
La Norma Ética IX trata sobre cómo los psicólogos evalúan a sus pacientes.
Las instrucciones incluyen guía para proponer la opinión válida de la condición
de un paciente. Un psicólogo debe realizar un examen a fondo con base en
las declaraciones del paciente.
UNIDAD VI
6.4. De la confidencialidad.
6.9. De la aplicación
Antecedentes
Capítulo I
Del ejercicio profesional
Párrafo II. Los egresados pendientes de título y/o exequátur sólo podrán
desempeñar la función de psicólogo/a bajo la supervisión estricta, directa e
inmediata de un/a psicólogo/a debidamente registrado/a en el CODOPSI. En
esas circunstancias, ambas partes se regirán por este Código y serán
igualmente susceptibles de las sanciones correspondientes frente a violaciones
al mismo.
Capítulo II
De las declaraciones y actividades públicas
Capítulo III
De la confidencialidad
Art. 15. Es responsabilidad del psicólogo/a mantener bajo estricta confidencia
los datos que pueda obtener como resultado de su actividad profesional.
Párrafo: Cuando se utilicen técnicas que incluyan observadores externos (por
ejemplo: uso de la Cámara de Gesell), los/as psicólogos/as a cargo deberán
velar por la confidencialidad de la información obtenida. La violación a la
misma será responsabilidad de ambos.
Art. 17. El/la psicólogo/a debe planificar la guarda de los registros y datos
obtenidos como resultado de su ejercicio profesional para mantener la
confidencialidad, en caso de retiro, incapacidad o muerte.
Art. 18. En caso de que el/la psicólogo/a necesite hacer una consulta a otro
colega, deberá mantener en confidencia la identidad del paciente o
cliente. El/la psicólogo/a consultado/a debe mantener los mismos criterios de
confidencialidad.
Art. 19. La información recibida por un/a psicólogo/a de una tercera persona
sobre un cliente o paciente sólo deberá ser transmitida al cliente o paciente con
la autorización expresa del informante.
Art. 21. El/la psicólogo/a debe limitar su ejercicio profesional a las necesidades
reales del cliente o paciente.
Art. 23. El/la psicólogo/a debe dar a conocer el monto de sus honorarios
profesionales desde la primera sesión de trabajo, así como un estimado del
número de sesiones que requerirá su intervención. En caso de que los
honorarios sean globales, deberá informarlo antes de desarrollar sus
actividades.
Art. 26. El/la psicólogo/a debe colaborar con las instituciones que desarrollen
actividades relacionadas con la psicología, con el fin de contribuir a la
proyección de la psicología y del CODOPSI.
Art. 28. El/la psicólogo/a debe fomentar el respeto irrestricto a los derechos
humanos y denunciar cualquier violación a los mismos.
Art. 29. El/la psicólogo/a debe acatar los principios profesionales y éticos en la
práctica de la psicología para así evitar que las técnicas y métodos psicológicos
puedan ser utilizados en perjuicio de los derechos humanos.
Art. 30. Todo/a psicólogo/a debe evitar la complicidad activa o pasiva, directa
o indirecta en acciones que violen los derechos inalienables de las personas.
Art. 32. Los materiales de evaluación psicológica deben estar bajo el estricto
control de psicólogo psicólogos/as, orientadores/as o técnicos en
psicometría. El uso y la aplicación de los mismos deben ser realizados por
profesionales debidamente entrenados en el manejo específico de ella, de
acuerdo a la clasificación siguiente:
Art. 34. Las pruebas psicológicas a ser publicadas deberán ofrecerse sólo a
editores especializados que los manejen de una manera profesional y que
controlen su distribución; y se deben incluir todos los datos relativos a su
tipificación, validez, confiabilidad y formas de uso.
Art. 35. La distribución, venta y uso del material psicométrico debe ajustarse
estrictamente a lo previsto por la Ley No. 22-01 que crea el Colegio
Dominicano de Psicólogos (CODOPSI) y regula el ejercicio de la profesión de
psicólogo en la República Dominicana y por la ley de derecho de autor vigente
en el país.
a) Advertencia
b) Amonestación privada
c) Amonestación pública
d) Suspensión temporal o definitiva del CODOPSI
e) Solicitar al Poder Ejecutivo la suspensión temporal de su exequatur
f) Solicitar al Poder Ejecutivo la cancelación definitiva de su exequatur.
Art. 39. El/la psicólogo/a y el CODOPSI deben procurar por todos los medios
legales a su disposición, que el presente Código sea respetado por todos los
profesionales de la psicología que ejerzan en el país.
UNIDAD VII
Art. 10. Los miembros activos tendrán que cumplir con la Ley No. 22-01, que
crea el
CODOPSI, el Código de Ética y Disciplina, y los presentes estatutos, así como
acatar los
mandatos y disposiciones que establezcan la Asamblea General y el Consejo
Directivo Nacional.
Art. 11. Los miembros activos del CODOPSI tendrán derecho a:
a) voz y a voto;
b) elegir y a ser elegidos en cualquiera de sus organismos de dirección;
c) ser parte de las comisiones que formen la Asamblea General, el Consejo
Directivo
Nacional y/o el Consejo Directivo Regional correspondiente.
Párrafo I. Para ejercer los derechos a voto, a elegir y a ser elegido en
cualquiera de las
instancias del CODOPSI, se requerirá estar al día en el pago de las cuotas,
conforme se
establece en el Art. 13 de la Ley de Colegiación.
Párrafo II. Para ejercer el derecho a ser elegido como miembro directivo
nacional o regional
se requerirá tener cuando menos un año como miembro activo del CODOPSI.
Párrafo III. Quedan exceptuados del derecho a ser elegidos los miembros del
CODOPSI que
hayan sido sancionados por el Tribunal Disciplinario y/o el Tribunal Superior
durante el período
inmediatamente anterior a las elecciones.
Art. 12. Será un deber de todo miembro activo:
a) Cumplir y velar por el cumplimiento de la Ley No. 22-01 que regula el
ejercicio de la
profesión de psicólogo y del Código de Ética y Disciplina del CODOPSI.
b) Velar que los colegiados cumplan con los estatutos y reglamentaciones
internas del
CODOPSI.
c) Propugnar por el mejoramiento de las legislaciones y reglamentos que rigen
el ejercicio
profesional de la psicología.
d) Mantenerse al día en el pago de las cuotas establecidas por el Colegio.
e) Donar, a la biblioteca del CODOPSI, copia de todo trabajo científico que
presente.
f) Cualquier otro deber que establezca la Asamblea General y/o el Consejo
Directivo
Nacional.
Art. 13. Los miembros honoríficos no colegiados tendrán derecho a:
a) Voz dentro de los organismos del Colegio.
b) Representar al colegio ante cualquier evento, por designación del Consejo
Directivo
Nacional o la Asamblea General.
c) Recibir las publicaciones del Colegio.
d) Cualquier otro derecho que establezca la Asamblea General.
Art. 14. Será un deber de todo miembro honorífico no colegiado:
a) Velar por el cumplimiento de la ley de colegiación y del Código de Ética y
Disciplina del
CODOPSI.
b) Propugnar por el cumplimiento de los estatutos y demás reglamentaciones
del
CODOPSI.
c) Colaborar con las publicaciones del Colegio.
d) Cualquier otro deber que establezca la Asamblea General.
Art. 15. Todo miembro activo que sea designado Miembro de Honor mantendrá
los deberes y
derechos propios de su membresía como activo.
Art. 16. Los miembros pasivos solo tendrán derecho a estar registrados en el
CODOPSI.
Párrafo. Los psicólogos integrantes de esta categoría no disfrutarán de los
privilegios
correspondientes a los demás miembros del Colegio.
Art. 17. Los miembros pasivos del CODOPSI tienen el deber de:
a) Cumplir y velar por el cumplimiento de la Ley No. 22-01 que regula el
ejercicio de la
profesión de psicólogo y del Código de Ética y Disciplina del CODOPSI.
b) Propugnar por el mejoramiento de las legislaciones y reglamentos que rigen
el ejercicio
profesional de la psicología.
Art. 18. Todo miembro del CODOPSI que presente renuncia como tal, tendrá
que someterla
por escrito al Consejo Directivo Nacional a través de la Secretaría General,
debiendo exponer los
motivos de la misma.
Art. 33.
Art. 34.
El Colegio Dominicano de Psicólogos recibirá un cinco por ciento (5%) del valor
de importación
de todo material psicológico (test, equipos de laboratorios, etc.).
14
Vicepresidente en funciones.
Secretaria
Secretario.
Ramón Alburquerque,
Presidente
Secretaria
Secretario
HIPÓLITO MEJÍA
15
DADA en la ciudad de Santo Domingo de Guzmán, Distrito Nacional, Capital de
la República Dominicana, al primer (1er.) día del mes de febrero del año dos
mil uno; años 157 de la Independencia y 138 de la Restauración.
HIPÓLITO MEJÍA
CONCLUSIONES
Se busca prevenir los abusos y dejar de lado los prejuicios y tabla de valores
culturales que tiene el psicólogo para la toma de buenas decisiones. Además,
no podemos dejar de lado, que los profesionales de la salud mental somos
seres subjetivos, social y culturalmente moldeados, con una historia de vida y
de aprendizajes. Y que por lo tanto, nuestra ética tanto profesional como
personal, nos debe llevar a una conceptualización de las enfermedades
mentales donde se perciban con respeto y sobre todo respeto hacia los
pacientes que la padecen.