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LOS SEIS NIVELES DEL KRIYA YOGA por Paramahamsa

Hariharananda

"Una firme fe en Dios es el único rayo de esperanza que penetra la oscuridad del
miedo y la ignorancia."- Rig Veda

Paramahansa Hariharananda

Primer Kriya

En el primer Kriya, al activar el proceso de realización de Dios en la columna


vertebral, puedes convertir tu mente ordinaria en conciencia superior y experimentar
las tres cualidades divinas de luz interior, sonido y gozosa vibración. Al tocar el suelo
con tu cabeza puedes magnetizar la columna y el lóbulo frontal del cerebro, y
comienzas a experimentar la luz divina allí.

Observas el poder de Dios subiendo y bajando por el ascensor de siete pisos (los siete
chakras principales en el cuerpo), dando poder a nuestro cerebro y Alma. Los primeros
cinco pisos son el "reino del diablo", en donde deambulan la ignorancia humana y la
maldad. Los pisos seis y siete son el reino de los cielos, en donde Dios está activándolo
todo directamente. El primer Kriya atrae la kundalini shakti, que está inactiva, no
evolucionada, el poder divino o del átomo, desde el centro coccígeo hasta la pituitaria
y más arriba. El meditador puede sentir que cierta corriente divina y luz están subiendo
y bajando por la columna.

Mahamudra (algunas posturas físicas) cultiva el cuerpo, y de ese modo recarga tus
órganos vitales, cardíacos, gastrointestinales y otras funciones biológicas. Ésto te
permite recoger la cosecha espiritual del cuerpo entero y Alma.

Cuando tu mente, intelecto, pensamiento y ego están calmados, entonces puedes oír el
sonido divino, el habla invisible de Dios. A través de la práctica, puedes oír este sonido
continuamente. Esto se llama anahata dhwani, o sonido divino ininterrumpido. En el
primer Kriya el meditador puede alcanzar subhechha samadhi, o profundo deseo por la
realización de Dios. Éste surge cuando obtienes una supra-sensación en el cuerpo y
una gran calma.

Segundo Kriya

En el segundo Kriya aprendes a percibir las tres cualidades divinas en cada centro. Te
das cuenta de que Dios está activando en todos tus cinco centros inferiores, y por lo
tanto controlando el deseo de dinero, sexo, comida, emoción y creatividad. Mediante
esta conciencia transformas tu ira, orgullo y crueldad en amor.

Gradualmente, a medida que el poder sube por la columna, en cada centro escuchas
diferentes tipos de sonido divino. En la meditación puedes tener destellos de luz,
vibración y los doce tipos de sonido divino viniendo desde el alto cielo, el vacío, y
llenando todo el cerebro. Meditas en los 50 pétalos de loto en los seis chakras, debajo
de la fontanela (sahasrara), numerados en 4, 6, 10, 12, 16 y 2. Estos pétalos son tu vida
extrovertida. Del mismo modo, estudias las 50 partes del cuerpo y te vuelves consciente
del deseo de Dios operando a través de ellas. (Todo esto es hecho para permitirte
experimentar divinidad en cada átomo de tu cuerpo).

Cuando estés ocupado en la vida práctica, como al hacer tu trabajo, sentirás entonces
que Dios está funcionando a través de un centro determinado. Si surge algún
pensamiento o tendencia negativos, serás capaz de eliminar esa negatividad. El
samadhi del segundo Kriya se llama vicharani samadhi. Esto significa que el poder de
Dios está vagando de un centro a otro dentro de tu cuerpo y en todos tus órganos
vitales y partes del cuerpo.

Tercer Kriya

La práctica de este Kriya es dentro del cráneo, en el tercer circuito. El cráneo es el


reino divino. Tu verdadero ser está escondido dentro de la pituitaria, experimentando
constantemente el poder de Dios como el alma que mora en tu cuerpo.

Durante la meditación, la única percepción es la de las tres cualidades divinas girando


dentro del cráneo. El devoto siente como si su Alma estuviera separada del cuerpo y
estuviera flotando en un vacío. En este nivel el meditador siente que el Alma es
omnipresente y que sube hacia el alto cielo. Ves el mundo entero dentro de tu cráneo.
En tu coronilla, mil pétalos de luz giran dentro de tu cerebro e iluminan tu Alma.

Cualquier cosa que hagas, incluso al estar ocupado en actividades mundanas, sentirás
como si cierto poder superior estuviera actuando a través de ti. Sin embargo,
permanecerás desapegado y serás capaz de evitar toda negatividad que se presente. El
samadhi del tercer Kriya es tonumanasa samadhi. Esto significa que la mente no está
vagando en el sentido biológico; ésta ha alcanzado el nivel introvertido, en el que la
mente ordinaria ha sido transformada en conocimiento. Aún se mueve, pero sólo en el
sentido filosófico, ya que percibe conciencia de Dios incluso mientras permanece en el
mundo.

Cuarto Kriya

Al practicar el cuarto Kriya experimentas cierto movimiento especial del alma dentro
de la frente, puente troncoencefálico, tálamo, hipotálamo, glándula pineal, enfrente de
la pituitaria y en el cerebro medio. Experimentas que la luz está girando a tu alrededor
desde los altos cielos hasta la tierra. Este cuarto nivel se llama asamshakti samadhi.
Esto significa que estás vagando libremente en la supraconciencia y percibes la
presencia viviente de Dios en todo tu cuerpo.

Ves al Ser como una deidad que experimenta iluminación divina y la sensación de Dios.
Puedes ver miles de chispas y destellos, incluso con tus ojos abiertos, que iluminan tu
mundo interior. También puedes ver, literalmente, una super luz por encima de la
coronilla, iluminando el universo entero. En tu cuerpo puedes ver siete tipos de luz, dos
fuegos en cada uno de tus siete centros, uno ascendiendo y otro descendiendo. Puedes
ver estas luces tanto dentro como fuera de tu cuerpo. El cuerpo del gurú aparecerá
oscuro, con iluminación a todo su alrededor.

Quinto Kriya

En el quinto Kriya el devoto experimenta principalmente una sensación divina en el


cerebelo. Estás acercándote gradualmente a la glándula pineal y haciendo tu mayor
esfuerzo por entrar en ella. Así como los rayos caen, acompañados de truenos y lluvia,
así también las chispas vuelan hacia arriba desde tu cóxis para iluminar tu mundo
entero con poderoso sonido, luz y vibración. Agua (lágrimas) vendrán, como una
expresión de tu profundo amor por Dios. No puedes dejar de llorar, porque estás en la
presencia viviente de Dios.

Este quinto nivel de samadhi se llama sattapatti samadhi. Satta significa alma. Patti
significa apareciendo. El alma está apareciendo y tratando de ingresar en la glándula
pineal. Eso significa que estás cerca del nirvikalpa samadhi.

Mediante la práctica del quinto Kriya puedes alcanzar también el sexto nivel de
samadhi, llamado padartha bhabini samadhi. Eso significa que estás casi fundido en la
sabiduría. En este nivel no tienes conciencia del universo. Sientes que la puerta de Dios
está parcialmente abierta, pero aún no puedes entrar. A través de tu meditación estás
viendo el poder de Dios en cada ser humano y en todas las plantas, animales, árboles
-en los cinco elementos densos subyacentes en toda existencia física. Estás absorto y
fundido en Dios, en elevada conciencia cósmica.

Sexto Kriya

El sexto Kriya es el reino divino. Obtienes constante conciencia de Dios. No tienes


conciencia del mundo; todo pertenece a Dios. Estás viviendo en la sabiduría. Esto
significa que no estás percibiendo el mundo, sino que sólo conoces la verdad. No tienes
cerebro del mundo. Eres uno con el Todopoderoso.

Estás viviendo tu vida diaria, pero estás permaneciendo siempre junto a la puerta de
Dios. En cualquier momento puedes entrar en nirvikalpa samadhi, el séptimo nivel de
samadhi. Esto significa que estás en el mundo y no estás en el mundo. Puedes entrar a
voluntad en el estado sin respiración y sin pulso. Este estado introvertido es también
conocido como turiya samadhi, que significa fundirse en Dios. En este estado, no hay
dolor, físico o psicológico, porque no hay separación entre tu alma y Dios.

En tu vida diaria, ves a Dios en los tres cuerpos -físico, astral y causal- y obtienes la
purificación de cada uno. Sientes que eres el hijo de Dios, el hijo del Único Padre
Celestial. Estás obteniendo constantemente el verdadero amor que proviene de conocer
y experimentar que Dios está dentro de ti, dentro de todo tu sistema. Así que Dios está
siempre muy cerca y a todo tu alrededor.

Por lo tanto, el sexto Kriya brinda completa realización de Dios, liberación constante y
desarrollo integral de cuerpo, mente y espíritu.

Los primeros seis niveles de samadhi son conocidos colectivamente como savikalpa
samadhi. Tu conciencia está permaneciendo en el mundo, pero estás desapegado en cada
centro, en donde tu alma está en Dios. A través de las técnicas del tercer, cuarto y quinto
Kriyas, desarrollas un amor por Dios que es intoxicante, de la manera en que un esposo
recién casado ama a su esposa, un ávaro ama su dinero, o un borracho ama el alcohol.
Estás explorando cómo tus tres cuerpos funcionan en este limitado cuerpo humano y
aún así percibes tu amor por Dios en el mundo exterior.

En el sexto Kriya y séptimo samadhi, vas más allá de éstos y te fundes con el infinito.

Fuente: extracto de artículo original de Paramahansa Hariharananda, publicado en


español por Kriya Yoga Argentina.

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