“Por Amor”

En la historia de Ninguna Eternidad como la mía, se puede notar que uno de los temas
principales que quiso destacar su autora, es el amor y el desamor, como lo vemos durante
el desarrollo de la corta pero intensa relación entre Isabel Arango y Javier Corzas, en donde
vemos la entrega de ella a tal punto de que esta es capaz de renunciar a su mas grande
sueño que es el de bailar, y el amor de el, que fue tan grande hasta el punto d pe llegar al
sacrificio, alejándose para siempre aunque eso les destrozara a ambos. Así, el amor cuenta
con una amplia gama de significados y formas de interpretación, por ejemplo Anais Nin lo
define de la siguiente manera, “¿Qué es el amor sino aceptación del otro, sin importar lo
que eso sea?”, para el psicólogo Robert Sternberg el amor se define como la combinación
de Intimidad, Pasión y Compromiso, mientras que para los científicos solo es una
correlación entre la cantidad de ciertas hormonas presentes en nosotros y los estados que
se califican como amorosos, y como estas cientos de definiciones que seria imposible
terminar de citar, sin embargo todas las definiciones coinciden directa o indirectamente en
que el amor es ese sentimiento expresado por alguien.
La historia de este libro hace reflexionar a uno acerca de lo que es el amor y la
manera en que lo definimos como un sentimiento que se da hacia otra persona, y en la cual
buscamos nuestra felicidad y bienestar. Este tipo de amor solo se da una vez en la vida, si
este se pierde, nunca se encontrara otro igual que se viva con la misma intensidad o mas
incluso, por lo que de ser así, solo será cariño disfrazado de amor. Y es ese amor el que
nos dará las mejores experiencias de la vida, el que nos dará un motivo por el que vivir o
en algunos casos querer dejar de hacerlo, pues algunos nos acostumbramos a abrir el
corazón para amar sin importar el precio, tan solo disfrutando el sentimiento en el momento
y dejando de lado el miedo al dolor que esto pueda ocasionarnos. La desventaja de abrir el
corazón de esa manera es que al mismo tiempo vamos alimentando un miedo a sufrir el
desamor, y es el miedo a este lo que nos lleva en ocasiones a prometer muchas cosas para
evitarlo y así no perder a la pareja amada, pero al final todas esas palabras dichas al aire
para intentar mantenerse unidos se vuelve imposibles de demostrar con hechos si no se
tiene la seguridad de nuestros sentimientos hacia la otra persona, lo que lleva a sufrir una
pena aun mas grande.
Así que esta en nosotros decidir si nos dejamos caer en el desamor, o lloramos lo
suficiente para después dejarlo como un buen recuerdo y seguir adelante con nuestras
metas, sin importar el daño que esa ruptura nos haya hecho.

Jesús Nahir Romero Castillo 1º C