En éste grupo se incluyen todos los aceros de herramientas que se usan para realizar trabajos
en caliente, detallándose a continuación las composiciones y principales propiedades de los
aceros de herramientas que durante el trabajo están sometidos a temperaturas superiores a
unos 200ºC.
Los primeros aceros que se emplearon para éste fin fueron los aceros al carbono con 0.5 a
0.9% Carbono, que se empleaban después de ser normalizados, y en algunas ocasiones
después de ser templados y revenidos. Pero requieren de una refrigeración para evitar que
pierdan el temple cuando están en contacto con las piezas en caliente.
La combinación del carbono con otros elementos de aleación como el cromo, molibdeno y
wolframio, que tienden a finar el grano y como consecuencia para mejorar la tenacidad el
acero y aumentar su resistencia en caliente.
Los aceros de baja aleación con 5% de cromo se caracterizan por tener gran resistencia
mecánica a temperaturas de 400º o 500ºC, muy buena templabilidad y gran resistencia al
desgaste. Además admiten bien la refrigeración sin peligro de agrietamiento.
2.- Gran templabilidad para que las grandes pieza lleguen a adquirir suficiente dureza en el
temple y puedan ser enfriadas al aceite o al aire y así evitar deformaciones y grietas en los
tratamientos térmicos.
5.- Deben tener gran tenacidad para trabajos de forja a martillo o martinete.
UNE F-5317 – AISI H11 – BÖHLER W300
Hay que tener especial cuidado en tratar bien el acero durante la forja, sin
sobrecalentamientos, ni trabajar por debajo de la temperatura de forja.
Con un poco mas tenacidad en caliente que su primo el H13, pero de menor resistencia al
desgaste en caliente. Aunque las diferencias apenas son apreciables.
Composición:
FORJADO:
600-650ºC con enfriamiento lento y controlado en horno 10-20ºC/h hsata 600ºC después
enfriamiento posterior al aire.
EMPLE:
REVENIDO: