Lo que también se tiene que tener en cuenta es que siempre va a existir tres tipos de
contratos, dos de consultoría de obra (son la elaboración del expediente técnico) y uno de
ejecución. No puede ejecutarse una obra sin la debida supervisión permanente.
Una obra pública nace de la constatación de una necesidad publica, para poder satisfacer dicha
necesidad surge una idea, la cual debe mostrar rentabilidad o efectividad. Para poder
determinar esa rentabilidad social, esta idea ingresa a un sistema, denominado en la
actualidad Sistema Nacional de Programación Multianual y Gestión de Inversiones – Invierte
Perú (antes conocido como SNIP).
Ciertos estudios se realizan para determinan la viabilidad técnica y económica de esta idea, en caso
quede demostrada, pues se otorga la declaratoria de viabilidad, lo cual permite la elaboración del
expediente técnico y la ejecución de la obra.
Cuando se habla de contrato de obra, no solo se refiere a aquel papel que se firma, que
representa uno de los elementos que conforma el contrato, también debe contener los
documentos del procedimiento de selección que establecen reglas definitivas, es decir, lo que
se conoce como las bases integradas.
Y finalmente, la norma también habla de otros documentos que deriven del procedimiento de
selección que establezcan obligaciones para las partes.