En el caso de Chile, dentro de este ciclo se han visto algunas iniciativas, tanto
públicas como privadas, que pese a su dispersión han servido para la circulación
de obras y a la vez de espacios de encuentro y retroalimentación para diversos
artistas indígenas contemporáneos. Tal es el caso de las 2 Bienales de Arte y
Cultura Indígena de los años 2006 y 2008, las que no tuvieron continuidad y un
conjunto de muestras individuales y colectivas que lenta pero sostenidamente
han configurado una especie de escena de arte étnico producido por sujetos que
asumen públicamente su condición.
Uno de los objetivos centrales de las tres versiones ya realizadas del Encuentro
de las Culturas organizado por el Departamento de Pueblos Originarios del
Ministerio de las Culturas, las Artes y el Patrimonio, ha sido consolidar una
instancia donde se han reconocido un conjunto de obras y a la vez se han
reforzado puntos de convergencia comunes para creadoras y creadores
indígenas.