Conferencia 2
• Mundo - El Universo
• Liberación o Moksha
El Mundo - El Universo
• Hay cinco pranas. Nuestra salud física y psicológica depende de su correcto funcionamiento.
Liberación o moksha
• La multiplicidad mundana representada por objetos de los sentidos tales como el tacto, el
sonido, etc., que ordinariamente se supone que es vinculante, resulta ser el medio infalible de
la autorrealización.
• Conocimiento como medio de liberación y sadhana que prepara la situación adecuada para
la gracia divina.
• Adoración (puja), deidad (devata) y posturas físicas (mudra) - esencialmente son reflexiones
sobre la identidad del yo individual con el Ser Universal.
Pravritti - ‘Llendo hacia’ Significa vivir en medio de tareas mundanas e intereses mundanos
con los sentidos y acciones dirigidos principalmente hacia el mundo externo. Rituales y
sacrificios. Búsqueda dharmática de la satisfacción en la sociedad y nacimiento en mundos
superiores. Personas casadas
Bhoga es yoga Bhoga es yoga: proviene de Ser Supremo y lleva al Ser Supremo. Así como la
luz de la luna proviene del Sol, el disfrute del mundo proviene del dios inmanente: Shiva y
Shakti que se dividieron en sujeto y objeto. Bhoga es explorar la experiencia de sujeto-objeto.
Es la sublimación que lleva a moksha. La atención está en el sujeto y no en el objeto – sino,
es hedonismo o materialismo. Disfrute del sujeto no del objeto. El disfrute nos lleva a
descansar en el Ser. El mundo de objetos es un medio de realización de Shiva como el sujeto
supremo. Cinco tipos de prácticas tántricas Samayachara – Sendero de la unión con la Madre
Divina. Dakshinachara – Sendero de la mano derecha.
Kaulachara – Sendero del Kaula. Mishra – Sendero mixto. Vamachara – Sendero de la mano
izquierda. Samayachara - Culto centrado en la mente Es una adoración interna en la cual se
lleva a cabo el homa (ritual de fuego) en la mente. Se basa solo en prácticas yóguicas sin la
limitación que implica el ritualismo externo. Elevación de la kundalini hacia la unión en el
sahasrara a través de la meditación. Práctica de Sri Vidya.
Suvasini puja se realiza a los pies de una mujer quien representa a la Madre Divina .
Mishra - Culto mixto Una síntesis de los sistemas vamacara y daksinacara. Una mezcla de
ritualismo tanto interno como externo. Sus seguidores gratifican los sentidos (bhoga) para
luego renunciar completamente a toda búsqueda de disfrute sensual (tyaga). Cultiva la
devoción a la divina femineidad, la Madre del Universo. Se despierta y eleva la kundalini hasta
el anahata chakra. Se centra en este chakra para cultivar una relación devocional con la Devi.
Adoración ocurre en el plano mental o manasa puja.
Shava sadhana - meditación sobre un cadáver. Elevación de la kundalini hasta lograr los
chakras superiores trascendiendo los miedos.
«El Tantra es, en algunos de sus aspectos, una doctrina secreta; es un Gupta Vidya. No
puedes aprenderla del estudio de libros. Deberás obtener el conocimiento y la práctica de los
Tantrikas, los Acharyas y los gurús que tienen la clave. El estudiante tántrico debe estar
dotado de pureza, fe, devoción, dedicación al gurú, humildad, coraje, amor cósmico,
veracidad, contentamiento y estar libre pasión y codicia. En ausencia de estas cualidades en
el practicante implica un grave abuso del Saktismo.» Swami Shivananda
Temas:
A menudo el kaula se define como todo sendero izquierdo del tantra: no dualista, transgresor,
adorador de la diosa.
Sin embargo, también había un linaje específico llamado Kaula encabezado por la figura
semihistórica y semilegendaria de Macchanda Natha (Matseyendra), posiblemente del siglo 9 n. e.
El kula aspira a la autorrealización y propone un sistema potente y efectivo que ayuda a elevarse
por encima de la dualidad de lo sagrado y lo profano.
Sigue el sendero de la mano izquierda que incluye la práctica de las cinco emes (pañca-makāra):
māṃsa (carne), matsya (pescado), madya (vino), mudrā (granos deshidratados), y maithuna (unión
sexual).
Sublimando la energía sexual, fluye el amor universal como el sendero hacia la liberación.
El culto kula comenzó con las prácticas de los ascetas kāpālikas en los crematorios.
Ellos se centraban en la adoración al aspecto terrible de Śiva como Bhairava junto con su
consorte, la Diosa, con especial énfasis en la feroz Cāmuṇḍā, rodeada de ocho Madres que cada
una tenía su clan de yoginīs.
Las yoginīs eran el séquito de las diosas y las mensajeras del conocimiento esotérico.
Para apaciguar a sus feroces deidades, el asceta kāpālika les ofrecía sangre, carne, alcohol y
flujos sexuales.
Matsyendra reconfiguró el ritual kāpālika y lo hizo más accesible al público de gente casada.
Este movimiento dentro del shaivismo esotérico descontaminó el misticismo de los kāpālikas,
eliminó aspectos mortuorios y puso mayor énfasis en el erótico del culto de las yoginīs.
Bhairava es adorado como Kuleśvara, junto con su consorte Kuleśvarī, y las ocho Madres como
las matriarcas de familias o clanes (kulas) de yoginīs.
En este ritual salvaje y visionario, el practicante busca el contacto (melāpa) con las yoginīs en
forma desencarnada, o encarnada como una dūtī, o ‘consorte sexual’.
El énfasis del ritual se puso menos en alimentar a esas deidades voraces, y más en la relación
erótico-mística con las yoginīs, a menudo representadas como híbridos entre humanos, animales,
pájaros y plantas.
Estas deidades femeninas eran a su vez divinas y demoníacas, terribles y benignas. Los humanos
tradicionalmente las adoraban con ofrendas de sangre y sacrificios de animales. Si se sentían
satisfechas por dichas las ofrendas, las yoginīs se encarnarían en mujeres jóvenes y atractivas para
gratificar a sus devotos humanos y otorgarles poderes sobrenaturales (siddhis) y la capacidad de
volar.
El kaulismo no era sectario ya que no proponía la adoración a una deidad en particular y así
cualquier culto tántrico podía ser reformulado en una versión de kaula y reinterpretado en estos
nuevos términos.
El kaula consiste en un cuerpo de técnicas para controlar a diferentes seres, especialmente a las
yoginīs, quienes fueron identificadas con las consortes rituales femeninas del practicante
masculino.
Las herramientas usadas eran : 1) Mantras: Fonemas capaces de controlar a estos seres si se
pronuncian de manera adecuada y con las condiciones propicias. 2) Posesión: Técnicas que
permitirían que estos seres actúen en el propio cuerpo. 3) Sacrificios y ofrendas