A pesar de los esfuerzos realizados, pocos países han logrado un consenso interno que
se traduzca en una legislación o una política nacional coherente. Al revisar las
regulaciones y disposiciones vigentes en diversos países, así como las recomendaciones
de comités y organismos internacionales, se comprueba que existen aspectos comunes
en lo que respecta a la utilización de las técnicas actuales.
Estos son:
2. Las instituciones y el personal médico que ofrecen estos servicios deben estar
sujetos a supervisión y regulación sanitaria.
3. La paternidad y la maternidad deben estar determinadas por leyes que rijan para
todos los nacimientos logrados mediante estas técnicas.
A pesar del acuerdo general sobre estos aspectos, las características socioculturales,
económicas y religiosas en cada Estado pueden crear divergencias en cuanto a:
De todo esto se desprende que, a la hora de establecer leyes y regulaciones que definan
la política interna en materia de reproducción, cada Estado debe velar por que éstas no
atenten o interfieran con la libertad y los derechos humanos básicos. Para esto han
quedado determinados varios principios, independientemente de las variaciones
políticas, culturales y religiosas, que pudieran servir de base a futuras regulaciones o
acuerdos de carácter internacional, y que se resumen en:
4. La inviolabilidad de la persona.
Tratamientos clínicos
Dos de los tratamientos de fertilidad más comunes son los siguientes:
Inseminación intrauterina
Se recolecta esperma sano y se lo inserta directamente en el útero durante la ovulación.
Fertilización in vitro (FIV)
Se extraen óvulos de los ovarios y se fecundan con esperma en un laboratorio, donde
se desarrollan como embriones. Luego, un médico coloca los embriones en tu útero.
Otros tratamientos
La crio preservación (congelación de óvulos, esperma o embriones), la donación de
óvulos o embriones, y los portadores de gestación (subrogación) también son formas
de tecnologías de reproducción asistida.
La donación de esperma, la donación de óvulos y la subrogación son utilizadas a
menudo por parejas del mismo sexo o por personas solas que desean tener un bebé.
También se puede usar esperma u óvulos de un donante si la infertilidad se debe a un
problema con tus propios espermatozoides u óvulos.