Los primeros días y semanas deben asimilar una nueva situación.
Esta será la primera ocasión en que se separa de sus padres o
cuidadores habituales, además de encontrarse en un espacio desconocido. Esto les provocara un sentimiento de inseguridad.
la reacción del niño dependerá de diversos factores:
-el niño ve desaparecer a su madre sin estar seguro de si
regresara, él percibe que se queda en un lugar desconocido, rodeado de otros niños también desconocidos y que, en muchos casos, se encuentran en la misma situación lo que implica que lloren.
-El lugar es mucho más grande que en aquellos en los que se
desenvuelve normalmente. Nuestra labor tendrá que enfocarse a conseguir que resulte lo más fácil y agradable posible. Nuestra tarea como educadores no debe limitarse a atender a los niños.
No podemos perder de vista que los padres están confiándonos
su <<posesión>> más valiosa.es posible que alberguen dudas sobre si es realmente conveniente para sus hijos incorporarse a la escuela infantil; los padres tienen la idea equivocada de lo que es una escuela infantil y de cómo funciona.
Existe un tercer actor a tener en cuenta en este proceso
adaptativo: los propios educadores. Debemos tener en cuenta que también ellos deben empezar a conocer a un niño que les es extraño, familiarizarse con sus características y adaptarse a ellas mientras responden a los miedos que puedan plantearles los padres. Podemos abordar este importante momento desde un triple enfoque : los niños, los padres y nuestra propia labor educativa.
Los niños:
primera separación que experimenten respecto de sus figuras de
apego. Tendremos que sopesar cómo es el vinculo de apego que tienen con su cuidador habitual.
Cada niño habrá tenido una experiencia individual de interacción
social. Encontraremos niños muy acostumbrados a estar con personas diferentes y otros que han tenido una relación casi única con sus progenitores. Los niños con mayor experiencia social suelen manifestar menos conductas de angustia.
Nuestra labor será facilitar su adaptación, utilizaremos diferentes
estrategias que deberían adaptarse de modo individual en la medida de los posible:
Escalonar la incorporación de los niños, que vayan
accediendo a la escuela poco a poco. Hablarles de la escuela en casa y realizar alguna visita para observar a los otros niños, los juguetes, los adultos que trabajan en ella, etc. Utilizar una progresión temporal lo que implica empezar pasando allí solo algunas horas, que irán aumentando paulatinamente para asumir la jornada completa Permitir que la figura de apego le acompañe al menos esos primeros días Mantener alguna linea de comunicación abierta para que el niño la utilice en caso de necesitar el apoyo de su figura de apego Evitar someter al niño a estímulos excesivamente fuertes Utilizar algún elemento que favorezca la privacidad del niño y le permita tener algún lugar para <<sus> cosas. Fomentar que el niño traiga a la escuela elementos de casa que le hagan sentirse seguro: fotografías suyas de padresbo de otros familiares
Insistimos en la importancia de adaptarnos al momento