Asensio, J. C. (2009). De la liturgia visigoda al canto gregoriano. En M. G. (ED.
), Historia de la Música en España e Hispanoamérica. De los orígenes hasta c. 1470 (págs. 21-76). Barcelona: Fondo de Cultura Económica.
DE LA LITURGIA VISIGODA AL CANTO GREGORIANO
Tenemos noticias de la incipiente liturgia hispana, o al menos la constancia de prácticas litúrgicas desde las primeras épocas de la cristianización, como el excepcional testimonio de una peregrina [Egeria] que, a finales del siglo IV, nos ha dejado un fabuloso relato de su viaje a los Santos Lugares. A este excepcional testimonio hemos de añadir los de tipo legislativo resultantes de las reuniones conciliares hispanas, sobre todo de los concilios toledanos y de los escritos litúrgicos, eruditos y pedagógicos de algunos de los Santos Padres de la Iglesia hispana. Inevitablemente el canto y la liturgia hispánica fueron sustituidos a finales del siglo XI por la liturgia romana y el canto gregoriano. El antiguo rito hispánico siguió un oscuro camino casi olvidado en las parroquias toledanas en las que le fue permitido continuar hasta comienzos del siglo XVI, cuando experimentó un renacer cuya autenticidad plantea muchas dudas. En cuanto a los textos, sus autores no pudieron disponer de todas las fuentes, y con respecto a la música, la tradición oral debía estar tan maltrecha que lo copiado en los llamados cantorales mozárabes no refleja en la mayoría de los casos los movimientos melódicos de los neumas de los más antiguos manuscritos.
LITURGIA HISPÁNICA: ORÍGENES Y DESARROLLO
Con la invasión Visigoda se produjo las primeras etapas de esplendor de la liturgia cristiana en la península ibérica. Tradicionalmente se considera que en Occidente las primitivas formas litúrgico- musicales nacieron según una rigurosa cronología conforme se iban enriqueciendo y estabilizando las distintas prácticas: la salmodia sin respuesta (