D.PREVIAS Nº 590.18-K
AUTO
En Barcelona a, 1.01.19
ANTECEDENTES DE HECHO
1.-Las presentes diligencias se incoaron por auto de fecha 9.04.18, ampliado por auto de
fecha 30.08.18, 20.11.18, 5.12.18 y 13.12.18
2.-Se ha recibido la declaración testifical que venía acordada por auto de fecha 6.11.18
3.-Se ha aportado copia del informe remitido al Ministerio fiscal relativo a la documentación
intervenida, que ha dado lugar a las presentes diligencias.
FUNDAMENTOS DE DERECHO
I) EL HECHO
El comisario jefe del área de información de los Mossos d'esquadra, ha dado todas las
explicaciones que le han sido solicitadas por el Ministerio Fiscal, acusación particular y
letrado de la Generalitat.
II) EL DERECHO
El auto de incoación contiene las referencias normativas que delimitan el alcance del objeto
procesal que es investigado.
En sentido amplio cabe, por lo tanto, decir, que la función de la policía es la de mantener la
paz social, persiguiendo delitos cometidos, evitando su comisión, determinando a los
posibles autores y participes y dando protección a las víctimas reales o potenciales.
B) LIMITES
La policía no es un imperio autónomo dentro del estado derecho, sino que actúa dentro de
los límites que la hermenéutica de éste le impone.
El art. 284 de al LECr establece la obligación de la dación de cuenta de las actuaciones que
se practiquen conforme con el art. 282.
La dación de cuenta tiene como vocación la de encuadrar la actuación policial de tal manera
que devenga eficaz, siendo respetuosa con los derechos fundamentales, en los que se
asienta el estado de derecho.
De entre los derechos fundamentales que pueden verse afectados por la actividad policial,
uno merece especial interés. Se trata del art. 8 del CEDH, derecho al respeto a la vida
privada. La injerencia exige previsión legal, perseguir un fin legítimo, y ha de ser necesaria,
en una sociedad democrática, para la seguridad nacional, seguridad pública, orden
económico, defensa del orden y la prevención de infracciones penales, protección de la
salud o de la moral, y la protección de los derechos y libertades de otros.
Que afecte a este derecho no significa que la investigación devenga ilícita, pero para que
no sea así debe de estar legalmente delimitada para evitar injerencias arbitrarias, que
aboquen a medidas de vigilancia incontroladas.
La necesidad de encontrar el sentido de todo precepto, exige que el mismo sea interpretado
en su dimensión reflexiva, y no puede ser leído como si su sentido pudiera deducirse de su
mismo enunciado.
Con ello no quiere significarse que los presupuestos de la interpretación sean de libre
disposición del que la hace, de tal manera que la subjetividad desplegara todo su efecto, y
fuera ésta la que se proyectara en el texto.
En el ámbito de lo jurídico no es así, toda vez que existe un lugar exterior a partir del cual
juzgar la adecuación; éste es, dentro de la cultura jurídica europea, el C.E.D.H. al que se
acaba de hacer mención en el apartado anterior.
El art. 6.1 del C.E.D.H., proclama el derecho a un proceso equitativo, y el art.7 establece el
principio de legalidad, equidad y legalidad, vinculados por la proporcionalidad, llevan,
establecer el principio de intervención mínima en la aplicación del Derecho penal, concebido
no como un derecho constitutivo, sino garantizador.
Ello lleva a la necesidad de preguntarse sobre cuál sea el sentido de los tipos penales que
se invocan.
La función del tipo penal es la de determinar la dación de un injusto que por su intensidad
es acreedor de una pena. El tipo penal no se identifica con comportamientos que, en
general, deben de ser prohibidos.
El tipo penal, entendido como tipo total, puede venir neutralizado por consideraciones
valorativas procedentes de la unidad hermenéutica del ordenamiento jurídico.
Todas ellas buscaban una finalidad concreta, cual la de obtener el máximo de información,
esencial en toda policía, sobre la actuación de personas que por su significación
sociopolítica pudieran, en un momento especialmente vulnerable, devenir autores o
participes en incidentes con afectación del orden público o devenir víctimas de estos
incidentes.
Ello supuso una afectación a la intimidad de las personas investigadas, que no comprendió
la interferencia de comunicaciones ni instalación de cámaras de vigilancia.
En el presente caso el Comisario jefe ha ofrecido una explicación precisa sobre las razones
de cada actuación policial; distinguiendo lo que es una información de lo que es una
investigación. Cuando la información o investigación inicial, no ofrece ningún dato relevante
en orden a la prevención de posibles delitos, la actuación cesa, en caso contrario continua
y se comunica al Ministerio fiscal o, en su caso a la Autoridad judicial.
La actuación policial así delimitada esta prevista en la ley antes mencionada, persigue el fin
legítimo de poder garantizar el orden público frente a posibles alteraciones y es por ello
necesaria en una sociedad democrática.
Se abre aquí la cuestión del necesario control de la actuación policial, tanto cuando se lleva
cabo la información o investigación como una vez finalizada.
Desde esta perspectiva, los tipos penales que se invocan no pueden ser compartidos; en
efecto, el tipo básico seria la prevaricación administrativa del art. 404 del C.P. El sujeto
activo es un sujeto activo cualificado, cual es el funcionario. La conducta ha de ser una
resolución arbitraria en un asunto administrativo, con afectación al art. 9.3 de la CE que
veda la arbitrariedad de los poderes públicos. No puede tratarse aquí de una mera
ilegalidad, que tendría su origen en una interpretación discutible, sino que debe de entrar la
absoluta falta de competencia, la inobservancia de la norma esencial y la ausencia de todo
razonamiento que pueda justificar la actuación. Ello se concreta en decir si las
investigaciones acordadas, que afectan a la intimidad de terceros, están justificadas por su
relación con el delito cometido o de posible comisión, tanto en lo que se refiere a autores
participes o víctimas, o por el contrario al margen de ello se orienta al servicio de otros
intereses
Como en toda actuación policial, unas han dado lugar a diligencias judiciales o están
relacionadas con ellas, otras no han concluido en datos relevantes para ninguna
continuación. No consta ni se ha alegado en ninguna denuncia o querella, ni ha sido objeto
de preguntas al Comisario Jefe, la posibilidad de que los datos obtenidos en las actuaciones
han sido utilizadas para algún fin político.
La utilización para una finalidad legalmente establecida de datos informáticos, a los que
tiene acceso la policía, que no realiza por lo demás ninguno de los comportamientos
descritos en el art. 7 de la LO 1/1982, no puede, a su vez incidir en el tipo penal del art.198,
ni del art 534 y ss. del C.P.,
Ninguno de los datos que constan en la documentación y que se refieren a los querellantes
y denunciantes, afecta a la vida íntima; se trata de datos que guardan relación con la vida
privada o con la misma vida pública, fácilmente obtenibles en la llamada información abierta.
Este artículo, tiene como referente el parágrafo 266 del C.P. alemán, que incrimina el deber
de salvaguardar los intereses patrimoniales ajenos, generando una desventaja para la
persona cuyos intereses debe de cuidar.
3.-NUEVAS DILIGENCIAS
Pedir testimonio de las actuaciones judiciales derivadas de las investigaciones que han
resultado positivas, y valorar aquí su relación, en nada alteraría lo acabado de señalar, ya
que su valoración corresponde al órgano judicial al que fueron remitidas. Cuando no ha sido
así por falta de relevancia, no se supera el ámbito de autonomía para decidir lo que ha de
ser objeto de información y de investigación, que tiene la policía. No puede sustituirse el
criterio policial por el de la acusación. En este caso, como se ha dicho, el Comisario Jefe ha
dado cuenta y razón de las actuaciones policiales
Interrogar a los policías que llevaron a cabo las actuaciones sobre el terreno, tampoco
alteraría lo que aquí se ha analizado.
Todas las diligencias que se solicitan llevarían al mismo resultado, conocer los motivos de
las actuaciones policiales y ello ya se ha ofrecido en el debate contradictorio.
3.-RESOLUCION A ADOPTAR
Las investigaciones comprenden un número mucho más elevado que los aquí querellantes y
denunciantes. Excede del derecho de acción la posibilidad de que en el proceso penal se
revisen todas y se solicite una explicación permanente por parte de la policía, que tiene ya
establecidos sus medios ordinarios de control.
La adecuación o inadecuación del supuesto de hecho a la previsión del tipo penal implica
siempre un espacio de separación, que se abre a situaciones nuevas; por ello el derecho
supone la intervención de un tercero al cual es posible apelar. La motivación de la
resolución abre, a su vez, la efectividad del recurso.
Lo acabado decir impide compartir la dación de la viabilidad incriminativa; razón por la cual,
conforme con el art. 637.2 de la LECr ha de acordarse el sobreseimiento libre.
PARTE DISPOSITIVA
DISPONGO:
Así lo acuerda, manda y firma el Ilmo.Sr.Dr. D. Juan Emilio Vilá Mayo, Magistrado-Juez del
Juzgado de Instrucción nº 22.