Moisés fue el libertador de Israel, y Josué es el conquistador de la tierra que Dios había prometido a su pueblo.
La generación de Josué representa a todos aquellos Cristianos que están dispuestos a conquistar sus sueños, sus
proyectos, es una generación de cristianos que se esfuerzan y son valientes para hacer proezas con la ayuda de
Dios, son la generación de hombres y mujeres, de jóvenes y jovencitas que están dispuestos a creer, que están
dispuestos a confiar, pero que también están dispuestos a pelear para alcanzar las bendiciones de Dios para sus
vidas.
Pero también es importante conocer porque Josué fue elegido como sucesor de Moisés, es importante conocer
porque Josué fue a quien el Señor eligió para ser el conquistador de la tierra prometida, pues es importante
conocer cuáles son esas actitudes que vio Dios en el corazón de Josué para que nosotros también podamos
desarrollarlas en nuestra vida, para que nosotros podamos ponerlas en práctica para poder conquistar como lo
hizo Josué.
Antes de ser el líder de Israel Josué fue siervo de Moisés durante 40 años, y antes de entrar a conquistar la tierra
prometida el Señor le recordó a Josué que él seguía bajo su autoridad, que el tenía que depender de Dios y de
nadie más.
Nosotros tenemos que aprender a depender de Dios, someternos a su voluntad, y eso es lo que a muchos nos
cuesta, porque queremos conquistar a nuestra manera, queremos hacer realidad nuestros sueños y proyectos sin
preguntarnos si son las metas y proyectos que Dios tiene para nosotros.
¨Dios nos enseña a estar bajo autoridad con nuestros padres, con nuestros pastores y líderes, con nuestros
maestros, etc. Posiblemente las cosas que estamos viviendo es porque Dios nos está enseñando a depender de
él, a reconocer que estamos bajo su autoridad y no el bajo la nuestra.
Josué tuvo que esperar abajo del monte Sinaí hasta que Moisés regresara, Josué tuvo que tener paciencia para
esperar hasta que llegara el dia que Moisés bajara del monte de hablar con Dios.
El pueblo y Aarón cuando vieron que Moisés no bajaba hicieron un becerro de oro y lo adoraron, pero Josué
seguía al pie del monte esperando a Moisés con paciencia (Éxodo 32:1-4 y 15-18)
La generación de Josué son personas que han aprendido a esperar en Dios, que no hacen locuras cuando las
cosas no salen como ellos esperaban o en el tiempo que ellos esperaban, sino que han aprendido a esperar el
tiempo perfecto de Dios (Salmo 40:1)
III. JOSUÉ ERA UN HOMBRE DE FE (NÚMEROS 13:27-29 /14:6-9)
Josué era uno de los doce espías que fueron enviados a reconocer la tierra prometida, diez espías pusieron sus
ojos en los gigantes, en las ciudades amuralladas, en los ejércitos.
Josué y Caleb vieron lo mismo, pero confiaban que su Dios era más grande y más fuerte que cualquier enemigo
que enfrentaran, Josué tenía confianza en que Dios pelearía por ellos y les daría la victoria.
La generación de Josué son personas que reconocen que en Cristo son más que vencedores, que no hay batalla
que con la ayuda de Dios no puedan vencer, que no hay problema que con Cristo no puedan solucionar, que no
hay sueño y meta que con Cristo no se pueda alcanzar.
Son personas que no ponen sus miradas en los obstáculos, en las dificultades aunque sean reales y difíciles, sino
que ponen su mirada en Dios y su poder, en Dios y su misericordia.
La generación de Josué son cristianos que no vuelven atrás por nada, que han puesto sus ojos en Jesús y siguen
adelante a pesar de todo (Hebreos 10:39).