Resumen
En el presente estudio se intenta abordar el contraste entre las revelaciones
de Dios a través de profetas, símbolos, figuras que muestran al Mesías en el
AT y en la revelación suprema que es hecha por medio del Hijo. Hebreos
revela consistente y simultáneamente el ministerio sumo sacerdotal de Cris-
to en sus diferentes facetas, constituyéndola como única en todo el NT.
Palabras clave: Faceta - Hebreos - Jesús - Revelación - Sumo Sacerdote
Abstract
The present study attempts to display the contrast between God‟s revela-
tion through prophets, symbols, figures presenting the Messiah in the OT
and the supreme revelation which is made through the Son. Hebrews re-
veals convincingly the high priestly ministry of Christ in its various facets,
constituting it as unique in the NT.
Keywords: Facet - Hebrew - High Priest - Jesus - Revelation
1. INTRODUCCIÓN
A través del don profético Dios se mantuvo en comunicación con el
hombre desde la caída. Ha dado mensajes de información, dirección, amo-
nestación y súplica a toda la familia humana y se da a conocer por medio
de símbolos y lenguajes familiares. Estas revelaciones han sido paulatinas a
lo largo del AT creando expectativas de salvación y liberación en el pueblo
de Dios.
La carta a los Hebreos fue dirigida a los cristianos judíos conocedores
del sistema de sacrificios y que aún sostenían la ley ceremonial como medio
de justificación. Tenían apenas un concepto de la obra de Cristo en el san-
tuario celestial y de toda su labor salvífica1. Sin duda, eran cristianos fieles
que habían sufrido persecuciones y que ahora estaban con la intención de
1 Francis D. Nichol, ed., Comentario Bíblico Adventista del Séptimo Día (Boise, Ida.:
Publicaciones Interamericana, 1990), 7:403.
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2. LA NATURALEZA DE LA REVELACIÓN
Hebreos comienza identificando a Dios como un ser que se da a cono-
cer continuamente a sus criaturas, pues, de otra manera “su silencio, oculto
en espesa oscuridad, la situación de la humanidad habría sido desespera-
da”.4 El énfasis del Dios que habla (1:1) es el mismo que se muestra en la
creación del Génesis resaltando por un lado (1) la existencia de Dios y (2)
el hecho de que Dios habla. Estos dos aspectos estaban en las mentes ju-
días, en la lectura de los tres primeros versículos del Génesis: “en el princi-
pio Dios creó… y Dios dijo”.5
Dios se revela por medio de la naturaleza. Esta manifiesta su gloria, sa-
biduría y su amante cuidado por sus criaturas. A esta manifestación se la
conoce con el nombre de “revelación general”.6 Sin embargo, era necesaria
una verdadera comprensión del carácter amante de Dios y su intención de
redimir a la humanidad del pecado. Por eso Dios se manifestó por medio
de una “revelación especial” dirigida a seres humanos específicos y no es
inmediatamente accesible a todos. “El centro y la sustancia de esa revela-
ción especial es la persona de Jesucristo”.7
Es por medio de la “revelación especial” que Dios manifiesta su creati-
vidad revelándose de diversas maneras. Así, en Hebreos se observa que a
los antepasados en los tiempos que precedieron al nacimiento de Jesús
continuamente Dios se reveló por medio de “visiones, sueños, símbolos,
Urim y Tumim, ángeles, eventos naturales, éxtasis, la columna de humo o
8 George Wesley Buchanan, Hebrews (Anchor Bible: Garden City, New York:
Doubleday & Company, Inc, 1972), 3.
9 Roberto Pereyra, Un comentario exegético de la homilía a los Hebreos (Villa Liberta-
dor San Martín: Universidad Adventista del Plata, 1997), 3, 4; Ekkehardt Mue-
ller, Acerquémonos confiadamente al trono (Buenos Aires: ACES, 2003), 15-16.
10 El uso de la frase aquí implica la inauguración escatológica. Véase Frederick F.
Bruce, The Epistle to the Hebrews (New International Commentary on the New
Testament, Grand Rapids, Mich.: Eerdmans, 1990), 46.
11 Juan Carlos Viera, La voz del Espíritu (Buenos Aires: ACES, 1998), 8.
12 Elena de White, Joyas de los Testimonios (Buenos Aires: ACES, 1991), 3:264
13 Daniel Oscar Plenc, “Homilía a los Hebreos: Antecedente de la predicación
cristocéntrica”, DavarLogos 5.2 (2006): 184.
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14 Hebreos 6:9; 7:7, 19, 22; 8:6; 9:23; 10:34; 11:16, 35, 40; 12:24.
15 George W. Reid, ed., “Dones espirituales”, en Tratado de Teología Adventista del
Séptimo Día (ed. George E. Rice, Buenos Aires: ACES, 2009), 698.
16 El concepto moderno de que un profeta es el que predice el futuro tiende a
obviar que algunos de los mayores profetas de todos los tiempos dijeron poco
o nada acerca del futuro. Por lo tanto, un profeta es alguien que lleva un men-
saje de parte de Dios. Véase Comentario Bíblico Adventista 5:372 y Creencias de los
Adventistas del Séptimo Día (Buenos Aires: ACES, 2007), 246-261.
17 De las 20 veces que se llama profeta a Jesús, en la mayoría de los casos, es el
pueblo que lo llama así (Mt 21:11; Lc 24:19). En Marcos 6:4 y Lucas 4:24, Jesús
se identifica a sí mismo como profeta.
18 Creencias de los Adventistas, 248, 249.
Chuquimia: Hebreos 125
22 Elena de White, El Deseado de todas las gentes (Buenos Aires: ACES, 2003), 11.
23 Simón J. Kistemaker, Hebreos (Grand Rapids, Mich.: Subcomisión Literatura
Cristiana, 1991), 42.
24 El vocablo carakth,r viene del verbo cara,ssw en el sentido de grabar, se usaba
especialmente en la impresión de sellos y acuñación de monedas. Así, el Hijo
de Dios es la imagen de lo que Dios es. Es la única vez que aparece en el NT.
Véase William L. Lane, Hebrews 1-8 (Word Biblical Commentary; Dallas, Tx.:
Word Book, 1991), 47A:12.
25 CBA, 7:411.
26 Pfandl, El don de profecía, 16.
27 Se creía que los ángeles controlaban los fenómenos naturales, las estaciones del
año, la paz, la muerte, la enfermedad y que formaban una jerarquía dirigida por
siete de ellos. Véase Rodríguez. Introducción a Hebreos, 42,43.
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entre Dios y los hombres.28 Por lo tanto era necesario mostrar que el Hijo
estaba incalculablemente por encima de los ángeles.
Por otro lado, puede ser que hubiera habido una razón especial, si es
que doctrinas diversas y extrañas contra las cuales los hebreos son adverti-
dos (13:9) incluían una doctrina de adoración a los ángeles como la que
había sido introducida a los cristianos de Colosas.29
Los ángeles cumplieron su labor de mensajeros y hay que resaltarlos.
Pero llegó una era de revelación en Jesús, el Hijo de Dios, exaltado supre-
mamente por su Padre: “Como Dios no tuvo mensajero más grande que
su Hijo, no tuvo tampoco otro mensaje más allá del evangelio”.30 Final-
mente, aclarando toda duda de confusión, se dice que los ángeles “son es-
píritus ministradores enviados para servicio de los que serán herederos de
la salvación” (Heb 1:14).
36 Hebreos 2:14; 9:7, 12, 13, 14, 18, 19, 20, 21, 22, 25; 10:4, 19, 29; 11:28; 12:4,
24; 13:11, 12, 20).
37 Mueller, Acerquémonos confiadamente…, 103, 104; Juan Carlos Pizarro, “Hacia
una teología de la sangre en la Epístola a los Hebreos” (Disertación doctoral
en Teología, Universidad Adventista del Plata, Libertador San Martín, 2004).
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