Método seco

El fraccionamiento en seco es un proceso de modificación física muy utilizado en una planta de

modificación de aceite, que no supone cambios químicos en los productos. En este proceso
tampoco se emplean aditivos químicos peligrosos y no hay pérdidas en el aprovechamiento ni
se contaminan los aceites. Al no producir residuos, este método es respetuoso con el
medioambiente.

El fraccionamiento en seco, también conocido como cristalización a partir de derretimiento, es

la forma más simple de cristalización fraccional. Las características de su tecnología hacen
posible que se emplee en la producción de materias primas grasas. El proceso de
fraccionamiento en seco siempre se había considerado impredecible, tedioso y con necesidad
de mucha mano de obras, sin embargo, esta técnica relativamente barata ha evolucionado con
la tecnología de modificación del siglo XXI, dado que, al no intervenir aditivos, residuos
contaminantes, ni post-refinado, la sostenibilidad y seguridad de este proceso no son
equiparables a ningún otro.

Método por solventes

Consiste en el espesamiento térmico del aceite, seguido por una extracción líquido-líquido con
cetonas, alcoholes superiores o cualquier otro disolvente polar. Puesto que una polimerización
limitada sólo alcanza a los glicéridos menos saturados y la porción polimerizada del aceite
es relativamente insoluble en el disolvente, mientras que la polimerizada lo es fácilmente, se
produce así un extracto concentrado en los glicéridos más saturados, junto aun residuo de
propiedades secantes superiores.