Estos hombres, desechados al poco tiempo por los alemanes, se hacían pasar por brigadas

de la cruz roja, robando y matando en ambos bandos, protegidos por su uniforme médico y un
arsenal robado. El azar los lleva al refugio donde se escondía la familia Lecter, y donde
instalaron su «campamento médico». Al recrudecer el invierno y quedarse sin alimentos,
mataron a la pequeña Mischa y se la comieron. Esto es lo que se conoce de su infancia, la
cual, sin duda, sembró las bases de su tendencia al canibalismo. En esas fechas, Lituania
sufre la devastación de la Segunda Guerra Mundial, debido a que colapsa el Frente Este de
Europa y los alemanes atacan la Unión Soviética.
En los años subsecuentes, Lecter, quien se obsesiona con eliminar a los Hiwis culpables de
esta atrocidad, comienza su carrera asesina de forma «justificada», pero después encuentra
un profundo gusto por esta actividad.
Entre 1970 y 1975, Lecter adquiere el Título de Doctor en Psiquiatría en el estado
de Maryland, USA. En 1975, el Dr. Lecter trabaja como perito en psiquiatría para las cortes de
Maryland y Virginia. La cuarta víctima de Lecter es Mason Verger, personaje de tendencias
homosexuales y pedófilo, el cual se suma a la lista de pacientes influyentes y,
consecuentemente, adquiere cierta amistad con el Dr. Lecter. Este acepta una invitación al
departamento del Señor Verger, en donde bajo el efecto de Popper, Lecter sugestiona al
señor Verger para autoinfligirse graves heridas en la cara, quitándose secciones de la misma.
Posteriormente, el Dr. Lecter le rompe el cuello. El señor Mason Verger sobrevivió
quedando tetrapléjico y deforme facialmente (este personaje es una de las 3 víctimas que
sobreviven a los ataques de Lecter).
Al desempeñarse como auxiliar del F.B.I. en la elaboración de perfiles psicológicos criminales,
Lecter traba una relación amistosa con el Agente Especial William Graham, quien a la postre
se convertirá en una de sus víctimas y su segunda y penúltima en sobrevivir (junto con una
enfermera del Hospital Forense del Estado de Baltimore a la que ataca durante un descuido
en la vigilancia). Este hecho es el que lo pone al descubierto y posteriormente, es capturado
para ser procesado en un juicio que genera una lista de 9 víctimas comprobables hasta ese
momento. El Dr. Lecter es sentenciado a 9 cadenas perpetuas, en el Hospital Forense del
Estado de Baltimore.
Hannibal y Mischa como prisioneros. (Hannibal Rising)

La casa fue invadida por un grupo de colaboradores lituanos que se convirtieron en

saqueadores. Lecter y Mischa fueron retenidos como prisioneros por este grupo y ellos
acabaron comiéndose a Mischa. Hannibal logró escapar, pero se quedó completamente
traumatizado por la muerte de su hermana, quedándose mudo temporalmente. La muerte de
Mischa atormentó a Hannibal el resto de su vida; según Hannibal, fue algo que destruyó su
fe en Dios y lo llevó a creer que no había ningún tipo de justicia en el mundo.

Después de que se marchasen los saqueadores, él deambuló por el bosque hasta ser
encontrado por el equipo de un tanque. Los soldados cortaron el grillete que tenía en el
cuello, algo que le hizo perder algo de piel, dejándolo con una cicatriz que no llegó a
curarse del todo. Lecter también tenía con él los prismáticos de su padre, que se quedaron
con él durante múltiples años y que volvería a utilizar más adelante.

El joven Lecter en el orfanato. (Hannibal Rising)

Los soviéticos llevaron a Lecter de vuelta al castillo de su familia, que se convirtió en un

orfanato. La guerra acarreó consecuencias en los niños y muchos de ellos eran abusones.
Durante su tiempo viviendo allí, Hannibal solía atacar y herir gravemente a varios de los
otros huérfanos, pero solamente a los que abusaban, herían o insultaban a otros. Lecter
utilizaba sus recuerdos del líder de los saqueadores, Vladis Grutas, para conseguir la furia
necesaria como para herir a los abusones. Por otra parte, se portaba bien con los huérfanos
más jóvenes, a menudo dejando que se burlasen de él un poco y que creyesen que era un
sordomudo loco. (Hannibal: El origen del mal)
Adopción y venganza Editar

Lecter tenía trece años cuando su tío (el nuevo Conde, Robert Lecter) lo llevó a su hogar en
Francia. Él tuvo una relación cercana con su tía, Lady Murasaki, de quien no tardó en
enamorarse. Lecter fue educado en casa en el hogar de su tío a orillas del Essonne; su tío le
animó a que empezase a pintar, mientras que su tía le enseñó aspectos de la cultura
japonesa. Todavía estaba mudo y afectado por la muerte de su hermana, de modo que
acudió a un psiquiatra, el Doctor Rufin.

Hannibal con su tía, Murasaki. (Hannibal Rising)

Hannibal atacó a un carnicero local, Paul Momund, al ver a este insultar de forma obscena a
su tía. Robert Lecter confrontó a Momund, pero sufrió un infarto al hacerlo. Furioso, Lecter
cometió su primer asesinato, acuchillando a Momund con un tantō que pertenecía al
ancestro samurai de su tía, Date Masamune. Hannibal decapitó a Momund tras recibir un
consejo del chef de su tía mientras preparaban un pez, le cortó las mejillas y se las comió,
siendo este su primer acto de canibalismo premeditado. Investigando el asesinato, el
inspector Pascal Popil sospechó de Lecter, intuyendo su culpabilidad y presionándolo para
que confesase. Sin embargo, Lecter resultó impenetrable, superando incluso un detector de
mentiras; gracias a la intervención de Murasaki, Hannibal fue declarado inocente. Tras la
muerte de Robert, Murasaki se mudó a un piso en París, donde acudió a un internado.
Popil, que se quedó fascinado con Lecter y Murasaki, siguió en contacto con ellos.
Hannibal estudiando medicina. (Hannibal Rising)

Lecter obtuvo notas excelentes en el Liceo y se graduó antes de lo normal, convirtiéndose

en la persona más joven en ser admitida en una escuela médica en Francia, donde tuvo
como mentor al doctor Dumas. Descubrió que las personas que lo retuvieron como
prisionero seguían vivas al encontrar un cuadro saqueado de la colección de su padre en
venta en una galería parisina.

En 1951, Hannibal regresó a Lituania y acudió al lugar en el que falleció su hermana.

Excavó las ruinas de la casa en la que murió su familia y, al encontrar los restos de Mischa,
la enterró debidamente. También encontró las placas de identidad del grupo que la asesinó.
Uno de los miembros del grupo, Enrikas Dortlich, que ahora era un oficial de los Guardias
del Borde Soviético, apareció en el lugar para matar a Lecter. No obstante, él estaba
preparado y asesinó a Dortlich. Lecter volvió a consumir las mejillas de su víctima.

Matando a Vladis Grutas. (Hannibal Rising)

El asesinato de Dortlich puso al resto del grupo en alerta y, dada la similitud entre este y el
primer asesinato de Lecter, Popil volvió a sospechar de él. Grutas envió a un segundo
miembro del grupo, Zigmas Milko, a que eliminase el problema a base de sobornar a
Hannibal o asesinarlo, pero Lecter asesinó a Milko hundiéndolo en formaldehído. Popil y
Lady Murasaki trataron de impedir que buscase al resto del grupo. En una confrontación
con su tía, Lecter estuvo a punto de tener sexo con ella, pero se detuvo en el último instante
diciendo que hizo una promesa a Mischa.

Hannibal atacó a Grutas en su casa, pero este fue rescatado por sus guardaespaldas. Grutas
secuestró a Lady Murasaki y la utilizó como cebo para atraer a Lecter. Lecter, armado con
el tantō, encontró a Grutas en su barco. En un enfrentamiento final, Grutas afirmó que
Lecter también había consumido a su hermana en el caldo con el que lo alimentaron los
soldados y tan solo los estaba matando para mantenerlo como algo secreto. Furioso, Lecter
lo destripó tallando las iniciales de su hermana una y otra vez en su cuerpo. Lady Murasaki
se quedó perturbada ante este comportamiento y huyó, aún con Hannibal diciendo que la
amaba.

Hannibal confronta a Grentz. (Hannibal Rising)

Popil arrestó a Lecter por los asesinatos, pero el juicio no fue muy apoyado; no había
ninguna prueba concluyente que lo indicase como culpable y todas las víctimas habían sido
esclavistas y criminales de guerra. De hecho, la asociación de sus víctimas con los Nazis
hizo que Lecter fuese considerado como una causa célebre en Francia, con comunistas y
estudiantes organizando marchas pidiendo su liberación. Lady Murasaki lo visitó una
última vez mientras él seguía retenido por la policía y vio que había pasado a ser alguien
sin ninguna emoción. Tras recibir referencias del doctor Dumas y del jefe del laboratorio
forense de la policía (para quien trabajó como voluntario), Lecter fue puesto en libertad. Se
fue de Francia y mató al último miembro del grupo, Bronys Grentz, durante unas
vacaciones en Montreal. (Hannibal: El origen del mal)
Carrera como psiquiatra Editar

Los dibujos de Lecter hicieron que obtuviese una beca en el Johns Hopkins Medical Center
en Baltimore, Maryland, Estados Unidos. Allí fue donde se asentó, graduándose en
medicina y estableciendo un local psiquiátrico en Baltimore en los años setenta. Se
convirtió en una figura prominente en la sociedad de Baltimore, satisfaciendo sus gustos
extravagantes a base de influenciar a algunos de sus pacientes para que le dejasen grandes
cantidades de dinero en sus testamentos. Pasó a ser conocido como un psiquiatra clínico
brillante, aunque en realidad sentía un tremendo desdén por la psicología; más adelante
diría que no la consideraba como una ciencia, criticándola por ser algo "pueril" y
comentando que la mayoría de los departamentos de psicología estaban llenos de personas
ineptas.

Serie de asesinatos Editar

Hannibal viendo tocar a una orquesta. (Red Dragon)

Lecter asesinó al menos a nueve personas antes de ser capturado. Tan solo tres de sus
víctimas sobrevivieron, entre ellos Will Graham, un investigador del FBI, (El dragón
rojo) y Mason Verger. Verger acudió a sesiones psiquiátricas con Lecter tal y como se le
ordenó cuando fue detenido por abuso a menores y por violar de manera viciosa a su propia
hermana, Margot, que también acudió a Lecter para sesiones.

Verger invitó a Lecter a su hogar en Owings Mills la noche tras una de estas sesiones.
Lecter drogó a Verger y sugirió que se cortase su propia cara con un trozo de cristal, cosa
que Verger hizo. Acto seguido, Hannibal hizo que diese los trozos de su cara a sus
Dobermans y que se comiese su propia nariz. Lecter rompió el cuello de Verger con una
cuerda que se utilizaba para la asfixi auto-erótica y lo dejó allí para que muriese. Los perros
fueron llevados a un refugio de animales para que se les limpiase el estómago, lo que
permitió la recuperación de la nariz, los labios y algunas partes del rostro de Verger. Verger
sobrevivió, pero se quedó con la cara completamente deformada y confinado a una máquina
de soporte vital. (Hannibal)

Una cena lujosa organizada por Hannibal. (Red Dragon)

Benjamin Raspail fue la novena y última víctima conocida de Lecter en Chesapeake antes
de que fue encarcelado. Raspail era un flautista no muy talentoso de la Orquesta
Filarmónica de Baltimore y se cree que Lecter lo mató por su falta de proeza musical, algo
que disminuía la calidad de los conciertos de la orquesta; Raspail también fue paciente de
Lecter. Lecter llegó a afirmar a Clarice Starling que el motivo de la muerte de Raspail fue
porque él "se cansó de sus quejas" durante sus sesiones. El cuerpo de Raspail fue
encontrado en el banco de una iglesia con el corazón perforado y sin su timo y su páncreas.
Se cree que Lecter sirvió estos órganos durante una cena que organizó para la junta de
directores de la orquesta. Raspail afirmó haber matado a un hombre cuya cabeza fue
encontrada años después en el garaje que había alquilado en Baltimore, pero Lecter
sospechó que estuviese protegiendo a Jame Gumb, quien pasaría a involucrarse en la vida
de Lecter como el asesino en serie conocido como "Buffalo Bill". (The Silence of the
Lambs)
Hannibal visitado por el agente especial Will Graham. (Red Dragon)

Otras de las víctimas de Hannibal fueron una persona que sobrevivió y fue llevada a un
hospital mental privado de Denver, un cazador con arco, un censista cuyo hígado Hannibal
se comió con "habas y un gran Amarone" y un estudiante de Princeton a quien enterró. El
FBI utilizó amital sódico (la droga de la verdad) para intentar descubrir dónde enterró al
estudiante; Lecter, sin embargo, respondió dándoles una receta para hacer una salsa de
patatas fritas, sugiriendo que el estudiante estuvo en la salsa. Hannibal se entrenó
previamente llevando a cabo una auto-hipnosis para estar preparado en el caso de que le
diesen drogas hipnóticas. Lecter cometió sus últimos tres asesinatos conocidos a lo largo de
nueve días.

Captura Editar

Hannibal Lecter fue capturado entre marzo y abril de 1975 por el investigador especial del
FBI Will Graham. Graham estaba investigando una serie de asesinatos cometidos por un
asesino en serie caníbal en la zona de Baltimore y quiso hablar con Lecter tras descubrir
que trató como médico a una de las víctimas por una herida de caza. Al acudir a hacer
preguntas a Lecter en su clínica psiquiátrica, Graham vio algunos libros de medicina
antiguos en el despacho.
Hannibal ataca a Will Graham. (Red Dragon)

Will supo de inmediato que Lecter era el asesino al que estaba buscando: su sexta víctima
murió en su taller, situado en un tablero de forma muy similar al Wound Man, una
ilustración utilizada antiguamente en muchos libros de medicina. Will se dio cuenta de que
la herida de caza que llevó a la víctima hacia Lecter era muy similar a la de la ilustración y
Hannibal quiso hacerlo aún más similar, matándolo y apuñalándolo.

Graham se dispuso a llamar a la policía, pero Lecter se le acercó por detrás y lo apuñaló
con un cuchillo de linóleo, casi llegando a destriparlo. Graham sobrevivió al encuentro y
Lecter fue arrestado por agentes del FBI y patrullas del estado de Maryland. Tras la captura
de Hannibal, Will estuvo en un hospital psiquiátrico durante un breve período de tiempo y
salió en cuanto se recuperó de sus heridas. (El dragón rojo)

Fotografía de un periódico con Hannibal entre policías. (Red Dragon)

En los juicios, Lecter fue declarado como alguien demente, lo que impidió que fuese
sentenciado a muerte. Fue enviado al Hospital Psiquiátrico de Baltimore para Criminales
Dementespara cumplir nueve cadenas perpetuas, siendo controlado por el Dr. Frederick
Chilton, administrador de las instalaciones. Varias familias de víctimas buscaron juicios
contra Lecter. El FBI encargó la exhumación de cuatro tumbas de pacientes de Lecter que
murieron mientras él los estaba tratando para investigar en profundidad los motivos de las
muertes. Lecter recibió el apodo "Hannibal el Caníbal" en el National Tattler, un tabloide
que también publicó fotografías no autorizadas de Graham en el hospital tras ser atacado
por Lecter. El electroencefalograma de Hannibal mostró que su cerebro tenía una forma
inusual y, dado su historial, él fue señalado como un "sociópata puro" por Chilton.
Encarcelamiento Editar

Estando en custodia, Lecter fue considerado como "demasiado sofisticado" para la mayoría
de los tipos de evaluaciones psicológicas, más que nada porque le gustaba estar al corriente
de los últimos desarrollos del campo. Como sabía el funcionamiento de estas pruebas,
podía pensar fácilmente en respuestas típicas que no lo señalarían como alguien perturbado.
Él además se burlaba de los intentos de los psiquiatras de crear un perfil psicológico sobre
él doblando sus papeles como origami.

Will Graham acude a Lecter en el hospital psiquiátrico. (Red Dragon)

Hannibal fue un paciente modelo hasta la tarde del 8 de julio de 1976. Tras quejarse de
molestias en el pecho, fue llevado a una enfermería. Cuando le quitaron sus restricciones
para hacerle un electrocardiograma, él atacó a una enfermera, sacándole un ojo, dislocando
su mandíbula y arrancándole la lengua de un mordisco. Chilton posteriormente señalaría
que el ritmo cardíaco de Lecter nunca subió a más de 85 latidos por minuto, ni siquiera
cuando tragó la lengua. En el forcejeo con otros empleados del hospital, se le dislocó un
hombro. Tras este incidente, Lecter fue tratado de manera extremadamente cuidadosa por el
personal, a menudo con restricciones fuertes, una camisa de fuerza y un bozal, transportado
en un pequeño carro.

Chilton y Lecter tuvieron una relación de odio mutuo; el estado de Chilton como psicólogo,
su mediocridad y su ego inflado ofendían a Lecter, que a menudo se dedicó a humillarlo;
por su parte, Chilton se volvía furioso por las constantes burlas de Lecter, que lo castigó
quitándole sus libros y su retrete. Lecter diagnosticó a este castigo como el indicio de un
problema de la sociedad, diciendo: "Cualquier sociedad racional me mataría, o me daría
mis libros." Hannibal sin embargo se llevaba bien con Barney Matthews, su principal
cuidador en el hospital, con quien solía tener conversaciones y los dos se trataban con
mutuo respecto. Durante la investigación de "Buffalo Bill", los dos también hablaron
sobre Clarice Starling. (The Silence of the Lambs)

Clarice conociendo a Hannibal. (The Silence of the Lambs)

A lo largo de su estadía en el hospital psiquiátrico, Lecter ayudó al FBI en cuatro casos

distintos. Will Graham salió de su retiro en 1978 para colaborar en el caso del "hada de los
dientes" y, sin tener pistas, acudió a Lecter para pedir su ayuda (cosa que ya había hecho
dos veces desde que Lecter estaba encarcelado pero que nunca había hecho desde que se
retiró). Hannibal proporcionó datos muy valiosos, pero cuando descubrió más sobre el caso,
envió en secreto un mensaje en clave al asesino, Francis Dolarhyde, para que fuese a matar
a Graham y a su familia. Ellos sobrevivieron, pero Graham fue herido en la cara y se quedó
algo desfigurado. (El dragón rojo)

Huida Editar

Cinco años después, Jack Crawford envió a la alumna del FBI Clarice Starling al hospital
para llevar a cabo un cuestionario psicológico con Hannibal. Al principio, ella creía que la
tarea estaba relacionada con sus estudios, pero acabó haciendo que Hannibal ayudase al
FBI en el caso de "Buffalo Bill". Lecter hizo lo mismo tanto Will Graham como con
Starling: usar juegos de palabra y dar pistas sutiles para que ellos mismos llegasen a las
conclusiones.
Lecter ataca a los policías. (The Silence of the Lambs)
Cuando Buffalo Bill secuestró a Catherine Martin, hija de la senadora Ruth Martin, Lecter
dijo a Chilton que revelaría el nombre real del asesino si lo llevasen ante Martin. Hannibal
fue llevado a Memphis, Tennessee, y se quedó retenido en los juzgados del condado de
Shelby. Hannibal sin embargo mintió a la senadora Martin, dándole un nombre falso.
Starling lo visitó en su nueva celda y él le dio unas últimas pistas.

Hannibal llevó a cabo una huida sangrienta, asesinando a dos agentes de policía en el
proceso. Consiguió escapar a base de hacerse una "máscara" con el rostro de uno de los
agentes, vistiendo su uniforme y fingiendo ser su propia víctima para que se lo llevasen de
allí en ambulancia mientras las autoridades lo buscaban. (The Silence of the Lambs)

Vida como fugitivo Editar

Hannibal se sometió a cirugía plástica y a que le quitasen el característico "sexto dedo" que
tenía. Decidió no reconstruir su nariz para proteger su olfato, que era particularmente fino.
Luego, se dirigió a Florencia, Italia, donde pasó a usar el seudónimo "Dr. Fell". Sus
encantos lo llevaron a conseguir un trabajo como curador en un museo; él, por supuesto,
asesinó a la anterior persona que tenía el trabajo.
Hannibal capturado por Mason. (Hannibal)

El detective florentino Rinaldo Pazzi descubrió la identidad de Lecter siete años tras su
huida de Memphis. Pazzi, cuya carrera policial se vino abajo por su fracaso en el caso del
"Monstruo de Florencia", vio una oportunidad de redimirse al descubrir a Lecter. Pazzi hizo
un trato con Mason Verger para que este pudiese capturar al doctor vivo y vengarse de él
haciendo que se lo comiesen jabalíes específicamente entrenados para ello. Pazzi trató de
capturar a Hannibal, pero en vez de eso acabó siendo capturado por él y lo informó sobre de
los planes de Mason.

Tras destripar y colgar a Pazzi, Lecter regresó a Estados Unidos, donde tanto Verger como
Clarice Starling lo estuvieron buscando, cada uno esperando poder encontrarlo antes que el
otro. Hannibal fue capturado por los hombres de Verger, pero Starling lo rescató. Se
produjo un enfrentamiento y los hombres de Verger acabaron disparando a Clarice con dos
dardos cargados con sedantes. Lecter la alejó de los jabalíes y convenció a Margot
Verger para que matase a su hermano, dejando un mensaje de voz en el que asumía la
responsabilidad por la muerte de Mason.

Hannibal con Paul Krendler y Clarice Starling. (Hannibal)

Hannibal mantuvo a Clarice en total aislamiento durante los meses siguientes, sometiéndola
a diversas técnicas de condicionamiento para poder reemplazar sus memorias y
personalidad de manera sistemática y hacerla creer que era su hermana, Mischa. Hannibal
consiguió alterar a Starling y, como prueba final, secuestró a su némesis, Paul Krendler,
que había estado esforzándose por desacreditarla y acabar con su carrera. Lecter drogó a
Krendler y llevó a cabo una craneotomía en él, preparando trozos de su cerebro para comer
con Starling y el propio Krendler mientras él seguía vivo.

A pesar de esto, el plan de Hannibal fracasó, ya que subestimó la fuerza de voluntad de

Clarice; ella impidió que se sublimase su personalidad e incluso se burló de los intentos de
Lecter de convertirla en su hermana. Clarice enseñó sus pechos a Lecter y lo sedujo.

Tras estos eventos, la pareja desapareció. En 1993, el antiguo cuidador de Lecter, Barney
Matthews, vio a los dos juntos en Buenos Aires, Argentina. Tanto Lecter como Starling
eran capaces de asesinar a alguien en cualquier momento; el condicionamiento mental de
Lecter no convirtió a Clarice en Mischa, pero sí hizo que fuese una persona equivalente al
propio Hannibal. (Hannibal)

Trastorno antisocial

Si una persona posee tres de los siguientes siete criterios puede decirse que sufre
trastorno antisocial:

1.- Fracaso para adaptarse a las normas sociales, incurriendo en conflictos con
la ley.

Lecter es uno de los 10 más buscados del FBI. Si bien la criminalidad no es

sinónimo de sociopatía (un delito puede cometerse por muchas razones, como la
búsqueda de un bien mayor), en el caso del personaje principal de El silencio de los
inocentes (Silence of the Lambs, Jonathan Demme, 1991) existe fascinación y
atracción por las figuras que representan la ley. Lo anterior se puede ver en la
relación que establece con Clarice Starling, a la que incluso en una carta le
menciona que ambos son como “La bella y la bestia”. Este vínculo es muy parecido
al que se observa entre El Guasón y Batman o entre el Dragón Rojo y Reba, su
acompañante ciega. El perverso busca, a su manera, el cumplimiento de la Ley:
desprecia a los servidores públicos corruptos y ayuda a atrapar a otros criminales. En
Clarice Starling (Jodie Foster) probablemente ve a su hermana menor.

2.- Uso de alter egos, manipulación y estafa.

La imagen de Hannibal Lecter es emblemática. Parece como si su aparato bucal

hubiese adquirido el significado de un pene siniestro y sádico que busca violar para
incurrir agresivamente en el cuerpo del otro, y, así, destruirlo internamente. Al
hablar, siempre recurre a la trampa o la mentira. La primera vez que apareció en el
cine, se entrevista con Clarice e intenta corromperla con una alianza para,
posteriormente, emitir brillantes interpretaciones de su actitud deshonesta y sus
orígenes humildes. (El reo de la celda aledaña se suicida de sólo escucharlo.) El
rasgo más característico de este asesino es la tensión que existe entre sus gustos
sofisticados y sus actitudes salvajes. El primer punto es, por un lado, una coraza que
gratifica su narcisismo, haciendo quedar a sus interlocutores como ignorantes, y, por
el otro, una red de mentiras que absorbe a otros dentro de su locura.

3.- Incapacidad para planear el futuro.

Hannibal Lecter no posee este rasgo: sus fortalezas cognitivas tienen la certeza de
una gratificación futura. Dada su perversidad, es sumamente metódico, hace rituales
y ceremonias chamánicas para ejecutar dolorosos actos sexuales.

4.- Irritabilidad y agresividad.

A pesar de no ser agresivo en formas ordinariamente impulsivas, Lecter opta por la
venganza. Su envidia y voracidad son la fuente interminable de una irritabilidad
disimulada por una coraza sofisticada.

5.- Despreocupación por su seguridad y la de los demás.

El narcisismo de Lecter le impide ponerse en riesgo. Siempre se anticipa a las

acciones para mantener la ilusión de un control omnipotente.

6.- Irresponsabilidad laboral y económica.

El perfil psicológico de Lecter le impide ser irresponsable. Es posible que su figura

seductora y su sensibilidad interpersonal y narcisista, así como su intelecto, le hayan
proporcionado un enorme éxito laboral. En este caso, sus conocimientos
psicoanalíticos y psiquiátricos le ayudan a manipular.

7.- Falta de remordimiento.

Un aspecto importante en el comportamiento de Lecter es la ausencia de culpa –el

cual es el rasgo más característico de los antisociales. Su forma de relacionarse con
el mundo es a través del daño. Esto lo convierte en un personaje al que le sería
imposible mejorar en un tratamiento psicológico. Dentro del consultorio,
desacreditaría al terapeuta para tal vez también destruirlo en la realidad y comerle el
corazón o el cerebro. Sin ningún remordimiento.

Este personaje ha sido el objeto de curiosidad y admiración por al

menos 20 años. Películas, origins, series… ha sido mucho lo que se
ha dicho sobre el Psiquiatra Hannibal Lecter, interpretado por
Anthony Hopkins en sus películas y por Mads Mikkelsen en su
versión televisiva más reciente.
Hannibal es un caníbal, se alimenta de distintas partes del cuerpo
humano. Ya de por sí este es un acto perverso y espeluznante,
pero la maldad de Hannibal no termina aquí.