ve girar el suelo
mira el suelo y crece
tira de su pelo
muere y luego crece
Yo.
Con el hueco blanquísimo de un caballo,
crines de ceniza. Plaza pura y doblada.
Yo.
Mi hueco traspasado con las axilas rotas.
Piel seca de uva neutra y amianto de madrugada.
Yo.
Con el hueco blanquísimo de un caballo.
Rodeado de espectadores que tienen hormigas en las palabras.
Yo.
Mi hueco sin ti, ciudad, sin tus muertos que comen.
Ecuestre por mi vida definitivamente anclada.
Yo.
No hay siglo nuevo ni luz reciente.
Sólo un caballo azul y una madrugada.
Te entregaste a la tierra
te entregaste a la tierra
y hoy hay búhos que giran alrededor
encendiste una hoguera
y ahora vas levitando en el gran tambor
y hay miel en tu cueva
peregrino camino hacia el ardor
hay enjambres que tiemblan
todos van persiguiendo tu dulce flor
que de pronto se seca
y se va devolviendo en mi sudor
si te quedas ahora
voy a hacerte cosquillas en el sillón
voy a robar la aurora
y llenarte de rabia esta oración
revolcarme en te sombra
y contarte en secreto de qué es tu voz
voy a llevarte al agua
a hacer huellas de pies en el cielo
y lloraré en secreto
cuando estés escondida en tu jarrón
si te quedas ahora
voy a hacerme un vestido con tu dolor
voy a lavarte el cuerpo
y pintarte la espalda de aquel color
que vimos en el cerro
cuando al fin descubriste tu latido
ay rayo de luz
canción que le canto a los perros
ay rayo de luz
me vienen a oír con su cuerpo
ay rayo de luz
temprano me abrazo a su pecho
ay rayo de luz
me ladran o ladran al cielo
ay rayo de luz
me huelen o huelen el tiempo
ay rayo de luz
canción que le canto a los perros
Todo el fuego
Todo el fuego
Del sol para ti habrá
y un florero
lleno de pan
Saca el cuerpo
de plumas se cubrirá
y en el viento
Flor para ti habrá
y en la lluvia
vas a querer bailar
Todo el tiempo
Vas a querer cantar
y en la luna
todos aplaudirán
Come el cielo
Azul para ti allá
Y un salero
Lleno de mar
Mete el cuerpo
El agua lo cubrirá
El desierto
despierto te esperara
y en la lluvia
vas a querer bajar
Lero Lero Candilero